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ACTVIDAD 1 MESA DE TRABAJO SOBRE CONCEPTOS BASICOS DE LA

ECONOMIA

YULIETH DAMARIS PERDOMO RAMIREZ


I.D. 745129

PROFESORA:
JACQUELINE BELTRAN SANCHEZ
NRC: 15966

CORPORACIÓN UNIVERSITARIA MINUTO DIOS


CONTADURIA PÚBLICA
VILLAVICENCIO (META)
2021
GLOSARIO CONCEPTOS BASICOS DE ECONOMIA.

CIENCIA ECONOMICA: Se trata del estudio de los recursos escasos que la


sociedad necesita para existir. su producción, extracción, intercambio, distribución
y consumo de bienes y de servicios en una sociedad y una época determinadas,
así como de los contextos que acompañan a toda actividad económica, tales como
el gobierno, la administración, la sociedad, las finanzas, la cultura, etc.

IMPORTANCIA.

La economía es la ciencia que genera relaciones entre la sociedad y la


administración pública y privada, gracias a la economía podemos medir la
estabilidad de un país, su desarrollo y crecimiento para así generar políticas que
tiendan a mejorar la situación general del bienestar social.

* Permite conocer las bases de las necesidades humanas, su producción,


distribución, reutilización y el mejor aprovechamiento de los recursos.

* Establece las bases de intercambio de bienes y servicios entre las personas,


organizaciones y hasta países.

* Genera sistemas, técnicas y políticas públicas que mejoren el bienestar social.

* Ayuda a fijar precios objetivos de los bienes y servicios.

* Permite ajustar desequilibrios políticos, financieros y hasta sociales.

* Otorga conocimientos y técnicas que previenen crisis y ayudan a salir de ellas.

* Utiliza técnicas econométricas para predecir situaciones económicas futuras que


pudieran perjudicar o beneficiar determinadas situaciones en determinado lugar,
así como la forma de maximizar los beneficios y mitigar los problemas.
El método de estudio de la economía puede reducirse a la realización de cuatro
principios básicos del método científico: observación, inducción, deducción y
comprobación. No obstante, desde el nacimiento de la disciplina, la dicotomía
respecto a cuál método de estudio emplear siempre ha estado presente.

La economía estudia la manera en que se fijan los precios de los bienes y factores
productivos, así como el comportamiento de los mercados financieros a nivel local
y global, la participación del Estado y los gobiernos en el mercado y el comercio
internacional.

El objetivo de esta ciencia es analizar todo tipo de fenómenos desde tres


aspectos: la economía descriptiva, la teoría económica y la economía aplicad

Principales métodos de estudio de la economía

Método inductivo

También denominado empírico, fue uno de los primeros métodos propuestos por
Adam Smith para estudiar la economía.

Dicho método consiste en establecer proposiciones, teorías o análisis de carácter


general obtenidas por la observación y experimentación de casos particulares
aislados. El objetivo es estudiar lo específico para llegar a una conclusión general.

En primer lugar debe llevarse a cabo una etapa de observación y registro de los
diferentes hechos económicos que se están estudiando. Posteriormente analizar
lo observado estableciendo definiciones claras de los conceptos observados.
Finalmente formular proposiciones científicas y enunciados universales generales.

Un ejemplo de este método puede precisarse a través de la ley de oferta y


demanda, donde el hecho de que los precios de diferentes productos particulares
hayan disminuido se deba a una generalidad, a saber la existencia de mayor
oferta.
Este método parte de la idea de que para llegar a las leyes que rigen la economía,
es necesario partir del estudio de casos particulares.

Método hipotético deductivo

Acogido desde los escritos de David Ricardo, se enfoca en establecer


proposiciones, teorías y análisis partiendo de un principio general, a saber una
hipótesis, con el objetivo de analizar y explicar diferentes casos particulares.

En primer lugar, debe plantearse la hipótesis que se utilizará, luego deben


analizarse los fenómenos económicos en base a dicha hipótesis para
posteriormente, enunciar leyes de carácter general.

El método deductivo es opuesto al inductivo, ya que se busca estudiar una


proposición general para explicar lo particular. De igual forma puede tomarse la ley
de la oferta y la demanda como ejemplo.

Puede afirmarse que la existencia de una gran oferta de productos originara una
disminución en la demanda de éstos por lo que bajar los precios sea una acción
razonable a realizar.

Método analítico-sintético

Al utilizar el método analítico se busca realizar un análisis profundo de las diversas


variables que conforman el fenómeno económico.

Tiene el objetivo de tomar en consideración la influencia e incidencia de diferentes


aspectos, como los sociales y políticos, en el caso de estudio. Así, de la
generalidad, se estudian las particularidades, descomponiendo el al hecho
económico.
Mientras que al realizar un juicio sintético, el objetivo que se persigue es unificar
sistemáticamente los diferentes elementos heterogéneos y aislados que
conforman al caso de estudio para comprenderlo en su totalidad.

Método matemático y estadístico

Partiendo de la idea de que la economía es una ciencia y que es crucial verificar y


comprobar todas las teorías propuestas, es imprescindible el uso de las
matemáticas y los métodos estadísticos.

Éstos ayudan a comprobar si el fenómeno económico se ajusta bien o no a las


predicciones, teorías e hipótesis previamente elaboradas.

