Exitoso el Carnaval del Cuero de Ballena a beneficio

de
Francisco Freddy Torres.

Me apresure para llegar tempranito el domingo, 15 de mayo

de 2011 para llegar al Parque Bronco Ext. Roig de Las
Pequeñas Ligas de Humacao. Se celebró allí el Carnaval de
Cuero de Ballena a beneficio de un amigo muy apreciado
por la comunidad Freddy Torres, quien fue diagnosticado
recientemente con el síndrome Lou Gehrig, una enfermedad
del sistema nervioso que no tiene cura.

Yo llegue ataviado con mis mahones, camiseta y la gorra,

busque de inmediato a mi Equipo Los Caminantes
Urbanos, que pretendíamos darles una tremenda zurra a
todos los equipos y alzarnos con el campeonato. Para mi
sorpresa solo había llegado Pancho, los demás aún
continuaban durmiendo.

Aproveche la ocasión entonces para saludar al equipo

organizador del Carnaval lo integró el dilecto deportista, el
amigo José Manuel Chemane Carradero, Robert Cruz, Robin
Cruz, Carlos Rody Molina, Héctor Ruiz, en el Kiosko Freddy,
Héctor Camps, Paleto, Lourdes Cáceres, Zorry, Janet
Carrasquillo, Matías, Wison, junto a la Brigada Suicida de
colaboradores de la comunidad.

El Kiosko estaba repleto de golosinas y friitas por lo que

momentáneamente se me olvidó el juego. Poco a poco y
medios soñolientos fueron llegando mis compañeros de
equipo, compuesto por Pito Huertas (José Luis), Kike Torres,
Baby Carrasquillo, Héctor D. Melendez Cubero, Pancho
Castro, Che Pibe, Omar Castro entre otros.

Los Caminantes Urbanos lucíamos una impecable

apariencia de jugadores profesionales, y me parece que
impactamos a los otros equipos que nos miraban y de
nerviosidad se reían. De hecho, no quisieron jugar a
primera hora con nosotros. Tuvimos que jugar a segunda
hora.

Los equipo que participaron en la noble causa fueron; Los

Mayiyos de Darwin Figueroa, Los de Patagonia de Robert

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Figueroa, La Tropa 215 de la Guardia Nacional de Humacao
comandando por Luis Raúl Sánchez, Los Pelayos de Ext Roig
dirigidos por Andy Rivera y por supuesto los que se
perfilaban sin lugar a duda como los futuros campeones,
Los Caminantes Urbanos dirigidos por Kike Torres.

El evento comenzó con el partido entre los equipos

integrado por Los de Patagonia frente a La Tropa 215 de la
Guardia Nacional de Humacao. El equipo de la nacional se
quedo sin municiones y los de Patagonia aprovecharon la
oportunidad para vencerlo en el último momento.

A segunda hora las gradas se llenaron para el tan esperado

partido entre Los Pelayos frente a los Caminates Urbanos.
Luego, de nuestras rutinas de estiramientos nos
preparamos para la ofensiva. Pero parece algo le echaron a
los bates porque no funcionaron como esperábamos y el
estelar lanzador Héctor Ruiz logró con sus ágiles y variados
lanzamientos propinarnos los tres out de la entrada de
inmediato.

Debemos confesar que al parecer le echaron algo al agua

que tomamos porque nuestras destrezas motoras parecían
de bicicleta y con el arco doblado. Nuestro estelar pitcher
Héctor D. Melendez Cubero se paró en la lomita de manera
impresionante. Los bateadores del equipo contrario se
intimidaron y al principio no se atrevían enfrentarlo.

Se adueño del montículo, de aquel trozo de terreno

levemente elevado, y miro desde allí al centro del campo
interno observando a sus compañeros que lucían muy
seguros y tranquilos. Apareció el primer bateador y de
inmediato Héctor puso su pie en contacto con el montículo
y lanzo la primera bola del juego que no toco tierra ya que
fue alcanzada por un batazo y todavía la están buscando.

Héctor que al principio lucia como un león termino lanzando

como un corderito y lo apabullaron a palos. Yo que actué
como receptor del Equipo casi no llegue a ver una bola,
todas desaparecían como arte de magia ante mis ojos.

En la defensiva nuestro cuadro interior lucia impresionante.

