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   CARACAS, 28 Mar. (Notimérica) -

Francisco de Miranda fue un político, militar, diplomático, escritor y


humanista, que junto al argentino José de San Martín y el
venezolano Simón Bolívar, fue el gran impulsor de la independencia
iberoamericana.

El 'Precursor de la Emancipación Americana' nació el 28 de marzo


de 1750 en Caracas, cuando el actual territorio venezolano formaba
parte del Imperio Español. También conocido como 'El Primer
Venezolano Universal' y 'El Americano más Universal', Miranda fue
partícipe de la Independencia de Estados Unidos, de la Revolución
Francesa y posteriormente de la Independencia de Venezuela.

Sus orígenes parten de la más pura humildad. Su padre, Sebastián


de Miranda nació en Tenerife, una de las Islas Canarias de España,
en 1721. Por razones de nacimiento, se le acusaba de mestizaje
que, en la mentalidad de la época, tenía una consideración social
inferior por los estatutos de limpieza de sangre. La familia viajó a
Venezuela y en Caracas nació Francisco de Miranda, el primero de
los nueve hijos que tuvo con su esposa, la caraqueña de
ascendencia canaria Francisca Rodríguez de Espinosa.

A pesar de los malos inicios de la formación familiar, que era


considerada inferior por la no pureza española de su ascendencia,
con el tiempo comenzaron a gozar de cierto estatus social debido a
las actividades comerciales del patriarca. Los orígenes de los
miembros de la familia siempre estuvieron en entredicho y fueron
objeto de burlas y odio por parte de los mantuanos, los blancos
criollos perteneciente a la aristocracia local.

Al padre de Francisco de Miranda no le limitaron las restricciones de


la pureza sanguínea entre las que se encontraba la prohibición a la
educación y a la universidad de sus hijos. Sin embargo, en enero de
1762 el primogénito comenzó sus estudios en la Universidad de
Caracas, donde estudió latín durante dos años e hizo sus primeras
incursiones en la gramática del humanista español Antonio de
Nebrija y catecismo del jesuita Jerónimo Martínez de Ripalda.
REAL EJÉRCITO ESPAÑOL

No obstante, decidió marchar a España debido a la situación


irreconciliable entre los mantuanos y su familia. Caracas le quedaba
pequeña y el Real Ejército Español era una buena salida para
demostrar su valía personal y profesional.

Su participación en acontecimientos históricos es digna de


mencionar: la Guerra de Independencia de Estados Unidos, la
Revolución Francesa y las Guerras de Independencia
Hispanoamericanas. Miranda pisó todos los continentes del planeta,
excepto Asia y Oceanía, y se relacionó con las personalidades más
influyentes y relevantes de las altas esferas.

Demostró amplios conocimientos en todas las tierras que pisaba y


continuó estudiando en Madrid, lugar del que le atrajo la diversidad
cultural y académica promulgada por el entonces jefe de Estado
Carlos III.

Mientras tanto, profundizó su experiencia en materia militar, que


desarrolló de tal forma que fue nombrado capitán en el Ejército Real
de España. Su carrera militar despegó cuando fue asignado al
Regimiento de Infantería de la Princesa.

Una vez destinado a Cádiz (España), se involucró en la Guerra de


Independencia de Estados Unidos, viajando a La Habana y
participando activamente en la batalla de Pensacola, que le llevó a
ser ascendido a teniente coronel. Así, se trasladó a Estados Unidos,
lugar donde conoció Nueva York, Boston o Filadelfia donde, de
nuevo, consiguió sumar bagaje intelectual.
Al abandonar Estados Unidos, Miranda viajó a Inglaterra y a otros
países europeos como Bélgica, Alemania o Polonia para afianzar
relaciones con los personajes más importantes del continente.

INDEPENDENCIA DE VENEZUELA

Estando en Inglaterra, Miranda aceptó colaborar en una nueva


expedición formada por el gobierno británico para liberar a los
pueblos americanos del dominio español. A pesar del odio eterno
que se habían profesado la corona británica y la española, los
"lords" decidieron que era mejor desplazar la armada que iba a
invadir el Caribe hacia Portugal para apoyar a sus antiguos
enemigos hispanos, que estaban siendo invadidos por Napoleón.