Método behaviorista

Tratándose de una ciencia social, es vital tomar métodos de


la sociología o psicología para estudiar cómo los comportamientos sociales
influyen en las economías locales y globales.

Si bien la economía debe analizar la conducta de los diferentes agentes


económicos que intervienen en los mercados y  lo qué les motiva a formar parte
de los diferentes ciclos económicos, se hace necesario el estudio de disciplinas
que ayuden a entender la conducta humana.

Política económica

La política económica hace referencia a las diversas estrategias que los gobiernos
y el Estado ponen en práctica para conducir la economía de un país.

De ahí que la economía deba a su vez estudiar y conocer las políticas fiscales y
comerciales que los gobiernos ponen en práctica, con el objetivo de analizar el
hecho o fenómeno económico en su totalidad.
La economía para su estudio se divide en dos
campos: microeconomía y macroeconomía.

 La microeconomía se refiere al estudio de las elecciones que hacen


individuos, empresas y gobiernos, denominados "agentes económicos"; es
decir, su comportamiento ante la escasez. La microeconomía explica cómo
se determinan variables como los precios de bienes y servicios, el nivel de
salarios, el margen de beneficios y las variaciones de las rentas. Los
agentes económicos tomarán decisiones intentando obtener la máxima
satisfacción o utilidad posible.
 La macroeconomía se refiere al estudio del funcionamiento de la economía
nacional y global. Analiza las variables agregadas, como el monto total de
bienes y servicios producidos, el total de los ingresos, el nivel de empleo,
de recursos productivos, la balanza de pagos, el tipo de cambio y el
comportamiento general de los precios.
 Recientemente se han añadido los campos de la mesoeconomía y
la metaeconomía. Sin embargo, no están plenamente consolidados como
los otros dos.

Economía normativa y economía positiva


En las ciencias se distingue entre el análisis de lo que es y de lo que debiera ser,
la economía distingue entre economía positiva que estudia lo que es (desde un
punto de vista objetivo), en esta rama económica las proposiciones pueden
demostrarse erróneas según las observaciones reales. Por el contrario la
economía normativa estudia lo que debiera ser (desde un punto de vista
subjetivo), así este enfoque depende de los juicios de valor de las personas.
Ejemplos de Economía Positiva

 Índice inflacionario del mes pasado.


 Cotización del dólar para un día en específico.
 Tasa de crecimiento del PIB durante el año.
 Demanda de un producto.
 Tasa de IVA.

Ejemplos de Economía Normativa

 Índice inflacionario del mes pasado ha perjudicado al sector comercial

 El crecimiento del PBI en el 2017 disminuyó la capacidad de compra de las


personas con más bajos recursos

 Los sueldos se deberían incrementar en 10%

 Para mejorar la economía se deberían producir mayor cantidad de bienes


de consumo.

Diferencias entre la Economía Positiva y Normativa


Entre las diferencias que existen entre la Economía Positiva y Normativa se
pueden mencionar:

 La economía positiva identifica lo que es, la normativa razona lo que


debería ser.

 La positiva es objetiva, la normativa es subjetiva.

 Economía positiva es comprobable, la normativa emite juicios y criterios de


valor.

 La positiva es teórica y científica, la normativa desarrolla planteamientos y


genera ideas de pensamiento.
 La positiva puede ser descriptiva, macroeconómica o microeconómica y la
normativa puede ser tan extensa como ramas del pensamiento político
-económico, político – fiscal y político – monetario existan.

 Por último, mientras que la positiva es teórica, la normativa es práctica.

ECONOMIA DE MERCADO

La Economía de Mercado es parte de los sistemas económicos que se basan en


el análisis de la oferta y la demanda para regular los precios, la asignación de la
producción de bienes, la cantidad de dinero circulante y el consumo. La toma de
decisiones de los agentes económicos es consecuencia del estudio de la
economía en su conjunto, los mercados financieros, las políticas económicas de
cada país (influenciadas en América Latina por Estados Unidos y el comercio
internacional), las tasas de interés, las acciones del sector público y el
comportamiento del ser humano. La Economía de Mercado no se mantiene
estable a lo largo del tiempo, sino que es dinámica y va fluctuando en función de
todos los factores enumerados; incluidos los problemas económicos que puedan
surgir.

Características de la economía de mercado


De las principales características de la economía de mercado podemos destacar
las siguientes:

 Se fundamenta en la ley de oferta y demanda.

 Dentro de esta economía, es el mercado quien fija los precios de los


productos.

 El gobierno solo interviene en el marco jurídico que fomenta la libre


competencia entre las empresas.
 Hay una gran participación de empresas privadas y una menor
participación de empresas estatales.

 Es un tipo de economía descentralizada.

