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W. GRAHAM SCROGGIE EL ENCANTO DEL ANTIGUO TESTAMENTO (Estudios homiléticos y practicos para predicadores) Libros CLIE Galvani, 113 08224 TERRASSA (Barcelona) EL ENCANTO DEL ANTIGUO TESTAMENTO © 1984 por CLIE Depésito Legal: B. 38.867-1989 ISBN 84-7228-879-X Impreso en los Talleres Grificos de la M.C.E. Hi E.R. n® 265 §.G. -Poligono Industrial Can Trias, oe calles 5 y 8— VILADECAVALLS (Barcelona) Printed in Spain PREFACIO «Los dirigentes cristianos deben conocer su Biblia me- jor que ningun otro libro.» El pan no es cocido para ser analizado, sino para ser consumido. Una casa n0 se edifica para que demos vueltas alrededor y la critiquemos, sino para ser habitada. La Biblia nos ha sido dada para que po- damos conocer a Dios y vivir una vida santa. Naturalmen- te, la critica tiene su lugar, el criticismo, alto, bajo, textual, toda clase; pero, en estos puntos son relativamente pocos los que pueden entrar, y el valor principal de la Biblia no queda afectado por los resultados de estos estudios. Es el Libro del pueblo como herencia, y deberia serlo también en posesién. Todo obrero cristiano, sea ministro, maestro de Escuela Dominical, director de una clase, predicador al aire libre, repartidor de tratados, o lo que sea, deberia tener un cono- cimiento sélido de la Biblia en su lengua materna. No bas- ta con estar familiarizado con los grandes textos; deberia- mos comprender que la Biblia es una revelacion progresiva divina, y que todas sus partes estan relacionadas espiri- tualmente unas con otras. Sdélo considerandola como un todo, podemos Ilegar a la altura para apreciar su grandeza y su valor. En las paginas siguientes he procurado ser util a los cristianos corrientes, sin estudios especiales, para que vean la unidad y progreso de la Revelacién del Antiguo Testa- mento; presentar el material que hay en cada perfodo de la historia de forma que el lector pueda tener delante todo lo que es importante. Este método ha sido puesto a prueba desde hace muchos afios, con mucho éxito, y lo que se pre- senta aqui es la sustancia de conferencias que he dado en «colleges» y al publico. El que lea el libro y luego lo ponga de lado no va a sa- car mucho beneficio del mismo, pero si el lector lee con atencién y meditacién media hora cada dia, durante un afio, creo que, a pesar de los defectos de mi libro, penetrara en el encanto del Antiguo Testamento. S. GRAHAM SCROOGGIE TABLA DE CONTENIDO PARTE I HISTORIA DE LA BIBLIA BOSQUEJO GENERAL El Antiguo Testamento El Nuevo Testamento BOSQUEJO DETALLADO ANTIGUO TESTAMENTO Historia primitiva Historia patriarcal Historia de Israel NUEVO TESTAMENTO Historia de Cristo Historia de la Iglesia Historia de la Realizacién del Reino de Dios PARTE II HISTORIA DE LOS PRIMEROS TIEMPOS BOSQUEJO GENERAL Desde la Creacién hasta la Caida Desde la Caida hasta el Diluvio Desde el Diluvio hasta Babel ' BOSQUEJO DETALLADO La Creacién La Caida Cain La Apostasia El Diluvio Noé Babel El Esparcimiento de las naciones RESUMEN PARTE III HISTORIA DE LOS PATRIARCAS BOSQUEJO DE ABRAHAM La llamada E] pacto La cruz BOSQUEJO DE ISAAC A JACOB Isaac Jacob José APENDICES El problema de los 430 afios. La relacion entre Génesis y Exodo, Tabla de 3.000 anos de historia biblica. PARTE IV HISTORIA DE ISRAEL LA TEOCRACIA Israel en Egipto Israel en el desierto. Israel en la tierra de Canaan. LA MONARQUIA El Reino unido El Reino dividido El Reino tinico (Los Profetas Hebreos) LA DEPENDENCIA La subyugacién La correccién La restauracioén PARTE I LA HISTORIA DE LA BIBLIA BOSQUEJO GENERAL El Antiguo Testamento El Nuevo Testamento Nos sera muy util, ante todo, obtener una visién de con- junto de los libros de la Biblia. Hay sesenta y seis: treinta y nueve constituyen el Antiguo Testamento y veintisiete constituyen el Nuevo Testamento. Fueron escritas por lo menos por cuarenta personas distintas; en tres lenguas di- ferentes, hebreo, griego, y partes en caldeo; en estilos muy diferentes, con propésitos muy diferentes, y en muchos lu- ares distintos. «Hay aqui palabras de reyes, de poetas, de filésofos, de BeseLd ee aS Robes eradoe PREIS! dle sacerdotes, de publicanos, de médicos, de_fariseos, de .eruditos en la sabiduria de Egipto, educados en las escue- las de Babilonia, y que estudiaron a los pies de los rabinos de-Jerusaten-Emtre sus autores hallamos, pastores, cobi pastores, cobra- dores de contribuciones, hombres pobres y ricos, predica- dores, desterrados, capitanes, legisladores, jueces.» «Hay hombres de todo estado y condicién representa- dos en este maravilloso volumen. Escribiendo en el desier- to de Sinaf, en los yermos de Judea; en la cueva de Adu- llam; en la prisi6n publica de Roma, en la isla de Patmos; en los palacios de Monte de Sion y de Susa; junto a los rios de Babilonia y las orillas del Chebar. Los varios fragmen- tos de este extrafio mosaico fueron construidos en una va- riedad de lugares y de circunstancias tan heterogénea que no hay fenémeno literario en el mundo que pueda compa- rarsele.» La historia de.su producci6n, preservacién y transmi- sién es bastante para hacer de él un volumen unico, hasta el punto que sélo puede ser explicado por el hecho de que procede de Dios, que es sobre Dios, y que ha sido guardado por Dios. Nuestro propésito es trabajar desde dentro de él, a fin de que, ante todo, veamos esta biblioteca en su pleni- tud, como la muestra la lamina n.