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Evaluación 1 de Macroeconomía 1

Reglas de juego

1) El trabajo se puede presentar en grupos de dos estudiantes. Quien lo quiera


presentar de manera individual no tiene ningún inconveniente.
2) La entrega se debe realizar el 12 de noviembre de 2021. (A lo largo de las 24 horas
disponibles)
3) Deben enviar el archivo de las respuestas al correo de la monitor.

Puntos:

1) El artículo que se presenta a continuación propone una renta básica para los hogares
pobres y vulnerables del país, $500000 por hogar. El monto debe girarse
mensualmente durante la crisis. Analice con el modelo de oferta y demanda
agregada keynesiano visto en clase, los efectos de esta política del gobierno.
Suponga que dicha política se financia con emisión monetaria.
2) Determine el monto total del gasto que tiene que hacer el gobierno a partir de la
renta básica propuesta por Ocampo. Y determine el % que representa en términos
del PIB de 2019. Suponga que la crisis del Covid19 se extiende por dos años. Es
decir, 24 meses. (Para estimar el gasto debe averiguar el número de hogares pobres
y vulnerables en el país. Dicha información la puede buscar en la red y en las
instituciones del Gobierno Nacional, DANE, DNP, etc ).
3) El ingreso solidario que el gobierno nacional transfiere a las familias vulnerables
hace parte del PIB. Argumente su respuesta con los conceptos vistos en clase.

Ideas Para Que Colombia Salga Adelante (Revista Semana,


https://www.semana.com/nacion/articulo/la-agenda-de-la-reactivacion/202000/)

“A diseñar una renta básica”: José Antonio Ocampo, economista

Por José Antonio Ocampo, economista.

La agenda de reactivación económica debe ser integral y ambiciosa. Debe contribuir, en


particular, a superar tres problemas básicos que ha generado la crisis: la reducción de los
ingresos de los hogares pobres y vulnerables, el colapso del empleo y la fuerte caída de
las exportaciones petroleras. Las acciones en estos campos tienen que estar
complementadas con mecanismos de apoyo a las empresas, especialmente las pequeñas, y
un complejo saneamiento fiscal.

Sobre el primero de estos temas, la combinación de familias en acción e ingreso solidario


ha apoyado a un conjunto amplio de hogares pobres y vulnerables. Los datos oficiales de
pobreza tardarán en conocerse, pero las proyecciones que existen indican que
retrocederemos una década en este campo. Sin embargo, los montos de los apoyos a
estos hogares son muy reducidos. La mejor solución es el diseño de un sistema de renta
básica para hogares pobres y vulnerables de mayor tamaño, en torno a los 500.000
pesos por hogar mientras dure la crisis.

Si bien la recesión del país es fuerte, no es de las peores de América Latina, pero el
colapso del empleo sí lo es: una pérdida de más de cuatro millones de puestos de
trabajo y una tasa de desempleo nacional del 20 por ciento. La reactivación generará
empleos, como lo demuestra que la pérdida de empleos en junio y julio es menor que en
abril. Pero se necesitan otras acciones: programas de empleo de emergencia,
especialmente para las mujeres, que se realicen en conjunto con los gobiernos
municipales, inversión en infraestructura que contribuya tanto al empleo como a la
reactivación, y el subsidio a la creación de empleo al cual me refiero más adelante.

La caída de los ingresos petroleros es otro impacto dramático de la crisis. No se ha


reflejado en un deterioro de la balanza de pagos, porque las importaciones también han
colapsado. Sin embargo, cuando se reactiven las importaciones, el deterioro de la
cuenta corriente de la balanza de pagos, que ya era alto antes de la crisis, puede
frenar la reactivación. Por ese motivo, la promoción de exportaciones no mineras debe ser
una tercera área de atención prioritaria del gobierno. La estrategia exportadora ambiciosa
que se requiere debe estar articulada, además, con una amplia política de desarrollo
productivo y con un salto en materia de inversión en ciencia y tecnología.

Para apoyar la reactivación del empleo y de la actividad productiva necesitamos tener un


sector empresarial que contribuya a esos resultados. Es necesario contar, por lo tanto, con
políticas específicas de apoyo a las empresas, que deben incluir a las de sectores
estratégicos (como el transporte aéreo y los sistemas de transporte masivo), pero
especialmente a las pequeñas empresas. En este campo se podría extender el subsidio al
empleo, orientado ahora a nuevos puestos de trabajo, pero también una política de crédito,
de apoyo a la capitalización de las empresas y la plena ejecución del programa de garantías
crediticias. Una alternativa es otorgar el subsidio a la creación de empleo a través de
créditos parcialmente no reembolsables y promover a través de nuestros bancos de
desarrollo fondos de capital, que inviertan incluso en empresas pequeñas.

Por último, la situación fiscal debe ser objeto de atención especial, ya que la deuda
pública se elevará a los niveles más altos de la historia. Las necesidades de gasto público
asociadas a los temas mencionados previamente indican que el ajuste fiscal debe hacerse
por la vía tributaria. Por eso se deben postergar o eliminar los beneficios tributarios
otorgados el año pasado, crear algunos impuestos de emergencia (a las utilidades de
empresas que se han beneficiado con la crisis, a salarios altos y a transacciones digitales) y,
especialmente, abocarse a una reforma tributaria estructural en 2021. Esta última debe
eliminar o reducir significativamente los beneficios tributarios del impuesto de renta,
algunos del IVA y a restablecer un impuesto al patrimonio de mayor alcance.

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