Ventajas y desventajas de la economía de mercado

Ventajas
Las ventajas de la economía de mercado son las siguientes:

 Al ser un tipo de economía libre, hay más libertad de elección por


parte de los consumidores.
 Este mercado fomenta la competencia de precios e impulsa su
flexibilización.
 Promueve la industria y la producción nacional.
Desventajas
La economía de mercado puede presentar algunas desventajas:

 Suele dejar a los sectores menos favorecidos en situación de


desventaja, siendo de esta manera menos equitativa que otras
economías.
 Su foco no es el ser humano sino la optimización del beneficio.
 Solo pueden participar en esta economía aquellos mercados que posean
un gran capital de inversión.
 Si no hay una correcta participación jurídica estatal, pueden surgir
mercados de competencia imperfecta.
FRONTERAS DE POSIBILIDADES DE PRODUCCION

Las posibilidades de producción de un país nos indica el máximo de bienes


que ese país es capaz de producir en un momento dado. Tal y como
acabamos de ver, estas posibilidades de producción van a depender
fundamentalmente de:

1. La cantidad de recursos de los que disponga el país. Obviamente, cuantos


más factores productivos (trabajadores, máquinas y recursos naturales) tenga el
país, más bienes podrá producir. Parece lógico pensar que un país tan grande y
con tantos recursos como Estados Unidos va a poder producir mucho más que un
país pequeño como Andorra.

2. La tecnología. Hemos aprendido que no sólo es importante la cantidad de


recursos sino también la tecnología, es decir, la manera en la que se combinan los
factores productivos. Por ejemplo, un país como Japón no tiene una gran cantidad
de factores productivos, pero aun así consigue una elevada producción. El motivo
como has podido suponer es la excelente tecnología que posee.

LA FRONTERA DE POSIBILIDADES DE PRODUCCIÓN (en adelante, FPP)


refleja las cantidades máximas de bienes y servicios que es capaz de
producir una economía en un determinado periodo de tiempo teniendo en
cuenta los factores de producción y tecnología que posee.

Para explicar la FPP vamos a imaginar que estamos en una pequeña aldea,
en la que sus habitantes sólo tienen que decidir si van a pescar peces o
recolectar vegetales. Por tanto, esta sociedad sólo puede producir estos dos
bienes. También vamos a suponer que todos los habitantes o bien pescan o bien
recolectan y que están usando todos los recursos que posean en la aldea.

Lógicamente se trata de una simplificación. No hay aldea tan pequeña en el


mundo que sólo produzca dos bienes. La FPP se trata de un modelo
económico, que si recuerdas vimos que era una simplificación de la realidad. En el
mundo real los países producen miles de productos, pero al simplificarlo sólo a 2,
podemos construir este modelo de la FPP que nos va a permitir entender mejor la
realidad.

La siguiente tabla nos muestra las diferentes combinaciones de peces y


vegetales que los habitantes de la aldea pueden obtener. De esta manera, si todos
los habitantes de la aldea se dedican a recolectar vegetales, obtendrán 60kg, pero
no podrán pescar ningún pez (combinación A).
Si unos cuantos habitantes se dedican a pescar, conseguirán 10kg de peces y
todavía podrán recolectar 55kg de vegetales. Como vemos a medida que más
habitantes se dedican a pescar, se consiguen más peces, pero menos vegetales.
En el último extremo (combinación E), todos los habitantes se dedican a pescar y
se obtienen 40kg de peces y, por supuesto, no recolectarán nada de vegetales.
BIENES ECONOMICOS

Podemos decir que un bien económico es una utilidad económica. Un bien económico es


cualquier objeto o cosa que nos sea de utilidad, que sea provechoso para nosotros y nos
proporcione un determinado valor de uso o de utilidad. En otras palabras, el bien económico es
producido para poder ser intercambiado, es una mercancía.

Para qué sirven

Los diferentes bienes económicos son los bienes que tienen la capacidad de
poder satisfacer las diferentes necesidades sociales que tienen las personas y al
mismo tiempo sirven como un medio para poder crear dinero en la sociedad.

Clasificación de los bienes económicos

La clasificación de los bienes económicos son los siguientes:

Bienes muebles: son objetos que pueden comercializarse a nivel nacional e


internacional, no tienen barreras para la salida y entrada en el mercado y son
fáciles de transportar.

Bienes inmuebles: son objetos que solo pueden consumirse o utilizarse en


la economía en donde se producen. Son construidos en lugar determinado y no
podrán ser exportados. Como por ejemplo una casa.

Bienes de consumo: sirven de forma directa para satisfacer las necesidades de


las personas. Es el aspecto más importante de la actividad económica. Pueden
ser perecederos o no perecederos; de primer orden, de segundo orden o de tercer
orden.

Bienes de producción: forman parte del proceso del bien o en la prestación de


servicios. Son conocidos como bienes de equipo. No satisfacen necesidades de
forma directa.

Bienes privados: son los bienes que pertenecen a una persona en particular y se


dice que la persona tiene derechos de propiedad sobre ellos.

Bienes públicos: son aquellos que pertenecen a todos. No es un


bien rival o excluyente, en otras palabras, el uso de este bien no perjudica al resto
de personas y puede ser disfrutado por todos.

Bienes complementarios: se usan para satisfacer necesidades y su uso influye


directamente en otros que lo complementan.
Bienes sustitutivos: son los bienes que un consumidor está dispuesto
a comprar en lugar de otros bienes.

Importancia

Los bienes económicos son de mucha importancia para las personas porque
ofrecen protección económica y les permite tener mayores oportunidades. Cuando
los bienes económicos se planifican adecuadamente se puede
desarrollar riqueza y adquirir bienes, mientras que al mismo tiempo se puede
ahorrar haciendo que exista estabilidad económica.

