"El Pago Como Acto"

(*) Jornadas De La Escuela Freudiana De Buenos Aires, Acto E Interpretación, 30 De Septiembre, 1 Y 2 De Octubre De 2010.

Olga Cuadra

Este trabajo surgió a partir del seminario que dicté durante el primer cuatrimestre en la EFBA,
"El pago y el dinero como obstáculo en la dirección de la cura", el cual fue muy fructífero y
debatido con los colegas que participaron en el mismo, de manera muy activa, con
interrogantes, planteos y viñetas clínicas, a ellos mi agradecimiento.
Por qué hablar de ese tema no siendo unos de los cuatros conceptos fundamentales pero con
seguridad el tema del pago y la deuda participa de modo regular en nuestra práctica y varias
veces de manera de obstáculos.
¿Cuál es la función del dinero? se paga con dinero o este es subsumido a los matices de la
pulsión o la economía libidinal de cada analizante ¿Hay otras formas de pago?
Freud siempre diferenció pago de dinero. En Iniciación al tratamiento da una serie de
consideraciones con respecto al dinero, nos plantea que es un sustento y obtención de poder
y en que la estima del dinero, interviene poderosos factores sexuales, lo plantea en relación a
la sexualidad, no en el sentido común. Trabaja con ecuaciones simbólicas esto supone que va
hacer entrar al dinero en el análisis como un producto psíquico más, posible de ser
interpretado, la relación de ese sujeto con esa representación. En el Inconsciente los
conceptos de excrementos, dinero, regalo, niño y pene no son exactamente discriminados y sí
fácilmente confundidos, son tratados como equivalentes o intercambiables.
En las civilizaciones antiguas, los mitos y fábulas, el pensamiento inconsciente, sueños y la
neurosis aparece el dinero estrechamente relacionado con la inmundicia. El oro que el diablo
regala a sus protegidos se trasforma luego en estiércol.
Concluye luego de vincular el dinero y la sexualidad con una apreciación muy fuerte al
comienzo del siglo XX, en Viena los asuntos de dinero son tratados entonces de idéntica
manera que las cosas sexuales, es con esa duplicidad y mojigatería e hipocresía.
El analista debe ser claro en cuestiones de dinero, Lacan considera al dinero en su dimensión
sgte, lo realiza al manejar la equivalencia tiempo y dinero pero no de una manera ritualizada,
porque no existe reciprocidad entre el tiempo que el analista dedica a cada uno de sus
pacientes y el dinero que cobra por ese tiempo. En cambio para la IPA era un intercambio de
dinero por tiempo e interpretación.

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Dinero en tanto sgte supone considerarlo no como resultado de un proceso natural, sino como
una creación introducida en lo Real por la dimensión sgte. El dinero anudado a los tres
registros de RSI.
Sabemos desde Lacan que nuestra práctica no está regida por las leyes de mercado, como
cualquier otra práctica asistencial, sabemos que en el dispositivo analítico y en el interior de la
transferencia, el pago -dinero -sesiones, cobran valor sgte, a nadie se le ocurriría al menos si
se dice analista hacer los aumentos de sus honorarios de acuerdo el índice de calidad de vida
ya sea el de Moreno o el de Moyano. Muchas veces se sitúa el acto del pago en el eje de la
relación especular, el pago es otra cosa es la marca de la Castración simbólica, es signo de la
instauración de un lugar, alojamiento para la palabra, que de este modo se abre a una zona
de interpelación del sujeto.
Una analizante al cuál le aumento los honorarios, me pregunta ¿si aumenté a todos mis
pacientes o a ella porque le vi la cara de boluda? sin duda vemos que ahí se juega cuestiones
fantasmatica de la analizante. Entonces podemos decir que sí bien en la mayoría de los casos
por el cobro de honorarios el analista recibe dinero, para el analizante en ese pago y en cada
pago, entra a jugar cuestiones de su fantasma.
Lacan en la dirección de la cura dice "...pues si el amor es dar lo que no se tiene, es bien
cierto que el sujeto puede esperar que se le de puesto que el psicoanalista no tiene otra cosa
que darle, pero incluso por esa nada no se lo dan y más vale así, por esa nada se la pagan y
preferiblemente de manera generosa para mostrar bien de que otra manera no tendría mucho
valor...".
Entra a jugar el anhelo de todo neurótico del Don del amor. El analista no está en posición de
donar el amor, por el contrario se trata de hacer estallar la significación amorosa a partir de la
intervención respecto del dinero. Y que cuando se plantea la cuestión de la nada y de que hay
algo que debe ser pagado en forma generosa, lo que aquí se instala es ni más ni menos que
la dimensión del deseo ¿de qué manera? Si el sujeto paga nada especificándose nada en el
sentido de lo útil o lo productivo en términos de mercado pero entonces pagar por nada, ya
implica la consideración del lugar del deseo.
También en este texto subraya el pago del lado del analista: que debe ser considerado de una
manera ética "...debe pagar no con el imperativo del Superyo, sino con el imperativo ético
excluyendo la moral del poder".
No es sólo el paciente el que paga con sus dificultades sino también el analista paga con sus
interpretaciones, presencia, con palabras y también a veces paga con sus prejuicios. El
analista paga en el hospital lo mismo que paga en el consultorio, la diferencia entre una
práctica privada y pública no la podemos ubicar en el pago, al menos para mí la diferencia
está en relación a los discursos a los que responden, la práctica institucional (hospitales,
prepagas etc) siempre está en relación con otros discursos que no son el discurso analítico. El
discurso del Amo es tradicionalmente el discurso con el que se tiene que ver los analistas
cuando hacen una práctica hospitalaria, también hay otros discursos que tienen que ver con la
ciencias, los avances de ésta y avances tecnológicos.

