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En mi sueño La
Sagrada Familia se
Nº 33. 1 de enero de 2022.
me apareció como un
árbol enorme
➢ Dando pasitos 10
2022!
¡Feliz
➢ Semana cultural 11
Agenda 25
Un poco de humor 29
Contraportada 30
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Nuestra Vida
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Y la llama en Getafe sigue viva, Dios sigue llamando y hay corazones generosos que
acogen su llamada. Tras esta celebración el Comité se reunió con el grupo de Getafe 2.
Como todos los asociados, también este grupo está viviendo un proceso de discernimiento.
Durante un precioso encuentro pudimos conocernos más, charlar, expresar vivencias,
interrogantes, sugerencias, siempre abiertos al don que Dios nos regala y que nos impulsa
a hacer vida concreta a nuestro alrededor. ¡Seguimos acogiendo la llamada a ser cada día
miembros más activos y comprometidos en la Sagrada Familia! Una mención especial a la
cena que nos tenía preparada Agustina en casa, resumiendo todo el cariño y la acogida de
este grupo para el Comité Nacional.
Y, como hemos dicho antes, la vida sigue, Dios llamó a su seno a los pocos días a Roberto.
Pero la fe nos sostiene y alienta, especialmente en los momentos más duros. Por ello
hemos podido celebrar y DAR GRACIAS por los 25 años de compromiso de Mª Dolores
Arellano y Roberto ya en la intimidad de casa y a pesar de vivir momentos muy duros, con
la esperanza de confiar que Roberto está ya con el Padre y con tantos hermanos y
hermanas que seguro están intercediendo por cada uno de nosotros. Íntima, emotiva y muy
familiar, en la más estricta intimidad, pero dando gracias por todos los momentos de alegría
vividos.
Resuenan en nosotros las palabras de nuestro Buen Padre: “Seguid adelante”. Dios les
bendiga y la Sagrada familia les proteja y les de su paz.
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Gran número de participantes: Obispos; sacerdotes, laicos; seminaristas; vida consagrada;
niños-jóvenes, autoridades civiles, militares, judiciales, y académicas, de la Comunidad
Autonómica de Andalucía, de la provincia de Jaén y de cada uno de nuestros pueblos y
ciudades.
La celebración, fue rica, en la Palabra, muy emotiva. En la homilía creo que tuvo en cuenta
muchas situaciones de la realidad de la Iglesia, Quiero destacar, el grupo de personas que
por diversas circunstancias viven en situación de enfermedad, sufrimiento, soledad,
pobreza, marginación, ancianidad.
Ya terminando nos expresó; “contad con mi disponibilidad y colaboración para juntos buscar
el bien, la caridad y la justicia”… “Ruego que recéis por mí para que cada día, refleje con
más claridad en mi vida el “Santo Rostro” de Cristo que como joyero custodia nuestra
majestuosa Catedral para que él sea el buen pastor que necesitáis”. “Pongo mi Ministerio
Episcopal junto al manto Maternal de la Santísima Virgen de la Cabeza, Patrona de la
Diócesis de Jaén”.
Podéis imaginaros los aplausos durante la celebración y más al terminar, como expresión
de acogida.
Terminada la celebración pasó por los distintos pasillos saludando a las personas. Allí
esperamos Mª Luisa, Eduardo (Laico) y yo. Cuando pasó con un poco de dificultad, oyó:
“somos de la Sagrada Familia de Burdeos”. En cuanto escuchó esas palabras se volvió y
dijo “mi familia, mucho la quiero”. Por lo visto ha tenido mucha relación con las hermanas
de los Mateos, Cartagena, cuando era el cura de allí. Se alegró de que en su diócesis esté
presente la Sagrada Familia.
De regreso a casa se oía: “Parece que tiene olor a oveja y es joven, cercano. Tenemos
para años…”.
Que Dios le acompañe en su caminar con todo nuestro pueblo de Jaén.
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Nos movilizamos de nuevo
La pandemia llegó inesperadamente, pero está tardando en marcharse con todas las
secuelas que ha arrastrado. Poco a poco vamos saliendo del atasco y queremos volver a
movilizarnos y comprometernos de forma concreta como comunidad y como Iglesia de
pueblo. Hemos hecho este verano nuestro propio camino, hemos escuchado la llamada a
volver a empezar con ánimo y a recuperar la dimensión comunitaria, tanto en casa como
en el pueblo. Y claro está, hemos comenzado a reunirnos de nuevo con los vecinos,
después de meses de aislamiento y temor. Las gentes del entorno en su mayoría también
se han ido despertando y empiezan a querer actuar. Juntos con nuevos ánimos hemos
retomado nuestros pequeños compromisos.
