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“Aplicación práctica Mindfulness

en entornos personal
y profesional”

Unidad 8: Fomentando
conciencia social y
emocional en niños y
adolescentes

Ángela de las Heras


Pedro Laguna
INTRODUCCIÓN

Hola queridos alumnos. Hemos llegado a la última unidad del curso y en


esta ocasión vamos a dedicar este espacio a descubrir y profundizar en la
importancia que tiene de la educación emocional y social en las escuelas.

En las últimas décadas, los investigadores han puesto de manifiesto la


importancia que tiene la educación social y emocional en las primeras
etapas de la vida para el desarrollo adecuado de las personas. La escuela y
la familia, como principales entornos de aprendizaje del niño, deben
garantizar el correcto desarrollo físico, mental, social y emocional de
nuestros niños y jóvenes.

En la unidad anterior, vimos como se podían utilizar las técnicas Mindfulness


en niños pequeños para el aumento de la atención, incremento de la
conciencia corporal y el fomento de la calma en las aulas. También
conocimos cómo, en los últimos años, la investigación ha encontrado
evidencias que sugieren que las técnicas Mindfulness son de utilidad para el
tratamiento de trastornos emocionales, de ansiedad y de conductas propias
del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad en niños de edades
tempranas.

En esta última unidad, nos centraremos en la aplicación de estas técnicas


en niños a partir de 7 años y adolescentes, para fomentar el aprendizaje
social y emocional.

Descubriremos los problemas que están sufriendo hoy en día nuestros


jóvenes, las ventajas de la aplicación de programas de aprendizaje social y
emocional (tipo Mindfulness) en los entornos educativos y sus principales
beneficios a corto, medio y largo plazo.

Por último, conoceremos cómo se aplican las técnicas Mindfulness en niños


y adolescentes y daremos algunos ejemplos de prácticas para estas edades.
PROBLEMAS SOCIALES Y EMOCIONALES
EN NIÑOS Y ADOLESCENTE

Como vimos en la unidad anterior, se ha venido observando en la población


infantil unos aumentos significativos de problemas mentales y de ciertas
patologías, una de ellas la dificultad de manejar las emociones y conducta.

Según distintos estudios, un 13,4% de los niños a nivel mundial presentan


un trastorno mental (Polanczyk et al., 2015), en España, los trastornos
mentales ya afectan a un millón de jóvenes, uno de cada ocho menores de
18 años presenta algún problema de salud mental (El libro Blanco de la
Psiquiatría del Niño y del Adolescente, 2014).

Algunos de estos problemas están relacionados con la dificultad que tienen


los niños y adolescentes para gestionar sus propios pensamientos,
emociones y comportamientos, y para tener hábitos y conductas sociales
saludables ante las dificultades. Esto puede suponer un gran problema a
corto, medio y largo plazo. Un niño que no aprende a gestionar sus
pensamientos y emociones, tendrá dificultades para procesar la información
y esto interferirá en su aprendizaje. Los jóvenes con dificultades
emocionales, manejaran inadecuadamente sus relaciones y sufrirán las
consecuencias futuras en sus trabajos. Por el contrario, los niños que
adquieren un buen aprendizaje emocional en las escuelas y en los entornos
familiares, manejarán de una mejor manera las situaciones difíciles, tendrán
menos problemas de salud mental y se relacionaran de una manera más
saludable y menos conflictiva.

La influencia de las redes sociales en los jóvenes

Las nuevas tecnologías y las redes sociales han permeado nuestra sociedad,
a día de hoy, son parte de la vida cotidiana de todos nosotros. Desde
principio de este siglo se ha venido revolucionando nuestra forma de
relacionarnos y compartir información, y es, en estos momentos, cuando
estamos comenzando a conocer el impacto que tiene en nuestras vidas.
Existe un debate creciente entre los profesionales de la salud que está
poniendo en relieve la relación entre las redes sociales y la salud mental de
nuestros jóvenes.

Cuando no existían las redes sociales, los


niños y adolescentes construían
relaciones y adquirían aprendizaje social
y emocional a través de familiares,
amistades del colegio e instituto, vecinos
y compañeros de actividades. Esos
entornos (limitados) constituían los
campos para la construcción de nuestra identidad personal, el sentimiento
de pertenencia y las habilidades sociales y emocionales. Hoy en día,
construimos y mantenemos nuestras relaciones apoyados en las redes
sociales, un mundo de infinitas posibilidades en donde poder relacionarnos
con personas más allá de nuestro alcance físico. Las redes sociales pueden
fortalecer nuestro sentimiento de pertenencia a los grupos, así como
facilitar apoyo emocional en algunas ocasiones, en cierto sentido puede
ejercer un papel catalizador positivo para una buena salud mental.

