TAREA # 3

ANÁLISIS PROPIO DE EL ABC DE LA RENEGOCIACION DE DEUDA EXTERNA

REALIZADO POR: MARIA LISBETH MOREIRA VILLAMAR

La deuda externa es un tema de importancia económica que desde hace varios

años ha puesto al país en un panorama socioeconómico incierto, y que ha sido
generador de grandes inconvenientes a nivel interno como externo.

Los valores de la deuda al momento actual previo al impacto de la pandemia por

coronavirus ascienden a 40 mil millones de dólares y de estos las principales entidades
prestadoras corresponden a tenedores de bonos, FMI, CAF, Banco mundial, BID, entre
otros, aquí radica un total del 90% de la deuda, dichos valores generan pagos de hasta
8000 millones de dólares anuales, los cuales previamente ya eran imposibles de pagar, y
en la actualidad con las millonarias pérdidas económicas que ha sufrido el país por la
pandemia se volverán totalmente impagables.

La historia de la deuda externa ecuatoriana se inicia antes de que el Ecuador se

constituyera en República. Es necesario distinguir en esta historia, dos fases, la primera
es la deuda de la independencia, desde los inicios del siglo XIX. La segunda fase
comprende el último cuarto del siglo XX, cuando Ecuador se convierte en un rico
exportador de petróleo, lo que llevó a instalar la idea del boom petrolero, y continúa
presente hasta la actualidad.

Durante los peores momentos del siglo XX Ecuador tuvo que realizar enormes
esfuerzos presupuestarios que afectaron negativamente a su población. Para pagar las
obligaciones del endeudamiento externo, el país debía cumplir ineludiblemente con las
disposiciones de los organismos financieros internacionales como el Banco Mundial y
el Fondo Monetario Internacional que siempre exigían planes de ajuste estructural lo
que llevaba inevitablemente a priorizar las obligaciones financieras del Estado, en
desmedro de las obligaciones sociales para el pueblo ecuatoriano.

Eloy Alfaro describía a la deuda externa como el Nudo gordiano de Ecuador ya

que impedía el desarrollo económico y social lastrado por los programas de ajuste
estructural (paquetazos económicos) provocados por el endeudamiento externo. El
Presupuesto General del Estado a lo largo de la vida republicana ha destinado altos
porcentajes más del 50 % en muchos momentos de su historia. Y en la actualidad esto
se mantiene así.
 Además de la deuda externa el país internamente debe aproximadamente 17 mil
millones de dólares a entidades como el IESS y otras, valores que se adeudan hace
varios años y que ponen el riesgo la continuidad de estas instituciones traduciéndose
esto en una catástrofe socio sanitaria inminente que desestabilizaría aún más la
economía del país,

Este panorama no está cerca de mejorar en los años venideros más bien los
análisis económicos indican que esta deuda aumentará unos 12 mil millones entre este
año y el siguiente causando un aumento porcentual del 72% de valores adeudados,
situación que pone al país en un estado económico terrible.

Ante esta complicada situación el país tendría dos opciones posibles para poder
subsanar el impacto que ocasionan dichos problemas económicos, una de estas
corresponde a la estrategia confrontativa, y la segunda es la estrategia conciliadora,
Ecuador específicamente ha escogido la estrategia conciliadora a diferencia de
Argentina en donde avanzan a paso lento pero seguro con un enfoque confrontativo.

En los actuales momentos aún es muy prematuro establecer cuál de estas dos
estrategias y opciones es el mejor camino a seguir sobre todo cuando el país necesitaría
en los siguientes años alrededor de 9 mil millones de dólares anuales para hacer frente a
las necesidades económicas que persisten colateralmente a la deuda.

Respecto a los bonos y su renegociación, los mayores tenedores de bonos con

quienes tenemos deudas son los bancos y a pesar de que con China nos enfrentamos a
un panorama en donde se refinancian las deudas con los bancos es distinto, aquí nuestra
reputación y riesgo como pais es de aproximadamente un 9% por lo tanto en los últimos
años el país ha pagado un 8% más de interés en los prestamos realizados que países
como por ejemplo Estados Unidos.

Sin embargo este panorama ha empeorado durante todo este tiempo, siendo así
que el país en los actuales momentos tiene un riesgo del 35% al haber sido renegociadas
sus deudas por la duda de los tenedores de la capacidad de pago del país. Estas
afirmaciones representan dos situaciones críticas en las cuales se encuentra el país, las
cuales son que nadie desea ni está dispuesto a prestarle a nuestro país y la segunda que
las pocas instituciones que están dispuestas a prestarle dinero al país saben que estas
deudas posteriormente van a tener que ser renegociadas.
 Para poder disminuir los costos de la deuda e intentar pagarla en lo posterior se
pueden aplicar 3 estrategias solas o e conjunto las cuales consisten en 1) diferir los
pagos de 3 a 5 años, 2) bajar los intereses de los bonos cuyo promedio actual es de 9.5%
y 3) reducir el capital de los bonos. Con estas estrategias se pudiera obtener un recorte
del 40% al 50% en los pagos y el valor de los bonos y cuando hablamos de recorte nos
referimos a un menor pago de deuda que puede venir representado en 3 escenarios: la
obtención de años de gracia en donde no se paga nada y es probable que la deuda
disminuya su valor nominal, disminución del interés y disminución del valor del capital.

Entonces de estas estrategias las que más nos convienen son: no pagar nada, ni
capital ni intereses, los próximos 3 a 5 años y tener una rebaja en valor presente de
alrededor del 50%, este es un escenario realista que se podría conseguir, sin embargo el
escenario ideal para nuestro país sería la combinación de las 3 estrategias que
mencionamos al inicio con lo cual e alcanzaría la reducción del 50% de dicha deuda, sin
embargo es difícil alcanzar la meta ideal con los factores reales y actuales a los que nos
enfrentamos.

El asunto de la pandemia y el déficit económico mundial que conllevará la

misma dificultan las opciones de un mejor perfil de deuda en estos años para nuestro
país además de que en estas últimas semanas se dio un hecho desde el punto de vista
económico bastante cuestionable. En donde se pagaron alrededor de 1000 millones de
dólares en un supuesto intento de mejorar la tasa de interés del país, sin embargo este
movimiento ha sido muy criticado y se asegura que sería inútil en el futuro próximo.

En conclusión podemos decir que para poder reducir la deuda el Ecuador

necesita crecimiento de al menos 4% anual y un superávit fiscal del orden de 2-3% del
PIB, esto además de las metas legales que se requerirían para que se pueda disminuir el
valor actual de la deuda, estos objetivos pueden alcanzarse sin embargo con la reciente
ola de corrupción y de desvíos de fondos públicos que parece haberse incrementado en
nuestro país no solo se ven como metas imposibles de alcanzar sino que también ponen
al Ecuador en la necesidad de aumentar el valor de endeudamiento y lo colocan en una
pésima posición frente a los países que pudiesen ayudar con la misma.