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Fuentes de las Obligaciones

Son fuentes de las obligaciones aquellos hechos jurídicos que dan


origen a la obligación, es decir, los hechos jurídicos mediante los
cuales dos personas se encuentran en la situación de deudor y
acreedor uno del otro. Solo pueden quedar obligados cuando
ocurren los supuestos de hechos previstos en la ley, y son estos
mismos ordenamientos jurídicos los que indican cuáles serán las
fuentes de las obligaciones.

Las fuentes de las obligaciones son:


El contrato. Produce obligaciones porque tanto el acreedor como el
deudor han manifestado su voluntad de contratar.

El pago de lo indebido. Este se presenta cuando una persona


(deudor) paga a quien no es su acreedor. La ley obliga a aquel que
ha recibido el pago tiene la obligación de repetirlo.

La gestión de negocios. Consiste en la obligación que adquiere


aquel que sin estar obligado, asume la gestión de negocios ajenos,
de continuar la gestión comenzada y de llevarla a término hasta
que el dueño se halle en estado de proveer a sí mismo a ellas,
debiendo también someterse a las consecuencias del negocio y a
las obligaciones derivadas de un mandato.

Enriquecimiento sin causa. se dan ciertos supuestos en donde todo


aquel que se enriquece sin justa causa a expensas de otro, está
obligado a indemnizar dentro de los límites de su propio
enriquecimiento, de todo lo que aquel se hubiese empobrecido.

Hecho ilícito. En el cual se agrupan las obligaciones provenientes


del daño causado con intención por el agente a la persona o al
patrimonio de la víctima, o cuando se causa el daño sin intención
por imprudencia, negligencia, impericia, se responde por el daño
causado por un hecho propio, o bien por los hechos de una persona
sometida a nuestra guarda, o de una cosa o animal sobre los cuales
debíamos haber ejercido una vigilancia correcta.

Elementos de las obligaciones

Sujetos.
Sujeto activo: Es el acreedor, es decir el que tiene la facultad de
exigir el cumplimiento. El acreedor tiene un derecho personal que
se encuentra en el activo de su patrimonio.
Sujeto pasivo: Es el deudor, o sea aquella persona que tiene la
carga de cumplir la prestación convenida. Para el deudor existe un
deber jurídico (deuda) que se encuentra en el pasivo de su
patrimonio.

La relación jurídica
Es el vínculo que se establece entre los sujetos que intervienen en
la obligación, es decir, el acreedor está facultado para acudir al juez
con el objeto de hacer cumplir por parte del deudor la prestación.
La relación jurídica se reduce a la facultad que tiene el acreedor de
poder exigir al deudor que cumpla, y la situación del deudor de
debe cumplir con la prestación de su acreedor.

La prestación debida o deuda


El objeto es lo que se debe. Responde a la pregunta ¿qué se debe?
Este debe ser jurídicamente posible, por ejemplo, el pago de una
suma de dinero.

Obligaciones reales y personales.

Obligación real
Es la que afecta a la cosa y obra contra cualquier poseedor de esta.
Se dirige en primera línea hacia la cosa que es el objeto del derecho
pretendido. El demandado es un obstáculo que se interpone entre
el actor y la cosa. En la acción real se desconoce contra quien se
utilizará dicho accionar real, el deudor puede ser cualquiera. Todo
es en respecto o dirección de alguna cosa.

Características de las obligaciones reales.

 No ligan al deudor en cuanto a su persona, sino que es


determinada por ser titular del derecho real.
 Puede transmitirse por el solo hecho de transmitir la cosa o
liberarse de ella por el abandono del bien.
 El obligado responde de esas obligaciones con cosa o el bien y
no con todo su patrimonio.

Obligación personal

Es la que solamente liga a la persona que la contrae y a sus


herederos. No puede concebirse sino en función del deber jurídico
del deudor hacia el acreedor. El que tiene la acción personal sabe,
que, si se ve precisado a utilizarla, el demandado se una persona
determinada.

Características de las obligaciones personales.