Pero también se están evidenciando riesgos, sobre todo cuando en la etapa


de desarrollo del niño y adolescente, las redes se utilizan de manera
abusiva. Según los últimos informes, el 20% de los jóvenes reconoce el
abuso de las redes sociales y esto, para los investigadores, está relacionado
intrínsecamente con el aumento de los problemas de salud mental. Muchos
de nuestros jóvenes han convertido las redes como un medio para su
desarrollo emocional y social en donde “ser populares y sumar amigos” se
convierte en un objetivo prioritario. Con la sobreexposición a las redes
sociales aumentan las posibilidades de recibir información negativa y tener
que afrontar situaciones sociales cada vez
más complejas y desconocidas. Nuestros
jóvenes, sobre todo preadolescentes y
adolescentes, no tienen todavía los recursos
adecuados para manejar estas situaciones y
según algunos estudios, esto puede ser la
causa de problemas como el aumento de la depresión, del estrés, de los
problemas del sueño, la bajada de autoestima, el rechazo de su imagen
corporal y la baja resistencia a la frustración.

El último informe realizado en Reino Unido titulado "Status Of Mind,


examining the positive and negative effects of social media on young
people’s health" (Estado de la Mente, examinando los efectos positivos y
negativos de los medios sociales sobre la salud de los adolescentes),
publicado por la Royal Society for Public Health y el Young Health Movement
pone de manifiesto las potenciales consecuencias del uso de las redes
sociales en la salud mental de los jóvenes. En este informe se estima que,
entre otras consecuencias, la adicción a las redes sociales supone un
problemas que afecta a más de un 5% de los jóvenes, considerándose un
problema más grave que el tabaco o el alcohol, o que el abuso de las redes
sociales, está relacionado con el incremento de un 70% de las tasas de
ansiedad y depresión en los últimos años.

Es en este contexto, en donde implementar programas de educación en las


escuelas cobra un papel fundamental para proveer a los alumnos de los
entornos apropiados para un buen desarrollo de la salud emocional y social
del niño.

LA EDUCACIÓN EMOCIONAL Y SOCIAL. BENEFICIOS

El aprendizaje emocional

Cuando hablamos de aprendizaje emocional nos estamos refiriendo al


desarrollo de la inteligencia emocional. Esta se define como la habilidad
para discriminar y manejar sus propios pensamientos y comportamientos, y
se estructura en cuatro competencias básicas que están interrelacionadas.
La primera de ellas es la percepción emocional, la capacidad de
reconocer las emociones en uno mismo y en los demás. La segunda, es la
asimilación emocional del pensamiento, la capacidad para tener en
cuenta, integrar las emociones cuando razonamos o afrontamos problemas
o situaciones difíciles. La tercera, la comprensión emocional, habilidad
para reconocer, comprender y analizar las emociones. Y la cuarta, la
regulación emocional, la capacidad para gestionar las emociones propias
y las de los demás de una forma apropiada y adaptativa.

Vimos un ejemplo de regulación emocional a través de Mindfulness


denominada “Método de regulación en tres fases” en la unidad 4 de este
curso. Esta práctica, integra varias de estas competencias anteriores.

Según González y Villanueva (2014),


desarrollar las competencias
emocionales permite comprender
mejor las propias emociones y las de
los demás, así como regular y
expresarlas de una forma más
adaptativa, aumentando el autoconocimiento. Favorece el aprendizaje y
posibilita el aprendizaje de habilidades de relación (empatía, comunicación
asertiva, cooperación, trabajo en equipo, etc.) facilitando la resolución de
problemas

Definitivamente, un buen aprendizaje de competencias, habilidades y


estrategias de gestión emocional en las escuelas y en los entornos
familiares, conducirá a una disminución de los índices de problemas de
salud y problemas de relaciones interpersonales, mejorará el bienestar
personal y social del niño y fomentará un desarrollo integral de la persona
disminuyendo la aparición de trastornos mentales.

Mindfulness en la educación emocional y social

“Una de las estrategias utilizadas en los últimos años para adquirir y


potenciar estas competencias emocionales en los ámbitos escolares es el
Mindfulness” (Ramos, Enriquez y Redondo, 2012).

Entre los beneficios más importantes que reportan los programas


relacionados con la salud mental, y el aprendizaje social y emocional, se
han encontrado los siguientes:

• Desarrollo habilidades sociales


• Reducción de los comportamientos antisociales
• Disminución abuso de drogas
• Incremento autoimagen positiva
• Aumento éxito académico
• Mejor salud mental
• Aumento comportamientos prosociales (amabilidad y conducta
compasiva)

PRÁCTICAS PARA NIÑOS (a partir de 7 años) Y ADOLESCENTES

Cuando trabajamos con niños a partir de 7 años, las técnicas Mindfulness se


emplean, tanto para desarrollar la atención, fomentar la calma y mejorar el
rendimiento académico, como para fomentar la conciencia social y
emocional, aprender a ser flexibles, tener un buen autocontrol para afrontar
las situaciones difíciles, y fomentar conductas sociales saludables basadas
en la empatía, la escucha activa, la compasión y el trato amable hacia mí
mismo y hacia los demás. A continuación veremos algunas prácticas.

