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LOCUCION
Dicen que el primer registro en cine del boxeo, una pelea entre Jack Cushing
y Mike Leonard, data de 1894, y en tan solo 37 segundos de pura adrenalina
demostró que el matrimonio entre el box y el cine iba a durar por mucho,
mucho tiempo. https://www.youtube.com/watch?v=8_BPBvjsDAQ
Es que el boxeo metaforiza, quizás como ningún otro deporte: la lucha por
triunfar enmarcada en el choque de 2 fuerzas contrapuestas, la base
argumental de cualquier película. Los golpes y la cercanía con la muerte,
generan la adrenalina y urgencia de la épica personal del ascenso o
descenso de quienes lo practican. Y entre golpes, construyen sueños o los
derrumban.
Las películas que tienen expresa esta dualidad son, en general, las
inspiradas en casos reales, sobre boxeadores que vivieron la gloria y el
ocaso. Entre ellas: “Ali” con Will Smith, sobre la vida del gran Mohammed
Al, “Toro Salvaje” con Robert De Niro, que interpreta al púgil Jake La Motta.
“Huracan” con Denzel Washington como el boxeador Rubin Hurracaine
Carter, “Gatica, el mono” del gran Leonardo Favio o “El estigma del arroyo”
(Somebody up theres like me) donde Paul Newman interpreta a Rocky
Graziano. Todas fueron reconocidas y premiadas
A veces el mundo del boxeo estuvo ligado a otros géneros como el Thriller
Político en “Golpe a la vida” (“The Boxer”) en la que Daniel Day Lewis estaba
involucrado con el IRA, el grupo terrorista irlandés. Al Documental con el
premiado “Cuando éramos reyes”. A la comedia con la gran parodia de
Chaplin en “Luces de la ciudad”. Al romance en “Pelea de Fondo” con
Barbra Streisand y Ryan O Neil o la argentina “Sangre en la Boca” con
Leonardo Sbaraglia y Eva De Dominici, entre otras.