Resumen: El camino a Cristo. Capitulo 1. Amor Supremo. Por medio de la naturaleza Dios mani+esta su grande amor hacia nosotros de manera visual y tangible. Por medio de su palabra nos muestra su amor a través de la historia de la humanidad. Mas sin embargo, fue la encarnación de su amado Hijo quien nos mostro la evidencia suprema de “Dios con nosotros”. Jesús hizo manifestó su amor por medio de sus principios prác2cos y vivos, también nos mostró una clara forma de relación con los diversos 2pos de personas y en medio de un mundo agobiado por el maligno, sanó las dolencias de los hombres. Y cuando hubo realizado toda su obra de amor, se dio a sí mismo para garan2zar nuestro rescate, resurrección y acceso al cielo por medio de Él, a quien rendimos honra y gloria. Capitulo 2. La más urgente necesidad del hombre. Era perfecto y estaba en armonía con Dios. El propósito del tentador era contrariar el plan que Dios había tenido al crear al hombre y llenar la 2erra de miseria y desolación. El pecador no podría ser feliz en la presencia de Dios; le desagradaría la compañía de los seres santos. La gloria de Dios sería para ellos un fuego consumidor. La mís2ca escalera de su sueño representaba a Jesús, el único medio de comunicación entre Dios y el hombre. Al caer, el hombre se apartó de Dios: la 2erra fue cortada del cielo. Capitulo 3. El poder misterioso que convence. Su arrepen2miento era sincero y profundo. En la vida del Salvador quedaron perfectamente ejempli+cados los principios de la ley de Dios y el amor a Dios y al hombre. Hay ayuda para nosotros solamente en Dios. Toda indulgencia pecaminosa fortalece la aversión del alma hacia Dios. Estudiemos la Palabra de Dios con oración. Cuanto más plenamente comprendemos el amor de Dios, más nos percatamos de la pecaminosidad del pecado. Capitulo 4. Para obtener la paz interior. Debes entonces buscar el perdón de Dios, porque el hermano a quien has ofendido pertenece a Dios y al perjudicarlo has pecado contra su Creador y Redentor. La confesión de nuestros pecados, ya sea pública o privada, debe ser de corazón y voluntaria. Su ingra2tud oprimía sus almas y los separaba de Dios. Dios no acepta la confesión sin sincero arrepen2miento y reforma. Sus confesiones no son sinceras ni de corazón. Capitulo 5. La consagración. La promesa de Dios es: "Me buscaréis y me hallaréis cuando me buscaréis de todo vuestro corazón" Por naturaleza estamos enemistados con Dios. Dios quiere sanarnos y libertarnos. Dios no fuerza la voluntad de sus criaturas. Los tesoros son el ídolo de muchos. El Hijo de Dios dio todo para nuestra redención: la vida, el amor y los sufrimientos. Dios ha dado a los hombres el poder de elegir; depende de ellos el ejercerlo. No llegan al punto de dar su voluntad a Dios. No eligen ser cris2anos ahora. Al dar nuestra voluntad a Cristo. Capitulo 6. Maravillas por la fe. Nuestros mo2vos son impuros, nuestro corazón está corrompido. Hemos resuelto entregarnos a Dios. Contó en la palabra de Cristo y Dios le dio el poder. Más Dios promete hacer todo esto por ti mediante Cristo. Confiesas tus pecados y te entregas a Dios. Tan ciertamente como haces esto, Dios cumplirá su palabra contigo. Pero es la voluntad de Dios limpiarnos de pecado, hacernos hijos suyos y ponernos en ac2tud de vivir una vida santa. Alejar la sospecha de que las promesas de Dios no son para nosotros. Son para todo pecador arrepen2do. Dios no nos trata como los hombres se tratan entre sí. Satanás está pronto para quitarnos la bendita seguridad que Dios nos da. Capitulo 7. Como lograr una magni+ca renovación. Un corazón egoísta puede ejecutar obras generosas. Era su delicia hacer la voluntad de Dios. Se encuentra solamente en el corazón donde Cristo reina. Más aún, Cristo cambia el corazón. Habita en nuestro corazón por la fe. Capitulo 8. El secreto del crecimiento. La vida en Cristo es una vida de reposo. Cristo en su abnegación, Cristo en su humillación, Cristo en su pureza y san2dad, Cristo en su incomparable amor: esto es lo que debe contemplar el alma. Capitulo 9. El gozo de la colaboración. Dios es la fuente de vida, luz y gozo para el universo. Con espíritu amoroso podemos ejecutar los deberes más humildes de la vida...... Si tenemos el amor de Dios en nuestro corazón, se manifestará en nuestra vida. Capitulo 10. Los 2 lenguajes de la providencia. Dios nos habla también en su Palabra. Llenar nuestro corazón de las palabras de Dios. El Espíritu Santo exalta y glorifica al Salvador. Capitulo 11. ¿Podemos comunicarnos con Dios? La oración secreta sólo debe ser oída del que escudriña los corazones: Dios. Tranquila pero fervientemente se extenderá la oración hacia Dios. Dios es el cas2llo de nuestra fortaleza. De este modo anduvo Enoc con Dios. Presentar a Dios nuestras necesidades, gozos, tristezas, cuidados y temores. Nuestro Dios es un Padre 2erno y misericordioso. Capitulo 12. Que hacer con la duda. Sin embargo, Dios no ha quitado nunca toda posibilidad de duda. La Palabra de Dios, como el carácter de su divino Autor, presenta misterios que nunca podrán ser plenamente comprendidos por seres +nitos. Pero no tenemos razón para dudar de la Palabra de Dios porque no podamos entender los misterios de su providencia. No están dispuestos a esperar pacientemente hasta que Dios juzgue oportuno revelarles la verdad. Demos gracias a Dios de que no sea así. Dios quiere que aun en esta vida las verdades de su Palabra con2núen siempre revelándose a su pueblo. No podemos llegar a entender la Palabra de Dios sino por la iluminación del Espíritu por el cual fue dada la Palabra. “Las cosas de Dios nadie las conoce, sino el Espíritu de Dios " “porque el Espíritu escudriña todas las cosas, y aun las cosas profundas de Dios " Capitulo 13. La fuente de la felicidad. Los hijos de Dios están llamados a ser representantes de Cristo y a mostrar siempre la bondad y la misericordia del Señor. Satanás siempre procura presentar la vida religiosa como una vida de 2nieblas. Gracias a Dios que nos ha presentado hermosísimos cuadros. Su corazón era un manan2al de vida