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Kerosene pa tu Yampan

(Brahmaturgia)

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Kerosene pa tu Yampan
(Brahmaturgia)
De Nicolás Vivanco Viale y Evelin Brandán

Personajes
(Por orden de aparición)

La Bruja Soledad / Eve


Malacresta / Nico

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ACTO PRIMERO

CUADRO PRIMERO
(La Bruja Soledad entra en escena con una lámpara de
kerosene prendida en total penumbra. Malacresta
permanece dentro del escenario a oscuras).

ESCENA I
La Bruja Soledad: - No sé en qué situación se encuentre
cada uno de ustedes… ni me importa! Que la Alquimia
explique esta poción de suerte. De ser dignos anormales,
y como si fuera poco… ¡recibir aplausos, monedas,
felicitaciones! Insultos, escupitajos… shhht!
Haciendo amigos y enemigos a cada paso. Tampoco se
puede caerle bien a todo el mundo.
¡Acechar calles! Conjurar casas, fiestas, recitales.
Agitar comisarías, ¡calabozos! ¿Quién no perdió alguna
vez?
Con aire transmundano, somos transmutantes. Y nos
cagamos de risa!
Lo que van a ver y escuchar es Kerosene pa tu Yampan,
materia prima fuera de control, flema sentenciosa,
vómito adornado con fluorescente bilis, puta bruta
hermosa sinceridad, humilde experiencia bebida, digo…
de vida!

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Sincerémonos, si seremos monos!
¿Estás acá? ¿Estás acá?... ¿Están acá? ¡Todavía están a
tiempo! ¡Las puertas están abiertas!...
¡Damas y caballeros! ¡Leidis and yelteman! ¡Linyeras y
linyeros!
En la mama de la frente para todos los voyeristas
presentes…
¡No somos ni escritores, ni músicos, ni actores, ni mucho
menos poetas! Somos apenas el corcho que cayó al vino
cuando lo abrieron con un palo!
(La Bruja Soledad deja la lámpara de kerosene en la mesa
y poco a poco la figura de Malacresta se va iluminando).

Malacresta: - Estos tiempos de desbundes en crestas de


gritos al cielo enorme al vacío y al abismo el que no se las
juega, sólo ve espejismos y el espejo lo confunde y le dice
que es lo mismo. El amor por la revolución, la biblia de la
pensión, el sabor de unos labios, la energía de un estadio,
el calor de un duelo, el túnel del tiempo en los ojos de un
abuelo, la vereda serena de la siesta, el estallido de una
fiesta, la libertad de una ruta, la santidad de una puta, las
alas, el intento, las drogas, el experimento, los golpes del
camino por ser hombre del destino, la mentira de la
verdad, las raíces, la amistad, el pensamiento y sus
laberintos…. todos iguales de distintos, sentirse dueño de
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las calles, los tragos a la salud, compartir una olla, la
compañía del vino, atravesar las capas de la cebolla, la
fiebre de la traición, la creación desde el error, los ídolos
en caída libre, ojos y dientes que enfrentan al temor.
Amor, odio, la vida, la suerte y ella tan misteriosa, la
muerte.
(Malacresta enciende un cigarrillo y apaga la lámpara de
kerosene. Acompaña el texto de La Bruja Soledad el juego
de luz que produce el cigarrillo prendido).
La Bruja Soledad: - Y el rojo anaranjado gris, de un cigarro
encendido no llega a iluminar la habitación a oscuras,
pero es la única estrella en cuatro paredes, un piso y un
techo, y todos hipnotizados con ella. Las ventanas son
para mirar y las puertas para salir o entrar. Pero te
levantaste pensando que tu puerta era la ventana y que
los miedos y los límites eran una mentira más de la
prensa de la historia, de la prensa de tus padres, de la
prensa de tus libros y tus discos. Y te asustó pensar hasta
dónde podías llegar. Y reían los peores y lloraban los
mejores. Y los esclavos eran los únicos que gozaban la
libertad mientras dormían. Pero todo cambió cuando
recordaron el sueño… y la puerta que se abrió nunca más
pudieron cerrar…. Y el machete que alguna vez cortó la
caña, fue a parar al cuello del patrón… y camuflados en
danzas, los esclavos prepararon la canción que se ríe de
los soldados en fila, esos que desconocen la droga más

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exquisita del alma. Oíd mortales el verdadero grito
sagrado: Libertad!
(La Bruja Soledad asiste a Malacresta, acomodándole la
ropa y probándole distintos sombreros).
Malacresta: -Laburar sin sumisión, grito y parezco un
santo. Careciendo de ley… crucificado.
Pido por el revirazo, somos madera dura,
Algo te algarrobo mientras te sonrío.