Desesperado por favorecer la sublevación de Hispanoamérica


--principalmente de Venezuela--, el 'Precursor' comenzó a enviar
cartas a Caracas instando a sus gobernantes a levantarse en armas
contra el rey español Carlos IV, quien había perdido todo su poder.

En respuesta, Venezuela envió a Londres una serie de


comisionados entre los que destacaba Simón Bolívar. El proceso de
separación de España de las provincias de Venezuela se inició el 19
de abril de 1810 y la independencia fue declarada oficialmente el 5
de julio de 1811, proclamándose así la Primera República de
Venezuela.

Sin embargo, Miranda no fue tomado en cuenta para formar parte


de las nuevas autoridades ejecutivas, y se recurrió a él únicamente
para hacer frente al ejército español. La República venezolana puso
a Miranda al frente de las fuerzas rebeldes y le otorgó plenos
poderes para detener el contraataque español del 23 de abril de
1812.

No obstante, sin medios para organizar un ejército eficaz, Miranda


tomó la decisión de rendirse ante las milicias españolas por la caída
de la ciudad venezolana de Puerto Cabello, defendida por Bolívar.

Por este motivo, el armisticio conocido como la Capitulación de


San Mateo, firmada el 24 de julio de 1812 entre el Comandante del
ejército español Domingo de Monteverde y Antonio Fernández de
León, en representación del propio Miranda, fue el último acto
político del 'Precursor'.

Con este hecho, entendido por muchos como un acto de traición,


Venezuela volvería a manos del Ejército Real Español y Simón
Bolívar, comandante del Castillo de Puerto Cabello, arrestó a
Miranda.

Desacreditado por sus errores políticos y militares, y enfrentado


tanto a los republicanos radicales como a los terratenientes
conservadores, Miranda fue entregado por Bolívar al ejército
español.

Finalmente, tras una larga vida dedicada a su tierra, el precursor


de la independencia venezolana murió solo y traicionado por sus
compatriotas en una prisión en Cádiz el 14 de julio de 1816.

Sin lugar a dudas, Francisco de Miranda fue un personaje digno de


ocupar cualquier tomo de coleccionista en los libros de historia. Gran
pensador, inquieto por naturaleza y conocedor de varias lenguas
modernas, llevó a muchos rincones del mundo su visión de una
Venezuela libre del poder español, a pesar de que estos logros
nunca le fueron reconocidos de forma plena.

En 1810, el gobernador español Vicente Emparán fue destituido


como Capitán General de la Capitanía General de Venezuela (una
región administrativa colonial que se había establecido en el
Virreinato de la Nueva Granada en 1777, para dar más autonomía a
las provincias de Venezuela). Se estableció una Junta en Caracas.
En toda Venezuela se dieron diferencias de opinión sobre si las
distintas provincias debían seguir su ejemplo y establecer sus
propias Juntas; si debían apoyar a la Junta de Caracas o si deban
seguir siendo leales a España. Estas diferencias dieron lugar a una
guerra civil.

En ese momento, la Junta de Caracas proclamó estar actuando en


nombre de Fernando VII, el rey español que había abdicado
después de la invasión napoleónica de la Península española. Sin
embargo, una facción que estaba a favor de la independencia iba a
convertirse en dominante y dirigir al movimiento independentista. Al
frente de esta campaña de independencia estuvieron Francisco de
Miranda y Simón Bolívar, militares que habían vivido en Europa y
habían sido influenciados por las ideas de la Ilustración y la
Revolución Francesa.

Miranda usó la bandera tricolor en la campaña de independencia. La


bandera forma la base de la bandera venezolana actual, que usa los
mismos tres colores con la adición de estrellas y un escudo de
armas.