La escasez

La escasez es el problema fundamental de la economía. Según la ciencia


económica, los recursos materiales son limitados y la capacidad para producirlos
también, mientras que los deseos y las necesidades humanas son ilimitadas. La
escasez, entonces, es la interrelación entre esas necesidades y los recursos
disponibles. Así, pues, lo que permite que establezcamos el precio de los bienes y
los factores productivos es, precisamente, la escasez.

Ceteris paribus es una expresión en latín que significa «todo lo demás


constante». Es recurrente su uso en el análisis económico y financiero.

El término ceteris paribus sirve a un autor o expositor cuando explica el impacto de


una variable económica sobre otra. Es una forma de indicar que todos los demás
factores permanecen iguales.

Ejemplo de ceteris paribus

Veamos un ejemplo de cómo se usa la expresión ceteris paribus. Supongamos


que analizamos la oferta y demanda de los juguetes electrónicos para niños.

Imaginemos que aumenta la demanda de la mercadería debido a una coyuntura


determinada. Por ejemplo, las fiestas navideñas. Entonces, ceteris paribus, se
incrementarán el precio y la cantidad en el equilibrio de mercado.
En este caso, asumimos que se mantienen constantes otras variables como la
capacidad de producción de las empresas competidoras, el impuesto al valor
añadido, el precio de cada bien sustitutivo, entre otros.

Origen del ceteris paribus

El origen del ceteris paribus fue la obra del economista Alfred Marshall, en su


modelo de equilibrio parcial. Este tenía como objetivo estudiar por separado cada
sector económico, considerando que los demás permanecían sin modificaciones.

En otras palabras, la finalidad de Marshall era observar, de manera individual, las


relaciones entre distintas variables dentro de un determinado mercado. Con ese
fin, se asume que el resto de la economía no se mueve.

Ventajas y desventajas de ceteris paribus

Entre las ventajas de la metodología del ceteris paribus destacan:

 Simplifica el análisis, suponiendo que solo cambia una de las variables


del modelo económico. Esto es importante tomando en cuenta que en la
práctica es imposible disponer de información perfecta.
 Es útil para examinar el corto plazo debido a que algunos factores solo
varían tras largos periodos.
 Permite observar a detalle la afectación de una variable sobre otra, aislando
ese hecho de otros eventos que suceden en paralelo.

Sin embargo, también hay algunas desventajas de este tipo de estudio:

 No es realista asumir que cambia a la vez solo uno de los factores que
forman parte del modelo económico. Por el contrario, lo más común es que
muchos elementos varíen al mismo tiempo.
 No es una metodología eficiente para estudiar el largo plazo tomando en
cuenta que, a mayor tiempo transcurrido, más circunstancias pueden
cambiar.
Escuelas de pensamiento económico: Principales representantes y sus
aportes a la ciencia económica.

La economía es la ciencia social que estudia la forma en que las sociedades


asignan sus recursos escasos a la producción de los bienes y servicios que van a
satisfacer sus necesidades (siempre crecientes).

El estudio de la economía puede dividirse en dos grandes campos.

La teoría de los precios, o microeconomía, que explica cómo la interacción de


la oferta y la demanda en mercados con distintos niveles de competencia
determinan los precios de cada bien, el nivel de salarios, el margen de beneficios y
las variaciones de las rentas.

La microeconomía parte del supuesto de comportamiento racional.

Los ciudadanos gastarán su renta intentando obtener la máxima satisfacción


posible o, como dicen los analistas económicos, tratarán de maximizar su utilidad.

Por su parte, los empresarios intentarán obtener el máximo beneficio posible por sobre sus
costos de producción.

El segundo campo, el de la macroeconomía, comprende los problemas relativos al


nivel de empleo y al índice de ingresos o renta de un país.

El estudio de la macroeconomía surgió con la publicación de La teoría general


sobre el empleo, el interés y el dinero (1936), del economista británico John
Maynard Keynes.

Sus conclusiones sobre las fases de expansión y depresión económica se centran


en la demanda total, o agregada, de bienes y servicios por parte de consumidores,
inversores y gobiernos.

Según Keynes, una demanda agregada insuficiente generará desempleo; la


solución estaría en incrementar la inversión de las empresas o del gasto público,
aunque para ello sea necesario tener un déficit presupuestario.
Principales escuelas de pensamiento económico a través del tiempo

Las cuestiones económicas han preocupado a muchos intelectuales a lo largo de


los siglos. En la antigua Grecia, Aristóteles y Platón disertaron sobre los
problemas relativos a la riqueza, la propiedad y el comercio.

Durante la Edad Media predominaron las ideas de la Iglesia, se impuso el Derecho


Canónico, que condenaba la usura (el cobro de intereses abusivos a cambio de
efectivo) y consideraba que el comercio era una actividad inferior a la agricultura.

La economía, como ciencia moderna independiente de la filosofía y de la política,


data de la publicación de la obra Investigación sobre la naturaleza y causas de la
riqueza de las naciones (más conocida por el título abreviado de La riqueza de las
naciones, 1776), del filósofo y economista escocés Adam Smith.

El mercantilismo y las especulaciones de los fisiócratas precedieron a la economía


clásica de Smith y sus seguidores del siglo XIX.