Soy el corrosivo que tu parca ha destilado en la taza de


ginebra que tu boca ha vomitado.
¡Y por ese desliz, fuiste un infeliz, por tu distracción!

Traigo noticias negras, ya lo ves.


Cómo el reflejo me devolvió, al indio que mataron con el
alcohol.
Y cómo comen mis muertos… tienen tanto sangrando
tanto,
creo poder juntarlos esta noche.

Soy el corrosivo que tu parca ha destilado en la taza de


ginebra que tu boca ha vomitado.
¡Y por ese desliz, fuiste un infeliz, por tu distracción!
Sólo bajo un molle, querés reforzar tu sangre, con tutuma
de chicha, ver un poco más allá.
¡Y por ese desliz agradecerás a tu distracción!

Quieren ponerme en la fila, que apueste a un mañana


mejor jubilado.

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Con un mejor mentir, nada será tan fiero…
Pero miro ´pa delante y lo único que veo,
Es un rati ignorante apuntando con un fierro!!!
Miro ´pa delante y lo único que veo
Es la sierra sin fin del carnicero!!!

(La Bruja Soledad pone un platillo de sombrero a


Malacresta y golpea con un palillo. Cae desmayado.)

CUADRO SEGUNDO
(Malacresta permanece tirado en el suelo).

ESCENA II
La Bruja Soledad: - Cuánto me intriga saber qué estarán
pensando en este momento… yo por ejemplo estoy
tratando de entender ¡¿qué habrá querido decir con esto,
éste infeliz?! ¡Claro! ¡Reite! Mejor reírse un poco, que es
bastante más higiénico que andar renegando la
existencia. ¡Si, si, si! ¡Reírse y bailar! ¡Bailemos!... antes
de que caigan las bombas. Caminemos descalzos por la
vegetación y la tierra húmeda… antes de que esté todo
pavimentado. La historia se repite y estamos aquí,
parados sobre la punta de nuestro pasado. Nadie sabe
bien si reír o llorar, si vivir plenamente caminando por las
cornisas, o vegetar como un idiota esperando las siete
trompetas del juicio final, sumisos a que en medio del

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apocalipsis el buen dios nos lleve ahí donde suenan arpas
angelicales, en medio de un montón de viejos obedientes
y un cordero degollado. ¡Todos coronados de oro! ¡Cómo
llamó la atención el oro!… soñadores gringos hijos de una
gran yuta… Mirá que bonito cómo nos enseñaron a leer y
a escribir… Ahora yo ya sé mentir… Y hasta puedo rimar…
Incluso en mi peor malestar… ¡Señorita, póngame un
diez!
Que yo puedo hacerla gozar
Cogerla hasta detonar
Escucha mi flow Omar
Siente mi flow perra
Tiempo, tiempo, tiempo… Ahora me sobra tiempo…
Tengo lo que se llama VAGANCIA EXTRA. ¡He decidido ser
EXTRAVAGANTE! ¡Y que me coman los bichos! ¡Que se
me pudra la carne! ¡Qué se me caigan las tetas! ¿Y
qué?… total me sobra el tiempo. ¡Uy! Tengo que ir a
trabajar.
¿Y vos?... ¿Pensás quedarte ahí tirado?
Malacresta: - Sos vos…
(La Bruja Soledad se sienta sobre Malacresta y hacen un
juego sensual).
Malacresta: - Sos vos la soledad que se ha parado frente
mío. Se presenta como patria. Se apoderó de mis
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movimientos, de mis pensamientos… el que está más
cerca se encuentra a kilómetros de distancia. Me dice…
La Bruja Soledad: - No tengo amigos, no tengo amores,
soy tu uva más dulce. Las otras ya no volverán…
Malacresta: - De nuevo estoy en el pozo, se está
poniendo más hondo, más peligroso… una oscuridad
encantadora… reveladora… escucho que gritan mi
nombre… pero no hay nadie aquí, sólo lo que uno se
imagina. Entonces todo es descomunal, extraordinario…
que clase de adicción… que universo tan sensual… tiene
los labios tan encendidos que emiten luz… ¿Cuántas
personas habrán que te conozcan de verdad? Quiero
amarte, chuparte las tetas y los colmillos, serpentearte la
lengua en la concha y tragar esos elixires que se funden
con el calor. Penetrarte, escupirme la cabeza del choto y
metértela por el culo. Hacerte transpirar, dejarte con
ganas de volver. ¿Qué querés?... ¿Querés casarme?
¿Querés cansarme?
La Bruja Soledad: - En ese orden. Eau du cônche! No sí…
más veces derramo sangre yo… ¿Y a quién le jode? ¿Qué,
acaso te ha pegao la piedra a vos chico? ¿Acaso te ha
chorriao el jugo a vos chica? Caminamos juntos, Juntos
estamos en esto… Corremos la misma suerte. Hay algo
mío en todo esto, propiedades alucinantes. Robo y
propiedad. Una vez tuve algo, pero nunca hice una

