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La crisis de 1820: un dilema representativo

La caída del poder central, en el proceso de disgregación creada con la restauración


monárquica Europea, y una fuerte oposición en Buenos Aires al gobierno directoral,
desato la catástrofe aludida por Mitre.

La Batalla de Cepeda, consumada el 1 de febrero de 1820 celebro el triunfo del Litoral


liderados por Estanislao López de Santa Fe y el entrerriano Francisco Ramírez,
generando la caída del gobierno directoral.

La experiencia revolucionaria había demostrado la dificultad de conformar una unidad


política, donde había caído el poder central, surge el Estado Provincial. Donde las
provincias se convirtieron en entidades autónomas y organizaron sus regímenes y
aparatos administrativos. Buenos Aires dejo de ser, la sede de gobiernos para ser un
Estado autónomo.

En el interior de la elite porteña existían defensores de una política confederal y una


división facciosa que enfrentaba a directorales con antiderectoriales.

Los escenarios de la disputa

Luego de Cepeda, Buenos Aires se convirtió en un escenario de sistemas


representativos- cabildos abiertos, asambleas populares, petitorios- a la vez, temas
acerca de la legitimidad del poder.

Mientras el Cabildo de Bs As reasumía el mando universal de esa ciudad y su provincia,


los caudillos vencedores de Cepeda se opusieron y exigieron un nuevo cabildo para
realizar un tratado de paz.

El cabildo abierto del 16 de Febrero creo la Junta de Representantes de Bs As, y un


nuevo poder de designar gobernadores. Y eligieron como gobernador provisional a
Manuel de Sarratea, y esta junta se formo sin la campaña.

En Marzo se dio otra junta por falta de votantes por parte de los diputados. Por lo cual
la Sala, determino que los alcaldes y tenientes hagan noticia a los vecinos para que
votaran.

Sarratea convoco a elecciones para formar una nueva Junta de Representantes de la


provincia. Para elegir diputados en la ciudad y campaña.

La Gaceta deicidio publicar noticias para que los habitantes acudan a votar. Pero la
ausencia de sufragantes no hacia más que profundizar un vacio en la ciudad.

La legitimidad estaba basada en la fuerza del voto como obligación, haciendo


responsables a los ciudadanos para votar. Función que se cumplió el 21 de Abril, donde
el gobierno obligo mediante los alcaldes a que pasaran casa por casa a reclutar a los
vecinos.
Pero existía una gran conflictividad entre la ciudad y la campaña, tema y razón por la
representatividad.

La idea de que la campaña era un espacio subordinado a los designios de la ciudad y


dependencia exclusiva del gobierno.

La critica a un tipo de representación fundada en la distribución del número de


diputados según la cantidad de habitantes, resurgía el problema del Congreso
Constituyente en 1818.

Los diputados defendían la concepción de representación basada en las tradicionales


jerarquías. Cada pueblo de la campaña proclamaba reasumía su soberanía a través de
cuerpos morales.

López no tenía jurisdicción en Buenos Aires para convocar a elecciones de diputados y


oponiendo a los cuerpos morales.

“En aquellos días gobernó el que quiso”

Con la crisis del año 20 la legitimidad política estaba en a base del conflicto. Aquí el
Cabildo reasumió el poder de las provincias y se nombraron gobernadores, los cuales
duraron poco. Dado que se habían roto las reglas de juego.

La caída del poder central produjo un vacío de poder y de mecanismos de legitimar una
autoridad. Por lo cual la contraposición entre asambleismo o representación, fue en
realidad, un claro ejemplo de cómo sectores de la elite, apelaron al asambleismo para
ocupar el poder.

Además, esta anarquía del 20 generó la inclinación hacia un régimen representativo que
eliminara el asambleismo y fue acompañado este reclamo por la Gaceta.

El 26 de septiembre, fue electo el general Rodríguez quien impone ciertos principios. La


elección de representantes y cualquier sujeto del pueblo, sea directa, libre y lo mas
general posible.

Establecer una constitución provincial de carácter republicano: la soberanía residiría en


el pueblo expresando sus voluntades con representantes y aquellos hombres libres=
ciudadano.

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