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de cumplir un acto de fe y de arrepentimiento, y de aceptar la

salvación en el nombre del Señor”. (5)


 
“El Nuevo Testamento enseña que hay dos ordenanzas: El Bautismo
y la Cena del Señor. No son mágicos ni confieren de por si gracia
alguna. Son, mas bien, símbolos significativos de la experiencia
cristiana, actos que traen a la memoria a Cristo, quien murió para
que los hombres vivan (1 Corintios 11: 26).
 
El bautismo es la inmersión en agua de una persona ya salvada,
para simbolizar su muerte al pecado y la resurrección a una nueva
vida en Cristo. (Romanos 6; 4; Hechos 8: 36 a 39)”. (6)
“Por tanto, los bautistas creen que su practica (la del bautismo y la
Cena) es bíblicamente correcta, psicológicamente verdadera,
intelectualmente libre, y simbólicamente rica. El bautismo y la Cena
no son meros símbolos, actitud que refleja una evaluación muy
liviana de su importancia, sino - símbolos dinámicos – que
comunican la verdad y despiertan una respuesta.... En general, los
bautistas creen que el bautismo neotestamentario simboliza: La
purificación personal del pecado, la recepción del don del Espíritu
Santo y la unión mística con Cristo en sus hechos redentores”. (7)
Jesús y el Bautismo
 
1º Jesús, como en todo, también en el bautismo nos da ejemplo (Mateo 3: 13
al 16).
2º El Señor, durante su ministerio, bautiza a través de sus discípulos (Juan
3: 22; 4: 1 y 2).
3º Jesús, convierte mas adelante este importante rito en ordenanza (Mateo
28: 18 al 20).
4º Podemos ver la importancia que Jesús da a esta ordenanza en: (Juan 3: 5
y Marcos 16: 16).
 
“Jesús se sometió al bautismo de manos de Juan (Mar. 1: 9 al 11),
administrando la ordenanza (por medio de sus discípulos), y mando
a sus seguidores a hacer lo mimo, como parte de su obra hasta el
fin de lo siglos, Mateo 28: 19, merece, por lo tanto, nuestra mas
cuidadosa consideración”. (8)
 
“BAUTISMO: Acto de entrada al cristianismo ordenado por
Jesucristo a sus apóstoles, del cual El mismo dio ejemplo al entrar
en su ministerio.
Los investigadores de la historia de la Iglesia, de todas las
confesiones, están de acuerdo en reconocer que la forma original
del bautismo era por inmersión en agua, en el nombre del Padre, del
Hijo y del Espíritu Santo”. (9)
 
“Es (El Bautismo) una institución divina de la que el mismo Señor
Jesús nos dio ejemplo siendo bautizado a los treinta años en el río
Jordán... La Sagrada Escritura enseña ciertamente que todos somos
pecadores por naturaleza; y la experiencia de la Humanidad lo
demuestra con bastante evidencia. Por esto todos necesitamos la
Regeneración que el Santo Espíritu de Dios puede obrar en nuestras
almas; porque: El que no naciere otra vez no puede ver el Reino de
Dios”. (10)
Por inmersión y solo a creyentes
 
“... Rechazando el bautismo infantil como contrario a las Escrituras,
creían que era valido solamente aquel bautismo que se
administraba a creyentes conscientes, les fue puesto pues el apodo
de anabaptistas, o sea, los bautizados por segunda vez, pero para
ellos la denominación era falsa, pues ellos no creían que el
bautismo infantil fuera bautismo”. (11)
 
“El bautismo de Juan el Bautista prefigura a Jesucristo, el cual quita
los pecados del mundo. Cuando los oyentes del profeta daban
señales de verdadero arrepentimiento, los sumergía en el agua. No
era un nuevo bautismo de arrepentimiento, sino además el símbolo
de la incorporación al reino de Dios”. (12)
“Desde el principio de la historia evangélica, encontramos a Juan el
Bautista sometiendo, a aquellos que habían aceptado su
predicación, a un bautismo en las aguas del Jordán, Y ese mismo
bautismo se relaciona con la costumbre existente de someter a los
prosélitos que querían incorporarse al pueblo israelita a un
bautismo, es decir, a una inmersión en el agua”. (13)

 “Como expresión, el bautismo es un acto simbólico. El simbolismo


de la inmersión y el simbolismo del agua le confieren el valor de un
lenguaje de acto”. (14)
“En los primeros tiempos de la Iglesia, no se bautizaban mas que a
los adultos que lo pedían libremente y que eran conscientes de lo
que iban a ser”. (15)
“Pablo da al bautismo un sentido
místico (Romanos 6:3), simbolizado en
el rito físico de la inmersión en el agua, según el cual los bautizados
se sumergen y (revisten) de Cristo, sentido 

 
que ya conocen las comunidades helenísticas (Hechos 19: 3).
El propio Pablo, llamado personalmente por Jesús en la misión de
Damasco, ha de someterse al rito externo del bautismo (Hechos 9:
18 y 22 al 26), por ser el signo físico de pertenencia al nuevo pueblo
de Dios”. (16)
 
 
Los Padres de la Iglesia
 
“Justino mártir, que escribió entre el año 100 y 150, describe una de
estas ceremonias religiosas con todo lujo de detalles, explicando
que (el bautismo) es para los que han sido doctrinados.
...casi todos los grandes padres de la Iglesia fueron bautizados en
su mayor edad, aun a practicar cuando fueron hijos de cristianos.
Parecerá muy extraño al lector católico, pero nadie puede desmentir
que:
 
San Rufino, San Basilio,
San Paulino, San Ambrosio, San Juan Crisóstomo,
San Jerónimo, San Atanasio, San Agustín y otros,
no fueron bautizados cuando niños,
sino cuando manifestaron su fe en Cristo.
 
San Gregorio Nacianceno tenia una madre piadosa y su padre era
obispo, pero no fue bautizado hasta que creyó.
San Atanasio que murió en el ano 373 dice: Cualquiera que sea la
virtud del bautismo presupone la disposición del que lo recibe.
Nuestro Salvador no solo ha mandado que se bautice, sino que ha
dicho, enseñad y bautizad luego, porque la fe resulta de la
enseñanza y el bautismo sigue a la fe.
San Basilio, obispo de Cesarea, que murió en el año 379 dice: El
bautismo es el sello de la fe; porque es preciso creer antes de
recibir el sacramento.
El Reverendo Felipe Scio de San Miguel declara: La inmersión del
cuerpo en el agua, como se acostumbraba a administrar
antiguamente el bautismo, es una señal de la muerte espiritual del

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