° 1: Aqui vemos que cada Testamento esta dividido en tres partes principales, el Antiguo Testamento, segtin el arreglo judio; y el Nuevo, segtin sus temas. La formacién del Ca- non del Antiguo Testamento fue gradual, y cubre probable- mente varios siglos; parece que fue completado en tres fa- ses sucesivas, segtin las divisiones de las laminas 2 y 3. 1. LA LEY, o Libros de Moisés, llamados la Tora, fueron pronto reconocidos como de autoridad divina. 2. Los PRO- FETAS, llamados el Nebi’im, fueron afiadidos mas tarde, 9 PROFETAS (v. lam. 2 2) 21 volam. 21 volim. Romanos a Judas DOCTRINA Grafica Lamina 1 Estos fueron divididos por los j divi judios en dos cl: B Pabe ecB tee oss que narraban lo asada) sets es, 1. y 2.2 Samuel, y 1.4 y 2. Reyes; 5), lo: Pre ; Brediciives (los que predijeron), Isafas, Tereett Wecehe 3 los doce profetas menores. 3. LOS SALMOS, fueron afia- idos al final y se Haman el kethubim, 0 los Escritos. Estos PREDICTIVOS Predijeron el futuro LOS PROFETAS 21 volimenes Grafica Lamina 2 10 incluyen el resto de los libros del Antiguo Testamento (v. lamina n.° 3), y fueron llamados los «Salmos», probable- mente porque estos himnos habian formado el nucleo del grupo. Este tercer grupo de Escritos estaba sub-dividido por los judios en: a) los Primeros Escritos, b) los Ultimos Eiscritos, y c) los Cinco Megilloth o Rollos. fstos Rolls exan-leides en ciertos dias sagrados: Rut, en la Fiesta de Pentecostés; Ester, en la Fiesta dé Purim; ficlesiastés, en la Fiesta de los Tabernaculos; Los Canticos de los Cantares en la Fiesta de Pascua. Lamentaciones, en 7 el aniversario de la destruccién del Templo. Esta es pues la division general del Antiguo Testamento; pero, debe que- dar bien claro que esta clasificacién judia no significa el orden cronolégico de los Libros, si bien es de valor, pues es endosada por el Seftor en Lucas 24:44: «Era necesario que se cumpliese todo lo que esta escrito de mf en la ley de Moisés, en los profetas y en los salmos.» Escritos Antiguos Rollos LOS SALMOS 13 volimenes Escritos Ultimos Grafica Lamina 3 (El orden en la Biblia hebrea de esta tercera parte en el Antiguo Testamento es como sigue: Salmos, Proverbios, Job, Cantares, Rut, Lamentaciones, Eclesiastés, Ester, Da- niel, Esdras, Nehemias, Crdénicas.) i Pasando ahora al Nuevo Testamento, aceptamos los Li- bros segun su clasificacién (Lamina 1): cinco libros histori- cos, veintitin libros doctrinales, y un libro profético, y pue- de ser util para recordar el hecho que la primera y la se- gunda divisién del Antiguo y el Nuevo Testamento, respec- tivamente, tienen el mismo numero de libros, cinco y vein- tiuno. Todo esto, naturalmente, es sdlo la superficie, la puerta por la cual entramos en el parafso de la verdad, el conocimiento de estas cosas en s{, es de poca importancia, pero, si se estudian, es con el deseo de entender mejor la sustancia y poder de las Escrituras, para lo cual nos seran muy ttiles. Repitamos: el propdsito de estudios, no es la adquisicion del conocimiento por si mismo, sino Para que por medio del conocimiento podamos conformar nuestro cardcter a la imagen de Dios, en Cristo. Estudia estas graficas atenta- mente, hasta que puedas repetir de memoria los nombres de los libros. Con nuestro propésito claramente definido y los Libros de la Biblioteca Divina dispuestos delante de nosotros, ha- gamos ahora un resumen general de su sustancia. Aqui, nuestro objetivo no es analitico, sino sintético; no es ver los Libros en su diversidad, sino en su unidad. La Biblia no es mecanica, sino orgdnica en su estructura; no es un edificio, sino un cuerpo; y cada miembro separado de este cuerpo es perfecto, y tiene que ser examinado por separado. Pero, nuesiro primer interés es ver el cuerpo en su plenitud; o para usar otra figura, hacer un reconocimiento del territo- rio desde una colina, y luego, poder llegar a un estudio mas detallado. Es evidente, pues, que el andlisis mas general que pode- mos hacer es esta divisién doble de nuestra Biblia, tal como la tenemos, con el intervalo que cae entre los dos. Asi decimos: EL ANTIGUO TESTAMENTO - Génesis a Malaquias. EL INTERVALO - Malaquias a Mateo. EL NUEVO TESTAMENTO - Mateo al Apocalipsis. ANTIGUO TESTAMENTO INTERVALO NUEVO TESTAMENTO Extranjero i Iglesia 4 6 Consu ~1|macion 3.600 400 100 UNA SEPTUPLE DIVISION DE LA HISTORIA SAGRADA Entendemos, naturalmente, que «Testamento» significa «Pacto», y que entre el Antiguo y el Nuevo, las diferencias son radicales y vitales, aunque estos pactos no estan