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En la transferencia donde se despliega la dialéctica del amor Erastés(amante) y Eromenós
(amado), se pide que pague para eliminar del paciente la suposición de que el analista al
analizante pueda amarlo. En "La carta robada" encontramos que el dinero es un sgte que
mata toda significación en tanto toda significación, también mata la del amor. Es una manera
de que el analista no goce de sus pacientes, sino que goce con otras cosas. No fue así en el
caso de Freud con el hombre de los lobos, en el último análisis que tuvo con él, este paciente
no le podía pagar, antes había pagado lo suficiente como rico para justificar ahora un
tratamiento gratuito, entonces es el mismo Freud que se encarga de hacer una colecta de
dinero durante seis años al hombre de los lobos que tanto había aportado a los fines teóricos
del psicoanálisis, no sólo que no mejoró sino que empeoró volviéndose especulador,
calculando cuánto ascendería su cuota cada año y ocultando que había recibido una herencia.
El paciente quedó en posición de que todavía le debían y que tenía todo el derecho de
reclamar y no de pagar por su deuda.
Más que hablar de dinero hay que hablar de la deuda donde se instala un imposible de pagar
la libra justa de carne como lo vemos bien ejemplificado en "El mercader de Venecia", lo
incomensurable en tanto incorporamos ese resto irreductible que es el objeto a, objeto
inasible, inhallable, evoca la idea de un objeto que no tiene valor de uso, hiancia que conlleva
un imposible de que no hay relación sexual. Aniquilando la ilusión del Don de amor como
respuesta a la demanda de completud.
En la dialéctica del amor de transferencia lo que se pide siempre es amor, es demanda de un
don, la verdadera demanda de amor es la demanda de un Don de nada-
¿Por qué tengo que pagar me decía un analizante? ¿Por qué tengo que pagar cuando
falto?¿al final voy a tener que venir siempre para no pagar la falta? Se paga para poder
reducir el goce de sus síntomas, de sus padecimientos o para que pueda disponerse a
sacrificar algo de su goce a la palabra. Se paga con dinero como función legislativa del goce,
renuncia al goce por efecto del discurso al cual Lacan llamó "plus de goce" como verdad del
síntoma a diferencia de la plusvalía que es la verdad del capital, como algo acumulativo que
se convierte en mercancía pudiendo generalizar su venta en el mercado. El objeto a pasa de
la posición de plus de gozar o plusvalía para el discurso capitalista en el discurso Amo a la
posición de objeto causa de deseo en el discurso analítico.
La falta se cuenta ,Freud sugería cobrarlas y notaba la reducción de las mismas y las
escusas, también porque es el cero, concepto que Lacan toma de Fregue, es un conjunto
vacío, es desigual consigo mismo, a partir del computo del cero posibilita la aparición del uno.
En la teoría de Lacan el conjunto vacío tiene más de una manifestación: la primera es el
sepulcro vacío, la tumba vacía. La tumba vacía es importante no por su relación con la
muerte, considerada aquí como un hecho natural, sino más bien porque simboliza el lugar con
el cual tenemos que confrontar a los muertos. El sepulcro vacío cumple una función
significativa en la historia de Cristo así como también en Hamlet: la aparición del espectro le
indica a Hamlet que la tumba está abierta y vacía. En la teoría freudiana también hay dos
figuras centrales que llaman la atención porque no han sido enterradas, porque

