Recomendada por exorcistas de la Arquidiócesis de Manila
Dios todopoderoso, que liberaste a tu pueblo de la esclavitud del
adversario, y por medio de tu Hijo derribaste a satanás como un rayo, libera a tu hijo (hija) y a toda mi familia también de toda influencia de espíritus inmundos; especialmente de los espíritus de muerte, enfermedad, desesperación, confusión, división, ansiedad, avaricia e injusticia, miedo, ira, odio, lujuria, pereza y orgullo. Ordena a satanás que se aleje de mí, de mi familia y de todos mis seres queridos por el poder de Tu Hijo unigénito. Rescátanos de las insidias demoníacas y la oscuridad. Llénanos con la luz del Espíritu Santo para que mi familia y yo podamos estar protegidos contra todas las trampas de los demonios. Concede que un ángel siempre vaya delante de nosotros y nos guíe al camino de la justicia todos los días de nuestra vida, en honor a Tu glorioso Nombre; del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, ahora y para siempre. Amén