Está en la página 1de 1

El primero de enero de 1958 se produjo el primer intento de rebelión militar contra Pérez

Jiménez. El movimiento encabezado por el coronel Hugo Trejo contó con la participación


de un buen número de oficiales de la guarnición de Caracas y de Maracay, principalmente
de la Fuerza Aérea. Este levantamiento militar fracasó y sus principales dirigentes fueron
detenidos por el gobierno. Sin embargo, a partir del primero de enero la crisis interna de la
dictadura se hizo cada día más grave. Se produjeron nuevos brotes insurreccionales en las
fuerzas armadas y el movimiento popular se manifestó con más vigor en la lucha contra el
dictador. Se acentuó la represión; las cárceles se llenaron de presos políticos; fueron
cerrados los liceos y reprimido el movimiento estudiantil. Pero el movimiento popular iba en
ascenso; densos sectores sociales se incorporaban activamente a la lucha: intelectuales,
médicos, abogados, profesores, ingenieros, suscriben manifiestos de denuncia contra el
régimen. Esto significaba pérdida de prestigio en la institución armada que aparecía
comprometida de hecho con los desmanes del régimen. En las calles sucedían
manifestaciones y motines.
A mediados de enero la Junta Patriótica llamó a la huelga general para el día 21. El 21 de
enero comienza la huelga de prensa y horas después de ésta, la huelga general
convocada por la Junta Patriótica. El paro se cumplió a cabalidad y en muchos sitios
de Caracas se produjeron enfrentamientos con las fuerzas del gobierno. El 22 se reúnen
altos jefes militares en la Academia Militar para considerar la situación. Sus deliberaciones
concluyen formando una Junta Militar de Gobierno que pide la renuncia a Pérez Jiménez.
En la noche del día 22, la Marina de Guerra y la Guarnición de Caracas se pronunciaron
contra la dictadura; y Pérez Jiménez, privado de todo apoyo en las Fuerzas Armadas, huyó
en la madrugada del 23 de enero desde el Aeropuerto La Carlota, rumbo a Santo
Domingo.
En lugar de Pérez Jiménez tomaba el poder una Junta presidida por el
contraalmirante Wolfgang Larrazábal. Pérez Jiménez huyó hacia República Dominicana,
para posteriormente trasladarse a España junto a su familia, protegido y mantenido
por Francisco Franco.

También podría gustarte