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LA TRADICION, COMO MODO DE ADQUIRIR EL DOMINIO

1. DEFINICION
Este modo está definido en el Código Civil como la entrega que el
dueño hace de las cosas a otro con la facultad e intención de
transferir el dominio y la capacidad e intención de adquirirlo. Lo
mismo que se dice del dominio se puede decir de los demás derechos
reales.

ELEMENTOS  DE LA TRADICION


LA CAPACIDAD: Tanto el tradente como el adquirente deben ser
personas capaces de obrar y sus declaraciones de voluntad deben ser
libres y recaer sobre un objeto real o lícito, deben ser mayores de 18
años. Toda persona es capaz excepto los que la ley declara incapaces
(dementes, impúberes y sordomudos) 
LA VOLUNTAD: La tradición debe ser hecha voluntariamente por el
tradente o su representante y el adquirente también debe recibir
voluntariamente, el concurso de ambas voluntades se llama
consentimiento.
EL OBJETO: Debe existir una identidad del objeto.

2. CARACTERISTICAS DE LA TRADICION


a) Es un modo derivado, lo que se desprende de su misma
definición.
b) Puede darse a título gratuito, como cuando es precedida por una
donación, o a título oneroso, cuando la antecede una venta, una
permuta, etc.
c) Por la tradición se pueden adquirir, además del dominio, los
demás derechos reales, e inclusive, los derechos personales, con
excepción de los llamados personalísimos, que por ser intuitu
personae, no pueden ser traditados.
d) la tradición es una convención, no un contrato. Aquella tiene por
función crear, modificar o extinguir obligaciones; este solamente las
crear Con la tradición se extinguen obligaciones, pero no se crean. El
vendedor contrae la obligación de entregar, y cuando entrega se
extingue la obligación y se presenta la tradición

3. REQUISITOS DE LA TRADICION


La tradición se considera perfecta y plena cuando se reúnen los
siguientes requisitos:
a) Que concurran los dos sujetos de ella, que lo son el tradente y el
adquirente.
b) Que ambos sean capaces y consienten en la tradición.
c) Entrega de la cosa, en los bienes muebles.
d) Preexistencia de un título de los llamados traslaticios.
c) Registro, en los inmuebles.

CONCURRENCIA DE TRADENTE Y ADQUIRENTE


como convención que es, la tradición requiere la presencia de dos
sujetos, uno que tradita la cosa y otro que la recibe, llamados
tradente y adquirente, respectivamente, que pueden  actuar por sí
mismos o servirse de apoderados o mandatarios para entregar o
recibir. El tradente debe ser dueño de la cosa que entrega, o de lo
contrario no hay tradición. Habría entrega, pero esa entrega no
alcanzaría a ser tradición. En esto radica una diferencia fundamental
entre el título y el modo, entre la venta y la tradición. La venta de los
bienes muebles, se perfecciona con el solo acuerdo sobre el
precio y el bien. Es un contrato consensual que, al perfeccionarse
como fuente de obligaciones que es, genera para el vendedor la
obligación de entregar la cosa, hacer la tradición de ella, y para el
comprador hacer la entrega del precio. Por esta razón y porque,
además, el Código Civil la autoriza, la venta de cosa ajena es válida,
sin perjuicio de los derechos del verdadero dueño. De tal manera que
para vender no es necesario ser dueño. En la tradición la situación es
totalmente distinta. No puede traditar sino quien es dueño. Lo mismo
ocurre con la venta y tradición de bienes raíces. La venta del bien
raíz es solemne, ya que se exige escritura pública para poder
vender. La tradición se da con el registro de la escritura pública
en la oficina de registro de instrumentos públicos, y si la venta no
proviene del propietario, no se puede registrar la tradición, sería una
falsa tradición.

B) CAPACIDAD Y CONSENTIMIENTO DE TRADENTE Y


ADQUIRENTE
En cuanto a la capacidad del tradente debe ser plena debe tener
facultades de disposición, pues precisamente se trata de
disponer del bien. Es el ius abutendi. En cambio, al adquirente solo
se le exige facultad de administración. El tradente se desprende
del dominio; el adquirente, en cambio, se beneficia. Recibe, no
dispone.
No obstante, tanto el tradente como el adquirente deben prestar su
consentimiento sano, ajustado a todas las prescripciones del
código civil contemplada, para que el consentimiento sea válido,
sin vicios, excepto de error, fuerza y dolo.
En el título de la tradición el código se limitó a reglamentar lo referente
al error, por lo que la fuerza y el dolo deben mirarse, par efecto de la
tradición, de conformidad con las reglas generales que se contemplan
en el estudio de las obligaciones.

