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Análisis Interpretativo

República Dominicana tiene ventajas competitivas para potenciar sus exportaciones de


productos frescos, según las conclusiones del “Análisis de la cadena de frio de la República
Dominicana”, auspiciadas por el programa exportando calidad e inocuidad, financiadas por el
Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA).
Entre estas ventajas del país se destacan su ubicación geográfica, sus puertos, aeropuertos y
correteras, así como la participación de los diferentes actores de la producción y el comercio
en la cadena de frio.
Sin embargo, el país necesita mejorar la coordinación entre todos los eslabones de la cadena
de frio, fortalecer algunos conocimientos sobre esta, y buscar soluciones a temas relativos a la
calidad y el costo de la electricidad, de acuerdo con el análisis elaborado por técnicos de la
alianza global de cadena frio, con el apoyo del Consejo Nacional de Competitividad (CNC).
En la parte de zonas francas, son casos de Éxitos, demuestran la fortaleza del sector de zona y
de su importancia para la República Dominicana en términos de exportación de productos y
como se han ido diversificando al mismo tiempo que las tecnologías han cobrado importancia
en el mundo. La estabilidad política y económica, junto a la posición geográfica privilegiada,
sus incentivos y marcos legales favorables para ese tipo de inversión y el DRCAFTA.
Nuestro país, que en su momento fuera eminentemente agrícola, ha sufrido una
transformación en la que, excepto por el arroz y las habichuelas, se ha venido dejando de lado
el tema de la seguridad alimentaria y se ha transformado en una economía de servicios
(Turismo) y en cierta medida de manufactura (Zona Franca).
Las grandes empresas transnacionales establecidas en zonas francas del país han estado
desarrollando estrategias de eficiencia desde 2003 para mejorar el posicionamiento del país y
sus niveles de exportación, junto a otros exportadores de la región.
El banco central informo que la cuenta corriente de la balanza de pagos de República
Dominicana, durante el periodo enero-junio 2020, registro un déficit de $756 millones como
resultado de la reducción en los ingresos del sector turístico, debido a la paralización de
actividades productivas por la pandemia de coronavirus (COVID-19)

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