A. Mercantilismo

El desarrollo de los modernos nacionalismos a lo largo del siglo XVI desvió la


atención de los pensadores de la época hacia cómo incrementar la riqueza y el
poder de los estados nacionales.

La política económica que imperaba en aquella época, el mercantilismo,


fomentaba el autoabastecimiento de las naciones. Esta doctrina económica imperó
en Inglaterra y en el resto de Europa occidental desde el siglo XVI hasta el siglo
XVIII.

Los mercantilistas consideraban que la riqueza de una nación dependía de la


cantidad de oro y plata que tuviese.

Aparte de las minas de oro y plata descubiertas por España en el continente


americano, una nación sólo podía aumentar sus reservas de estos metales
preciosos vendiendo más productos a otros países de los que compraba.
El conseguir una balanza de pagos con saldo positivo implicaba que los demás
países tenían que pagar la diferencia con oro y plata.

Los mercantilistas daban por sentado que su país estaría siempre en guerra con
otros, o preparándose para la próxima contienda.

Si tenían oro y plata, los dirigentes podrían pagar a mercenarios para combatir,
como hizo el rey Jorge III de Inglaterra durante la guerra de la Independencia
estadounidense.

En caso de necesidad, el monarca también podría comprar armas, uniformes y


comida para los soldados. Jean. B. Colbert (1619-1683), ministro de Luis XIV,
institucionalizó la exportación de productos franceses para crear oro y a cuyos
efectos desarrolló de forma muy importante la industria gala.

Esta preocupación mercantilista por acumular metales preciosos también afectaba


a la política interna.

Era imprescindible que los salarios fueran bajos y que la población creciese. Una
población numerosa y mal pagada produciría muchos bienes a un precio lo
suficiente bajo como para poder venderlos en el exterior.

Se obligaba a la gente a trabajar jornadas largas, y se consideraba un despilfarro


el consumo de té, ginebra, tejidos de seda, entre otros.

De esta filosofía también se deducía que era positivo para la economía de un país
el trabajo infantil. Un autor mercantilista tenía un plan para los niños de los pobres:
«cuando estos niños tienen cuatro años, hay que llevarlos al asilo para pobres de
la región, donde se les enseñará a leer durante dos horas al día, y se les tendrá
trabajando el resto del día en las tareas que mejor se ajusten a su edad, fuerza y
capacidad».
B. Fisiocracia

Esta doctrina económica estuvo en boga en Francia durante la segunda mitad del
siglo XVIII y surgió como una reacción ante las políticas restrictivas del
mercantilismo.

El fundador de la escuela, François Quesnay, era médico de cabecera en la corte


del rey Luis XV. Su libro más conocido, Tableau Économique (1758), intentaba
establecer los flujos de ingresos en una economía, anticipándose a la contabilidad
nacional, creada en el siglo XX. Según los fisiócratas, toda la riqueza era
generada por la agricultura; gracias al comercio, esta riqueza pasaba de los
agricultores al resto de la sociedad. Los fisiócratas eran partidarios del libre
comercio y del laissez-faire (doctrina que defiende que los gobiernos no deben
intervenir en la economía).

También sostenían que los ingresos del Estado tenían que provenir de un único
impuesto que debía gravar a la actividad primaria, la única fuente de riqueza para
ellos. Adam Smith conoció a los principales fisiócratas y escribió sobre sus
doctrinas, casi siempre de forma positiva.

C. Escuela Clásica

Como cuerpo teórico coherente, la escuela clásica de pensamiento económico


parte de los escritos de Smith, continúa con la obra de los economistas británicos
Thomas Robert Malthus y David Ricardo, y culmina con la síntesis de John Stuart
Mill, discípulo de Ricardo.

Aunque fueron frecuentes las divergencias entre los economistas desde la


publicación de La Riqueza de las Naciones (1776) de Smith hasta la de Principios
de Economía Política (1848) de Mill, los economistas pertenecientes a esta
escuela coincidían en los conceptos principales. Todos defendían la propiedad
privada, los mercados y creían, como decía Mill, que «sólo a través del principio
de la competencia tiene la economía política una pretensión de ser ciencia».
Compartían la desconfianza de Smith hacia los gobiernos, y su fe ciega en el
poder del egoísmo y su famosa «mano invisible», que hacía posible que el
bienestar social se alcanzara mediante la búsqueda individual del interés personal.

Los clásicos tomaron de Ricardo el concepto de rendimientos decrecientes, que


afirma que a medida que se aumenta la fuerza de trabajo y el capital que se utiliza
para labrar la tierra, disminuyen los rendimientos o, como decía Ricardo,
«superada cierta etapa, no muy avanzada, el progreso de la agricultura disminuye
de una forma paulatina».

El alcance de la ciencia económica se amplió de manera considerable cuando


Smith subrayó el papel del consumo sobre el de la producción. Smith confiaba en
que era posible aumentar el nivel general de vida del conjunto de la comunidad.

Defendía que era esencial permitir que los individuos intentaran alcanzar su propio
bienestar como medio para aumentar la prosperidad de toda la sociedad.