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película… me faltaba la firma de los médicos. Ahora tengo
ganas. Eso es lo que tengo. ¡Ganas!
¡Sucias ratas habladoras! ¡Salgan de sus escondites y
sepan ladrar como perros!
¡Siéntense en la mesa y yo les arrebato la comida! Ésa es
la bronca que queda linda. La que seduce a los jueces y a
la chica que atiende el almacén de la esquina.
Deberían decir algo, intentarlo por lo menos… Ver tanta
gente buscando la felicidad con un… (Gesto de celular).
Yo creo que de aquí a unos años, las próximas
generaciones, en vez de manos, van a nacer con un solo
dedito.
Hace tiempo que quería inventar un lenguaje. Pero no
me alcanza una vida…
A éste lo entendemos bien… Tengo que coger…Tengo que
tomar… Tengo que comer... Me tengo que reír y duchar…
¿Y vos todavía me pedís que escriba?
Hay en el mundo tantas cosas asquerosas… como yo, por
ejemplo. Sólo subestima la mentira…
No te preocupes, las minas como yo estamos condenadas
a arder… como brujas en la hoguera… ¡No sientas lástima
por mí, no sientas pena por nadie!... La pena es la peor
enfermedad… Y aunque el remedio se llame vino, la
tristeza tocará tu puerta… y cuando lo haga, pagale sus

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lágrimas a esa desgraciada, pa que se vaya… Anoche me
suicidé dos veces… pero no me animé a morir.
Apagón.

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ACTO SEGUNDO
CUADRO PRIMERO
(La Bruja Soledad alumbra a Malacresta con una luz de
linterna mientras recita).
ESCENA I
Malacresta: - Increíble con qué facilidad la gente más
querida, se convierte con tanta velocidad en la peor
enemiga! Parece un juego perverso, una ironía de la vida,
mutantes transformando tu realidad en una negra
pesadilla. Quien amaste te mintió, quien confiaste te
traicionó. Sólo te pones la soga al cuello, qué
desesperación. Quien votaste te defraudó, pa quien
laburaste te estafó, queda descartarlos después de
mandarlos a la yuta que los parió.
El negro brillante de Saturno está menguante, paranoico
estoy. El viento, la nada, diluyen los secretos… van
perdiendo su valor. Fácil poesía más parece porquería…
no es esto necesario… somos puercos jalándose las perlas
de los dioses sobre estos escenarios. La vendimia se
vendió, el orujo nos dejó. ¿Será esta la mafia que
llamamos arte? No me digas que no. El rencor del otro
lado va perdiendo sus soldados… con el balero
anestesiado, amedrentado y abombado... Aaaaarghhh!!!
Increíble con qué facilidad la gente más querida, se
convierte con tanta velocidad en la peor enemiga. Parece
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un juego perverso, una ironía de la vida, vampiros
transformando tu realidad en una negra pesadilla. En una
negra… en una negra… en una blanca, en una blanca… en
una blanca pesadilla.

ESCENA II
(La Bruja Soledad mezcla las cartas en una mesa con luz
de vela).
La Bruja Soledad - El espejo agrietado que tenés al frente
divide tu rostro en mil pedazos. Cada pedacito muestra
una viva imagen de tu decadencia.
¿Cuántos años de mala suerte sin que la muerte haya
venido a buscar?
¿Quién dice que es demasiado pronto… que el corazón
merece seguir bombeando, moviendo tu cuerpo
destrozado de aquí para allá.
Pensás que todos los demás son los culpables de tu
desgracia. Querés arrasar con la humanidad entera,
matar a todos de un solo tiro, y eso es suicidio. Cuando en
realidad la batalla por conocerse a uno mismo resume a
todas las demás.
Es necesario atravesar al del espejo
¿Es el silencio sabiduría? ¿O es el silencio una mente
engañosa?
Me convierto en peste para que la peste no me moleste.
Tal vez esto versos sean la rebelión de la pena, ésa que
sabe ahogarse en una tragantada de vino.
El hartazgo del disgusto eterno.

