¿QUÉ ES LA AUTONOMÍA DE LA VOLUNTAD?

La autonomía de la voluntad viene a ser considerado como un principio básico del derecho
contractual, esta se encuentra dentro de todas las relaciones entre los particulares y es la libertad
que gozan los particulares para pactar los contratos que les plazcan y determinar su contenido y
efectos. Su fundamento se encuentra en la aplicación de materia contractual de las doctrinas liberales
e individualistas de la Revolución Francesa, la libertad del hombre e igualdad de este, pero con
limitaciones.

Por su parte Cobo (2020), refiere que esta figura es la base de los contratos, ya que las partes pueden
regular libremente sus intereses y crear las relaciones jurídicas que los contratantes estimen
convenientes. Sin embargo, un contrato no puede ser considerado válido simplemente porque
concurra la voluntad de las partes; se debe tener en cuenta que la voluntad de ser reconocida y
enmarcada en el Ordenamiento Jurídico. Por tanto, deberá tenerse en cuenta que prohibiciones
impiden que la voluntad de las partes despliegue plenos efectos. Y que, con carácter general, no
podrá pactarse aquello que sea contrario a la Ley, la moral y el orden público.