En el lado opuesto, Malthus, en su conocido e influyente Ensayo sobre el Principio


de la Población (1798), planteaba la nota pesimista de la Escuela Clásica,

al afirmar que las esperanzas de mayor prosperidad se escollarían contra la roca


de un excesivo crecimiento de la población. Según Malthus, los alimentos sólo
aumentaban adecuándose a una progresión aritmética (2-4-6-8-10, etc.), mientras
que la población se duplicaba cada generación (2-4-8-16-32, etc.), salvo que esta
tendencia se controlara, o por la naturaleza o por la propia prudencia de la
especie. Malthus sostenía que el control natural era «positivo»: «El poder de la
población es tan superior al poder de la tierra para permitir la subsistencia del
hombre, que la muerte prematura tiene que frenar hasta cierto punto el
crecimiento del ser humano». Este procedimiento de frenar el crecimiento eran las
guerras, las epidemias, la peste, las plagas, los vicios humanos y las hambrunas,
que se combinaban para controlar el volumen de la población mundial y limitarlo a
la oferta de alimentos.
La única forma de escapar a este imperativo de la humanidad y de los horrores de
un control positivo de la naturaleza, era la limitación voluntaria del crecimiento de
la población, no mediante un control de natalidad, contrario a las convicciones
religiosas de Malthus, sino retrasando la edad nupcial, reduciendo así el volumen
de las familias. Las doctrinas pesimistas de este autor clásico dieron a la
economía el sobrenombre de «ciencia lúgubre».

Los Principios de Economía Política de Mill constituyeron el centro de esta ciencia


hasta finales del siglo XIX.

Aunque Mill aceptaba las teorías de sus predecesores clásicos, confiaba más en
la posibilidad de educar a la clase obrera para que limitase su reproducción de lo
que lo hacían Ricardo y Malthus.

Además, Mill era un reformista que quería gravar con fuerza las herencias, e
incluso permitir que el gobierno asumiera un mayor protagonismo a la hora de
proteger a los niños y a los trabajadores.

Fue muy crítico con las prácticas que desarrollaban las empresas y favorecía la
gestión cooperativa de las fábricas por parte de los trabajadores. Mill representó
un puente entre la economía clásica del laissez-faire y el Estado de Bienestar.

Acerca de los mercados, los economistas clásicos aceptaban la «ley de Say»,


formulada por el economista francés Jean Baptiste Say.

Esta ley sostiene que el riesgo de un desempleo masivo en una economía


competitiva es despreciable, porque la oferta crea su propia demanda, limitada por
la cantidad de mano de obra y los recursos naturales disponibles para producir.

Cada aumento de la producción aumenta los salarios y los demás ingresos que se
necesitan para poder comprar esa cantidad adicional producida.

D. Marxismo (algunos autores lo ponen dentro de la Escuela Clásica)

La oposición a la Escuela Clásica provino de los primeros autores socialistas,


como el filósofo social francés Claude Henri de Rouvroy conde de Saint-Simon, y
el utópico británico Robert Owen. Sin embargo, fue Karl Marx el autor de las
teorías económicas socialistas más importantes, manifiestas en su principal
trabajo, El Capital (3 vols., 1867-1894).

Para la perspectiva clásica del capitalismo, el marxismo representó una seria


recusación, aunque no dejaba de ser, en algunos aspectos, una variante de la
temática clásica.

Por ejemplo, Marx adoptó la teoría del valor trabajo de Ricardo. Con algunas
matizaciones, Ricardo explicó que los precios eran la consecuencia de la cantidad
de trabajo que se necesitaba para producir un bien.

Ricardo formuló esta teoría del valor para facilitar el análisis, de forma que se
pudiera entender la diversidad de precios.

Para Marx, la teoría del valor trabajo representaba la clave del modo de proceder
del capitalismo, la causa de todos los abusos y de toda la explotación generada
por un sistema injusto.

Exiliado de Alemania, Marx pasó muchos años en Londres, donde vivió gracias a
la ayuda de su amigo y colaborador Friedrich Engels, y a los ingresos derivados
de sus ocasionales contribuciones en la prensa. Desarrolló su extensa teoría en la
biblioteca del Museo Británico.

Los estudios históricos y los análisis económicos de Marx convencieron a Engels


de que los beneficios y los demás ingresos procedentes de una explotación sin
escrúpulos de las propiedades y las rentas son el resultado del fraude y el poder
que ejercen los fuertes sobre los débiles. Sobre esta crítica se alza la crítica
económica que desemboca en la certificación histórica de la lucha de clases.

La «acumulación primitiva» en la historia económica de Inglaterra fue posible


gracias a la delimitación y al cercamiento de las tierras.

Durante los siglos XVII y XVIII los terratenientes utilizaron su poder en el


Parlamento para quitar a los agricultores los derechos que por tradición tenían
sobre las tierras comunales. Al privatizar estas tierras, empujaron a sus víctimas a
las ciudades y a las fábricas.

Sin tierras ni herramientas, los hombres, las mujeres y los niños tenían que
trabajar para conseguir un salario.

Así, el principal conflicto, según Marx, se producía entre la denominada clase


capitalista, que detentaba la propiedad de los medios de producción (fábricas y
máquinas) y la clase trabajadora o proletariado, que no tenía nada, salvo sus
propias manos.

La explotación, eje de la doctrina de Karl Marx, se mide por la capacidad de los


capitalistas para pagar sólo salarios de subsistencia a sus empleados, obteniendo
de su trabajo un beneficio (o plusvalía), que era la diferencia entre los salarios
pagados y los precios de venta de los bienes en los mercados.

