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La obra da inicio con la descripción de Salamanca una ciudad donde habitaba don Félix de

Montemar, quien era una persona anti religiosa, insolente, el cual solo se dedicaba a
enamorar bellas damas para obtener de ellas lo que desease para después dejarlas.
Don Félix de Montemar conoce a Elvira una hermosa dama inocente y tierna. Quien cae
rendida antes sus mañas.
Tiempo después. Elvira pasa por momentos de tristeza con un gran dolor en el corazón al
darse cuenta que su amado la había abandonado entre su locura cree oír la voz de su amado,
pero al darse cuenta que es falso sola y triste empieza a llorar. Elvira final mente muere de
amor, pero antes de morir le escribe unas cartas a don Félix de Montemar donde le agradece
los momentos de amor que pasó junto a él y le recuerda todas las amarguras que pasó por su
culpa.
Posteriormente don Félix de Montemar llega a un juego de cartas donde entra al juego
apostando un collar. Durante la primera ronda pierde, pero nuevamente apuesta el retrato
de una dama, perdiendo en esta ocasión solo el marco, finalmente termina apostando el
retrato. En seguida entra una persona quien se dirige hacia él con gran amargura y coraje.
La persona resultó ser don Diego hermano de Elvira quien venía a retar a don Félix a un duelo
ya que por la culpa de este su hermana había muerto. Finalmente, el vengativo hermano de
Elvira pierde la vida en manos de don Félix.
Don Félix se retira vagando por una calle oscura donde oye un suspiro, ante él una figura en
vuelta en ropa blanca se adelanta flotando entre la densa niebla, este sin miedo sigue
avanzando, finalmente observa a una dama sentada debajo de la luz de una lampara vestida
de blanco quien lloraba sin parar, sin miedo le ofrece su compañía la quiera o no, sin
importarle de quien se tratase, La dama al escucharlo le respondió con un gemido.
Don Félix Intrigado le pregunta a la dama si su sufrimiento se trataba por el maltrato de un
celoso marido a lo que la dama le responde que para ella el amor había terminado al igual
que el mundo en el momento en que la tierra la había abrazado, la dama continúo diciéndole
que dejara los delirios mundanos, pero este molesto le responde que no necesitaba
sermones, finalmente la dama se levanta y empiezan a caminar pasando por calles, plazas
solitarias y más calles hasta que don Félix ya no reconoce en donde se encuentra.
Entre la oscuridad observa a varias criaturas y fantasmas que le saludan dudando así si se
encontraba despierto. Continuaron andando hasta que don Félix reconoció nuevamente el
lugar culpando así al vino de aquel delirio. Mientras avanzaba se preguntaba quién era aquella
dama con mucha intriga le pregunta a la dama si era nueva en la ciudad ya que al parecer
había perdido el camino, pero ella no responde ante la pregunta de don Félix.
Continuaron andando hasta que la dama se detiene, don Félix a lo lejos ve luces y personas
que murmurando se acercaban hacia él, finalmente entre la multitud observa dos ataúdes,
pero al ver el nombre de los ataúdes se le heló la piel al observar su nombre en uno de ellos
y el nombre de don Diego en el otro, rápidamente se repuso tomando aquello como una
broma de mal gusto acercándose a la dama le pregunta que en donde vivía que se hacía tarde
a lo que la dama le responde que tarde sería dentro de una hora si continúa avanzando y que
a la muerte se dirigía y aun así no temía ya don Félix molesto le pide a la dama que continúen
que adonde sea que vaya él irá. Continuaron hasta llegar a una mansión donde sentía una
oscura sensación mientras recorría el pasillo a lo lejos observa un ataúd abierto deduciendo
que era para él, finalmente observa como los muertos despiertan quienes rápidamente le
empiezan a rodea.
Don Félix finalmente el velo de la dama alza, mientras escuchaba ecos decir a la dama que se
trataba de su eterno amor. En eso don Diego aparece con el pecho desangrado mientras le
dice a don Félix que al fin su promesa cumple y a su hermana como esposa toma, la dama con
fuerza a don Félix abraza, mientras este poco a poco la fuerzas pierde y sin más finalmente
muere.

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