VALIDEZ  DE LA TRADICION

1. RATIFICACION POR EL TRAMITE:  Para que la tradición sea


válida, deberá ser hecha voluntariamente por el tradente o por su
representante.  Una tradición que al principio fue invalida por haberse
hecho sin voluntad del tradente o de su representante, se valida
retroactivamente por la ratificación del que tiene facultad de enajenar
la cosa como dueño o como representante  del dueño.

2. RATIFICACION POR EL ADQUIRENTE: . La tradición para que sea


valida requiere también del consentimiento del adquirente o de su
representante.  Pero  la tradición que en su principio fue invalida, por
haber faltado este consentimiento, se valida retroactivamente por la
ratificación.

3. VALIDEZ DE LA TRADICION POR INTERVENCION DE


MANDATARIOS LAGALES: Para que sea válida la tradición en que
intervienen mandatarios o representantes legales, se requiere
además que estos obren dentro de los límites de su mandato o de
su representación legal.

4. TITULO TRASLATICIO DE DOMINIO: Para que valga la


tradición se requiere un título traslaticio de dominio, como el de
venta, permuta, donación etc. Se requiere, además, que el titulo sea
válido respecto a la persona a quien se confiere. Así el título de
donación irrevocable no transfiere el dominio entre cónyuges.  El justo
título es constitutivo o traslaticio de dominio. Son constitutivos de
dominio la ocupación la accesión y la prescripción. Son traslaticios de
dominio los que por su naturaleza sirven para transferirlo, como la
venta, permuta, donación.

5. AUSENCIA DE ERROR EN LA ESPECIE: Que no se padezca


error en cuanto a la identidad de la especie que debe entregarse,
o de la persona a quien se hace la entrega, que armoniza con otro
artículo del CC sobre error en la especie. Si alguien vende una vaca,
por ejemplo, y por entregarla entrega otra, hay causal de nulidad.
El error en la persona, en materia de tradición, la hace nula. Si por
entregar la cosa a Juan, que fue el comprador, la entrego a Juan
Guillermo, v. gr., hay causal de nulidad en la tradición, ya que la
entrega en las obligaciones de dar, como la que surge para el
vendedor de bienes muebles, es un pago, cumplimiento de la
obligación.

INVALIDEZ DE LA TRADICION


1. ERROR DE TITULO:. El error en el título invalida la tradición. Si, por
ejemplo, pienso vender y el otro cree que le estoy donando  hay
error en la donación, hay error en el titulo  pues ambos creen que
se trata de títulos translaticios distintos: venta y donación. Lo mismo
ocurre cuando entrego en comodato y el otro cree que le estoy
vendiendo. Hay error en el título el titulo no es traslaticio
(comodato) y el otro cree que si lo es (venta).

DONACION ENTRE VIVOS: Es una acto por el cual una persona


transfiere, gratuita e irrevocablemente una parte de su bienes a otra
persona que la acepta.
VENTA: Transmisión de la propiedad de una cosa o derecho por su
propietario mediante un precio en dinero.

COMODATO: O préstamo de uso , en que una de las partes entrega a


la otra gratuitamente una especie mueble o raíz, para que haga uso de
ella y con cargo de restituir la misma especie después de terminar el
uso. Este contrato no se perfecciona, sino con la tradición.

2. ERROR DE MANDATARIOS LEGALES: Si la tradición se hace


por medio de mandatarios o representantes legales el error de
estos inválida la tradición.

