Está en la página 1de 1

1.

Aporte de agua procesada limpia y segura

Mucha gente no sabe que las aguas residuales se pueden convertir en agua reutilizable. Los
productos tóxicos se eliminan en el proceso de tratamiento que produce agua limpia y segura.
Alrededor del 3 % del agua de la Tierra es potable. Se trata de un recurso renovable. Sin embargo,
es muy lento el proceso por el que los productos tóxicos son eliminados a través de la evaporación
y la lluvia. El tratamiento de las aguas residuales hace más rápido el proceso y aporta agua
reutilizable limpia y segura para la población de los alrededores de la cuenca Crisnejas
 

2. Ahorro de dinero   

Un sistema de tratamiento de aguas residuales bien aplicado y en buen estado de mantenimiento


puede facilitar el ahorro de dinero a largo plazo y, a su vez, garantizar el cumplimiento de la
normativa y la legislación.

3. Conveniencia para el medio ambiente    

El objetivo principal del tratamiento de las aguas es la eliminación de los productos químicos
nocivos, contaminantes biológicos que se generan en la cuenca Crisnejas. Por ello, no deben
constituir ningún impacto negativo para el medio ambiente al introducirse en el suelo. Puede
suponer un problema complejo si se trata de residuos de todo tipo. Como inversión importante, se
recomienda la implementación de un sistema de alta calidad para el tratamiento de las aguas
residuales.

4. Ahorro de agua

Tiene lugar un ahorro real de agua debido a la planta de tratamiento de efluentes. En la medida en
que la planta recicla el agua contaminada el proceso supone una pérdida inferior de agua, lo que,
de nuevo, es positivo para el medio ambiente. 

5. Un modo de minimizar los residuos   

El tratamiento de aguas residuales constituye un modo de reducir los residuos generados. Del
mismo modo que facilita el ahorro de dinero, garantiza la eliminación de los productos químicos
en el agua tratada de modo seguro y respetuoso con el medio ambiente.

También podría gustarte