Las fincas ganaderas están propensas a 3 tipos de riesgos laborales: mecánicos, biológicos y

ergonómicos. María Franquelina Zapata, profesional en seguridad y salud en el trabajo,

certificada por la Secretaría de Salud y Protección Social de Antioquia, explicó en qué consisten
esos riesgos.

“El riesgo más grande que tiene el sector ganadero es el mecánico y luego el biológico. El
primero parte desde la caída del trabajador desde su propia altura, golpes con animales o
las condiciones del terreno que son muy adversas, lo que puede generar que el
trabajador se accidente”
La experta además señaló que el exceso de confianza con el manejo de los semovientes
constituye un factor de riesgo, pues los empleados no tienen cuidados a la hora de trabajar con
ellos y pueden sufrir graves accidentes.

El segundo riesgo es el biológico, que se da sobre todo por el contacto y la manipulación de los
fluidos y residuos, tanto de animales como de plantas, actividad que realizan sin ninguna
protección.
Una de las cosas más difíciles que se encuentra, es lograr que nuestros empleadores hagan uso
de los elementos de protección, porque realmente ellos no están enseñados a usarlos..El tercer
factor de riesgo es el ergonómico. “Los trabajadores pueden sufrir lesiones por los
esfuerzos y los movimientos repetitivos que realizan, o por mantener una postura durante
mucho tiempo”, Manifiesta Zapata

Los propietarios de empresas ganaderas deben tener en cuenta estas advertencias, debido a
que así regen las disposiciones establecidas en el Decreto 1443 de 2014, para la
implementación del sistema de gestión de la seguridad y salud en el trabajo. En este sentido, el
sistema tiene como primer punto educar al trabajador, para que sea este quien este adopte
medidas de control. Luego se deben hacer listas de chequeo, inspecciones, mantenimiento
preventivo, capacitaciones y controles de ingeniería, con el fin de minimizar los riesgos.