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UNIVERSIDAD ABIERTA PARA ADULTOS

Tema

Tarea 1

Carrera:

Licenciatura en Derecho

Asignatura

Derecho Político

Presentado por

Yanibel Mercedes García Rodríguez

16-3893

Fecha

Noviembre del 2019

Santiago, Rep. Dom


Introducción

El derecho político es el estudio de la estructura dinámica de la organización


política y sus relaciones con la sociedad, el orden y la actividad política,
incorporando el método sociológico y político, sin abandonar el jurídico, inherente
a la disciplina, por la relación fundamental del derecho con los demás elementos
de la estructura de la organización política. De este modo, siguiendo en líneas
generales la orientación de la doctrina actual, el derecho político se nos presenta
como un sistema cuya unidad resulta del enlace de una teoría de la sociedad, una
teoría de la organización, una teoría de la constitución y una teoría de los actos
políticos.
Distinguido participante:

Consulte la bibliografía básica de la unidad y demás fuentes


complementarias del curso; luego realice la actividad que se describe a
continuación:

Elabore un cuadro de dos columnas, en el primero debe establecer el


derecho fundamental reconocido en la Constitución y en el segundo cuál es
el mecanismo de resguardo que dispone dicho cuerpo legal en caso de ser
violentado.

Derecho fundamental reconocido en Cuál es el mecanismo de resguardo


la Constitución que dispone dicho cuerpo legal en
caso de ser violentado.
de la Constitución dominicana, «De los Los derechos de ciudadanía se
Derechos, Garantías y Deberes suspenden en los casos de:
Fundamentales», se incluye, a partir del 1) Condenación irrevocable a pena
artículo 37, el derecho a la vida, el criminal, hasta el término de la misma;
derecho a la dignidad Humana, el 2) Interdicción judicial legalmente
derecho a la Igualdad, el derecho a la pronunciada, mientras ésta dure;
libertad y a la seguridad personal, la 3) Aceptación en territorio dominicano
prohibición de la esclavitud, el derecho de cargos o funciones públicas de un
a la integridad personal, el derecho al gobierno o Estado extranjero sin previa
libre desarrollo de la personalidad, el autorización del Poder Ejecutivo;
derecho a la intimidad y al honor 4) Violación a las condiciones en que
personal, la libertad de conciencia y de la naturalización fue otorgada.
cultos, la libertad de tránsito, libertad de
asociación, libertad de reunión y la
libertad de expresión e información.

Dentro de los derechos fundamentales


económicos y sociales, se encuentran:
la libertad de empresa, el derecho de
propiedad, el derecho a la propiedad
intelectual, el derecho del consumidor,
la seguridad alimentaria, los derechos
de la familia, protección de las
personas menores de edad, protección
de las personas de la tercera edad,
protección de las personas con
discapacidad, derecho a la vivienda,
derecho a la seguridad social, derecho
a la salud, derecho al trabajo, derecho
a la educación.

Dentro de los derechos fundamentales


culturales y deportivos, la Constitución
consigna el derecho a la cultura y
derecho al deporte. Asimismo, dentro
de los derechos colectivos y del medio
ambiente se encuentran protegidos los
derechos colectivos y difusos y la
protección del medio ambiente.
Los derechos fundamentales son
aquellos inherentes al ser humano, que
pertenecen a toda persona en razón a
su dignidad.
Concepto objetivo: el Estado está
ligado a las leyes, normas y otros; por
lo cual, ya es un Estado de derecho.