Hace diez años vinieron a Campohermoso los Misioneros Redentoristas a llevar a cabo una
Misión: la idea era llegar a los alejados de la Iglesia. Se invitó a muchas personas a que
prestasen su casa y que invitasen a reunirse allí a sus vecinos y conocidos, para reflexionar
sobre el mensaje de Jesús, una vez al mes. Surgieron así 40 Asambleas Familiares
Cristianas cuyas reuniones se preparan de antemano con una persona de cada Asamblea
y que ellos se encargan de trasmitir. Ya entonces se empezó la “Iglesia en salida”, idea tan
querida por el Papa Francisco.
Hoy día perseveran 10
Asambleas, con ganas de
empezar de nuevo, ya que con la
pandemia se cortó toda actividad.
Las cuatro de comunidad
pertenecemos a alguna de estas
Asambleas, participando como
uno más.
También hemos vuelto al Taller
Ocupacional para Inmigrantes en
San Isidro, un pueblo cercano al
nuestro, donde colaboramos con
las Mercedarias de la Caridad. De
nuevo limitados en el número,
acogemos a personas sin trabajo y
sin “papeles”.
Por otro lado, nada más llegar las Hermanas a Campohermoso, detectaron la necesidad
que tenían los inmigrantes de recibir clases de español, pues las que se imparten
organizadas por el Ayuntamiento tienen un número de plazas reducido y además exigen
cierto grado de conocimiento del idioma.
Desde Cáritas se empezó este servicio y durante todos estos años han pasado por “la
escuela” unos 1.500 extranjeros de Mali, Ghana, Gambia, Senegal, Marruecos, etc.
Junto con tres Hermanas de la Inmaculada de Castres, la otra congregación religiosa
presente en Campohermoso, tenemos repartido el alumnado según niveles.
Al terminar el curso se les entrega un Certificado de Asistencia con el sello de Cáritas, que
da fe de que en ese período han estado viviendo en España, lo que les sirve para la
obtención del Certificado de Residencia, los ansiados “papeles” que necesitan para poder
trabajar.
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Al principio, las mujeres marroquíes no
asistían porque no les dejaban los maridos,
pero ya se han integrado con toda
normalidad.
El que nos encontremos por la calle y nos
saluden ¡maestraaaa! con una gran sonrisa
es una buena recompensa.
Una de nosotras da clases de español a una
chica marroquí, de 23 años, con una
enfermedad congénita que le tiene medio
paralizado el lado derecho y que la ha tenido
aislada en su casa durante años. Hace poco
hemos tenido la alegría de que ya sabe
bastante y puede participar en las clases
para adultos del Ayuntamiento.
Tenemos la suerte de vivir una experiencia de trabajo intercongregacional en el que nos
sentimos muy a gusto, tanto con las Mercedarias de la Caridad como con las Hnas. de la
Inmaculada de Castres. Es una ocasión no sólo de compartir la tarea, sino que se ha ido
creando un ambiente de amistad y apoyo mutuo.
Formamos desde siempre parte de Cáritas y el Covid no nos ha dado vacaciones. Ahora
se ha vuelto ya al ritmo normal, colaborando con otras personas comprometidas.
Hemos retomado también nuestra participación en las reuniones convocadas por la
Delegación de migraciones de la Diócesis, la Confer y Cáritas en Almería, que se van
reanudando después del parón provocado por la pandemia.
Hace dos sábados subimos las cuatro de la Comunidad a Huebro, un pequeño pueblo en
Sierra Alamilla desde donde se domina la extensa comarca de Níjar hasta el cabo de Gata.
Se trataba de una reunión de formación organizada por Cáritas Almería para todo el
Arciprestazgo.
Después de profundizar sobre las diferencias entre la
acción social “asistencial” y la “promocional”,
terminamos con una comida fraterna y bulliciosa y
volvimos a casa habiendo recibido nuevos ánimos
para nuestras tareas.
Terminamos este compartir de nuestra sencilla vida
diaria con una reflexión de Fidel Aizpurúa:
“Debemos liberarnos de la tiranía del número. ¿Es
que hemos de arrugar el ceño cuando vemos que
somos pocos y sencillos en torno a la
espiritualidad cristiana? Fomentar la ilusión de
no tener que depender del número puede ser una
bocanada de aire fresco en la manera de vivir hoy la
fe”.
La Comunidad de Campohermoso
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Dando pasitos
Comunidad de Frómista
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Una experiencia de encuentro con Dios en matrimonio
Quiero compartir con vosotros una bendiciones del cielo sobre esta unión e
experiencia muy enriquecedora que indicándoles los deberes que les impone
hemos tenido en nuestra parroquia, el el matrimonio:
último fin de semana de octubre: un retiro
- Recibir con fe y dignamente el
de matrimonios, de los cuales cinco
sacramento.
formamos parte de la Sagrada Familia de
- Perseverar.
Alcalá la Real.