 Compromete al deudor en lo personal, siendo siempre


obligaciones determinadas.
 Compromete el patrimonio del deudor, pues si no cumple
podría demandarse el cumplimiento en ejecución forzosa,
pues el principio que rige es que el deudor responde de sus
obligaciones de crédito con sus bienes.
 El derecho personal puede ser transmitido por contrato o
cesión.
 En cuanto a las obligaciones reales el derecho es distinto
porque el ser titular de un derecho real y transmitirlo “ipso-
jure” transmite las obligaciones reales, pues desde el derecho
romano estas se denominan “porpter-rem”.
 Diferencias entre obligación real y personal.
En las obligaciones reales se reclama lo que se pertenece y en las
personales lo que se le debe.
En las obligaciones reales el deudor puede ser cualquiera siempre y
cuando afecte al objeto y en las personales el deudor está
determinado.
En las obligaciones reales provoca satisfacción sin ir en contra de la
propia existencia de la cosa en relación al titular.

Deber jurídico

El deber jurídico es una obligación implantada por una norma


jurídica que tiene que ser respetada por los individuos. Por lo tanto,
este deber restringe la libertad de las personas e implica la
existencia de un derecho jurídico en contrapartida.
Existirá deber jurídico siempre que el incumplimiento de la norma
correspondiente implique algún tipo de sanción o castigo.
Un deber jurídico es una obligación que tiene que ser respetada por
todos los individuos, de lo contrario, su incumplimiento supondrá
una sanción o un castigo.

Elementos del deber jurídico


El deber jurídico está formado por tres elementos: sujeto, objeto y
vínculo jurídico. Por ejemplo, en un contrato de compraventa los
elementos serían los siguientes:
Sujetos: el sujeto activo corresponde con el acreedor y el sujeto
pasivo corresponde con el deudor (persona que tiene que cumplir
el deber jurídico correspondiente).
El objeto o prestación de la obligación consiste en pagar la
cantidad establecida en el contrato.
Vínculo jurídico o causa es el contrato, que es el motivo que ha
generado la obligación.

Clasificación de los deberes jurídicos


Aunque existen varios modos de clasificar los deberes jurídicos, la
clasificación más habitual es la que los divide en función de su
objeto o prestación.
En este sentido, podemos distinguir entre:
Deberes jurídicos positivos: consisten en una obligación de
hacer (ejecutar un comportamiento o prestación concreta, por
ejemplo, tener que entregar una cantidad de dinero) o de
dar (ceder o transferir una propiedad).
Deberes jurídicos negativos: aquellas obligaciones consistentes en
un no hacer (no poder realizar determinados actos o conductas).
Hechos y Actos Jurídicos

Los hechos jurídicos son hechos relevantes al derecho y


producen efectos jurídicos, y como consecuencia del hecho se
crean, modifican o extinguen derechos y obligaciones. Como
ejemplo podemos encontrar un contrato de compraventa en el cual
se adquiere el derecho de exigir la cosa comprada por parte del
comprador y a exigir el dinero por parte del vendedor y el deudor,
por medio del pago efectivo extingue la obligación con el acreedor.
No obstante, no todas las obligaciones nacen de un contrato,
también pueden nacer de la ley y de los delitos.

En un sentido amplio puede considerarse un hecho jurídico todo


acontecimiento, ya se trate de un fenómeno de la naturaleza o de
un hecho del hombre, ya que el ordenamiento jurídico lo toma en
consideración para atribuirle consecuencias de Derecho. Los hechos
jurídicos en amplio sentido se clasifican en hechos jurídicos en
sentido estricto y en actos jurídicos.

Los Hechos Jurídicos Humanos Involuntarios, son aquellos


acontecimientos producidos sin la voluntad del hombre, que
interesan al derecho por tener consecuencias jurídicas, por
ejemplo: un accidente de tránsito, pero con la peculiaridad de que
el hombre no tiene la intención de producirlo, no obstante ello,
estos hechos involuntarios se imputan a título de culpa.
Estos hechos involuntarios en el Código Penal se prescriben como
Delitos Culposos (Homicidio Culposo y Lesiones Culposas) Similar es
la situación en los casos de responsabilidad civil, en donde
determinados hechos involuntarios se generan por el
incumplimiento de un deber jurídico general.

