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UNIVERSIDAD DE LA COSTA

CODIGO DE ETICA DEL EJERCICIO PROFESIONAL

“ENSAYO SOBRE EL LIBRO DEL SEMESTRE: EL HOMBRE MEDIOCRE".

ESTUDIANTE: ANYELA CAMPO MARTINEZ

20 DE NOVIEMBRE DEL 2021

DOCENTE: LISSETH VASQUEZ PEÑALOZA


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El HOMBRE MEDIOCRE: UNA SOMBRA PROYECTADA POR LA SOCIEDAD

Para la sociedad el carácter del hombre se ve influenciado por factores como la herencia de los
progenitores, la educación y en la forma como el ser se adapta al entorno en el que vive. Lo que
se hereda muchas veces implica cierta fatalidad, que la educación corrige y orienta. La sociedad
ejerce presiones coercitivas sobre los hombres y conservar una linea propia se convierte en una
verdadera resistencia.
El hombre se forma con ideales fundados por la percepción de una realidad que lo rodea,
adaptándose a ella y evolucionando a la vez. "Los ideales pueden no ser verdades; son
creencias. Su fuerza estriba en sus elementos efectivos: influyen sobre nuestra conducta en la
medida en que lo creemos. A medida que la experiencia humana se amplia, observando la
realidad, los ideales son modificados por la imaginación", la experiencia y la imaginación siguen
vías paralelas.

En el hombre con ideales predomina la variación y esta determina la originalidad. El hombre con
ideales, se distingue en la sociedad por su carácter propio, no vive como un simple reflejo de los
demás, piensa por sí mismo con cabeza propia y con una imaginación creadora, en contraste, el
hombre mediocre (del latín mediocris, mediocre cuyo significado es mediano, regular, débil,
insignificante) carece de ideales, tiene miedo al cambio y a afrontar la realidad con sus propios
pensamientos y deseos, tiene pocos deseos de superación y es conformista. Como dice en su libro
el sociólogo y médico Italo-Argentino José ingenieros: "La función capital del hombre mediocre
es la paciencia imitativa; la del hombre superior es la imaginación creadora. El mediocre aspira a
confundirse en los que le rodean; el original tiende a diferenciarse de ellos. Mientras el uno se
concreta a pensar con la cabeza de la sociedad, el otro aspira a pensar con la propia".

En el libro el autor manifiesta que se pueden diferenciar 3 tipos de hombres, el hombre inferior

que se puede asemejar a un animal humano que debido a su ineptitud no se adapta al medio en

que vive, se limita a actuar por debajo de la moral o de la cultura dominante y en ocasiones fuera

de la legalidad. El hombre mediocre, es una sombra proyectada por la sociedad incapaz de usar

su propia imaginación para obtener ideales, que solo refleja rutinas, prejuicios y su conducta

tiende a la imitación de lo que lo rodea, es por esto que se dice que el mediocre es el "alma de la

sociedad". Por su parte el hombre superior es original e imaginativo, sus ideales están bien
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definidos, no son influenciados y están sobrepuestos a los de los demás, ve más allá y busca

perfeccionar su imaginación.

Hoy en día observamos en nuestra sociedad esta variabilidad de hombres, cada vez son menos los

de mentalidad superior y más los de mentalidad mediocre e inferior. Las personas optan por

querer llevar una vida conforme, rutinaria, con pocas aspiraciones, porque se" cree" que es menos

complicada y más llevadera que tener la responsabilidad de superarse con esfuerzo y sacrificio

cuando así se requiera, de hacer algo distinto a lo que hacen los demás y distinguirse entre el

montón.

La mediocridad trae consigo otros síntomas como la envidia, la hipocresía, la mentira, la

cobardía, el egoísmo. Una persona mediocre no desea nada más que lo que otro tiene sin hacer

nada, muchas veces hasta no desea que el otro lo tenga, no cultiva en su mente pensamientos

optimistas ni de bienestar. En ocasiones, prefiere negarse a hacer algo para no tener molestias

hasta el punto de inventar excusas. Si existe un hombre con metas pero cobarde, es mediocre, y

sus miedos son cadenas que lo atan para no cumplirlas.

En conclusión, inferior, mediocre o superior, todo hombre adulto atraviesa un período

estacionario, durante el cual algunos perfeccionan sus ideales y las aptitudes adquiridas, otros se

quedan en la mitad del camino, no luchan por sus ideales y solo se adaptan a pensar con cabeza

ajena, y otros definitivamente son completamente dominados por la sociedad que los rodea.

Bibliografía:
Fontrodona Joan, A. A. (2011). Una visión panorámica de la ética empresarial. Universia Business Review,
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