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Por un lado entran operaciones, por otro datos y obtenemos resultados. Las operaciones son muy
sencillas y básicas ( sumas, restas, multiplicaciones y divisiones) . Los datos estándares que utiliza, a día
de hoy, tampoco tienen un volumen muy grande: 64 bits
Su peculiaridad está en que funciona a miles de millones de veces por segundo (Nanosegundos) y, por
tanto, ningún ser humano puede pasarle datos a dicha velocidad. Por esta razón le vamos
incorporando una serie de elementos y modificaciones:
• Lo primero es establecer que los resultados se puedan utilizar como nuevos datos. A
partir de ahí se establece un fujo de funcionamiento en que resolvemos el problema
de la entrada de datos.
• Una vez definido el flujo de datos, seguimos teniendo una limitación y es que
necesitamos un sitio para guardar los datos y los operadores que necesita para
funcionar. A este sitio le llamamos Memoria (RAM) y a partir de ese momento se
tomarán de ella datos y operadores. Con la aparición de la memoria también apareció
el concepto de Registros que son unas memorias de poca capacidad pero de acceso
muy rápido, casi instantáneo.
• A continuación, necesito definir el orden en que se van a ejecutar las instrucciones
porque lo que no puedo hacer es volcar toda la RAM de golpe. Es decir, necesitamos
definir que instrucción se ejecutará en un momento dado y cual será la siguiente. Para
esto añadimos el Contador de programas (que me dice la siguiendo instrucción a
ejecutar) y el Registro de instrucciones (un sitio donde meterla) .
• No necesito llevar un control de los datos porque los datos los especifico en las
instrucciones. Por ejemplo: si una instrucción es “sumar dos datos”, en la propia
instrucción ya va establecido donde puedo encontrar dichos datos. Además los
resultados también nos indicarán cuando tengo que cambiar el contador del
programa.
El 10 de septiembre de 2009, el primer ministro del Reino Unido, Gordon Brown, emitió un comunicado
declarando sus disculpas en nombre de su gobierno por el trato que recibió Alan Turing durante sus
últimos años de vida. Este comunicado fue consecuencia de una movilización pública solicitando al
Gobierno que ofreciera disculpas oficialmente por la persecución contra Alan Turing. Sin embargo, en
2012 el gobierno británico de David Cameron denegó el indulto al científico, aduciendo que la
homosexualidad era considerada entonces un delito. Finalmente, el 24 de diciembre de 2013 recibió el
indulto de todo tipo de culpa, por orden de la reina Isabel II.