Los Hechos Jurídicos Humanos Voluntarios, son aquellos


acontecimientos que se producen con la voluntad del hombre, a los
cuales el derecho le ha otorgado consecuencias jurídicas.
Pero, además, resulta necesario que dicha voluntad cumpla con la
satisfacción de éstos tres elementos: discernimiento [aptitud para
apreciar], intención [querer lo que se sabe], y, libertad [Ausencia de
presión externa].
Por ejemplo: la compra de un automóvil, el reconocimiento de
paternidad de un hijo, etc.
Para continuar con nuestro estudio, nos quedaremos sólo con los
hechos jurídicos humanos voluntarios, pues aquellos hechos
jurígenos sin la voluntad del hombre no nos interesan para alcanzar
nuestro objetivo -Acto Jurídico-.
La voluntad del hombre para generar hechos jurídicos se enmarca
dentro de la licitud o ilicitud, de allí que ahora corresponda
desarrollar el estudio de los hechos jurídicos humanos voluntarios
lícitos e ilícitos.

Los actos jurídicos son hechos voluntarios que tienen la


intención de producir efectos jurídicos. puede considerarse al acto
jurídico como una manifestación de voluntad que lleva la intención
de crear, modificar o extinguir derechos y que produce los efectos
que desea el actor o las partes involucradas porque el derecho
reconoce esa manifestación de voluntad como valida para producir
efectos jurídicos.

El acto jurídico tiene que contener necesariamente determinados


elementos esenciales o de existencia, ya que sin estos el acto no
puede llegar a consumarse.
Los elementos esenciales son:

Voluntad. Ya sea que se trate de un solo individuo o varios, es


necesario que exista de voluntad de actuar.
Objeto. Es necesario que esta manifestación de voluntad tengan
como finalidad producir una o varias consecuencias sancionadas
por el derecho.

Como vemos los actos jurídicos puede intervenir mas de un sujeto,


Cuando en el acto jurídico existe un solo individuo, se le denomina
autor, las partes dentro del acto jurídico pueden estar formadas
por más de una persona. Para que el acto jurídico se perfeccione no
solo hace falta la voluntad de las partes, si no que es necesario que
la autoridad lo reconozca.

Los hechos y actos jurídicos son ambas acciones realizadas por los
individuos, pero se diferencian en que un hecho jurídico, se
conforma por los acontecimientos que no se pueden evitar y que
existen por el simple hecho de nuestra existencia como es nacer o
morir, y son hechos involuntarios, es decir, no tenemos control
sobre ellos. En cambio, los actos jurídicos son aquellas acciones
hechas por los individuos pero que son hechos por voluntad propia,
es decir, el individuo decide si realizara el acto o no, como por
ejemplo realizar una compraventa o divorciarse

INEXISTENCIA Y NULIDAD DE LOS ACTOS JURIDICOS

La inexistencia, en términos legales, es una figura jurídica cuya


función es determinar la plena ineficacia del acto jurídico que no
tiene alguno de los elementos esenciales que impone una norma.
Un ejemplo de inexistencia de un acto jurídico podria ser un
contrato de compraventa en el que las partes contratantes no
hayan dado su consentimiento, sin cosa vendida, o sin precio.

Los actos jurídicos son inexistentes cuando no falta el


consentimiento, el objeto o la solemnidad, pues una vez que una
autoridad declara la falta de uno de estos elementos, desaparece la
obligación o el derecho porque nunca surgió o nació.

La nulidad en el ambiente legal es un factor que afecta los actos


jurídicos y que provoca la invalidez, teniendo como consecuencia
directa que una norma, acto jurídico, acto administrativo o acto
judicial deje de tener sus efectos jurídicos. Para que un acto jurídico
sea declarado nulo es necesario la declaración expresa o tácita de
una autoridad competente y que el vicio que lo invalida sea
inherente a la celebración el mismo.

Su función es proteger intereses que puedan resultar afectados al


no cumplirse los preceptos legales al celebrarse un acto jurídico o
dictarse una norma.

