Está en la página 1de 12
Microtubulos Son orgdénulos estructurales que existen en todas las células nucleadas. Ensamblados como un andamiaje a partir de subunidades proteicas, participan en la divisién, en el movimiento y en el mantenimiento de la forma celular no de los aspectos mas fascinan: | tes de la biologia es el continuo redescubrimiento de la eviden. te unidad que existe entre todas las células vivas, unidad que va desde 1a tuniversalidad del ADN conto material gonstico hasta la presencia, tanto en ‘organismos unicelulares como en las celulas de plantas y animales superio- res, de las mismas estructuras compli cadas ue realizan, esencialmente, idénticas funciones. Entre estas estruc. turas se encuentran los orgénulos celu- lares conocidos por microtdbulos: 1ar- gos y delicados tubos que, veces en forma de varias rigidas y otras como cuerdas relativamente flexibles, man- icnororosRAta Pierre Dustin ticnen y cambian la forma de la célula 0 de alguno de sus componentes, impul- san material 2 traves de la misma y separan la dotacin duplicads de cro- mosomas en el transcurso de Ia division celular. Existen microtubulos, en una u otra forma y, con frecuencia, en mu: cchas, en todas las células eucariotas (aucleadas). Hace ya un siglo que se observaron y describieron muchas de estas formas, pero al conocimiento de su estructura y composicién comunes le] microtwbulo como tal- se ha llega- do tan s6lo en las dos sitimas décadas. La investigacién de los microwbulos ‘comenz6, aungue parezca extraio, con Ja gota. Esta dolorosa enfermedad re- surenrice CONJUNTO DE MICROTUBULOS, que constuyen el amazin dela citaaringe de um prota, e ‘ilado Paeudoricrahorar dues, vos en cote transversal Y aumentados nas 78.000 veces ew tnlragetiaslcronin ina apart) toads por Klaus Hausenans de Tis cleferinge (libeje laquterde) cama extractors apenidament tabular Que #8 leas w ates press, La seein ‘strc pen atid por a {ean un smo mer de lereatas ru de leretchulin que a anew ene a formand al interior. Cada ae perro os ah rstrucura hesapoel:ts elementos eas {como laine, compuesss por 28 mlroubuor ead oma. Las esrocterss rend que aparecen aire los eerespondes a ntocondtas, Ledbeler y Porte, co 1963, acanarn of emina mr oabuls sulta de un elevado nivel de acido urico cen a sangre. Los glébulos.blancos sanguineos engloban a los microcrista- les ‘de urato y liberan los enzimas irritantes que contienen sus granulos. provoeando el penetrante dolor que caracteriza a un atague agudo de gota La droga mas eficaz para mitigar el dolor (por razones todavia descanocs das) es Ia colchicina, slealoide t6xico del célquico (Colchicum autumnale), planta conocida desde hace siglos por su especificidad para los dolores de articulaciones. La colchicina fue purifi ccada en 1883. Su conocida toxicidad conduje en Sicilia a un oscuto investi- gador, llamado B. Pernice, a estudiar su efecto en perros, sefialando en 1889 due la droga causaba ents soxpren- dentes en las zonas germiny'ivas (es decir, regiones en las que las células se estén normalmente dividiendo) del in- testino: casi todas [2s eélulas parectan estar en divisign, El informe de Pernice no tavo repercusién hasta que. fue redescubierto en 1949, Gin embargo, dese comienon de este siglo,’ se sabia ya de varias informaciones acerea del aparente efecto estimulante que ejercia la colchi- cina sobre la division celular, informa ciones que constimyeran et inicio de la moderna investigacién. Esta comenzs ‘en 1933 en la Universidad de Bruselas, en el laboratorio de mi padre, Albert P. Dustin, que habla estudiado la tegulacién’ del crecimiento y de la division celular durante muchos aos Un joven estudiante de medicins Franz Lits, sugirié que debia profundi zarse on el efecto especitica de la colchicina sobre la division celular. Lits encontro que fa inyeccisn de colchicina fen ratones parecia provocar un gran ineremento de la mitasis, 0 division celular, en todos los tejidos germina tivos. Pocos atios mas tarde, pudo explicar se este aparente aumento de la div sién. La colchicina no estimula la W 4 j livisién celular; de hecho, ta detiene: la droga interrumpe la division de Ia edlula en un periodo determinado, la prometafase, ya que destruye el apara- ‘o fibrilar (denominado huso, por su forma) que separa las dos series de ‘cromosomas y prepara asia divisiGn de una célula en dos, Se observan muchas figuras mitéticas, no porque se haya estimulado le mitosis, sino porque se van acumulando las ¢élulas detenidas ‘en mitad de ella. En 1937 se observ6 el mismo efecto en tas células vegetales, convirtiéndose 1a colchicina on un va Jioso instrusnento para producir plantas con multiples dotaciones de cromoso- ‘mas y originar asf plantas hbridas ‘rts. En 1955, cusndo el botanic norteamericano O. J. Eigsti y el autor Publicaron una monografia sobre la colchicina, era evidente que el alcalot de constituia un inhibidor muy especifi- £0 de la divisién celular. Supusimos entonces que la colchicina se tniria a algin componente determinado de las fibras de! huso, Sn la