en sentido alguno opuestos el uno al otro. Bajo el Antiguo Pac- to, Dios hace una demanda sobre el hombre; bajo el Nue- vo, Je hace una oferta. En el Antiguo, la palabra clave es: «Haz esto» y en el Nuevo pasa a ser: «Yo haré.» En el Anti- guo se trata de pecador; pero, en el Nuevo, del pecado. En el Antiguo la ley pasa sentencia; pero en el Nuevo, la gra- cia salva. E] objetivo del Antiguo es la muerte; pero el del Nuevo es la vida. En el Antiguo, el terrible Sefior exige: «Quitate el calzado de los pies», pero, en el Nuevo, el Padre amante nos ordena: «Ponte el calzado en los pies.» Bajo el Antiguo Pacto, los hombres hacian promesas y las que- brantaban; pero, bajo el Nuevo, Dios hace promesas y las cumple. En el Antiguo tenemos el simbolo, pero en el Nue- vo, la substancia: en el Antiguo, el agua, pero en el Nuevo, el vino. Como declara la Epistola a los Hebreos, el Nuevo es en todo «mejor» que el Antiguo, aunque solo podiamos llegar al segundo a través del primero. Que cada uno se asegure de que esta viviendo en la recta dispensacién; porque es de temer que muchos cristianos estan todavia regresando a los «puntos débiles y rudimentarios», que engendran escla- vitud, en vez de «estar firmes en la libertad con la cual 13 Eternidad Cristo nos hizo libres». Por otra parte, tengamos cuidado de no pensar como algunos, que ahora que tenemos el Nue- vo Pacto, el Antiguo ya no tiene ningun mensaje Para noso- tros; al contrario, no hay nada en el Nuevo Testamento que no haya sido profetizado o prefigurado en el Antiguo, y sin el uno no podriamos entender el otro, porque como se ha dicho brevemente: ie a «El Nuevo se halla en el Antiguo contenido? ntiguo se halla en el Nuevo explicado.» (7 . —Y Luego, es necesario recordar el gran periodo que cae en- tre estas dos divisiones de nuestra Biblia, un periodo du- rante el cual no aparecié ningun profeta, no se pronuncié profecia, un periodo de silencio y de sufrimiento, pero uno de los mas heroicos de la historia del pueblo judio. Esta historia no esta incluida en el Canon de las Escrituras; pero deberfa ser lefda cuidadosamente para que podamos ver la conexi6n entre los dos Testamentos y poder hacernos cargo de los cambios que, como veremos, tuvieron lugar entre los tiempos en que Nehemias y Malaquias escribie- ron hasta el Advenimiento de Cristo. La literatura de este periodo son los libros Apocrifos del Antiguo Testamento, y Josefo nos proporciona la historia. A juicio nuestro, el in- tervalo entre Malaquias y Mateo fue disefado por Dios como un sello sobre la profecia del Antiguo Testamento, se- parandola de su cumplimiento, a fin de hacer imposible cualquier colusién o trampa; y con ello nosotros hemos de aprender que los silencios de Dios son tan significativos como sus pronunciamientos. Habiendo percibido las divisiones generales de nuestra Biblia, vamos a definirlas ahora un poco mas de cerca. Tenemos una division septuple de la Historia Sagrada; tres partes pertenecen al Antiguo Pacto, y tres al Nuevo; y estos estan unidos por un periodo central. (Lamina prece- dente.) BOSQUEJO DETALLADO EL ANTIGUO TESTAMENTO Historia primitiva Historia patriarcal Historia de Israel EL NUEVO TESTAMENTO Historia de Cristo Historia de la Iglesia x Historia del Cumplimiento Final 15 EL ANTIGUO TESTAMENTO PERIODO I HISTORIA PRIMITIVA \ 19 A (Génesis 1-9:9) Esta es la historia inicial, o la primera del mundo, y cu- bre un periodo no inferior a 2.000 afios (esto es, natural- mente, desde la reconstruccién de la tierra, Génesis 1, 2), y probablemente mucho mas. Estos siglos iniciales pasan en relativo silencio, y sdlo se nos revela y se registra lo suficiente para proporcionar- nos una base inteligible, para toda instruccién ulterior; es la trama o marco base de la Biblia, en que se nos presenta a Dios, al hombre, a Cristo, al Espiritu, al diablo, al peca- do, la muerte, la gracia, la redenci6n, al universo, los pac- tos, el matrimonio, el Sabado o Dia de Reposo, o sea, en germen, todo lo que forma la substancia de la revelacién divina. Estas lineas de instruccién deberian ser seguidas cuidadosamente por el estudioso, marcando la primera vez que se presenta cada una de estas palabras o pensamien- tos, porque esta se vera de modo invariable, que es la clave para entender el tema. LA HISTORIA PRIMITIVA Desde la Creacién al Esparcimiento de las naciones 1. Desde la Creacion a la Caida a Sagrada Escritura empieza con las palabras subli- mes y comprensivas: «En el principio Elohim cred los cielos y la tierra.» De lo que hay deitras de e8to no sabemos nada, ni tene- mos medio alguno de saberlo, excepto que Dios estaba alli. 17 o£ za Rapidamente, y con exactitud cientifica se nos cuentan los dias de la reconstruccion de la naturaleza, que siguen a una serie de desastres, y el hombre aparece sobre la tierra. El hombre es colocado en el huerto del Edén, y junto con su mujer, se le pone a prueba de modo necesario e inevita- ble. Ceden a Satands, y sus naturalezas quedan contamina- das, y la comunién con Dios es cortada. 