C) ENTREGA DE LA COSA


En la tradición de los bienes muebles es indispensable la entrega
de la cosa y hasta cuando se produzca la entrega no habrá
tradición. No se pueden confundir los términos entrega y tradición,
pues son distintos. El Código, en varias oportunidades, los confunde.
Así, Vemos que cuando define el comodato, afirma que este contrato
no se perfecciona, sino con la tradición. Lo correcto es haber dicho
que el comodato se perfecciona con la entrega, ya que en el comodato
no hay cambio de dueño, no hay tradición; es un título no traslaticio.
Por la misma razón, sí acierta el Código cuando establece que el
mutuo no se perfecciona sino con la tradición, pues el mutuo sí es de
los títulos "traslaticios". El mutuario sí se hace dueño. Hay tradición en
el mutuo, porque en este la entrega equivale a tradición. En el
comodato es simple entrega.
En el contrato de arrendamiento se emplea bien la expresión entregar,
cuando al señalar las obligaciones del arrendador, la norma menciona
"entregar" la cosa arrendada. La ley también emplea bien la expresión
al mencionar el depósito, y advierte que se perfecciona por la entrega
que el depositante hace de la cosa al depositario.
En la anticresis vuelve a fallar el Código cuando afirma que se
perfecciona mediante la tradición del inmueble. Es con la entrega,
cuando el deudor le entrega al acreedor una finca raíz para que se
pague con sus frutos.
Por esa manera equívoca de tratar el Código los términos tradición y
entrega se han presentado no pocos conflictos doctrinarios y
jurisprudenciales, al señalar las obligaciones del vendedor afirma que
se reducen a dos: la entrega o tradición y el saneamiento de la cosa
vendida. Como quien dice que entrega y tradición son lo mismo. La
Corte ha despejado la duda diciendo que la obligación no es de
entregar, sino de traditar.  .

D) PREEXISTENCIA DE UN  TITULO TRASLATICIO


Esta exigencia o requisito de la tradición está contemplada en el
código: "Para que valga la tradición se requiere un título traslaticio
de dominio, como el de venta, permuta, donación, etc.". En
realidad, en la legislación no hay títulos traslaticios de dominio, ya que
entre nosotros el título solo no traslada el dominio, sino que tiene que
unirse a un modo, pues sí hay títulos que unidos al modo sirven
para trasladar el dominio, como los que el artículo cita; pero hay
otros que no sirven, como el comodato, el depósito, el arriendo, la
anticresis, el usufructo, etc., debemos tener presente esta
aclaración cuando hablamos de títulos traslaticios. Algunos
autores han dicho de estos títulos que son de vocación
traslaticia, pues quieren decir que sirven para adquirir el dominio.
De manera que para que la entrega sea tradición, debe ir
precedida de uno de estos títulos como la venta, la donación, la
permuta, el mutuo (Todos estos títulos sirven para trasladar el
dominio y en ese sentido se debe entender la expresión "título
traslaticio".
Nuestro sistema es diferente del francés, ya que en el Código de
Napoleón se suprimió la tradición y allí el título traslada al dominio.
Nuestro sistema es el mismo romano y español, en los cuales se
diferencian el l título y el modo y se requiere la confluencia de ambos
para que haya traslado de dominio.