- Ayudarse mutuamente…
- El amor de los padres, si Dios
fecunda el matrimonio…
Tenemos que pesar que es un lenguaje
del 1837, pero parecido a lo que tratamos
en el retiro.
En el retiro oramos algo muy importante,
que cuando contraemos matrimonio,
gracias al Sacramento que recibimos; se
sube un nuevo pasajero, ya no somos dos
sino tres. El Señor está entre nosotros dos
para guiar nuestro camino, compartiendo
cada día nuestra vida. En un momento de
Yo tengo una costumbre, llevo conmigo la oración y con el Señor expuesto,
siempre la Guía Espiritual y en lugar de pudimos experimentar su presencia en
leer el horóscopo, me gusta siempre nuestra unión, fue algo maravilloso.
conocer que pensaba el Buen Padre Comprendimos que Dios nos ha dado su
acerca del tema que esté tratando en ese Espíritu para vivir esta vocación, tan
momento, en este caso el Sacramento del importante en la iglesia y en el mundo.
Matrimonio; y como siempre encuentro Entender que el amor es lo que hace de la
algo que me llena y me hace reflexionar. persona humana la auténtica imagen de la
Siempre resulta fructífera la búsqueda, Trinidad, todo ello ante el Señor expuesto
encontré parte de la Homilía que el Buen y cerca de nosotros, ¡no os podéis
Padre había realizado en el matrimonio de imaginar cómo nos sentimos! .
su sobrina, 14 de noviembre de 1837, y
con ella quiero comenzar mi artículo:
“Entre todos los contratos que unen a
los hombres, el más sagrado, el más
santo, el más importante es éste que
estáis a punto de formular, al pie del altar.
Nuestro Señor ha revestido la unión del
hombre y de la mujer de un carácter
sagrado, y, entre los demás sacramentos,
éste es llamado por el Apóstol: “Gran
Sacramento”. La Iglesia desea que sus
ministros reciban las promesas de los
Trabajamos también la importancia de
esposos cristianos, atrayendo las
orar el matrimonio juntos, porque cuando
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rezamos juntos entramos en el compartir
más profundo, al escucharnos en la - ¿Cómo vivimos nuestra sexualidad
oración nuestras almas se vuelven conyugal?
transparentes y nos hacemos más - ¿Cuál es el lugar que Dios ocupa
sensibles el uno hacia el otro. en nuestra vida?
- …
Es difícil resumir en unas pocas letras todo
lo vivido en el retiro, por lo que gracias a Aunque breve el artículo espero haber
Dios me quedará mucho en el tintero y en transmitido la gran experiencia vivida y
el corazón; pero algo en lo que se hizo dejaros a todos con la motivación de
mucho hincapié es en la necesidad de participar en un encuentro de este tipo,
programar “sentadas”, para poder hablar seguro que a nuestro “cura” no le
de temas que normalmente no realizamos importará y quiero dar las gracias por
porque estamos inmersos en la “locura” de tenerlo en nuestra parroquia y tener suerte
la vida diaria y se nos olvida hablar y es de acércanos a Dios no de forma
fundamental. Javier nos dio algunas ideas individual sino como matrimonio.
como:
Se me ha olvidado contaros que el retiro
- ¿Cómo me veo a mismo/a? tuvo lugar en el convento de la Madres
- ¿Qué es lo que más me gusta? Trinitarias, y también compartieron la
¿Qué es lo que detesto? experiencia de su vocación (conocéis el
- ¿Cómo vemos nuestro lugar porque algún encuentro ha tenido
matrimonio? lugar en este convento).
- ¿Sobre qué temas estamos de
acuerdo o en descuerdo?
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Encuentro de Navidad, en Pinto
Todos los años, en la residencia de Pinto, se hace una fiesta entre las hermanas y todo el personal
auxiliar y de limpieza. Este año queremos contaros un poco todo lo que disfrutamos esa tarde. Y
nos lo cuenta una de ellas.
Como todos los años nos hemos vuelto a encontrar en la Residencia Sagrada Familia.
Todas unidas, hermanas y trabajadoras, como una gran familia.
Preparamos una merienda con churros y chocolate caliente preparado por Chus, que es la
cocinera. Después Carolina, nuestra coordinadora, leyó un discurso muy emotivo, donde
dio voz a todas las trabajadoras haciendo saber el cariño, la preocupación, amor y
responsabilidad que sentimos por y para todas las hermanas.
También proyectamos un vídeo navideño con
algunas imágenes que habíamos recolectado
entre todas las compañeras, en el que
compartimos momentos muy entrañables junto a
las hermanas. Como juegos, reuniones,
excursiones, en el huerto, recogiendo aceitunas,
haciendo mermeladas e incluso momentos con
hermanas que ya no están entre nosotras pero
nos hace recordarlas con mucho cariño.
