Un tubo traqueal es un catéter que se inserta en la tráquea con el propósito de establecer y
mantener una vía aérea permeable y para asegurar el adecuado intercambio de O2 y CO2.
Existen diferentes tipos de tubos traqueales:
Un tubo endotraqueal es un tipo específico de tubo traqueal que casi siempre se inserta a través de la boca (orotraqueal) o la nariz (nasotraqueal).
Tubo endotraqueal
La mayoría de los tubos endotraqueales hoy se construyen de policloruro de vinilo, pero
también hay tubos especiales construidos de caucho de silicona, caucho de látex o de acero inoxidable, y están ampliamente disponibles. La mayoría de los tubos tienen un manguito inflable para sellar la tráquea y los bronquios contra fugas de aire y la aspiración del contenido gástrico, sangre, secreciones, y otros fluidos. Los tubos sin manguito también están disponibles, aunque su uso se limita principalmente a pacientes pediátricos (en los niños pequeños el cartílago cricoides, la parte más estrecha de la vía aérea pediátrica, a menudo proporciona un sello adecuado para la ventilación mecánica).
Los tubos endotraqueales son dispositivos rígidos cuyo propósito es asegurar la
permeabilidad de la vía área: su uso tiene dos propósitos. Conservar y resguardar las vías respiratorias en pacientes que por diferentes causas no puedan hacerlo.
Cómo se debe introducir el tubo endotraquial
Una profundidad adecuada del tubo es de 21 a 23 cm en adultos y 3 veces el tamaño del
tubo endotraqueal en niños (para un tubo endotraqueal de 4 mm, 12 cm; para un tubo endotraqueal de 5,5 mm, 16,5 cm). En los adultos, si se introduce demasiado el tubo, éste ingresará en el bronquio principal derecho.