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ARTICULACIONES CRÁNEO – CERVICALES

La función de la columna vertebral en su segmento cervical está íntimamente ligada a los órganos de
los sentidos ubicados en la cabeza, en especial con la visión y el equilibrio corporal. La gran
movilidad de la columna cervical responde a la necesidad de aprovechar al máximo la visión
estereoscópica con el fin de dirigir la mirada en el espacio para que luego el conjunto de músculos
que actúa sobre el bulbo ocular realice los ajustes necesarios para un correcto enfoque del objeto
visualizado.

En la columna vertebral encontramos articulaciones fibrosas, cartilaginosas y sinoviales, siendo en el


sector cervical donde las articulaciones sinoviales adquieren gran importancia. La articulación
atlantooccipital privilegia los movimientos de flexión y extensión de la cabeza siendo las rotaciones
secundarias. En cambio la articulación atlantoaxial mediana tiene como principal movimiento la
rotación de la cabeza, la que arrastrando al atlas lo hace girar en relación al diente del axis. La
inclinación de la columna cervical y por ende de la cabeza se establece en el segmento inferior de la
columna cervical por la sumatoria de los movimientos de las articulaciones cigapofisiarias.

ARTICULACIONES DEL SEGMENTO CERVICAL DE LA COLUMNA VERTEBRAL.

1.- FIBROSAS:

a) Ligamentos que unen los procesos espinosos entre si, a saber los ligamentos interespinosos y el
supraespinoso, éste ultimo de gran desarrollo en el sector cervical constituyendo el ligamento
cervical posterior o nucal.

b) Ligamentos amarillos, ubicados entre las láminas de dos vértebras.

c) Ligamentos atlantoaxiales: Corresponden a dos láminas fibrosas, una anterior y otra posterior. La
anterior (ligamento atlantoaxial anterior) se extiende del borde inferior del arco anterior del atlas a la
cara anterior del cuerpo del axis. La posterior (ligamento atlantoaxial posterior) se extiende del borde
inferior del arco posterior del atlas al borde superior de las láminas del axis y base de su proceso
espinoso, tiene la misma significación que los ligamentos amarillos.

d) Ligamentos atlantooccipitales: Son dos membranas que unen el occipital al atlas. La membrana
atlantooccipital anterior y posterior.

La membrana atlantooccipital anterior se extiende entre el borde anterior del agujero magno al borde
superior del arco anterior del atlas, relacionándose por posterior con las articulaciones
atlantooccipitales y con el ligamento longitudinal anterior por anterior.

La membrana atlantooccipital posterior se extiende entre el borde posterior del agujero magno y el
borde superior del arco posterior del atlas, lateral anterior a ella se ubican las articulaciones
atlantooccipitales. De interés en ésta membrana es un orificio que permite el paso de la arteria
vertebral, que busca ingresar al cráneo por el agujero magno.

e) Ligamentos Occipitoodontoideos: Extendidos entre el occipital y el diente del axis. Se encuentran


situados entre la membrana atlantooccipital anterior y el ligamento cruciforme que se ubica posterior
a ellos. Se reconoce un ligamento mediano y dos laterales. El mediano llamado ligamento del vértice
del diente del axis (ligamento apical) se extiende desde el vértice del diente al borde anterior del
agujero magno. Los laterales o ligamentos alares, más gruesos que el apical, van de los bordes
laterales del diente del axis a la cara medial de los cóndilos del occipital.

f) Membrana tectoria: Corresponde a un ligamento occipitoaxoideo. Se extiende entre el borde


anterior del agujero magno y la cara posterior del cuerpo del axis. Por anterior se relaciona con el
ligamento cruciforme y por posterior con el ligamento longitudinal posterior que lo separa del canal
vertebral.

2.- CARTILAGINOSAS:

Establecen las articulaciones intervertebrales clasificadas como de tipo cartilaginoso subtipo sínfisis.
En este caso las superficies articulares están formadas por las caras superior e inferior de los
cuerpos vertebrales unidas por un disco intervertebral. Estas articulaciones se encuentran reforzadas
por anterior y posterior por los ligamentos longitudinales anterior y posterior.

3.- SINOVIALES:

a) Articulaciones cigapofisiarias: Corresponden a articulaciones del tipo sinovial subtipo planas. Las
superficies articulares están representadas por los procesos articulares superiores e inferiores de las
vértebras, los cuales varían en su orientación de acuerdo al segmento de la columna. Presentan una
cápsula con forma de manguito reforzada por ligamentos accesorios.

b) Articulación atlantoaxial lateral: Corresponde a la articulación cigapofisiaria entre el atlas y el axis,


por tanto se clasifica como del tipo sinovial subtipo plana. Las superficies articulares por parte del
atlas se ubican por inferior de las masas laterales y están orientadas hacia inferior y medial, el axis
presenta sus carillas articulares ubicadas lateralmente al diente del axis y orientadas hacia superior y
lateral. Estas superficies articulares se encuentran revestidas por un cartílago articular que hace que
presenten una forma convexa en todo sentido.