Después nos disfrazamos para hacer el baile de “Jerusalema”, bailamos algunas canciones
más y María Luisa cantó un karaoke de Jeanette “Soy rebelde”, por cierto muy bien cantado.
También tuvimos la oportunidad de cantar
algún villancico acompañados de guitarra
tocada por Tere.
Por último, decir que, como todos los
años, nos hemos acompañado
mutuamente. Hemos reído, cantado y
bailado y aunque en el último momento
hubo un apagón de luz, no impidió que
disfrutáramos de nuestra fiesta. La fiesta
de Navidad, como todos los años y por los
años que vendrán y las fiestas que nos
quedan por disfrutar junto a nuestras
hermanas de “La Sagrada Familia”,
también nuestra familia.
Encarni
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Hemos Participado en…
MANIFIESTO
Los pobres son sacramento de Cristo
El Papa Francisco nos recuerda que “a los pobres los tienen siempre con
ustedes” y luchar contra la pobreza no significa “tratar de aliviar nuestra
conciencia dando alguna limosna, sino más bien de contrastar la cultura de la
indiferencia y la injusticia con la que tratamos a los pobres”.
A menudo son considerados como personas separadas, como una categoría
que requiere un particular servicio caritativo. Seguir a Jesús implica un
cambio de mentalidad, acoger el reto de compartir que genera fraternidad.
Los pobres no pueden ser sólo los que reciben, tenemos que descubrir que
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es lo que nos están dando, muchas veces más de lo que ofrecemos.
Además, los pobres nos evangelizan porque nos permiten redescubrir a los
predilectos del Padre y por lo que vamos a ser juzgados.
“Tuve hambre y me disteis de comer…”
Que este año de La Sinodalidad, la concretemos en un caminar juntos
La comunidad de Fuenlabrada
http://sagradafamiliaburdeos.blogspot.com/
sagradafamiliaburdeos
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La Realidad nos Cuestiona
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La Luz que nos Ilumina
En camino a la paz
No es fácil definir la PAZ, plenitud de todos los bienes. Sabemos lo que es hasta que
empezamos a decirlo o, para poder decirlo, miramos un diccionario, y de pronto caemos en
la cuenta de nuestra ignorancia. Pero más dolorosa que la ignorancia es la carencia de paz.
¿Podrán las palabras ayudarnos a saberla y a gustarla, a acogerla en nosotros o a caminar
hacia ella, aquí y ahora?
Leo en la RAE, en la entrada Paz¸ algunas de sus acepciones:
1. Situación en la que no existe lucha armada en un país o entre países.
2. Relación de armonía entre las personas, sin enfrentamientos ni conflictos.
3. Estado de quien no está perturbado por ningún conflicto
o inquietud.
Nuestra ignorancia y perplejidad persisten. En efecto, la
primera de las acepciones recogidas es insuficiente y
engañosa: no basta que no haya guerra para que haya paz;
como no basta “la tranquilidad del orden” –según la
definición de la paz propuesta por San Agustín poco antes
de la caída del Imperio Romano–: no hay paz si no hay
justicia, por mucho orden que haya, impuesto a la fuerza.
Si la primera acepción se queda corta, las otras dos se
pasan, pues la “relación de armonía sin conflicto” alguno o
el “estado personal no perturbado por ninguna inquietud”
simplemente no existen.
¿Tendremos, pues, que emigrar a otro planeta en busca de paz? La humanidad –o lo que
vaya resultando de ella– algún día lo hará. ¿Hallará la paz? No es seguro que en el universo
infinito exista algún planeta perfecto sin “enfrentamientos ni conflictos” y que no sea
“perturbado por ningún conflicto o inquietud”. Y aun cuando existiera, nadie mientras
vivamos nosotros podrá llegar a él. ¿Tendremos, pues, que esperar la paz para después
de la muerte? San Agustín enseñó que solo en el “cielo” después de la muerte y del fin del
mundo gozaremos de la vida “eterna”, mejor, de la vida plena, la dicha y bienaventuranza
plenas, la PAZ plena.
Sea como fuere, la paz la deseamos aquí y ahora, y no tiene por qué ser la paz perfecta
del diccionario. Dejemos, pues, de lado los planetas perfectos, existan o no existan, y
dejemos la “vida de después”. Vivimos aquí, y aquí nos perturban conflictos e inquietudes,
y aquí y ahora deseamos la paz que no hallamos en ninguna parte.
No existe, pero a ella aspiramos. Si no hubiera agua, si no fuéramos agua, no tendríamos
sed. Si no hubiera paz, si no fuéramos paz, ¿la podríamos desear? Tal vez exista la paz,
pero no lo seamos. ¿Aspiramos acaso a lo que no existe ni somos? Tal vez existamos en
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la paz y no somos conscientes de ello. O quizá somos paz, pero no sabemos cómo llegar
a ser eso que somos.