En 1811, Francisco Miranda convenció al Congreso Nacional de


Venezuela a declarar la independencia. Muchas regiones en
Venezuela declararon su independencia el 5 de julio de 1811 y se
redactó una Constitución poco después. Sin embargo, también hubo
regiones que se negaron a unirse a la república. Estas incluyeron a
las ciudades de Coro, Maracaibo, Guayana y Valencia, que
inicialmente se unieron, pero luego cambiaron de parecer. Por lo
tanto, a pesar de la proclamación de la independencia, todavía había
una guerra interna en apogeo. La Primera República de Venezuela
se perdió en 1812, después de la Batalla de La Victoria y un
terremoto en Caracas. Francisco Miranda y Simón Bolívar
encabezaron una campaña para ganar el control de Venezuela una
vez más, y la Segunda República de Venezuela se estableció en
1813. Esto fracasó nuevamente, debido a rebeliones locales y a una
reconquista realista española.

Daniel Gutiérrez habla sobre la declaración de la independencia de


Venezuela en el podcast anterior.

Sebastián Francisco de Miranda y Rodríguez Espinoza, conocido


como Francisco de Miranda (Caracas, 28 de marzo de 1750-San
Fernando, 14 de julio de 1816), fue un político, militar, diplomático,
escritor, humanista e ideólogo venezolano considerado El Precursor
de la Emancipación Americana contra el Imperio español. Conocido
como El Primer Venezolano Universal y El Americano más
Universal, participó en la Independencia de los Estados Unidos, la
Revolución francesa, acontecimiento del cual fue protagonista
destacado por lo que le fue otorgado el título de Héroe de la
Revolución, y posteriormente en la Independencia de Venezuela,
siendo líder del Bando Patriota y gobernante de la Primera
República de Venezuela durante esta última, en calidad de Dictador
Plenipotenciario y Jefe Supremo de los Estados de Venezuela.1

Destacó en la política como un firme defensor de la independencia y


la soberanía de las naciones en el ámbito internacional. Militó con
los girondinos en Francia, fue firmante del Acta de la Declaración de
Independencia de Venezuela e impulsor y líder de la Sociedad
Patriótica. También fue el creador del proyecto geopolítico conocido
como Gran Colombia que Simón Bolívar trataría de llevar a cabo tras
la liberación de los territorios que hoy conforman Colombia, Panamá,
Ecuador y Venezuela en 1826, aspirando a unificarlos en una sola
nación.

Al militar en las filas de los ejércitos español y francés, alcanzó los


rangos de coronel y mariscal, respectivamente. Además, obtuvo el
grado de coronel en el ejército ruso, concedido por Catalina II la
Grande, y fue el primer comandante en jefe de los ejércitos
venezolanos, ostentando el título de generalísimo. Su carrera militar
contempla su participación en cuatro contiendas: el sitio de Melilla
(1774-1775) y la Invasión española de Argel de 1775 en el norte de
África, la Guerra de Independencia Estadounidense, las Guerras
Revolucionarias Francesas y la Guerra de Independencia de
Venezuela. Entre sus gestas militares destacan su actuación en el
sitio de Melilla, la batalla de Pensacola en Estados Unidos y la
batalla de Valmy en Francia. Miranda fue combatiente destacado en
tres continentes: África, América y Europa.2

A pesar de haber formado parte de tantos procesos revolucionarios


y gubernamentales en el ámbito internacional, fracasó a la hora de
poner en práctica sus proyectos en su propio país, Venezuela. No
obstante, su ideal político perduró en el tiempo y sirvió de base para
la fundación de la Gran Colombia, mientras que sus ideas
independentistas influyeron en destacados líderes de la
«Emancipación Americana», como Simón Bolívar en Venezuela y
Bernardo O'Higgins en Chile.3

Su nombre está grabado en el Arco del Triunfo de París. Su retrato


forma parte de la Galería de los Personajes en el palacio de
Versalles; su estatua se encuentra frente a la del general Kellerman
en el Campo de Valmy, Francia.
Combatiente destacado en tres continentes

Francisco de Miranda fue el primero en traer la bandera de


Venezuela a las costas de América en el año 1804, pocos años
antes de comenzar la gesta independentista, liderada por el
Libertador Simón Bolívar, que llevó a la emancipación de Venezuela.