E) REGISTRO DE LOS INMUEBLES


La tradición de los bienes raíces se da con la inscripción en la oficina
de registro de instrumentos públicos.
4. FORMAS DE ENTREGA
A propósito de la tradición de los bienes muebles, el artículo 754
menciona varias formas de entrega, aunque se refiere a formas de
tradición, por el equívoco a que ya aludimos. Son ellas las siguientes:
Entrega material: la forma común de hacer entrega de una cosa es la
llamada entrega material, por la cual el tradente pone, por decirlo así
en manos del adquirente la cosa que le tradita.
Pero la entrega material a la que se refiere el código, permitiéndole la
aprehensión material de una cosa presente.
Entrega "longa manu": así se denomina la entrega contemplada en
el ordinal 2 cuando afirma "mostrándosela", pues da a entender que
quien muestra algo alarga la mano. De ahí el nombre que desde los
romanos se ha dado a esta forma de entrega.
Entrega simbólica: a esta forma de entrega se refiere el ordinal 3
cuando señala que consiste en la entrega que se hace de las llaves
del granero, almacén, cofre o lugar cualquiera en que esté
guardada la cosa. De tal manera que si Pedro vende unas joyas que
se encuentran en un cofre bajo llave, con entregar las llaves del cofre
se entiende hecha la entrega de las joyas. De la misma manera puede
entregar un vehículo que vende, etcétera.
Entrega convenida: hay ocasiones en las que las partes acuerdan
que el bien objeto de transacción debe ser entregado en un sitio
determinado. Por ejemplo: compro un caballo y mi vendedor se
compromete a entregarlo en la feria, o en mi finca. Hasta cuando lo
lleve allí no habrá entrega. Esa forma está señalada en el ordinal 4.
Entrega "brevi manu ": puede suceder que quien adquiera un
bien, con existencia previa de uno de los títulos traslaticios que
menciona la ley [compraventa, permuta, donación, etc.), con
anterioridad al contrato tenga la cosa en su poder por haberla recibido
a un título de los no traslaticios, un comodato, por ejemplo. Ilustremos
la situación: Pedro le arrienda a Juan un caballo y se lo entrega a ese
título el 20 de mayo de 2018. Estando en poder del caballo Juan como
tenedor, por el contrato de arriendo, Pedro se lo ofrece en venta. Se
ponen de acuerdo en las condiciones del contrato y, efectivamente, el
15 de junio del mismo año se hace la compraventa. Como ya Juan
tiene el caballo en su poder, la ley no exige otra entrega, que sería
innecesaria. La sola venta se toma como entrega, en este caso.
Esta forma, llamada por los romanos entrega brevi manu, está
contemplada en la primera parte del ordinal 5".
Entrega con cláusula "constituto possessorium": contempla esta
modalidad que consiste en que, quien hace la tradición de un bien
conserva la tenencia de este temporalmente. El ejemplo podría ser:
Pedro, dueño de un televisor, se lo vende a Juan, pero como quiere
ver una película en esos días, le pide el favor de que se lo deje en
alquiler hasta el fin de semana. Efectivamente así se hace. Ese
contrato de arriendo serviría como entrega. De no ser así, habría que
hacer una pantomima, como ocurriría también con la entrega brevi
manu, en la que  el vendedor le entrega al comprador y este, ya como
dueño, vuelve y entrega al anterior dueño, que ahora pasa a ser
arrendatario.
Tradición de frutos: si se traditan frutos naturales o productos, la
tradición se entiende perfeccionada, en el momento en que son
percibidos, es decir, cuando se separan de la cosa que los da.cuando
nos referimos a los muebles por anticipación, la ley permite que se
trafique con esos bienes inmuebles que están adheridos, como los
frutos del árbol, como si fueran ya muebles, antes de percibirse. El
título, entonces, puede ser anterior a la percepción, pues se les
anticipa su carácter de muebles que en el futuro adquirirán,
precisamente en el momento en que se perciban. La tradición solo
se da cuando el adquirente los separe de la cosa que los da,
cuando los aprehenda materialmente, es decir, cuando los
perciba. En ese momento se da la tradición.
5. FORMAS DE ENTREGA EN EL CODIGO DE COMERCIO
El Código de Comercio prescribe: "La entrega de la cosa se entenderá
verificada:
" 1º  Por la transmisión del conocimiento de embarque, carta de porte
o factura, durante el transporte de las mercancías por tierra, mar o
aire.
“2º . Por la fijación que haga el comprador de su marca en las
mercaderías compradas, con conocimiento o aquiescencia del
vendedor.
"3º. Por la expedición que haga el vendedor de las, mercancías al
domicilio del comprador".
6. LA TRADICION DE LOS VEHICULOS AUTOMOTORES
Grave confusión se ha generado en nuestro medio con respecto a la
negociación de los vehículos automotores, existe la tendencia a creer
que la venta de los automotores es solemne, cuando no es así.
El Código Civil, por ser una obra de tantos años, no podía referirse a
estos bienes, pues no existían. Los comprende dentro de la
categoría de bienes muebles. Por tanto, a la venta de vehículos
automotores hay que aplicarle las reglas de la venta de bienes
muebles, y a la tradición de vehículos automotores, las reglas de
la tradición de bienes muebles. Esto en cuanto se refiere al Código
Civil, ya que también existen el contrato y la tradición comercial de
vehículos automotores.
Por lo dicho, tenemos que, de conformidad con el   Código Civil,
por ser el vehículo automotor un bien mueble, su venta se realiza
por el acuerdo de las partes sobre el precio y el vehículo. En
cuanto a su tradición, esta se perfecciona con la entrega que
haga del vehículo el tradente al adquirente, bien sea real,
simbólica o cualquiera de las formas de entrega aceptadas por el
cc.
El Código de Comercio señalaba  que la tradición de los vehículos
automotores requería, además de la entrega, la inscripción del
título, que "se efectuará ante el funcionario y en la forma que
determinen las disposiciones legales pertinentes".
De tal manera que si el contrato es civil, la tradición se realiza con
la entrega, como la de cualquier bien mueble. Pero si el contrato
es comercial,' la tradición requerirá, además de la entrega, la
inscripción en la forma y ante el funcionario que la ley señale,
según la intención del legislador mercantil. «La tradición del
dominio de los bienes raíces requerirá, además de la inscripción del
título en la correspondiente Oficina de Registro de Instrumentos
Públicos, la entrega material de la cosa.