2. Desde la Caida al Diluvio. A partir de esto, el curso que sigue la raza es hacia aba- jo; la naturaleza pecaminosa se hace evidente pronto y cla- ramente y dentro del término de la primera familia apare- cen todos los temas morales y espirituales de las edades. Cain va por un lado y Abel por el otro; su posteridad aumenta y se desparrama, pero en el curso del tiempo tie- ne lugar una alianza fatal entre las dos simientes, (Cain y (Set) que son visitadas por Dios, mediante el envio de un diluvio, que barre toda la tierra habitada, dejando sélo a Noé y a su familia. 3. Desde el Diluvio a Babel. Se empieza de nuevo, pero la naturaleza pecaminosa que la familia introdujo en el Arca con ella reaparece, y pronto se manifiesta sobre la nueva tierra en la conducta vergonzosa de Cam. Dios hace un nuevo pacto con Noé, el cual pasa a ser el padre del nuevo mundo, y al cual se le da la orden de multiplicarse y esparcirse sobre la tierra. Su posteridad se niega a hacerlo y son visitados por el juicio de Babel. PERIODO II LA HISTORIA PATRIARCAL (Génesis 11:10-50) La historia de los primeros padres cubre un periodo probablemente de 215 afios. El Exodo 12:40, leemos que Is- rael habit6 en Egipto 430 afos, y en Galatas 3:17, el apds- 18 tol Pablo habla de la Ley Mosaica que fue dada 430 afios después del Pacto hecho con Abraham. Aahora bien si vol- vemos al momento de hacerse el Pacto, en Génesis 12 y 15, hallamos que el Sefior habla de este mismo perfodo en tér- minos de «generaciones», cubriendo como unos 400 anos (15:13, 16). De modo que el «tiempo de estancia» a que nos referimos empieza no con la ida de la nacion a Egipto, sino con la estancia de los «padres» —Abraham (cap. 12), José (cap. 37), y Jacob (cap. 44)— alli. Asi que Génesis 12-44 cubre un periodo de 215 anos, y desde este punto en adelante, hasta Exodo, en Exodo 12, otro periodo de 215 afios, haciendo los 430 afios que hemos mencionado de Galatas 3:17. E] término «patriarcas» tiene un doble significado, re- firiéndose a vecés a Abraham, Isaac, Jacob y los doce hijos, y a veces solo a los tres primeros, que eran los cabezas 0 je- fes del Pacto. Si el primer perfodo que vimos se referia a sucesos, este de los patriarcas es esencialmente de persona- jes, y de él mana la fuente de vida que fluye por toda Ia tie- rra después de la revelacién. Hay que hacer un estudio muy cuidadoso de este periodo, a cuya historia, los moder- nos descubrimientos arqueolégicos han dado nuevo testi- monio. HISTORIA PATRIARCAL Desde la llamada de Abram, a la muerte de José 1. Desde la llamada de Abram, hasta su muerte. Después de Noé, la raza y la familia se demostraron in- fieles, por lo que Dios toma a un individuo y lo hace el cen- tro de sus propésitos y le da un pacto que no puede ser quebrantado. De modo lento, pero seguro, los propésitos de Dios ma- duran en Abram, que es guiado desde Ur a Hebron, desde la ciudad de la idolatria, a la «comunién» con Dios. 2. Desde el Nacimiento de Jacob a la muerte de Isaac. Se escoge una linea para la perpetuacién de las prome- sas del pacto, y esta sigue por Isaac, Jacob, y los doce hijos. 19 No se dice mucho sobre isaac, pero se dedica espacio consi- derable a Jacob, su hijo, uno de los personajes mas impor» tantes de la historia del Antiguo Testamento, y cuya vida esta llena de significado espiritual. 3. Desde la venta de José hasta su muerte. Se selecciona a uno de los hijos de Jacob para darle una consideraci6n especial, y aunque la simiente prometida no iba a pasar por José, sino por Juda, con todo se nos presen- ta al primero como el tipo del que habia de venir. Asimismo, la historia de José nos lleva a Egipto, que es la escena de la experiencia mas sombria de Israel en el pré- ximo gran periodo. PERIODO II HISTORIA DE ISRAEL Exodo a Malaquias En esta division tenemos la historia de los doce hijos de Jacob, cuyo nombre fue cambiado, en Jabbok, a Israel: “Principe de Dios» Esta historia ocupa el resto del Antiguo Testamento, y cubre un periodo aproximado de unos 1.400 afios. «Israel» es el titulo del pueblo escogido, que lo inclu- e todo, aunque hemos de distinguir luego en la historia, Israel de Juda, y luego a los israelitas (0 samaritanos) de los judios. Este tercer periodo, que es el tema de casi todo el Anti- guo Testamento, cae en tres partes definidas. 1. Edad de la Teocracia. 2. Edad de la Monarquia. 3. Edad de la Dependencia. 