Pienso que aspiramos a lo que somos en el fondo y es nuestro horizonte común. Pero
aspirar de verdad significa caminar. Somos caminantes en camino a la paz que es y que
somos.
¿Qué seríamos, qué sería la humanidad sin el sueño, el aguijón, la utopía o la esperanza
de la paz?
La esperanza no significa esperar o aguardar que algo suceda. Eso sería, en lenguaje de
Ernest Bloch –pensador marxista crítico–, una esperanza dormida. La esperanza
“despierta” es crítica del presente con su conflicto violento o su (des)orden establecido, y
es estímulo del futuro que hay que crear. Esperar significa caminar con espíritu y respiro,
dar pasos en dirección hacia la utopía, aunque nunca la alcancemos.
Ser caminante de la paz es la condición y el modo para construir, paso a paso, la paz
concreta y posible, una paz parcial
y verdadera. Es también la manera
de vivir en paz, no en la paz plena
inexistente, pero sí en una paz real
y suficiente para seguir caminando.
¿Y cómo, en nuestra condición
limitada e incierta, podremos seguir
caminando cada día a pesar de
todo? Señalo tres aspectos o
formas fundamentales del camino a
la paz:
adentrarnos más a fondo en
nosotros mismos,
hacernos próximos del hermano, de
la hermana herida,
sumergirnos en la naturaleza que
nos rodea y somos.
No son tres caminos, sino tres dimensiones de un mismo y único camino. Cada uno implica
a los otros; si falta uno faltan todos.
José Arregi
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La Sagrada Familia en…
BARCELONA (4ª parte)
SANTA COLOMA DE GRAMANET
Colegio 1964
Al cerrar el Orfanato, el Sr Obispo aprobó la compra de un terreno con vistas a fundar más
delante una Obra Social y nos orientó hacia Santa Coloma de Gramanet. Pues aquí
estamos dispuestas a recorrer este pueblo, de más de 130.000 habitantes, 145
nacionalidades, en su mayoría andaluces y extremeños que han emigrado a esta región
catalana, para remediar sus problemas económicos. Completamente abandonados en el
aspecto espiritual.
Está situado a las afueras de Barcelona y la gente lo llamaba “ciudad dormitorio.”, pues la
mayoría de los obreros pasaban el día fuera
En octubre de 1964, una comunidad de la Sagrada Familia, va a instalarse en Santa
Coloma, en la calle Valencia nº·3, dónde se abre el colegio. La comunidad está formada
por doce hermanas.
El día de la colocación de la primera piedra, fue
el 25 de enero de 1962, Presidió el acto Mons.
Gregorio Modrego, Arzobispo de Barcelona y en
presencia de la Madre Clara de Jesús Julien,
Superiora General, de la M Provincial y de las
Consejeras de la Provincia de Aragón; también
asistieron Hermanas de las diferentes casas de
Barcelona y antiguas alumnas de los Colegios.
Se ha colocado la primera piedra de la Obra
Social que la Congregación de la Sagrada Familia, establece en este pueblo
Sencillez y grandeza van siempre a la par: ese día, más de 500 personas estaban ya en
ese lugar una hora antes de llegar el Prelado.
En 1964 comienza a funcionar la Obra. El 29 de abril colocaron el altar. Un Sacerdote
Claretiano dijo la Misa de Primera Comunión de 55 de nuestros niños
Al colegio se le denominó “Escuela de la Sagrada Familia”. Empezó sus clases con 242
alumnas, todas ellas muy atrasadas. Al año siguiente eran 344, de las cuales 30 estaban
haciendo el Bachillerato, Como se quería que la Obra fuera completa se recogían a las
niñas de unos tres años, La guardería llevaba el nombre de Nazaret.
Viendo que aumentaba el número de niñas para estudiar Bachillerato, se construyó un
pabellón en la calle de enfrente del colegio y se creó el Instituto Filial, que empezó a
funcionar en 1967.Allí comienza una pequeña Comunidad.
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Como en Santa Coloma había diferentes Parroquias, los sacerdotes trabajaban y tomaban
sus decisiones en equipo. A los pocos años invitaron a las Religiosas de la Sagrada Familia
a que una de ellas participara en estos equipos, junto con una Religiosa del Prado. Más
tarde se integraron también seglares,
En 1978, la Provincial de la Sagrada Familia en España, propietaria de esta finca de Santa
Coloma, comunica que ante la imposibilidad de seguir llevando la dirección del Centro de
Enseñanza, por falta de personal religioso, por las dificultades que surgen ante la situación
conflictiva, tanto ideológica como laboral, y vista en la zona la necesidad de una enseñanza
totalmente gratuita entra en negociación de venta con el Ministerio de Educación y
Ciencia, para la enajenación de la parcela correspondiente a las edificaciones escolares.
