Capítulo Dos

La Vecina

Desperté cinco minutos antes de que sonará la alarma. Era sábado por la mañana, lo que me
recordaba que ya tengo que arreglar mis cosas para el lunes, el cual sería el inicio de mi nueva
vida escolar aquí. Papá dijo que no sería muy diferente a como era en la otra ciudad, pero yo sí
que lo sentía diferente. Hice el edredón a un lado y me senté por un momento, para evitar
marearme tan temprano. Tomé una ducha de quince minutos, al salir fui tomando el secador
de pelo y entre nuevamente a mi habitación. Eran las ocho y media de la mañana, hacia frío
por lo que opte por ponerme unos leggins negros, un jersey azul, y mis converse blancas. Bajo
las escaleras hacia la cocina encontrándome con Mamá haciendo el desayuno.

—Buenos días cariño.

—Buenos días Mamá.

Sigo mi camino hasta el salón y enciendo la tv para distraerme un poco.