Aunque en el Manifiesto Comunista (1848) Marx y Engels pagaban un pequeño


tributo a los logros materiales del capitalismo, estaban convencidos que estos
logros eran transitorios y que las contradicciones inherentes al capitalismo y al
proceso de lucha de clases terminarían por destruirlo, al igual que en el pasado
había ocurrido con el extinto feudalismo medieval.

A este respecto, los escritos de Marx se alejan de la tradición de la economía


clásica inglesa, siguiendo la metafísica del filósofo alemán Georg Wilhelm
Friedrich Hegel, el cual consideraba que la historia de la humanidad y de la
filosofía era una progresión dialéctica: tesis, antítesis y síntesis. Por ejemplo, una
tesis puede ser un conjunto de acuerdos económicos, como el feudalismo o el
capitalismo. Su contrapuesto, o antítesis, sería, por ejemplo, el socialismo, como
sistema contrario al capitalismo. La confrontación de la tesis y la antítesis daría
paso a una evolución, que sería la síntesis, en este caso, el comunismo que
permite combinar la tecnología capitalista con la propiedad pública de las fábricas
y las granjas.
A largo plazo, Marx creía que el sistema capitalista desaparecería debido a que su
tendencia a acumular la riqueza en unas pocas manos provocaría crecientes crisis
debidas al exceso de oferta y a un progresivo aumento del desempleo.

Para Marx, la contradicción entre los adelantos tecnológicos, y el consiguiente


aumento de la eficacia productiva y la reducción del poder adquisitivo que
impediría adquirir las cantidades adicionales de productos, sería la causa del
hundimiento del capitalismo.

Según Marx, las crisis del capitalismo se reflejarían en un desplome de los


beneficios, una mayor conflictividad entre trabajadores y empresarios e
importantes depresiones económicas.

El resultado de esta lucha de clases culminaría en la revolución y en el avance


hacia, en primer lugar, el socialismo, para al fin avanzar hacia la implantación
gradual del comunismo.

En una primera etapa todavía sería necesario tener un Estado que eliminara la
resistencia de los capitalistas. Cada trabajador sería remunerado en función de su
aportación a la sociedad.

Cuando se implantara el comunismo, el Estado, cuyo objetivo principal consiste en


oprimir a las clases sociales, desaparecería, y cada individuo percibiría, en ese
porvenir utópico, en razón de sus necesidades.

E. Escuela Neoclásica

La economía clásica partía del principio de escasez, como lo muestra la ley de


rendimientos decrecientes y la doctrina malthusiana sobre la población.

A partir de la década de 1870, los economistas neoclásicos como William Stanley


Jevons en Gran Bretaña, Léon Walras en Suiza, y Karl Menger en Austria,
imprimieron un giro a la economía, abandonaron las limitaciones de la oferta para
centrarse en la interpretación de las preferencias de los consumidores en términos
psicológicos.
Al fijarse en el estudio de la utilidad o satisfacción obtenida con la última unidad, o
unidad marginal, consumida, los neoclásicos explicaban la formación de los
precios, no en función de la cantidad de trabajo necesaria para producir los
bienes, como en las teorías de Ricardo y de Marx, sino en función de la intensidad
de la preferencia de los consumidores en obtener una unidad adicional de un
determinado producto.

El economista británico Alfred Marshall, en su obra maestra, Principios de


Economía (1890), explicaba la demanda a partir del principio de utilidad marginal,
y la oferta a partir del coste marginal (coste de producir la última unidad).

En los mercados competitivos, las preferencias de los consumidores hacia los


bienes más baratos y la de los productores hacia los más caros, se ajustarían para
alcanzar un nivel de equilibrio. Ese precio de equilibrio sería aquel que hiciera
coincidir la cantidad que los compradores quieren comprar con la que los
productores desean vender.

Este equilibrio también se alcanzaría en los mercados de dinero y de trabajo. En


los mercados financieros, los tipos de interés equilibrarían la cantidad de dinero
que desean prestar los ahorradores y la cantidad de dinero que desean pedir
prestado los inversores.

Los prestatarios quieren utilizar los préstamos que reciben para invertir en
actividades que les permitan obtener beneficios superiores a los tipos de interés
que tienen que pagar por los préstamos.

Por su parte, los ahorradores cobran un precio a cambio de ceder su dinero y


posponer la percepción de la utilidad que obtendrán al gastarlo. En el mercado de
trabajo se alcanza asimismo un equilibrio.

En los mercados de trabajo competitivos, los salarios pagados representan, por lo


menos, el valor que el empresario otorga a la producción obtenida durante las
horas trabajadas, que tiene que ser igual a la compensación que desea recibir el
trabajador a cambio del cansancio y el tedio laboral.
La doctrina neoclásica es, de forma implícita, conservadora. Los defensores de
esta doctrina prefieren que operen los mercados competitivos a que haya una
intervención pública.

Al menos hasta la Gran Depresión de la década de 1930, se defendía que la mejor


política era la que reflejaba el pensamiento de Adam Smith: bajos impuestos,
ahorro en el gasto público y presupuestos equilibrados.

A los neoclásicos no les preocupa la causa de la riqueza, explican que la desigual


distribución de ésta y de los ingresos se debe en gran medida a los distintos
grados de inteligencia, talento, energía y ambición de las personas.