TRADICION SOBRE DERECHOS DE SERVIDUMBRES


ART 760 C.C “ La tradición de un derecho de un derecho de
servidumbre se efectuará por escritura pública, debidamente
registrada, en que el tradente exprese constituirlo y el adquirente
aceptarlo; podrá ser esta escritura ser la misma del acto o contrato
principal a que acceda el de la constitución de la servidumbre

7. TRADICION DE LOS DERECHOS PERSONALES


El Código Civil que "la tradición de los derechos personales que un
individuo cede a otro, se verifica por la entrega del título, hecha por el
cédeme al cesionario". De acuerdo con el texto legal, la tradición de
los derechos personales se da con la entrega del título, pero no
siempre el crédito consta en un título, pues muchas de las
obligaciones se contraen verbalmente y no queda ese receptáculo
material o título para ser entregado. Estaríamos frente a una absoluta
imposibilidad de traditar el crédito cuando no consta en un documento.
Algunos autores sostienen que basta con crear el título y entregarlo.
Pero esto no es tan simple, pues un título hecho solo por el acreedor
no tiene valor. Tendría que ser creado conjuntamente por el acreedor
y por el deudor, y la dificultad estaría en obtener el concurso del
deudor. Al obtenerse, no habría ningún problema para crearlo y luego
traditarlo.

TRADICION DE LOS BIENES MUEBLES


C.C. “Consiste en la entrega que el dueño hace de la cosa, habiendo
por una parte la facultad e intención de transferir el dominio y por otra
la capacidad e intención de adquirirlo”
TRADICION DE LOS INMUEBLES
C.C. “ Se efectuará la tradición del dominio de los bienes raíces por la
inscripción del título en la oficina de registro de instrumentos públicos.
De la misma manera se efectuará la tradición de los derechos de
usufructo o de uso constituidos en bienes raíces y de los de habitación
o hipoteca.   La adquisición de la propiedad inmueble por tradición
exige tres procesos:
 la celebración del negocio obligatorio (compraventa, permuta,
donación)
 la inscripción en el registro inmobiliario de la escritura publica recoge
el negocio obligatorio.
 la adquisición de la poseción del inmueble por el adquirente

8. TRADICION HECHA POR QUIEN NO ES DUEÑO


la tradición debe hacerla quien es dueño, sea que actúe
directamente, o por medio de mandatarios o representantes
legales. Si es hecha por quien no es dueño, no es válida
En primer lugar, digamos que la venta de cosa ajena es válida porque
la venta es solo un título y el vendedor de cosa ajena se compromete
a traditar y puede hacer la tradición si posteriormente a la venta se
hace dueño, en cuyo caso cumpliría cabalmente sus obligaciones.
Ahora, en el caso de que no adquiera el dominio, no puede cumplir
con la tradición y lo van a demandar por incumplimiento de contrato.
Por ello, el Código autoriza la venta de cosa ajena en el artículo
1871, haciendo la salvedad de que se respetan los derechos del
verdadero dueño.
En cuanto a la tradición de cosa ajena, esta sí es ineficaz. ¿Qué
ocurre, entonces, cuando el vendedor de cosa ajena hace la entrega al
comprador?

9. TRADICION EN LAS VENTAS FORZADAS


El Código Civil afirma: "En las ventas forzadas que se hacen por
decreto judicial a petición de un acreedor en pública subasta, la
persona cuyo dominio se transfiere es el tradente y el juez su
representante legal". En el párrafo anterior del mismo artículo se
señala la posibilidad sus mandatarios o representantes legales de
entregar y recibir a nombre del dueño. Comentando esta norma del
Código Civil, dice el doctor VALENCIA ZEA que "esta regla constituye
una desfiguración del concepto propio de la tradición, que
consiste en la transmisión voluntaria que del dominio hace el
dueño a otro.

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