Vistas también las necesidades pastorales de la zona, la Congregación decide la donación
a la Iglesia, salas y dispensario con sus terrenos correspondientes al Obispado de
Barcelona. La guardería seguirá siendo atendida por la Congregación hasta que se entable
negociaciones con otra Entidad.
En 1978, se cierra el Colegio y la Filial, que pasan al Estado. Las dos Comunidades de
Religiosas se van.
SANTA COLOMA DE GRAMANET
Santa Rosa 1968
Juan Mata, Párroco de Santa Rosa, barrio de Santa Coloma, preocupado por la situación
de tantas familias que han emigrado de Andalucía, decide abrir una guardería en su barrio.
Pide ayuda a las religiosas de la Sagrada Familia. Respondiendo a esta llamada dos
Religiosas se trasladan cada día, desde la comunidad del Colegio, para atenderla.
Las necesidades en este barrio siguen aumentando y el Párroco
pide de nuevo a la Congregación más Religiosas para atender un
Centro de Preescolar, que desea abrir.
El Consejo Provincial estudia la propuesta que presenta el párroco,
que expresa el deseo de que las Religiosas de la Sagrada Familia
cojan también la dirección de ese Centro que forma parte del
Complejo Parroquial Santa Rosa.
Este Complejo está formado por una guardería, dispensario,
comedor escolar y un centro de preescolar. Si las Religiosas no
pueden coger la Dirección, el Centro se cerrará- Por otra parte, el barrio es muy pobre, hay
pocas escuelas y en malas condiciones.
Las Religiosas llevan ya la guardería, el dispensario y el comedor escolar.
El Consejo Provincial da su voto favorable, aceptando la propuesta del Párroco. La
dirección y la administración del centro de Preescolar correrá a cargo de las Religiosas,
tendiendo a que algún día pueda pasar a la Junta de Padres.
Al ser afirmativa la respuesta del Consejo, el 16 de marzo de 1968 es erigida una
comunidad de la Sagrada Familia en Santa Rosa. La formaban cuatro Hermanas. Una de
ellas, trabajadora social, dejó un recuerdo entrañable de mujer luchadora y tenaz, clara
postura de situarse del lado del marginado.
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La Coordinadora de Asociaciones de Vecinos elaboró un detallado Plan Popular estudiando
y proponiendo alternativas de solución a las necesidades de escuelas, mercados, centros
de salud. Las religiosas Colaboraron en el Casal de Cultura.
Esta comunidad se cerró en 1973, por la disminución del número de Hermanas
SANTA COLOMA DE GRAMANET
Las Oliveras 1971
Luis Hernández, cura Párroco de Las Oliveras, en Santa Coloma, pidió a la Congregación
de la Sagrada Familia, la presencia de una comunidad.
El permiso fue concedido por la Superiora General, y en septiembre de 1971, era erigida
una comunidad de la Sagrada Familia.
Se habilitó un piso en uno de los barrios más pobres; una de las Hermanas de la comunidad,
trabajaba en una fábrica; otra maestra de profesión, daba clase de alfabetización y se
ocupaba de la Pastoral.
El ambiente del barrio estaba muy politizado esto no ayudaba a las Hermanas en su vida.
Solo dos Hermanas permanecieron fijas, las demás se iban sucediendo, pues no acababan
de integrarse y no veían clara su misión allí. Por lo que en septiembre de 1978, fue cerrada
la Comunidad. La vida que llevaban no era compatible con la vida religiosa, a lo que se
añadía la situación conflictiva, que les llevó a la decisión personal de abandonar la
Congregación.
Esos tres miembros de la comunidad salieron de la Congregación ese mismo año.
SANTA COLOMA DE GRAMANET
C/ Ramón Berenguer – 1972
Un grupo de Hermanas de la Sagrada Familia, que deseaba trabajar con los gitanos en el
Polígono de la Mina, barrio emplazado en Santa Coloma, empezaron su tarea viviendo en
la Comunidad del Colegio, que estaba cerca, y desde allí se trasladaban durante el día al
Polígono.
Más tarde se les permitió ir a un piso, que en aquel momento era fácil conseguir: Cáritas,
pagaba la entrada (30.000pesetas) y el alquiler eran 1.000 pesetas al año. Se compró en
1972.
La nueva Comunidad había empezado a vivir ese año, en el edificio del Filial; pero esta
circunstancia les ataba mucho al colegio e impedía participar en el barrio, por lo que pidieron
irse a vivir a un piso. Querían vivir como todo el mundo, más
cerca de la gente, hasta en la estrechez de la vivienda y
participar de su género de vida. Quería ser una comunidad
de auténtica inserción. Los vecinos iban a su casa con toda
libertad. Había una relación abierta a todos y con todos, y
ellas participaban activamente en la vida del barrio y de la
Parroquia.