Por lo tanto, el éxito de cada individuo depende de sus características individuales,


y no de que se beneficien de ventajas excepcionales en el sentido que hablaba
Marx.

En las sociedades capitalistas, la economía neoclásica es la doctrina


predominante a la hora de explicar la formación de los precios y el origen de los
ingresos.

De hecho la mayor parte de la Microeconomía que se estudia hoy en las


universidades (a nivel de grado) se la debemos principalmente a ellos.

F. Economía Keynesiana

John Maynard Keynes fue alumno de Alfred Marshall y defensor de la economía


neoclásica hasta la década de 1930. La Gran Depresión sorprendió a economistas
y políticos por igual.

Los economistas siguieron defendiendo, a pesar de la experiencia contraria, que el


tiempo y la naturaleza restaurarían el crecimiento económico si los gobiernos se
abstenían de intervenir en el proceso económico. Por desgracia, los antiguos
remedios no funcionaron.
En Estados Unidos, la victoria en las elecciones presidenciales de Franklin D.
Roosevelt (1932) sobre Herbert Hoover marcó el final político de las doctrinas del
laissez-faire.

Se necesitaban nuevas políticas y nuevas explicaciones, que fue lo que en ese


momento proporcionó Keynes.

En su ya citada Teoría general (1936), aparecía un axioma central que puede


resumirse en dos grandes afirmaciones:

1) las teorías existentes sobre el desempleo no tenían ningún sentido; ni un nivel


de precios elevado ni unos salarios altos podían explicar la persistente depresión
económica y el desempleo generalizado; 

2) por el contrario, se proponía una explicación alternativa a estos fenómenos que


giraba en torno a lo que se denominaba demanda agregada, es decir, el gasto
total de los consumidores, los inversores y las instituciones públicas.

Cuando la demanda agregada es insuficiente, decía Keynes, las ventas


disminuyen y se pierden puestos de trabajo; cuando la demanda agregada es alta
y crece, la economía prospera.

A partir de estas dos afirmaciones genéricas, surgió una poderosa teoría que
permitía explicar el comportamiento económico.

Esta interpretación constituye la base de la macroeconomía contemporánea.


Puesto que la cantidad de bienes que puede adquirir un consumidor está limitada
por los ingresos que éste percibe, los consumidores no pueden ser responsables
de los altibajos del ciclo económico.

Por lo tanto, las fuerzas motoras de la economía son los inversores (los
empresarios) y los gobiernos. Durante una recesión, y también durante una
depresión económica, hay que fomentar la inversión privada o, en su defecto,
aumentar el gasto público.
Si lo que se produce es una ligera contracción, hay que facilitar la concesión de
créditos y reducir los tipos de interés (substrato fundamental de la política
monetaria), para estimular la inversión privada y restablecer la demanda
agregada, aumentándola de forma que se pueda alcanzar el pleno empleo.

Si la contracción de la economía es grande, habrá que incurrir en déficit


presupuestarios, invirtiendo en obras públicas o concediendo subvenciones a
fondo perdido a los más perjudicados.

G. Economía Analítica

Tanto la teoría neoclásica de los precios como la teoría keynesiana de los


ingresos han sido desarrolladas de forma analítica por matemáticos, utilizando
técnicas de cálculo, álgebra lineal y otras sofisticadas técnicas de análisis
cuantitativo.

En la especialidad denominada econometría se une la ciencia económica con la


matemática y la estadística. Los económetras crean modelos que vinculan cientos,
a veces miles de ecuaciones, para intentar explicar el comportamiento agregado
de una economía.

Los modelos econométricos son utilizados por empresas y gobiernos como


herramientas de predicción, aunque su grado de precisión no es ni mayor ni menor
que cualquier otra técnica de previsión del futuro.

El análisis operativo y el análisis input-output son dos especialidades en las que


cooperan los expertos en análisis económico y los matemáticos.

El análisis operativo subraya la necesidad de plantear los problemas de una


manera sistemática.

Por lo general, se trata de coordinar los distintos departamentos y las diferentes


operaciones que tienen lugar en el seno de una corporación que dirige varias
fábricas, produciendo muchos bienes, por lo que hay que utilizar las instalaciones
de forma que se puedan minimizar los costes y maximizar la eficiencia.

Para ello se acude a ingenieros, economistas, psicólogos, estadísticos y


matemáticos.

Según su propio creador, el economista estadounidense de origen ruso Wassily


Leontief, las tablas input-output «describen el flujo de bienes y servicios entre
todos los sectores industriales de una economía durante determinado periodo».
Aunque la construcción de esta tabla es muy compleja, este método ha
revolucionado el pensamiento económico. Hoy está muy extendido como método
de análisis, tanto en los países socialistas como en los capitalistas.
REFERENCIAS BLIBLIOGRAFICAS

 https://concepto.de/ciencias-economicas/#ixzz6rUpKgyTS

https://economipedia.com/definiciones/ceteris-paribus.html#:~:text=Ceteris
%20paribus%20es%20una%20expresi%C3%B3n,una%20variable%20econ
%C3%B3mica%20sobre%20otra.

https://economipedia.com/definiciones/ley-de-escasez.html

https://www.gestiopolis.com/principales-escuelas-economicas/

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