El bote de la mente (Educación primaria)

Objetivos: educación emocional, autoconocimiento, control emocional.

Tiempo: 15-20 min.

Materiales: un frasco transparente con tapa, purpurina, agua con vaselina o


glicerina.

Desarrollo: Llena el frasco con el agua caliente y glicerina hasta cubrir ¾


partes aproximadamente, añade la purpurina y ciérralo.

Los niños se sientan alrededor y se explica que:

• El frasco simboliza tu mente


• La purpurina son tus emociones

Se agita el frasco (la purpurina se mueve por todo el frasco) y se explica lo


que sucede dentro de la mente en momentos de agitación. Como en
ocasiones, las emociones y pensamientos invaden nuestra mente, esto hace
que perdamos el control, la respiración se hace más rápida, y nuestro
comportamiento, palabras y decisiones se descontrolan.

Como al detenernos (dejar el bote quieto), por


ejemplo, respirando conscientemente, contando hasta
20, etc. damos la posibilidad para que nuestra mente
se aquiete, nuestras emociones y pensamientos se
calmen (se van al fondo del frasco) y de esta manera
podemos ver con más claridad las situaciones para
afrontarlas de una manera que no genere más
problemas añadidos.

Para terminar la práctica se practica la “respiración consciente” para


aquietar la mente y se recogen las experiencias de los niños.

Comer de manera consciente (Educación primaria)


Objetivos: control atencional, atención a sensaciones a través de los
sentidos.

Tiempo: 15-20 min.

Materiales: trozos de fruta.

Desarrollo: se pedirá a los niños que se sienten en un círculo con los ojos
cerrados. Se les explica que han traído una nueva fruta de otro país y que
van a probarla de forma muy consciente.

Se reparte un trozo de fruta a cada niño. Primero debemos descubrirla con


el tacto, sintiendo la experiencia, tocando la piel, observando si es rugosa o
lisa, si es dura o blanda, etc. Después pasamos a oler el trozo de fruta,
quizás descubramos olores dulces o salados, fuertes o suaves, etc. Ahora,
abre los ojos y obsérvala como si fuera la
primera vez que la ves, observa su forma, su
color, etc. Ahora, despacio acerca el trozo de
fruta a tus labios, introdúcela en tu boca sin
morder y observa las sensaciones, mueve la
lengua alrededor y descubre el gusto que
tiene, dale un pequeño mordisco, sigue sintiendo su sabor, poco a poco
descubre su sabor, dulce, salado, acido, etc. Ahora, mastícala despacio,
suavemente, observa cómo se va triturando y rompiendo en trozos cada
vez más pequeños. Al tragar, siente como baja por tu garganta, hasta que
la sensación desaparece.

Al finalizar, los niños compartirán la experiencia. Se preguntará si han


notado diferencia al comer de forma consciente en vez de cómo lo hacen
normalmente. Se preguntará por los pensamientos, emociones y distintas
sensaciones que han aparecido a lo largo de la actividad.

Conciencia de las dificultades (Educación primaria y


secundaria)

Objetivos: Identificar y expresar las dificultades propias y nuestras


reacciones. Disminuir las respuestas automáticas y la impulsividad.

Tiempo: 20-30 min.

Materiales: puzle de las dificultades. Folios, lápices.

Desarrollo: se pedirá a los niños que se sienten en un círculo y que


observen y dibujen en el folio el puzle siguiente:

Se introducirá la dinámica de la siguiente manera:

“Todos nosotros nos encontramos alguna vez con situaciones difíciles. Todos
tenemos dificultades en algunas ocasiones. ¿Reconocéis algunas de estas
dificultades?”
Una vez cada niño haya identificado una dificultad propia, se le pedirá que
escriba en el folio para completar el puzle comentándole:

“¿Qué pensamientos has tenido ante la situación? ¿Qué sensaciones


corporales? ¿Qué emociones? ¿Cómo ha sido tu comportamiento con el
entorno, con los demás…?”

Una vez que el niño haya completado el puzle se le pedirá que escriba lo
que hacen o podrían hacer para resolver la dificultad.

“¿Qué hacéis para resolver las dificultades y los problemas?” “¿De qué otras
maneras podríamos solucionar las situaciones?”.