20 HISTORIA DE ISRAEL Desde la muerte de José, hasta la profecia de Malaquias 1, EDAD DE LA TEOCRACIA Desde la muerte de José, hasta que Israel pide un rey (1) Israel en Egipto Durante doscientos quince afios el Pueblo Escogido fue esclavo de los dépostas egipcios, y su experiencia fue ver- daderamente triste y amarga. Pero cuando su condicién se volvid intolerable, Dios mando a un libertador en la perso- na de Moisés, que habia tenido primero una preparacion especial en el desierto, y luego aparecid, investido de la au- toridad divina, para traer una serie de juicios sobre la casa rebelde de Faraon. Bajo la sangre de la Pascua, los hijos de Israel fueron protegidos de la espada del angel Destruidor, y al dia si- guiente temprano, salieron de Egipto una gran multitud, y entraron en su peregrinaje por el desierto. (2) Israel en el desierto Desde Rameses se dirigieron por Succot, Etam y Pi-Ha- birot al Mar Rojo, donde Dios, dividiendo las aguas, ajecu- {6 una maravillosa liberacién, que es celebrada en el Canti- co de Moisés. Luego, por Mara, Elim, Sin y Refidim, llegaron a Sinai, donde acamparon durante doce meses, el afio mas trascen- dental de toda su historia. Aqui, recibieron al Decalogo, se establecié el Tabernaculo, y se instituy6 el Sacerdocio, he- chos que inculcaron verdades profundas y de gran alcance, cuyo significado sélo podemos hallar en el Nuevo Testa- mento. Desde Sinaf, Israel viajo a Kades-Barnea, donde se re- belaron y fueron desviados al desierto durante treinta y ocho afios, hasta que toda la generacién anterior hubo pe- recido. Sus descendientes entonces regresaron a Kades- 21 Barnea y después de someter a algunos de los reyes al Este del Jordan, cruzaron el Jordén y entraron en la Tierra de Promisi6n. (3) Israel en la tierra Empieza ahora una larga historia, que requiere un estu- dio cuidadoso. Bajo esta seccién, sin embargo, la seguiremos sélo has- ta el tiempo de la monarqufa. Entre el tiempo en que entraron en la tierra, y el tiem- po en que fue elegido el primer rey, hay un periodo de unos cuatro siglos y medio. Josué sucedié a Moisés, hizo atravesar al pueblo el rio Jordan, los condujo a la victoria contra sus enemigos, y les distribuy6 la tierra. Luego vino una sucesién de Jueces o Salvadores, Ios cuales, cuando el pueblo era sometido por sus enemigos, a causa de sus pecados, eran Ilamados para que los libraran. Esto duré hasta el tiempo de Samuel, el profeta. 2. EDAD DE LA MONARQUIA Desde la peticién de un rey, hasta la cautividad de Judé (1) El Reino Unido El pueblo, en su afan por ser «como las demés nacio- nes», habia requerido de Samuel un rey, y con su decisién cambiaron el curso de su historia. De Teocracia pasaron a Monarquia, de un rey invisible a un reinado y un rey visi- bles. Durante los primeros ciento veinte afios este reino permanecié unido, regido sucesivamente, durante cuarenta anos cada uno, por Saul, David y Salomon. (2) El Reino Dividido Luego vino otro cambio. En parte por el descenso moral durante el reinado de Salomon, y en parte por la poca sabi- duria de su hijo, diez de las tribus se separaron del reino 22 ile Jerusalén, dejando solos a Juda y a Benjamin. E] nuevo yeino fue establecido en el Norte, con Samaria por capital, pronto pasé a ser un centro de culto idolatrico. De los Mianieve reyes de Israel, no hubo uno solo bueno, y su in- iependencia fue destruida por Asiria, pais adonde fueron \levados cautivos, y del cual nunca regresaron. (3) El Reino Unico Bl Reino del Sur, o Judea, continué durante ciento iveinta y cinco anos, después que Israel fue llevado en cau- tividad. Bl verdadero culto estaba centrado en Jerusalén, y ly manifestacién de Dios entre su pueblo estaba alli. Algu- nos de los reyes del Sur fueron hombres rectos y grandes, y el Templo era el lugar de reunion de la congregacién. Pero, también Juda se aparté de Dios, y se corrompié con la mal- dad de sus alrededores, como consecuencia de lo cual, fue derrocado po Nabucodonosor, que los Ilevé a Babilonia, de donde, como veremos més adelante, regresaron en numero considerable. Los reinos del Norte y del Sur no carecian de hombres fieles a Dios y al pueblo, los profetas, que publica y repeti- damente les hicieron evidentes sus pecados, advirtiéndoles del juicio inminente, y llamandoles a la rectitud de vida y santidad de cardcter. Para realizar este ministerio, muchos de los profetas lo sacrificaron todo, y lo sufrieron todo, ero ellos mantuvieron viva la conciencia moral, e hicieron ja justicia y la soberania de Dios real a su pueblo, tanto si lo deseaban como si no. Ellos eran la esperanza de la na- cién, pero el pueblo se aparté de ellos y siguié adelante ha- cia un camino de vergiienza y servidumbre. 23 3. EDAD DE LA DEPENDENCIA a) La Cautividad Desde la cautividad de Judd, hasta la catda de Babilonia (1) Los tres movimientos de la cautividad Hasta ahora, la historia, tal como ha sido contada, ha sido directa y consecutiva, pero a partir de este punto ne- cesita ser reunida. La cautividad de Juda tuvo lugar, real- mente, en tres fases: a) En el reino de Joacim, cuando Da- niel y los tres j6venes hebreos fueron Ilevados cautivos; b) En el reino de Joaquin, cuando fue Ilevado cautivo Eze- quiel; y c) en el reino de Sedequias, cuando el templo y la ciudad fueron destruidos y el reino fue derrocado. (2) El ministerio de Ezequiel en Asiria Ezequiel estaba situado en Tel-Abib, un lugar a unos 200 millas al norte de Babilonia, y alli Dios se le revelé, y le hizo