El número de Hermanas osciló entre 5 y 7: Iban a trabajar al
colegio, a la guardería, al Filial, al hospital… y al mismo
tiempo, según el compromiso de cada una, participaban en
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diversas agrupaciones: HOAC, Consejo de Pastoral Parroquial, la comunidad cristiana,
Asociación de Vecinos de Amas de Casa, encuentros festivos, excursiones, convivencias,
etc, apoyando a la gente en sus legítimas reivindicaciones, para obtener mejoras sociales
y urbanísticas. Cada hermana participaba según sus posibilidades y capacidad de
respuesta en aquel momento, respetada y animada por las demás.
1980.- Con sus aportaciones, las Hermanas Isabel C. e Izaskun G. , se ganaron a pulso a
la gente del barrio, trabajando en la oscuridad, pero intensamente en las cosas más
temporales. Así podian anunciar el significado profundo de la Navidad, y eran escuchadas
por las personas más “frias”; porque sus palabras estaban como regadas previamente por
el compromiso desinteresado, sencillo y constante.
1985. El paro sigue siendo la preocupación en el ambiente.
Pero hay que pensar en una alternativa de sociedad . En los grupos de adultos se reflexiona
sobre la alternativa en una sociedad distinta, partiendo de “Cuadernos de Cristianísmo y
Justicia”.
Las catequistas, algunas madres de familia, necesitabam y pedían formación. Ese año
tuvieron formación bíblica. Un sacerdote, un diacono y Mº Carmen Vilardell dieron los
contenidos.
1988.- “Los cristianos, los religiosos y por tanto las comunidades de inserción, tenemos hoy
un gran reto. Nuestra calidad de vida, nuestro testimonio de vida.” Este reto llevó a alguna
Hermana a cambiar de trabajo. Dejó el bien remunerado y seguro, por otro inseguro,
aceptando un sueldo mínimo interprofesional. Su trabajo fue entonces en una Cooperativa
que promovía Cáritas Diocesana.
“Nuestras acciones son muy pequeñas, pero creemos firmemente que a través de ellas día
a día…, en medio de grandes dificultades- el Reino de Dios llega”.
La Comunidad estuvo realizando tareas apostólicas y sociales hasta 1992, en que las
Hermanas tuvieron que marcharse.
La gente de Santa Coloma seguia reclamando a las Hermanas. La comunidad cristiana del
barrio valoraba lo que aportaban y veian lo necesarias que seguian siendo.
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Cartas del Buen Padre
La Solitude, 9 de abril, 1840
A la Madre San Carlos Despect
Directora General de las Hermanas de la Sagrada
Familia. Casa de San José, calle Santa Eulalia.
Bordeaux
Mi pobre hija:
Todo estaba en danza, cuando llegué a la Solitude: mi cama, mis muebles y mis libros los
habían llevado a l’Hermitage. El herrero y el carpintero debían venir, por la tarde, para dar por
terminada la obra. Yo he aplazado todo hasta mañana, por la mañana, a fin de reflexionar, esta
noche…
El Sr. Cura ha venido a verme, precisamente a l’Hermitage, donde me encuentro aún más solo.
Hace frío se masca la tristeza y, sin embargo, me ha dicho el Sr. Cura, que se comenta, en el
pueblo, que he sido nombrado Cardenal …Todos estos ruidos, todos estos cambios llenan mi
alma de una negra tristeza…
Tengo más necesidad, que nunca, de sentirme acompañado, y no tengo a nadie. Mi Obra está
dividida… No tengo a mano ni los papeles ni las personas que me son necesarias, a cada
momento… Me siento como un árbol que se arranca, de raíz, después de veinte años, para
transplantarlo en una tierra nueva…: ¡se marchita!... ¿Qué frutos puede ofrecer? ¿Quiere Dios
que me quede en l?Hermitage? ¿en la Solitude? ¿en Bordeaux?... ¿A quién pedir consejo,
cuando Dios te abandona, en esta confusión, en esta incertidumbre?...Los extraños me inspiran
poca confianza: no conocen ni la organización ni las necesidades de nuestras obras… Los
miembros de la “familia”, las personas que me rodean, y que debían apoyarme, están sujetas
a diversas emociones, que podrían desorientarlas…
¡Pobre hija! ¡Pienso en voz alta con Ud!... No hable de esto con las demás; solo serviría para
apenarlas, restarles las energías que necesitan… Pero yo tengo necesidad de volcar mi
corazón en otro, y…¿qué corazón puede comprender el mío, que el de Ud?... Sin embargo, no
se aflija… Esta mañana tengo más paz que nunca… Al llegar, el desorden del traslado, las
dificultades para comunicarme con las personas de la Solitude; el más completo aislamiento, la
lluvia, el frío, el reuma, el dolor de cabeza… Bautista siempre en la cama; Juan que viene a
reemplazarlo; la familia Bertèches que se marcha, etc… Todo esto no es alegre, y, Ud. sabe,
qué impresionable soy…
Voy a la Capilla. Oraré ante el Señor, y, quizás salga con otras disposiciones…
Adiós, hija mía. Dios me hizo comprender que había que retrasar el trabajo del herrero y del
carpintero…Mañana, los ocuparé en algo y dejaré los demás en el statu quo…
Quizás una palabra suya, diciéndome que me necesita en Burdeos, mañana por la tarde… Me
serviría de pretexto… Pero convendría una señal que me hiciese saber que su llamada es
convencional…pues sin esa aclaración, esa misma llamada sería, para mí, motivo de
preocupación… ¿Comprende Ud. a su pobre Padre?... En verdad es un pobre…un pobre
Padre…
Adiós, hija mía. Pida por mí
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P.B.N
El Buen Padre se dirige a la Madre San Carlos Despect confiándole sus sentimientos,
podríamos llamarlo “La soledad del Fundador”.
