Impresionismo

el impresionismo es una corriente artística que surge en el último tercio del siglo
XIX y se caracteriza por plasmar la realidad como era percibida visualmente. El
movimiento artístico surge en Francia y su máximo exponente fue Claude Monet
(1840-1926). El término impresionista nace de las críticas a la obra Impresión, sol
naciente, del pintor Monet realizado en 1872.
Los impresionistas se enfocaban principalmente en el estudio de los modos de
percepción óptica de la luz, cuyos efectos son instantáneos. Esto los obligo a
pintar al aire libre y a trabajar rápidamente. La velocidad requerida favoreció la
mayor parte de los impresionistas prescindir de la línea, abandonara el claroscuro
y descuidara el tratamiento de la perspectiva.
Asi las cosas, los impresionistas no representaban grandes temas históricos,
religiosos o mitológicos, sino temas cotidianos como el paisaje urbano y la vida
burguesa, que les permite explorar la luz y el movimiento.
Algunas características del impresionismo como corriente artística son:
 Énfasis en los fenómenos instantáneos de la luz
 Temas cotidianos sin trascendencia
 Tendencia a la desaparición del dibujo
 Desaparición del claroscuro
 Coloración directa sobre el lienzo
 Uso de pinceladas como brochazos y puntos para construir efectos de color
 Poca o nula profundidad espacial.
Son representativos por los colores que conllevan, así como la técnica de la
pincelada y sin grandes significados que representen los cuadros, sino lo cotidiano
o una situación común.
Es uno de los periodos que, en lo personal, están muy bonitos, porque se sale de
los trazos y los colores que maneja son muy llamativos. El intentar captar un
momento como una fotografía es lo más impresionante, sin que haya cambios sino
estar lo más cerca del momento y que cada uno plasme el espacio y la situación
que desee.