Destacó en la política como un firme defensor de la independencia y


la soberanía de las naciones a nivel internacional. Militó en el grupo
político moderado conocido como Girondino en Francia, fue firmante
del Acta de la Declaración de Independencia de Venezuela, impulsor
y líder de la Sociedad Patriótica así como también fue el creador del
proyecto geopolítico conocido como Gran Colombia, que Simón
Bolívar, trataría de llevar a cabo, tras la liberación de Colombia,
Ecuador y Venezuela, en 1826 aspirando unificarlos en una sola
nación.

Militar prodigioso, formó parte de las filas del Ejército Español y del
Ejército Francés, alcanzando los rangos de Coronel y Mariscal
respectivamente, además detentó el rango de Coronel en el Ejército
Ruso, concedido por Catalina II la Grande y fue el primer
Comandante en Jefe de los Ejércitos Venezolanos, ostentando el
título de «Generalísimo». Su carrera militar contempla su
participación en cuatro guerras, las Guerras Coloniales en
Marruecos, la Guerra de Independencia Estadounidense, la Guerras
Revolucionarias Francesas y la Guerra de Independencia de
Venezuela, incluyéndose brillantes hazañas militares, como su
desempeño en el Sitio de Melilla, su victoria en la Plaza de
Pensacola (Florida Occidental) y su ofensiva en la Batalla de Valmy.
De esta forma, Miranda en su carrera militar, fue combatiente
destacado en tres continentes: África, Europa y América.
Viajando y luchando en pro de la independencia y la soberanía de
las naciones

Gran parte de su vida la pasó viajando y participando en conflictos


armados al servicio de diversos países.

A pesar de haber formado parte de tantos procesos revolucionarios


y gubernamentales a nivel internacional, Miranda fracasó a la hora
de poner en práctica sus proyectos en su propia nación.

No obstante; su ideal político perduró en el tiempo y sirvió de base


para la fundación de la Gran Colombia, mientras que sus ideas
independentistas influyeron en destacados líderes de la
Emancipación Americana como Simón Bolívar y Bernardo O’Higgins.

Su nombre está grabado en el Arco del Triunfo de París. Su retrato


forma parte de la Galería de los Personajes en el Palacio de
Versalles; su estatua se encuentra frente a la del general Kellerman
en el Campo de Valmy, Francia.

Proyecto de independencia

Con la idea de materializar su primer proyecto de Independencia, en


abril de 1782 participa en la expedición naval española que sale de
Cuba para conquistar las islas británicas de las Bahamas; de ahí se
traslada a Cabo Francés (Haití), donde tendrá que enfrentar por
primera vez las denuncias, que entonces lo acusaban de haber
permitido la visita del General inglés Campbell a las fortificaciones
de La Habana (capital cubana) en junio de 1781, por lo que es
arrestado y posteriormente liberado, gracias a su amigo Cajigal.

De regreso a La Habana tiene que esconderse para no ser sometido


a prisión, embarcándose hacia Estados Unidos donde pasará 18
meses.

El 2 de febrero de 1806, parte de Nueva York (noreste) a bordo del


Buque Leander con una tropa de 200 hombres para emprender la
gesta libertaria que lo llevaría a la Vela de Coro (noroeste
venezolano) el 3 de agosto del mismo año.

A su llegada a Venezuela, libra una importante batalla donde vence


a las tropas españolas e iza por primera vez en la Patria la bandera
tricolor, como símbolo de libertad de los pueblos de América.

Condena eterna

Francisco de Miranda es trasladado desde el puerto de La Guaira


(norte venezolano), hasta el Castillo San Felipe de Puerto Cabello
(centro-norte), donde escribió, desde su celda en 1813, un memorial
a la Real Audiencia de Caracas (capital), en la que exigía el
cumplimiento de la capitulación de San Mateo.

Sin embargo, el 4 de junio de ese año lo mandaron hasta la fortaleza


de El Morro en Puerto Rico. De allí a un calabozo en Cádiz, España,
donde muere, a los 66 años de edad, luego de intentar escapar.
En la actualidad ha sido imposible reconocer sus restos, pues al
fallecer fue enterrado en una fosa común en el cementerio del
Arsenal de la Carraca (España). No obstante, en Venezuela, se le
dedicó un mausoleo en el Panteón Nacional de Venezuela.

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