“Nadie es superior a su Maestro”
Esta máxima, que tanto se repite y que es una realidad, tiene su vigencia en todo tiempo.
El Fundador que escogió a Cristo como maestro, la experimentó.
Aquí podemos intercalar cómo el mismo, con toda claridad y nostalgia, lo va describiendo.
No lo disimula, lo expresa tal y como lo vive.
Se experimenta la torpeza en la interpretación que hace el pueblo. Hecho que perdura a
través de los tiempos. No exento de envidia. Es también algo, sobre lo que hoy tenemos
que luchar.
El Buen Padre, vivió también, la tristeza que producen las interpretaciones desviadas de
la verdad.
El, que era un discípulo auténtico, no acepta estos comentarios, pero, es humano y
necesita el diálogo y la confianza para poder expresar sus sentimientos.
Experimenta la soledad, hasta el punto en que expresa “que Dios le abandona”.
Sin embargo, después de manifestar su estado de tristeza, confía en Dios.
Olimpia Iraeta ( Secular)
Agenda
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¿QUÉ PUEDO HACER YO POR EL PLANETA?
Una reflexión a raíz de las personas o grupos que niegan que el ser
humano no sea responsable del Cambio Climático actual en nuestro
planeta.
“La extinción masiva del Pérmico-Triásico eliminó entre el 80 al 92% de las especies
terrestres y marinas que habitaban la Tierra en ese momento. Muchos investigadores
apuntaron, como principal causa a la propagación de vastas inundaciones de lava a lo que
se conoce como Las Trampas Siberianas, una gran región de roca volcánica en Siberia,
Rusia. Estas erupciones causaron tensiones ambientales, incluido el gran calentamiento
global provocado por las emisiones volcánicas de dióxido de carbono, y en consecuencia
la reducción de la oxigenación de las aguas del océano, lo que ocasionó la asfixia de la vida
marina”
“Un estudio sugiere que un período de invierno volcánico habría bajado drásticamente las
temperaturas en todo el mundo. Posiblemente adelantándose al periodo más largo de
calentamiento que seguiría. “Los aerosoles atmosféricos de ácido sulfúrico producidos por
las erupciones pueden haber sido la causa de un enfriamiento global rápido de varios
grados, antes del gran calentamiento observado en el intervalo de extinción masiva del
Pérmico-Triásico”
Las erupciones de Las Trampas Siberianas no fueron la única causa de la extinción masiva
del periodo Pérmico-Triásico, y que los efectos ambientales de las erupciones volcánicas
en el sur de China y en otros lugares podrían haber jugado un papel vital en la desaparición
de las especies”
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Esto y otros muchos razonamientos que son ciertos pero no únicos son los
que esgrimen los negacioncitas del Cambio Climático. No se dan cuenta o no
quieren hacerlo de la influencia que el hombre está causando en este proceso
que nos lleva a la destrucción de esta nuestra casa, que no podrá ser
remplazada por ninguna otra, si es destruida por nuestra desidia y falta de
cuidado. Y al hilo de esta pequeña reflexión adjunto un extracto de una
publicación en la revista Nacional Geographic, que me ha parecido
interesante.
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Un poco de humor
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Ven, Espíritu Santo.
Tú que suscitas lenguas nuevas y pones
en los labios palabras de vida, líbranos de
convertirnos en una Iglesia de museo,
hermosa pero muda, con mucho pasado y
poco futuro.
Ven en medio de nosotros, para que en la
experiencia sinodal no nos dejemos
abrumar por el desencanto, no diluyamos
la profecía, no terminemos por reducirlo
todo a discusiones estériles.
Ven, Espíritu Santo de amor, dispón
nuestros corazones a la escucha.
Ven, Espíritu de santidad, renueva al
santo Pueblo fiel de Dios.
Ven, Espíritu creador, renueva la faz de la
tierra.