profetizar, primero respecto a la derrota de Juda, que se acercaba; luego contra las naciones circundantes; y finalmente, sobre la futura restauracién de todo Israel. Su ministerio duré unos veinte afios, y fue uno de los rasgos mas conspicuos del periodo de la cautividad. (3) El ministerio de Daniel en Babilonia El ministerio de este profeta se extendi6 practicamente por todo el periodo de la cautividad, empezando en el rei- no de Nabucodonosor, rey de Babilonia, hasta el tiempo de Ciro, rey de Persia. Fue un ministerio grande y maravillo- so, que nos presenta las escenas finales, cuando el anticris- to sera derrotado y Cristo establecido sobre el trono. Su vida es el eslab6n entre el tiempo de la cautividad y el tiempo de la restauracion, que es el periodo final que estu- diaremos en este libro. 24 5) La Restauraci6n Desde el decreto de Ciro, hasta la profecta de Malaqutas De la misma manera que la cautividad se desarrolla en ives fases (ver pag. 23). (1) El retorno y la obra bajo Zorobabel Primero, Zorobabel el principe, y Jestia, el sacerdote, condujeron a Judea a una gran multitud, la cual inmedia- tamente empezé a renovar la patria desolada. Como la esencia del pueblo hebreo era esencialmente espiritual, lo primero a que dedicaron su atencién, fue a la reconstruc- cién del Templo, que fue empezada casi inmediatamente. Hubo fuerte oposicién por parte de los samaritanos, y du- yante un tiempo, la obra qued6 estancada. Pero bajo los fervorosos ministerios de Hageo y Zacarias prosiguid, fi- nalmente, y qued6é terminada. (2) El retorno y la obra bajo Esdras Cerca de sesenta aos més tarde, Esdras, descendiente de sacerdotes, crué6 el desierto y Ilego a Jerusalén. El episodio que se registra en el Libro de Ester, ocurre entre estos dos retornos, y por tanto deberia ser leido antes de entrar en el estudio de la obra realizada por Esdras. Si la obra de Zorobabel fue reconstruir el Templo, la obra de Esdras fue la reforma moral del pueblo, que se ha- bian apartado mucho de la ley de Dios, y en consecuencia del camino de la rectitud y la separacion de los otros pue- blos. Esdras, ora respecto a los pecados del pueblo, y luego los llama a arrepentirse y a volverse de su iniquidad, y como respuesta a su palabra se realiz6 una poderosa obra de purificacién. (3) El retorno y la obra bajo Nehemias Unos doce afos después del retorno de Esdras, Nehe- mias consiguié permiso de Artajerjes, y llegé a Jerusalén 25 para reconstruir el muro que estaba en ruinas. Lo hizo, se nos dice, en cincuenta y dos dias, después de lo cual, coo- pero con Esdras para reinstaurar la Palabra de Dios entre el pueblo, como su guia y su autoridad final, haciendo se- guir la obra de una manera practica por medio de la co- rreccién de los abusos existentes. En todo esto Malaquias le ayuda, que es el ultimo de los profetas del Antiguo Tes- tamento. Se ve que estos tres grandes periodos de historia no son proporcionales en cuanto a los afios. El primero, 2.000 afios, ocupa nueve capitulos. El segundo, 215 afios, ocupa treinta y nueve capitulos. El tercero, 1.400 anos, ocupa ochocientos ochenta capi- tulos, o treinta y ocho libros, mostrando claramente en donde pone Dios el énfasis principal. Considera este ciclo del Antiguo Testamento, hasta que quede bien grabado en tu mente, de modo que siempre que vuelvas a esta parte de la historia de la Biblia, inmediata- mente pienses en sus partes constituyentes. PERIODO IV EL INTER-TESTAMENTO De Malaquias a Mateo Pasamos ahora a un nuevo ciclo. Es de gran importan- cia reconocer el contacto y relaciones de Israel con los grandes imperios que rodeaban la Tierra de Promisién, que era, y alin es, el centro geografico de Dios. De estos im- perios hubo cinco que jugaron un gran papel en el progra- ma de Dios para su pueblo: el asirio, el babilonio o caldeo, el medo-persa, el griego y el romano. Nos referiremos aho- ra, sdlo brevemente, a los que tuvieron algun papel en el Interin de unos 400 afios entre Malaquias y Mateo, a saber, Persia, Grecia y Roman. Iba siendo preparado el camino para Cristo, y todos los sucesos conducian al gran suceso, al Advenimiento del Hijo de Dios a este mundo. Los pode- rosos imperios que se movian de lejos como gigantes en el horizonte eran inconscientemente los heraldos de este nue- 26 vo imperio espiritual que finalmente habria de hacer de to- «los ellos sus vasallos. El Imperio Medo-Persa, representado por Ciro, era el poiler-preparado por Dios para-enviar-a su pueblo otra vez fi su tierra. El Imperio Griego, representado por Alejandro el Gran- ide, Tue Ta escuela en Ia cual se prepararon las Escrituras jiebreas para el mundo, al ser traducidas al griego, la len- a entonces prevaleciente, en la versién que se llama la eptuaginta. Imperio Romano, representado por los Césares, fue la wuerta de acce: ‘odas par mndo-civitizado. Ha- {a un orden politico; una lengua que era hablada por to- das partes; todas las carreteras conducfan al Foro de Roma. Los