década de 1960, un equipo ‘encabezado por Edwin W. Taylor. de Ja Universidad de Chicago, estudid la accién de Ia colchicina marcindota con Iitio, isétopo radiactivo del hidrSgeno. Taylor seftalé en 1965 que la colchicina ‘mareada se unia irreversiblemente a las células humanas en cultivo y que, a bajas concentraciones, detenia la rito- sis sin producir otf0s efectos metebsli- cos; sugiri6 que fa droga se uniria a in componente estructural del huso, En 1967, Gary G. Borisy y Taylor aislaron la protefna que se unia a la colehicina y observaron que era especialmente abundante, no en cétulas en mitosis, sino en las células nerviosas de! cere- bro, que no se dividen; donde se encontraba la proteina, senalaron, ha: bia también unas esteucturas conocidas como microvibulos. La denominacion de microtabulos, que data de 1963, se debe a Myron C. Ledbetter y Keith R. Porter, que tra bbajaban entonces en la Universidad de Harvard, y a David B, Slautterback, de la Facultad le Medicina de la Univer dad de Wisconsin. Por la fecha en que Porter resummié los conacimientos que se tenian de los microtibulos, en 1966, se habian reconocido -en base a st estructura y ultraestructura aparente- ‘mente similar en animales y plantas inferiores y superiores, en ediulas ner- viosas y células en divisi6n y, funda- mentalmente, en dos apéndices mévi- lest los cilios (semejantes a pelos) de muchos tipos celulares y los flagelos {parecidos a colas) de células movites como los expermatozoides. Borisyy Taylor sugirieron que el centro de fe ‘unién con Ta coleh los mier ina seria una subu- bulos, cuye simi yeestructural debia demo erentes eélulas nos afios siguientes, muchos invese tigadores estudiaron las multiples funciones de los microtibulos en diver- ss tipos celulaces. En mi laboratorio (eal de ted con fin y aumentaa unas 1400 scene ano fetmlerograia de Klaus Weber 9 ‘Mary Osborn dl Insite May Planck de Fcogeimica se Gettngen La {dita secu can ancurrpo de conc Tene at abla, pre gue Sur Bethe 5 de la Universidad Libre de Bruselas, demostraron que fas fibras del huso tenian forma de ‘tibulo y que el centriolo, Ia estructura partir de la cual se extienden esas fibras, era también una compleja aso. Toe Zotar, eta Unveradad de. Cop iacién de mictotibules. Otros investi gadores del laboratorio probaron qu los microtdbulos jugaban un papel esencial en la scorecién de por la ghindula tiroidea y el Mas recicntemente, Jacqueline Fla- ment-Durand y el autor han estudiado el efecto de la colehicina en ef transpor- te de los grinulos de secrecion en los coneye te wlertubels: dicho aniusrpe x unio or macrotbulos Seguldemente se rat au ee a prparacon con atiutrge dca ete 2 anumegibutina de conte: el anienerpo de cas que resiamente ab ‘de coptindo con sn soranca voresone, se unis mumoqiouline dr ‘oncjr Se fotgeats con la ultra para rear ore, epic, En cada mirotibulo extend se dstngion ws protatamenies urs Cpocsion Se rbuniade de abaina. Los potas Equrene p ievure en lov rear, ce se atnren wy gles ¥ 0 i t ' ‘expansiones nerviosas. La ubicuidad de 10s microtdbulos en tas eélulas eucario- tas, asf como su importancia para una ‘gran variedad de funciones, han queda- do ampliamente demostradas. Cualquiera que sea su funcion concreta, tanto en plantas como en animales, los microtibulos son, esen- cialmente, iguales: estructuras tubula- res alargadas, cuyo didmetro total es de unos 24 nanémetros (un nanémetro es 1a millonésima parte de ua milimetro), ¥.con una luz central (como un agujero Gilindrico) de unos 15 nanémetros de imetro. Su longitud arta de un caso @ otfo, pero casi siempre es mucho mayor que su anchura; con frecuencia iden muchos mierometros (milésimas de milimetto). Los microtubules se cextienden a fo largo de los axones de ENSAMBLAJE DELOS MICROTUBULOS enellabaraterio. Comino con os moins prteeas, tubulin lft 40 ‘bet (ae Son meetin ‘lobuares ulus ovalacar que extn ners, suaaeateeeguemin) {a tubatinas formao dimers, o debs maléeulas Sa concetraion de ieeros er sufctewtemente leva tet se. asian form facasInermedis anil dbs, expiraley anil apladon entre ‘tras cj qulibeo se despara, sein Tas condiciones, has lo ders diverse Jas neuronas, que, en animales de gran tamaito, pueden medir varios metros de longitud, aunque dichos orgénulos no parecen ser continuos a lo large de todo ese trayecto. Martin L. Chalfie y J. Nichol Thomson, del Medical Re- search Council Laboratory of Molecu- lar Biology. de Cambridge, han sefala do, en recientes observaciones de cor: tes seriados de nervios de un nemito. ‘que se-unen lteralnente constayends un Taina i at Tes protolarnenis pueden crvarse Ceando ta mina 2 ‘aficentemente anche, forms un tubo, ta es replegidn (0) Una ver se he formado uo pequetn tito Y), ste Se ala por alone dean do, que la longitud de los microuibulos ‘oscila entre 10 y 25 micrometros ‘Al microscopio electrénico, los cortes transversales de microtdbulos aparecen como circulos. A. grandes ‘aumentos. se aprecia que el cielo estd cconstituide a su vez por varias subuni-

También podría gustarte