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Uso alambre de acero inoxidable del tipo usado en trabajos odontológicos o en trabajos
de soldaduras. Ambos se consiguen en las casas del ramo correspondiente.
En general uso diámetros entre 0,80 y 0,90 mm en señuelos destinados a tarariras y
dorados. En señuelos para pesca ultra liviana suelo usar de 0,50 mm de diámetro y en casos
excepcionales suelo usar de 1,2 ó 1,5 mm, por ejemplo para hélices grandes. Muchas veces he
usado estos diámetros mayores por una mera cuestión estética.
Prefiero la fabricación del alma de alambre completa, desde la cabeza a la cola por
sobre el uso de tomas individuales, si bien esta última opción esta super testeada y bien hecha
es efectiva. Mi razón se justifica en que me lleva muy poco trabajo hacerlas y estructuralmente
veo al alma como el "chasis" del señuelo, el componente que recibirá toda la fuerza de tracción
en la pelea con el pez, siendo el cuerpo una mera "carrocería" encargada de "mostrar el
engaño"
No uso plantillas para el doblado del alambre pues, aunque fabrique dos señuelos
iguales, los cuerpos tallados en madera difieren ligeramente entre sí y con ello las almas.
En la mayoría de las almas de alambre que fabrico destino la toma central para ser
usada con anzuelos triples y la de la cola para usar anzuelos simples. Cada uno puede elegir
que le gusta o conviene mas. Es una de las ventajas que otorga fabricar nuestros propios
señuelos.
Considero que un alma de alambre está bien construida cuando, una vez alojada en la
ranura, cada componente mantiene su posición sin pugnar por moverse de su lugar, motivo de
tensiones por estar mal alojada o mal conformada. Sonará medio místico pero debo decir que
"el alma debe ser enterrada en reposo"....
Manos a la obra:
Arrancamos desde el supuesto que tenemos listo un cuerpo tallado, seguramente en madera y
medianamente pulido.
Nota:
Digo esto del pulido, porque en esta etapa donde el cuerpo está despojado de todos los
accesorios que harán que se convierta en señuelo, es mucho mas fácil hacer uso de las lijas,
así que yo trato, en esta instancia, de lograr un buen pulido, por lo menos hasta grano 220, a
sabiendas que tras intervenirlo para colocar las tomas, contrapesos y baberos la superficie se
verá afectada, pero será mucho mas fácil volver a tener una buena superficie que ayudará a la
hora de la pintura.
Con el cuerpo terminado entonces, trazo un eje longitudinal por debajo, donde irá alojada el
alma de acero que conforma las tomas.
Sobre este eje marco el lugar donde quiero ubicar la toma del triple central
Con una hoja de sierra montada en un pistolete realizo la ranura donde irá alojado el alambre.
Nota 2:
Con estos pistoletes, fáciles de usar y muy económicos, se pueden utilizar las hojas de sierras
partidas que ya no se pueden colocar en el arco normal, sin tener que manipularla directamente
con la mano, con la ventaja de evitar cortarnos cuando la hoja se traba en el corte.
Por lo demás, una hoja de sierra de 18 dientes por pulgadas, gastada y que ya no sirve para
metales, cortará sin problemas la madera, dejando una ranura muy prolija que nos permite
colocar un alambre de hasta 1 mm de diámetro.