Se reflexiona entre todos sobre lo que puede aportar Mindfulness en las


situaciones difíciles. Nos aporta claridad para ver la dificultad, a descubrir
las emociones, pensamientos y nos ayuda a reaccionar de una manera
menos impulsiva. Antes de responder ante la situación podemos respirar de
manera consciente, calmarnos y elegir nuestra forma de actuar.

Conciencia amable y compasiva (Educación secundaria)

Objetivos: fomentar la relación amable y compasiva con los demás. Tomar


conciencia del sentimiento de humanidad compartida y la gratitud como
herramientas del bienestar social y emocional.

Tiempo: 20-30 min.

Desarrollo: se pedirá a los adolescentes que se sienten en un círculo con los


ojos cerrados y se hará una práctica inicial de 5 min. de mindfulness en la
respiración.

Seguidamente se guiará una práctica de compasión y conciencia amable.


Éste es un ejemplo.

“Trae a la mente a una persona a la que tengas especial cariño. Invítala a


que se siente a tu lado y date cuenta de la relación que existe entre
vosotros/as. Quizás sientas amor/cariño, o quizás simplemente haya una
muy buena amistad, una relación bonita, de confianza, puedes darte cuenta
de que cuando estáis juntas/os estáis muy a gusto, os sentís comprendidos,
muy acompañados”

“Quizás si observas un poco más profundo, te des cuenta que esa persona
es muy parecida a ti, tiene ilusiones en la vida... como tú , vive situaciones
agradables... igual que tú, pero también algunas situaciones desagradables
en las que también sufre como tú. ¡¡No sois tan diferentes!!”.

“En estos momentos, vamos a hacer algo muy bonito con esa persona... le
vamos a dar las GRACIAS, gracias por estar ahí, quizás porque te ha
ayudado en momentos en los que lo necesitabas, quizás porque sea una
persona querida que te acompaña y comparte tu vida…”.

Y vamos a hacer algo más por ella... vamos visualizar que estamos de
frente a ella y le vamos a decir...

“Que seas feliz”


“Que estés bien”
“Que estés libre de toda preocupación”
“Que tengas todo lo mejor”

“Deja a la persona al lado y quédate un momento con los sentimientos y las


sensaciones que estás viviendo en este momento”.

“Ahora, trae a este lugar a una persona con la que tengas alguna diferencia
o alguna dificultad. Invítala a que se siente también y quizás lo primero
que te venga es el malestar que causa la relación que existe entre
vosotros/as. Puede que sean tensiones, diferencias de opinión... pero en el
fondo... Si observas detrás de todo eso veras que también hay un ser
humano... Y Quizás si te acercas un poco mas y observas quizás puedas
descubrir que esa persona es muy parecida a ti, tiene ilusiones en la vida...
como tú , vive situaciones agradables... igual que tú, pero también algunas
situaciones desagradables en las que también sufre como tú. ¡¡No sois tan
diferentes!!”

“Ahora, si te apetece, vamos a hacer algo muy bonito con esa persona... le
vamos a dar las GRACIAS, gracias por estar aquí y ahora, ayudándote a
descubrir y conocerte un poco más”.
“Y ahora vamos a hacer algo más por ella... Y nos vamos a ayudar de la
persona querida que hemos dejado al lado, visualizamos que nos agarramos
de las manos y le vamos a decir...”

“Te deseamos todo lo mejor”


“Esperamos que seas feliz”
“Que estés bien”
“Que estés libre de toda preocupación”

Quédate ahí unos momentos y vive esta experiencia de compasión y


humanidad compartida.

Respiramos profundamente para cerrar la actividad.

BIBLIOGRAFÍA y DOCUMENTACIÓN

- Mindfulness para principiantes. Jon Kabat-Zinn . Editorial Kairós


- Mindfulness, una herramienta inspirada en la meditación oriental
para aliviar el estrés, la ansiedad y la depresión. Sarah Silverton.
Editorial Blume
- La compasión, el corazón del mindfulness. Vicente Simón. Editorial
Sello
- Aprender a practicar mindfulness. Vicente Simón. Editorial Sello
- Vivir con atención plena. De la aceptación a la presencia. Vicente
Simón. Editorial Desclée de Brouwer
- Iniciación al mindfulness. Vicente Simón. Editorial Sello
- Mindfulness en la práctica clínica. Mª Teresa Miró y Vicente Simón.
Editorial Desclée de Brouwer
- Mindfulness y ciencia. De la tradición a la modernidad. Javier
García Campayo. Alianza Editorial
- Mindfulness curiosidad y aceptación. Jaime García Campayo y
Marcelo Demarzo. Editorial Siglantana
- Mindfulness y compasión. La nueva revolución. Jaime García
Campayo y Marcelo Demarzo. Editorial Siglantana

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