1. Lavamos los limones que vayamos a elegir para darle sabor a
nuestras flores, secamos. Rallamos los limones sin coger la parte blanca del limón para que no amargue y reservamos. 2. Batimos en un bol los huevos con el azúcar hasta que blaqueen. Reservamos. 3. Añadimos al bol con los huevos, la leche, un pellizco de sal, la harina de trigo, la ralladura de los limones y la copita con en el anís. Batimos hasta que nos quede una crema de la consistencia densa parecida a la de las natillas o a la de las filloas. Ni espesa ni líquida y muy importante, sin grumos. 4. A esta crema le iría bien un poco de reposo. No es necesario pero como en el caso de las filloas la crema se asienta y luego queda mejor. Con media hora es más que suficiente. Un pequeño truco para que os salgan un poco mejor.
Preparación de las flores. Fritura
1. Para poder hacer las flores debemos de tener un molde especial de hierro con forma de flor, mariposa o estrella que lo encontraréis en ferreterías o tiendas de cocina. Si es bueno os dura toda la vida como las churreras, seguro que habéis visto la receta de los churros. Imaginaros que es de la época de su madre y aún sigue cumpliendo su función, seguro que por muchos años más. 2. Ponemos una sartén honda o una cazuela con abundante aceite de girasol y calentamos a fuego medio. Cuando el aceite está caliente colocamos el molde para las flores dentro. 3. Cuando el molde ya se encuentre muy caliente introducimos el molde en la crema pero sin llegar al borde, sólo un centímetro de su altura más o menos, este dato es muy importante para que la flor se desprenda luego sin dificultad. 4. Introducimos el molde impregnado con la masa en la sartén y lo apoyamos en el fondo de la misma y pasados unos segundos al levantar el molde. Se desprenderá la flor de carnaval y se quedará en la sartén. Al principio, la primera y segunda flor suelen resistirse, así que movemos lentamente el molde para que se vaya despegando, las siguientes salen solas. 5. Cuando esté despegada, la dejamos unos instantes que acabe de freírse y la sacamos cuando está dorada.