Catecismo

Nosotros podemos realmente

nombrar a Dios partiendo de las

de la
El hombre descubre ciertas “vías” para acceder múltiples perfecciones de las
al conocimiento de Dios, también se les llamas
“pruebas de la existencia de Dios”, argumentos criaturas, semejanzas del Dios

Iglesia
convergentes y convincentes que permiten infinitamente perfecto, aunque
llegar a verdaderas certezas.
Estas vías tienen como punto de partida la nuestro lenguaje ilimitado no agote
creación: el mundo material y la persona

Católica
humana. Por estas vías, el hombre puede su misterio.
acceder al conocimiento de la existencia de una
realidad que es la causa primera y el fin último
de todo, “y que todos llaman Dios”.
PRÓLOGO
DIOS SE VALE DE LA
Y
CATEQUESIS PARA PRIMER PARTE
EDUCAR A SU PUEBLO Y LA PROFESIÓN DE LA FE
MOSTRARLE EL CAMINO,
Para que el hombre pueda acoger la fe, Dios se QUE EL MISMO HA
le ha revelado. Las pruebas de la existencia de
Dios ayudan a ver que la fe no se opone a la
PUESTO, PARA LLEGAR
razón humana.
A ÉL.
La Iglesia enseña que Dios se puede conocer
con certeza mediante la luz natural de la razón
EL CATECISMO ES UNA
a partir de las cosas creadas.
PARTE MUY
IMPORTANTE DE ESE
CAMINO.

“Dios, nuestro Salvador… quiere que todos los

hombres se salven y lleguen al conocimiento
José Enrique Ortuño Tolibia pleno de la verdad” (Tim 2, 3-4).

Prólogo.
(No. 1-25)
Dios ha creado al hombre y en todo tiempo le
llama. Convoca a todos los hombres, que el
pecado dispersó, a la iglesia. Para ello envió a
Cristo, su Hijo. En él, llama a los hombres a
ser, en el Espíritu Santo, sus hijos en
adopción.
Cristo envió a sus discípulos a anunciar el
Evangelio y ellos salieron a predicar por todas
partes. Siguiendo este mandato, todos los
fieles de Cristo son llamados a transmitirlo de
generación en generación.
De esto, se comenzó a llamar catequesis a los
esfuerzos por hacer discípulos.
Personalice en unos
“La catequesis está unida
íntimamente a toda la vida
de la iglesia… a su
crecimiento interior y a su
correspondencia con el
designio de Dios”.
Del deseo de una mejor catequesis, el Santo
Padre, San Juan Pablo II, dispuso todo lo
necesario para la elaboración del Catecismo de
toda la doctrina, tanto sobre la fe como la moral.
El plan del catecismo articula la catequesis en
torno a cuatro pilares: la profesión de la fe
bautismal, los sacramentos de la fe, la vida de
fe y la oración del creyente.
“Toda la finalidad de la doctrina y de la
enseñanza debe ser puesta en el amor
que no acaba”.
Primera parte
LA PROFESIÓN DE LA FE
Primera sección
“CREO” – “CREEMOS”
(No. 26-49)
Al comenzar la profesión de fe, decimos:
“creo” o “creemos”, pero, ¿Qué es creer?, la fe
es la respuesta del hombre a Dios que se
revela y se entrega a él.
Capítulo primero
EL HOMBRE ES “CAPAZ” DE DIOS
El deseo de Dios está inscrito en el corazón del
hombre y Dios no cesa de atraerlo hacia sí. El
hombre expresa su búsqueda de Dios por
medio de sus creencias y comportamientos
religiosos.
Esta “unión íntima y vital” con Dios, puede ser
olvidada, desconocida e incluso rechazada por
el hombre. Aun así, Dios no cesa de llamar al
hombre a buscarle para que encuentre la
dicha. Esta búsqueda exige todo el esfuerzo
de su inteligencia, la rectitud de su voluntad,
“un corazón recto”, y también, el testimonio
de otros que le enseñen a buscar a Dios.
“El hombre quiere alabarte. Tú mismo le incitas a
ello, haciendo que encuentre sus delicias en tu
alabanza, porque nos has hecho para ti y nuestro
corazón está inquieto mientras no descansa en ti”.
(San Agustín, Confesiones, 1, 1, 1.)