Baby en la primera base, Pancho en la segunda y Kike en la

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tercera. Pero…, aún no me explico que nos paso. Pancho
Castro lució un tanto mariado y en repetidas ocasiones se
lanzó para atrapar la bola pero se sus movimientos
parecían la de un bailarín de flamenco y no pudo atrapar ni
tan sólo una bola.

En el jardín izquierdo lo ocupó el habilidoso Pito Huertas,

perdón José Luis que parecía que estaba corriendo un
maratón por todo el terreno de juego. Fueron muchas las
veces que lo vi llegar hasta la verja y mirar con mucha
atención hacia el Righ Field.

Pero luego fuimos testigos de la jugada de la tarde. Fue una

jugada que nos sorprendió y nos dejo atónitos a todos. Sin
lugar a duda una jugada espectacular que realizó nuestro
héroe el capitán del equipo Kike Torres. Con toda la
intención de defender la honra del equipo se prometió no
dejar pasar ni una sola bola por el área de la tercera base y
por todo el perímetro de la línea de base. Atrapó la primera
bola que batearon por tercera y de inmediato hizo los
movimientos de rigor para lanzarla como un meteoro hacia
la primera. Pero no se que le ocurrió, parecía que lanzaba
una bola de plomo y no una bolita de tenis. Los
lanzamientos parecían a cámara lenta.

Entonces vino la jugada espectacular de que todavía se

comenta. Kike, salió atrapar un fuerte batazo en dirección
a tercera base. Miro fijamente cuando salió la bola, dio un
paso hacia atrás y luego arrancó hacia el frente con
seguridad, escucho la algarabía de las gradas y se
aventuró con velocidad alcanzar la pelota. Nos sorprendió a
todos cuando lo vimos en una jugada acrobática sin
precedentes. De momento escuche a Robert a través del
micrófono gritar; es un pájaro, es un avión, noooo… es Kike
Torres que acaba de estrellarse contra el terreno de juego
de manera aparatosa levantando una ola de tierra.

Se posó en el suelo, provocando nuestra preocupación que

se disipo de inmediato cuando lo observamos respirar y
abrir su mano buscando la pelota, pero solo había un
puñadito de arena. Todos sus compañeros corrimos
ayudarlo para levantarlo pero se hizo preciso contar con la
ayuda de los compañeros del equipo contrario. Finalmente,

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lo pusimos de pie y por fortuna sólo tenía un poquito de
arenilla en los labios.

La demostración de Kike nos insufló ánimo y entusiasmo al

Equipo. Cuando nos tocó la ofensiva se soltaron los bates
para anotar en repetidas ocasiones y acercarnos al
marcador. El Equipo contrario tuvo la suerte de que el
partido se limitó a sólo cinco entradas. Como no había
pizarra electrónica, levantaremos una impugnación porque
nosotros pensábamos que el juego había terminado con un
marcador bien cerrado de 5-3 y no aquella anotación que
parecía de baloncesto de 22 a 4. Eso hiere nuestro orgullo
y es intolerable, fuimos a dar una zurra y salimos
susurrados.

Bueno, lo cierto es que el ambiente que prevaleció fue uno

de franca camaradería y solidario compartir donde
privilegiamos la amistad que nos une y sobre todo cuando
se trata de una buena causa.

Allí compartimos y nos tomamos fotos con Freddy dejándole

saber el aprecio, cariño y la solidaridad de sus amigos y su
comunidad. Observé su mirada emocionada llena de
gratitud. Se que sintió de manera especial todo el afecto de
sus amigos con la fe puesta en Dios, para que le de mucha
fortaleza para enfrentar su condición de salud.

El partido final se jugo bajo la lluvia. Lo disputaron el equipo

de Patagonia frente a los locales Pelayos de Extensión Roig.
Se alzó con la victoria el equipo que mejor conocía el
terreno el Equipo de los Pelayos.

Al final del partido y todavía bajo la lluvia disfrutamos de la

actividad musical a cargo del internacional Tony Sánchez
(Cano Galaor) y su Orquesta con la participación especial
del maestro Pedro Conga. Con salsa bajo la lluvia y con
sabor comunitario concluyó exitosamente el Carnaval.

El abrazo comunitario para Freddy Torres pidiéndole a Dios

por su salud.

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Prof. Félix Báez Neris
23 de mayo 2011
Humacao, Puerto Rico