Los medios de unión están representados por una cápsula fibrosa reforzada por un ligamento
atlantoaxial anterior extendido del borde inferior del arco anterior del atlas hasta la cara anterior del
cuerpo del axis y un ligamento atlantoaxial posterior extendido desde el arco posterior del atlas a la
base del proceso espinoso y borde superior de las láminas del axis, tendría la misma significación
que los ligamentos amarillos.

c) Articulaciones uncovertebrales: Se establecen entre los procesos semilunares de los cuerpos de


las vértebras cervicales. Se clasifican como sinoviales subtipo planas. Cuentan con una cápsula
articular reforzada por anterior.

d) Articulación atlantoaxial mediana: Se establece entre el arco anterior del atlas y el diente del axis.
El diente del axis se encuentra contenido en un anillo osteofibroso formado por el arco anterior del
atlas y por el ligamento transverso del atlas por posterior. Corresponde a una articulación del tipo
sinovial, subtipo trocoide. La superficie articular por parte del atlas corresponde a una carilla cóncava
de forma elíptica ubicada medianamente en la cara posterior de su arco anterior, por parte del axis se
opone una carilla convexa también elíptica ubicada en la cara anterior del diente del axis, ambas
superficies se presentan revestidas por cartílago. Por otro lado en la cara posterior del diente del axis
encontramos una carilla de forma elíptica orientada verticalmente, también revestida por cartílago
articular a la que se opone el ligamento transverso del atlas que corresponde a una gruesa lámina
fibrosa, aplanada en sentido anteroposterior y que se extiende entre dos tubérculos ubicados en las
caras mediales de las masas laterales del atlas, ésta lámina se curva para adaptarse a la cara
posterior del diente del axis presentando una superficie revestida de cartílago. De la parte mediana
de éste ligamento se desprenden un fascículo longitudinal superior y un fascículo longitudinal inferior.
El superior se fija en la parte más inferior del clivus y el inferior en la cara posterior del cuerpo del
axis. Así se constituye el llamado ligamento cruciforme.

Como medios de unión entre las distintas superficies articulares se establecen dos cápsulas
articulares con sus respectivas sinoviales.

El principal movimiento de ésta articulación es la rotación que realiza el atlas alrededor del diente del
axis. Dicha rotación se da cuando el atlas es arrastrado por el occipital en los movimientos de
rotación de la cabeza.

Asociadas a ésta articulación encontramos las sindesmosis que se establecen entre el diente del axis
y el occipital, a saber, los ligamentos del vértice del diente del axis (apical) y alares.

e) Articulaciones atlantooccipitales: Corresponden a dos articulaciones del tipo sinovial subtipo


elipsoidea. Por parte del occipital se presentan dos cóndilos que miran hacia inferior y que se
orientan en sentido oblicuo hacia anterior y medial, se le contraponen las carillas articulares
superiores del atlas que se presentan de forma cóncava adaptándose a los cóndilos del occipital,
todas éstas superficies se encuentran revestidas por cartílago.

Uniendo las superficies articulares encontramos una cápsula reforzada por ligamentos accesorios
anteriores, posteriores y laterales.
as articulaciones de los huesos craneales son sinartrosis, articulaciones inmóviles que fijan las piezas
óseas entre sí por medio de cartílago (sincondrosis) o de tejido conectivo fibroso (sinfibrosis).

Aquellos huesos que forman parte de la base craneal, desarrollados por osificación endocondral, se
unen entre sí a través de sincondrosis. Y los huesos procedentes de la bóveda del cráneo (y los
huesos de la cara también), desarrollados a partir de esbozos de tejido conjuntivo, se unen entre sí a
través de sinfibrosis o suturas (suturae PNA).

Según la configuración de las superficies articulares implicadas en la unión ósea, hay cuatro tipos de
suturas (sinfibrosis) en el cráneo:

las suturas dentadas surgen de la unión occipital "por engranaje" de las superficies articulares. Es la
articulación que une a los huesos frontal, occipital, parietal, esfenoides y etmoides (articulaciones
fronto-parietal; parieto-parietal; parieto-occipital; fronto-etmoidal; fronto-esfenoidal) y articulaciones
con el macizo facial (fronto-malar; fronto-nasal, etc.).
las suturas escamosas surgen de la unión de superficies rugosas y "talladas a bisel". Es la articulación
témporo-parietal.
la esquindilesis es la articulación del vómer (cara) con el esfenoides (cráneo), formada por la unión
de una superficie con forma de cresta (cresta esfenoidal inferior) que encastra con una superficie
complementaria en forma de ranura (entre las alas del vómer).
la sutura armónica se ponen en contacto superficies planas y lineales (entre los huesos de
viscerocráneo (cara)).

El principal movimiento de estas articulaciones es la flexión y extensión de la cabeza


La columna vertebral está compuesta de 26 huesos que brindan soporte axial al tronco y suministran
protección a la médula espinal que corre a través de su cavidad central. Entre cada vértebra se
encuentra un disco intervertebral. Los discos están llenos de una sustancia gelatinosa, llamada
núcleo pulposo, que suministra amortiguación a la columna espinal. El anillo fibroso es un anillo
cartilaginoso que rodea el núcleo pulposo y que lo mantiene intacto cuando se aplican fuerzas a la
columna espinal. Los discos intervertebrales permiten la flexibilidad de la columna y actúan como
amortiguadores durante las actividades diarias tales como caminar, correr y saltar.
Entre las vértebras cervicales, dorsales y lumbares existe un amortiguador, llamado "disco
intervertebral".
Está compuesto por dos partes: la parte central de consistencia gelatinosa que se denomina "núcleo
pulposo", y una envuelta fibrosa que lo mantiene en su lugar y se denomina "anillo o envuelta
fibrosa".
El anillo fibroso es más grueso en la porción anterior del disco, por lo que la pared posterior es más
frágil. Ese es el motivo por el que la mayoría de las veces en las que el anillo se rompe, causando una
hernia discal, lo hace por detrás.
La presión en el núcleo pulposo es de 5 a 15 veces superior a la presión arterial, por lo que no puede
llegar sangre a él. Por eso tampoco hay nervios en el núcleo pulposo; sólo los hay en las capas más
externas de la envuelta fibrosa. Eso explica que la degeneración del disco pueda ser indolora
mientras no afecte a la capa más externa de la envuelta fibrosa; aunque el tejido se desgaste no hay
nervios que puedan percibir y transmitir el dolor.

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