EL PRÍNCIPE QUE QUERÍA SER MONJE

En la India había un príncipe muy sabio llamado Dil Bahadur,

su trabajo era gobernar en un pueblo llamado Goa, que
estaba al sur del país, su vida era muy normal, era un joven
budista que cuidaba de su pueblo y al que le gustaba mucho
ayudar a los demás, un día cansado de su cotidianidad,
decidió salir a dar una vuelta por los alrededores de Mumbai,
una ciudad cercana a Goa. Allí disfrutaba mucho pasear y
recorrer todas las calles de la “ciudad de los sueños”
disfrutaba ver a algunas estrellas de Bollywood caminando
tranquilamente por la ciudad como si fueran personas muy
desconocidas, veía con mucha felicidad a las personas que
paseaban por sus coches lujosos, pero a la vez miraba con
mucha lástima y empatía a los llamados “intocables” la clase
social más baja del país, y a la cual nunca nadie podía
acercarse, debido al mito de la impureza social y de los
contrastes que estos poseen.
Más tarde al caminar observó a un hombre extranjero que
deambulaba por las calles de Mumbai, su aspecto era fuerte,
pero a su vez dulce y pacífico y pudo ver que este hombre
parecía tener un aspecto de budista, debido a su túnica
naranja que llevaba. El príncipe Dil Bahadur se le acercó y le
preguntó su nombre.
- ¿Hola cómo te llamas? - Preguntaba Dil Bahadur
- Mi nombre es Tensing y soy del Tíbet- se presentó el monje
De repente Dil Bahadur se dio cuenta de dos cosas muy
extrañas.
La primera era que este monje estaba al lado de un niño
“intocable” y la segunda era que parecía ser famoso, debido a
que dos jóvenes y una anciana lo estaban entrevistando.
Dil Bahadur al ver esto con un poco de asombro preguntó:
- ¿Por qué te acercas a ellos buen monje? ¿Acaso no sabes a
que ellos no son del agrado de la gente? - Preguntó Dil
Bahadur
- A lo mejor no son importantes para ti, pero para la vida son
un tesoro- Comentó Tensing
Dil Bahadur comprendiendo el sincero mensaje, no le quedó
otro remedio que marcharse del lugar con una indignación
total, el sabía que las palabras del sabio monje eran ciertas, y
a él no le gustaba la idea de que el monje y los reporteros
pensaran que el era un hombre arrogante y su corazón.
-Uy que carácter tan frívolo- dijo la reportera Kate Cold
Kate y sus otros dos acompañantes llamados Alexander Cold
que era su nieto y Nadia Santos, una compañera de Brasil,
estaban un poco preocupados por aquella situación y
pensaron que definitivamente en India eran muy desiguales
con los demás.
-Deberías de denunciar esto Kate- afirmó Nadia con un poco
de indignación
-Sí abuela eso es lo que debes hacer- Dijo Alex
- ¡Que no me llames abuela mocoso! - Respondía Kate
-Tal vez sería una buena idea para la revista denunciar este
tipo de situaciones- comentó la ambiciosa Kate.
- ¡Esperen! - replicó Tensing.
-Creo que ustedes están equivocados- Dijo Tensing.
- Este hombre volverá en unas pocas horas para darnos una
buena noticia- Aseguró Tensing
Los tres quedaron atónitos, pues no entendieron muy bien el
mensaje, pero aún así decidieron respetar la opinión del
monje y seguir con el reportaje que estaba dedicado en honor
a él.

Por su parte Dil Bahadur se quedó en su palacio muy

pensativo, el se conocía a si mismo y sabía que lo que estaba
haciendo no estaba bien, ¿por qué rechazar a personas que
no tenían los privilegios como él? ¿Por qué no brindarles
ayuda cuando esos “intocables” eran los que le habían
ayudado en su gobierno? Todo esto pensó Dil Bahadur y
entendió de que definitivamente sus ideas eran muy opuestas
a las de la sociedad india en general, por ello tomó la decisión
más difícil de su vida, y era dejar su mandato y dedicarse a
servir al pueblo de otra manera.

Antes de dejar su carta de renuncia, Dil Bahadur fue a donde

estaba el monje Tensing para decirle que quería ser como el,
un monje.

Como por obra de magia el monje Tensing y los otros tres

reporteros seguían allí, haciendo el reportaje para la revista
International Geographic. Cuando Tensing sintió su presencia,
detuvo el reportaje y miró hacia atrás.
-Sabía que eras tu Dil Bahadur-Dijo Tensing
Dil Bahadur se quedó con una cara de espanto que casi se
desmaya, no podía creer que ese hombre con aspecto
corriente pudiera adivinar tal cual era su nombre.
-No te asustes, yo puedo ver cual es tu nombre a través de la
mente, veo que eres un buen hombre-dijo Tensing
-Posiblemente buen monje- aseguró Dil Bahadur.
- Me he dado cuenta de que no he sido justo con la gente y
de que no puedo hacer cosas que comprometan mi corazón
por lo que he decidido… ser monje Tensing-

Tensing se sintió feliz al escuchar esas palabras, a pesar de

que ya supiera lo que iba a decir, decidió guardar silencio.
-esta bien joven príncipe, si tu karma es estar de servidor
que, de servido, entonces este será tu destino- Dijo Tensing

Kate y Alexander Cold junto con Nadia Santos se quedaron

perplejos, no por la decisión repentina de Dil Bahadur, sino
por la profecía que les había dado Tensing anteriormente.

A la final todos quedaron felices, por un lado Tensing y Dil

Bahadur ayudaron a los intocables y se convirtieron en
personas solidarias, y por otro los 3 reporteros pudieron hacer
un reportaje acerca de dos monjes en un país desigual.

FIN