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¿En qué se ha convertido todo esto? Nihilismo, burla,
verdugueo...
En el sabor de la venganza, en la negociación de la
vergüenza, en las ganas de pudrirse, en la destreza de
insultar y meter el dedo en la llaga, en vez de reglarle a la
existencia nuestra exquisita presencia….
… conocer la verdad. ¿Qué es la verdad?
La verdad sabe ser una flor, que por naturaleza florece y
marchita.
¿Y la mentira? La mentira también saber ser flor, pero de
esas que se marchitan velozmente. La raíz de todo cáncer.
Una farsa que hizo hemorragia por pudrirse bajo el manto
de un secreto.

ESCENA III
(Se encienden luces psicotrópicas y La Bruja Soledad baila
absurdamente)
Malacresta: - Hay más de lo que imaginás.
Cuanta verdad en una broma, cuanto en las palabras…
Cuanto en los fantasmas que te acostumbraron.
Cuanto en ese viaje que no dio pasaje de vuelta.
Hay más de lo que imaginás…
Cuantas miradas nocturnas que desaparecen con ritmo
de flashhhhhh…. Repitiendo veces.
En la moraleja del camino ajeno, no quedamos llenos… lo
sabemos.
Hay más de lo que imaginás…
No busques certezas en tu mente, no busques certezas…
en tu cabeza.

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No busques certezas en tu mente bruja…
Sólo en la naturaleza de que hay más de lo que imaginás.

Nico: - ¡Basta! ¡Basta! ¡Por favor! ¡Parece uno de esos


musicales horribles! ¡Espantosos! ¡Los detesto! ¡Por favor
terminemos con esta farsa! ¡Eve, tan bien que venías con
tu carrera de actriz! ¡La estás tirando por la borda! Yo sé
que a lo malo uno tiene que sacárselo, volcarlo en alguna
parte… pero de ahí a escribir un libro y para rematar
hacer una obra de teatro… ¡eso ya es perverso! La
verdad, no recomienden esta obra.
Eve: - ¿Y recién ahora lo decís?
Nico: - Y es que es imposible saber que va a pasar cuando
estas palabras penetren sus filtros morales, cuando
algunos conceptos aquí vertidos se instalen en sus
soliloquios... pero dejémonos de joder… ¡Hace como una
hora estamos acá y no aprendimos nada!
Eve: - ¡¿Cómo qué no?!¿Y lo de la soledad?
Nico: - qué pasa con la soledad…
Eve: - Esa parte, que estamos ahí… y que yo me tiro arriba
tuyo, vos me tocas… ¡Esa parte está buena!
Nico: - Bueno Eve, pero si esa parte nos va a salvar la obra
mejor dediquémonos al porno… claro… ¡Oh! ¡La soledad
es un estado infernalmente desgarrador! ¡Desgarrador es
este espejo de tinta!... bah… quién no sabía eso…
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¡Gracias! ¡Gracias! Son un público maravilloso, si nos
pagan lo que valemos vamos a volver el año entrante, a
meternos por la nariz el cobre de sus bolsillos, y a reír, y a
escuchar historias de la pachamama y la virgen Mariana...
El mundo es un circo, ¡el loco lo sabe!, ¡está enfermo de
vida!… todo es perfecto… hasta los imbéciles que huelen
mal… hasta los burócratas embajando la angustia para la
extinción de esta especie. ¡Burócratas! Qué ventaja
puede tener un poeta que va más a la ferretería que a la
biblioteca. Cerrando esta fábula oscura, extirpándola
como a un tumor, calcinándola hasta iluminar con su
negrura.
Al otro lado del horizonte la venganza husmea, se ríe de
los escritores de la gran obra mientras aísla los alcaloides
en su propio estómago ¿qué dimos? Trabajo… basura…
basura para armar… basura para degustar en cuatro
dimensiones… para separar el azufre del mercurio y
disponer la cristalina sal sobre un espejo sin raza… que se
yo… o acaso no viste esconderse al más triste detrás de su
calma, callando su alma…
Aquí estamos… disparando palabras para que las puertas
se abran, caminamos y los perros se acercan o ladran,
tenemos una lengua filosa y limada, y fuerte el vicio de
perder el juicio… algo de amistad hay en nuestra
demencia, no hay que ocultar las influencias, a esta
intensidad la mezclamos con paciencia, y no hay que

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olvidar la necesaria violencia… porque hasta en una
esquina fría la vida te prueba. Y no se olviden… no te
olvides… que vas a cambiar, vas a pasar, todo tu tiempo
repasando lo que hiciste, y en realidad los errores no
existen, lo que está en tu panza ya lo comiste… todo
depende de cómo lo digeriste. Nada más.
Eve: - ¿Nada más?
Nico: - Nada más.

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