judios, los heraldos de Dios, estaban esparcidos por todas partes, y las esperanzas de ellos estaban practi- camente extinguidas en una corrupcién sin nombre; y en- tonces, el reloj de Dios dio la plenitud del tiempo, y apare- cid el Mesias. De este modo se enlazan el Antiguo Testa- mento y el Nuevo. Hay dos cosas importantes para decir aqui respecto a esta parte de la historia: a) Detrds de todas las naciones esta Dios; su voluntad y su propésito abarcan toda la eternidad; no hay nada que pueda frustrarlos, y El los realiza por medio de los hom- bres y las naciones, no algunos, sino todos; porque en algu- na forma inescrutable la libre voluntad y actos de los hom- bres se subordina a los designios preordenados de Dios. Fue Dios el que levanté a Faraén, a Nabucodonosor, a Ciro, a Alejandro, a Cesar Augusto, Ningtne de ellos tenia la menor intencién de hacer la voluntad de Dios, pero la hizo, y algunos de ellos figuran ampliamente en el perfil de los planes de Dios que El nos dio en su Palabra. Y esto era y es verdad, Dios esta todavia detras de las naciones —Chi- na, Japon, Rusia, Turquia, Gran Bretafia, y el resto de las demas. La perspectiva politica del hombre es relativamen- te pequefia. La perspectiva verdadera es la divina, que ve el antes y el después, y lo juzga todo segun la gloria que provee para El. b) Que Dios y su pueblo al final siempre triunfan. Esto se ve a lo largo de la historia de la nacién escogida, y parti- 27 cularmente estos 400 afios. Defendiendo lo recto, a pesar de lo improbable de que lo consiguieran, los judios reco- braron su independencia, y libertad religiosa. Cuantas ve- ces durante las edades ha parecido que el pueblo de Dios se habfa hundido, por as{ decirlo: pero con la misma certeza de que Dios existe, la victoria ha sido suya, y serd nuestra. Lo principal es que estemos en el lado de Dios. «El Dios de la justicia parece descuidado; sin embargo, en las paginas de la historia, se registra una lucha mortal en las tinieblas, entre los viejos sistemas y la Palabra... Ahora la verdad se halla en el cadalso, la maldad esta en el trono; * Pero, este cadalso tiene el futuro en su mano, y detras, avizorando en lo desconocido, se encuentra Dios, atin en la sombra, en guardia, siempre velando por los suyos.» EL NUEVO TESTAMENTO PERIODO V HISTORIA DE CRISTO Mateo a Juan La historia de este gran perfodo, al cual conducian to- dos los que le precedieron, y del cual derivan los que le si- guen, se halla en los cuatro Evangelios y Hechos 1-11. Este es el mismo corazon de la Biblia y puede ser ilustrado en la lamina 42. La_sustancia de la Biblia entera es Cristo (Hebreos 10:7), el cual se halla profetizado en el Antiguo Testamento presente en los Evangelios, y proclamado en el resto del Nuevo Testamento. De modo que, como vemos, los Evan- gelios son el corazén de la Biblia. La vida presentada aqui es una sola, aunque vista desde cuatro distintos puntos de vista, y el descubrirla es poseer la clave de los Libros. Tenemos la obligacion de insistir en que la «vida de Cristo» verdadera y con autoridad es la que 28 CRISTO PROF ETasZ ADO: PROCLAMADO (Lamina 4) nos es dada por el Espfritu en este cuddruple Evangelio, y lo que nos interesa es familiarizarnos con lo que El dice, antes de buscar informacién, por buena que sea, de los que han tratado de reflejar su vida para nosotros en una histo- ria popular. Se ha hecho enorme dafo, y se esta haciendo cuando los cristianos se satisfacen con un conocimiento de segunda mano de las Escrituras, en vez de investigar el ori- ce Si el tiempo que se dedica a leer libros sobre la Bi- lia se pasara leyendo la Biblia misma, no sélo seria nues- tro conocimiento mas pleno y claro, sino que nuestras vi- das serfan mucho mas poderosas. Esto es verdad de toda la Escritura, pero de un modo preeminente de los Evangelios. El gran secreto de !a comprensién de estos Libros es un conocimiento intimo y personal con Aquél de quien ha- blan, asf como el valor de una biografia es aumentado si hemos estado frente a frente del individuo biografiado, y especialmente si es o era nuestro amigo. CONOCE A LA PERSONA Y CONOCERAS SU RETRATO. El primer gran hecho respecto a Cristo es su 1) ENCAR- NACION, y el ultimo, su 7) ASCENSION. Entre estos dos se encuentran cinco grandes sucesos: 2) PREPARACION, 3) MINISTERIO, 4) CRUCIFIXION, 5) RESURRECCION, 6) MANIFESTACION. 29 Todo el propésito del Advenimiento de Cristo a este mundo es presentado en estas siete palabras. Este propési- to es doble, y se declara en 2.* Corintios 5:19: «Dios estaba en Cristo, reconciliando consigo al mundo.» 1. Cristo vino para traer a Dios a los hombres. «Dios estaba en Cristo.» Esto lo hizo en su Encarnacion, Preparacién y Minis- terio. 