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desaparecieron sin dejar rastros: Edipo y Moisés(sin duda lo descendientes de Teseo sabían
dónde estaba la tumba de Edípo, pero no es menos cierto que, cuando Edipo muere no hay
ninguna marca que señale el lugar de su tumba, desaparece, este el modo de significar el
conjunto vacío, de señalarlo con un signo, que se mantiene en secreto y que se trasmite del
padre al hijo), se tramite la falta, el sepulcro vacío también es el sujeto que está siempre
disociado entre una marca y un vacío.
El hombre está poseído efectivamente por el discurso de la ley y con él se castiga en nombre
de la deuda simbólica que no cesa cada vez de pagar más con su neurosis. La Castración
sólo puede asignarse en la categoría de la deuda Simbólica porque está escencialmente
ligado al orden simbólico. Si el sujeto experimenta la Fustración como daño imaginario, la
Castración la experimenta como una Deuda simbólica (es decir su inscripción en la filiación y
su dialéctica). Esta deuda impuesta por el lenguaje que sólo se podrá saldar con ese objeto
privilegiado que es el Falo imaginario.
Un paciente me decía que a sus mujeres(esposa, madre, hija, amantes), como él las llamaba,
les tapaba la boca dándole guita, por supuesto que en el análisis no iba ser la excepción
,faltaba sin avisar y cuando venía pagaba sus faltas sin decir nada al respecto, a su analista
también quería taparle la boca.
Es la inscripción eneludible de la función del padre aquí Freud plantea que es el complejo de
Castración el que conduce a la deuda por donde se constituye el sujeto. En el caso del
hombre de las ratas aparece una obligación a pagar la deuda, pasando por el teniente A y el
teniente B, pero no es allí donde debe pagar porque esta es una deuda imposible de pagar, la
deuda tiene que ser pagada a nivel sgte, por eso es una deuda inagotable pues el sgte tiene
la última palabra, así podemos interpretar "tantos florines tantas ratas".
El acto de pago lograría preservar al analista de ser gozado o de gozar al otro, de cualquiera
de las posiciones del goce que aparecen formuladas en la estructura de la constitución
fantasmática y desplegada en la situación transferencial.
El valor de una sesión es del orden de lo que va más allá de la economía del dinero, es otro
orden de economía, es del orden pulsional, es importante tener claro que el honorario
depende de las viscicitudes de una sesión en sí misma. También podríamos pensar que cada
sesión tenga un honorario diferente, porque cada sesión tiene un valor diferente, un paciente
me decía "esta sesión vale el doble " de hecho esto Lacan lo hizo en su práctica, pero como
entran a jugar los tres registros RSI y como no podemos quedar fuera del lazo social, los
honorarios son fijos, porque además podrían quedar del lado de lo arbitrario y hasta
excesivamente arbitrario.
Así como Lacan se hizo famoso por cobrar honorarios muy altos, también tomaba pacientes
con honorarios que le permitían compensar la sumas de otros, adecuaba sus honorarios de
una manera muy amplia, podía dejarse tomar por el discurso del paciente, era muy abierto a
cualquier demanda de análisis, más allá de contarlos como monedas, también exasperaba a
sus pacientes disponiendo pilas de billetes sobre su escritorio para contarlos y clasificarlos.
Podría pensarse que esta es la imagen del avaro que cuenta dinero y solo recibe a sus

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pacientes porque le pagan. Con ese gesto, era una manera de interpretar que el analista tiene
mucho dinero, como era el caso de Lacan, también quiere decir que no lo hace por dinero
obviamente no quiere dinero, su deseo no se puede contar en miles de francos. ¿Por qué en
este caso Lacan hacía un gesto en lugar de ofrecer una interpretación? es que el dinero,
aunque puede ser un tema muy interesante para el analizado, no es lo que realmente se
cuestiona.
El analista paga con palabras-sus interpretaciones. Paga con su persona, en la medida en
que, por la transferencia, es literalmente desposeída de ella"...Finalmente es necesario que
pague con un juicio en lo concerniente a su acción."Lacan (seminario de la Etica).

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