Cuál es la relación entre derechos humanos y políticas públicas?
¿Cómo influye realmente una en la otra?
El objeto de toda política pública es la consagración del Estado de Derecho, la
democracia y el goce de los derechos humanos civiles, culturales, económicos, políticos y sociales, donde el enfoque de derecho significa asumir su contraparte, o sea, que tras el derecho hay una obligación progresiva del Estado en su cumplimiento. En las últimas décadas los derechos humanos ha venido ganando terreno en demandas por mayor libertad y reconocimiento social, esto ha conducido a una mayor precisión y especificación del desarrollo social, de las políticas públicas y de la democracia. El derecho al desarrollo es un derecho humano inalienable, donde todos los pueblos están facultados para participar en un desarrollo económico, social, cultural y político en el que puedan realizar plenamente todos los derechos humanos y libertades fundamentales. El reconocimiento legal de los derechos es ineludible pero requiere la aceptación social para que sea pleno. La lucha por la igualdad, en consecuencia, no se limita exclusivamente a los ámbitos político-formales, sino que se extiende también en los mundos privados. Las políticas públicas en el ámbito de lo social que están orientadas al reconocimiento de los derechos humanos en el derecho positivo conlleva la formulación de políticas públicas internacionales pueden ser entendidas como acciones. Los derechos humanos requieren acciones afirmativas de los Estados, y por ende políticas públicas que favorezcan su reconocimiento, respeto y realización. De igual manera los dos pactos internacionales adoptados en 1966 establecen obligaciones jurídicas específicas de los estados que requieren cursos de acción gubernamental para su materialización.