2. Cristo vino para guiar a los hombres a Dios. «Reconciliando consigo al mundo.» Esto lo hizo, y lo est4 haciendo, por medio de su Cruci- fixién, Resurreccién, Manifestacién y Ascensién. PERIODO VI HISTORIA DE LA IGLESIA Hechos a Judas De un modo general, podemos decir que esta historia ocupa la mayor parte del Nuevo Testamento; pero cuando entremos en un andlisis mds detallado, distinguiremos de un modo mas preciso entre las «epistolas de iglesias», es- trictamente, y lo que son conocidas como «epistolas gene- rales». Se puede decir, sin embargo, que la Iglesia no es el Reino, y el confundir los dos es hacer la Escritura ininteli- gible. La iglesia esta «edificada», (una palabra que se usa en el Nuevo Testamento veinticuatro veces), pero nunca en el sentido del Reino, para el que se usa la palabra «estable- cido», un término que nunca se usa para la Iglesia. Procu- remos con la guia del Espiritu «dilucidar rectamente la Pa- labra de Verdad»; de este modo, llegamos a pensar y ac- tuar con Dios. Asimismo, recordemos, en vistas del estudio futuro, que la Iglesia fue fundada en el Dia de Pentecostés, cuando el Padre envié a la tierra el Espiritu Santo que ha- bia prometido. Habfa creyentes antes de esto, pero el Cuer- po de Cristo, la Iglesia, no estaba constituido. A mi modo de pensar, no hay ninguna prediccién direc- ta de la Iglesia en el Antiguo Testamento (aunque con fre- cuencia esta tipificada), la verdad sobre la cual era un 30 «misterio» escondido a través de las edades, y revelado plenamente sélo al apéstol Pablo. En muchos pasajes del Antiguo Testamento, la disposicién presente es pasada en silencio total, aun cuando habria sido lo mas natural y fa- cil hablar de ello, si el propésito divino no hubiera sido te- nerlo en secreto. De estos pasajes, hay tres que pueden ser tomados como ilustracién: 1) Génesis 49:10: «No sera quitado el cetro de Juda, ni el legislador de entre sus pies, hasta venga Silo (0 sea, que haya terminado la dispensacion de la Iglesia); y a él se con- gregaran los pueblos.» Silo vino, pero fue crucificado, no obedecido; pero al fin de la edad presente, cuando venga otra vez, sera obedecido. 2) Isaias 61:2: «Para proclamar el afio de la buena vo- luntad de Jehova y, (cuando haya terminado la dispensa- cién de la Iglesia), el dia de la venganza de nuestro Dios.» Véase el uso que hace el Sefior del pasaje en Lucas 4:19, 19, al cerrar el rollo sin leer lo que esta todavia en el futuro, y cuya accién nos provee a nosotros de una clave importante a su interpretaci6n. 3) Malaquias 3:1: «He aqui, yo envio mi mensajero, el cual preparara el camino delante de mi, y (entonces con la dispensacién de la Iglesia terminada) vendra sibitamente a su templo el Sefior a quien vosotros buscais.» Esta ulti- ma prediccién no se ha cumplido todavia. Un hecho tan importante como ste deberia guiarnos a un estudio nuevo y original de todos los tratos y propésitos de Dios en las dis- pensaciones, para que nuestros pensamientos no se hallen en discrepancia con los suyos. La Iglesia es distinguida en 1.2 Corintios 10:32 de los gentiles y los judios, y se declara en Galatas 3:28, que se compondra de ambos. Estos puntos nos ayudarén cuando lleguemos a un studio mas de cerca de este periodo. PERIODO VI HISTORIA DE LA CONSUMACION El libro de Apocalipsis El relato de este periodo se da en el libro de la Revela- cién de Jesucristo «la cual Dios le dio a Juan». Y, aunque 31 es solo un libro, cubre un perfodo de por lo menos 3.000 afios de historia —tanto tiempo como de Addn a David—, incluyendo el periodo de la Iglesia, el tiempo final y el Mi- lenio; y debe ser estudiado en relaci6n con toda la profecia precedente. Teniendo una visién general de la sustancia de las Sa- gradas Escrituras, debemos conocer a fondo los hechos bosquejados, antes de proceder mas adelante; de modo aue nuestras mentes estén preparadas para el analisis mas de- tallado. Recordemos que hay siete grandes periodos en la histo- ria biblica: Tres en el Antiguo Testamento; tres en el Nue- vo y_que los periodos I al III corresponden a los periodos V al VII. Que el perfodo IV abarca 400 afios desde Malaquias a Mateo. Trataremos estos siete periodos en siete libros se- parados a fin de que se vean completos en si mismos para el objeto de estudio personal o de clase. 32 PARTE II HISTORIA PRIMITIVA BOSQUEJO INTRODUCTORIO GENERAL HISTORIA PRIMITIVA TIEMPO 4001-1921 a. J.C. —2.063 ajios LECTURAS: Génesis 1-9:9. 1.* Crénicas 1:1-23 BOSQUEJO DEL ESTUDIO 1. DESDE LA CREACION A LA CAIDA. (Génesis 1-3.) 1) La creacién, y la semana de trabajo de Dios. (Génesis 1-23.) 2) El huerto y la prueba del hombre. (Génesis 2:4-25.) 3) La serpiente y la caida de Adan y Eva. (Génesis 3.) 2. DESDE LA CAIDA AL DILUVIO. (Génesis 4:8-14.) 1) Cain y Abel, y su ofrenda. (Génesis 4:1-16.) 2) Las genealogias de Cain y de Set. (Génesis 4:17-32.) 3) La gran apostasfa, y el juicio divino. (Génesis 6:8-14.) 3. DESDE EL DILUVIO A BABEL. (Génesis 8:15; 9:9.) 1) El Nuevo mundo y el nuevo pacto. (Génesis 8:15-19.) 2) La posteridad de los tres hijos de Noe. (Génesis 10.) 3) La confederacién y la confusién de Babel. (Génesis 9:1-9.) 35,

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