La nulidad relativa, no pone fin a el acto jurídico, ni con los efectos


efectos que nacen con el, la nulidad relativa permite subsanar la
causa que la genera para perfeccionar el acto jurídico.

Un acto es afectado de nulidad absoluta cuando es contrario o viola


disposiciones pertinentes de la ley y tiene como principal
característica que no es posible subsanar o corregir la causa que la
genera.

Son elementos esenciales del acto jurídico:


I.- La voluntad del autor o de los autores del acto;
II.- EL objeto del mismo;
III.- Tratándose de actos solemnes, la forma requerida por la ley.
Convenios y contratos

Un contrato es un arreglo bilateral que establece una relación


jurídica entre las partes involucradas. Un convenio es un acuerdo
voluntario que no se encuentra sujeto a la ley.
Siempre puede existir un convenio sin haber contrato, pero para
que se lleve a cabo un contrato siempre debe haber un convenio.
A diferencia del convenio, el contrato busca crear obligaciones que
puedan modificarse, transferirse o extinguirse legalmente.

¿Qué es un contrato?
El contrato es un acuerdo con validez legal donde las partes
involucradas establecen los derechos y deben cumplir con ciertas
obligaciones.
Para que se pueda llevar a cabo un contrato no basta con que el
acuerdo sea verbal, debe presentarse por escrito con la firma de los
involucrados y enmarcarse dentro de la ley para su cumplimiento.
Por esta razón de legalidad, se dice que todos los contratos son
convenios, pero no todos los convenios son contratos.
Cuando una persona le hace una oferta a otra y ésta lo acepta,
debe expresarse por escrito y registrarse como un compromiso
legal para que pueda existir el contrato.
Otro aspecto fundamental para que se pueda llevar a cabo el
contrato es que las partes involucradas deben ser capaces en
términos legales de poder participar en él. Esto quiere decir que
deben tener la capacidad mental para entender los términos del
contrato y tener mayoría de edad.

Tipos de contratos
En líneas generales se podrían clasificar los contratos dentro de los
siguientes grupos:
Explícitos: describen detalladamente cada uno de los términos
utilizados.
Implícitos: se dejan a libre interpretación los términos porque son
conocidos por las partes involucradas.
Bilaterales: establecen las obligaciones y derechos del ofertante y
el ofertado.
Unilaterales: solo establecen las obligaciones de una las partes.
Ejemplo de contrato
Contrato de trabajo: el patrón hace una oferta al trabajador donde
solicita sus servicios a cambio de una remuneración monetaria. En
este caso, se procede a elaborar el contrato escrito donde se
estipulan las obligaciones y derechos de las partes, como las horas
de trabajo, el salario, las vacaciones, los días de descanso, entre
otros aspectos.

Requisitos de validez de los contratos


- Para que el contrato sea válido se requiere:
I.- Capacidad de los contratantes;
II.- Que el consentimiento esté libre de vicios;
III.- Que su fin o su motivo sean lícitos;
IV.- Que sea licito el objeto de las obligaciones creadas por el
contrato;
V.- Que el consentimiento se haya manifestado en la forma que la
ley establece.

¿Qué es un convenio?
Un convenio es un pacto o acuerdo de voluntades entre dos o más
partes respecto a determinado tema. Se puede llegar a este
acuerdo de manera verbal o escrita sin ser requerido un marco
legal.
Cuando una persona le hace una propuesta a otra y ésta la acepta
voluntariamente, se puede decir que se ha llegado a un convenio
entre las partes.
Los convenios no están determinados por ninguna ley, lo que
quiere decir que las condiciones y contexto de este acuerdo es
establecido enteramente por las partes que participan en él.
Igualmente, el cumplimiento del convenio dependerá directamente
de la disposición de las personas involucradas.
Los convenios se pueden dar en todo tipo de ámbitos porque no
requiere del cumplimiento de condiciones específicas para llevarse
a cabo. Por esto, cualquier acuerdo que no esté sujeto a la ley
puede ser considerado un convenio.

Tipos de convenio
Dependiendo de la cantidad de personas que participan en el
convenio, este puede ser:
Bilateral: aquellos en los que participan solo dos partes
interesadas.
Plurilateral: donde participan tres o más partes.

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