En el caso dominicano, los derechos


fundamentales son producto de la
comunidad política y, por tanto, no
pueden ser considerados como previos
a ella. Una de las discusiones más
importantes en el Derecho
Constitucional es el origen y naturaleza
de los derechos fundamentales. La
concepción liberal tradicional que es la
que se ve reflejada en las
constituciones tiende a asumir que los
derechos fundamentales son previos a
la comunidad política y que, por lo
tanto, ésta gira en torno a ellos y no
hace más que actuar sobre la base de
lo que ya existe. La diferencia es
importante porque va al quid del
problema constitucional. Si prevalece la
concepción iusnaturalista, entonces los
derechos son el origen y fin último de la
comunidad política (el alfa y el omega,
por usar otro término). Esto implica que
la capacidad de los seres humanos
para decidir sobre la forma y contenido
de los derechos es limitada y que la
progresiva democratización de las
sociedades humanas es un proceso de
descubrimiento y no de creación. Bajo
este supuesto, lo que gobierna la
sociedad humana es el conjunto de
derechos decididos por un legislador
supremo del universo. La posición
contraria tiene consecuencias
completamente distintas. Implica que el
camino de la política no tiene un fin
cierto, que el camino lo trazan las
sociedades y que cada uno de los
derechos ha sido construido sobre la
base de la interacción social. Descarta
un camino preconcebido para los
derechos y su desarrollo, convirtiendo
así el ámbito político (y el jurídico a
través de la Constitución) en el
elemento determinante de su
desarrollo. En el caso de la
Constitución de la República
Dominicana (CRD),
independientemente del énfasis que
ésta hace en la concepción liberal de
los derechos, es innegable que al
declarar el desarrollo de la “persona
humana” como su fin último ha
establecido un punto de referencia
axiológico sumamente importante.
Jorge Prats ve en ello una declaración
implícita del principio de la dignidad
humana como principio estructural de la
CRD y punto de partida de su
concepción de los derechos. En sentido
general, esto es correcto. La
Declaración Universal de los Derechos
Humanos, fuente de inspiración de la
nueva redacción de la declaración de
derechos en la CRD, tiene la función de
afirmar “el valor de la persona humana
y de su protección como fundamento de
todo orden jurídico-político” .No quiere
esto decir que la CRD asume una
posición iusnaturalista en lo relativo a
los derechos fundamentales. En
principio, la “dignidad humana” es un
concepto -o valor- con un contenido
axiológico que existe
independientemente del ordenamiento
jurídico positivo, por lo que son extra
constitucionales en la medida en que
no se encuentren previstos dentro del
ordenamiento Sin embargo, en el caso
dominicano, tiene validez o fuerza
normativa sólo en la medida en que sus
elementos constitutivos han sido
adoptados por la CRD misma o por los
mecanismos que ésta prevé. Tal como
afirma Pérez Luño para el caso
español, los derechos fundamentales
sólo son  jurídicos cuando han sido
adoptados de acuerdo con la CRD.
Sólo entonces puede afirmarse que son
una manifestación de la voluntad
soberana del pueblo dominicano. No
hay que olvidar que el contenido de
estos valores no es estático, cambia
con el tiempo.  Así que no puede
afirmarse que dentro del sistema
constitucional dominicano ese concepto
tiene fuerza jurídica. Lo que sí la tiene
son los derechos fundamentales. Lo
contrario implicaría volver tan voluble el
contenido de los derechos
fundamentales que terminaríamos no
sabiendo cuáles son, con la
consiguiente devaluación normativa.
Incluso el artículo 10 de la CRD limita la
posible expansión de los derechos a
aquellos que sean de la misma
naturaleza que los ya proclamados.
Esto es, en todo caso una licencia para
la interpretación abierta de la aplicación
de los derechos fundamentales
reconocidos por el Estado dominicano.
Ahora bien, la doctrina dominicana está
conteste en que este problema ha sido
superado en buena medida por el
proceso de positivización en el plano
interno e internacional de los derechos
fundamentales que sirven de garantía a
los valores democráticos modernos. En
virtud de esos caracteres, los derechos
fundamentales, a diferencia de los
demás derechos, se configuran como
otros vínculos sustanciales que son
normativamente impuestos, en garantía
de intereses y necesidades de todos, y
estipulados como vitales, por eso el
nombre de fundamentales, como son:
la vida, la libertad y la subsistencia,
frente a las decisiones de la mayoría y
frente al libre mercado.

La forma universal, inalienable,


imprescriptible y constitucional de estos
derechos se revela, en otras palabras,
como la técnica -o garantía – prevista
para la tutela de todo aquello que en el
pacto constitucional se ha considerado
fundamental.

El carácter universal de los derechos


fundamentales se refiere a que todos
estos derechos son poseídos por todos
los hombres, lo que quiere decir que
entre todas las personas se da una
estricta igualdad jurídica básica con
relación a ellos.

La reforma constitucional del año 2010


extendió considerablemente el catálogo
de derechos fundamentales en el
ordenamiento jurídico dominicano,
fortaleciendo su carácter vinculante
frente a los poderes públicos y creando
procedimientos e instituciones
especiales que velan por el respeto y la
garantía de los mismos, como por
ejemplo instituyendo el Tribunal
Constitucional, cuyas facultades
incluyen la revisión de las decisiones de
la Suprema Corte de Justicia y su
posible revocación o anulación en los
casos en que se entienda que han
vulnerado un derecho fundamental o
una garantía procesal.
Conclusión

La ciencia política, en lo esencial, forma parte de su contenido, así como también


la historia del pensamiento político. Su objeto y contenido le proporcionan
autonomía y sustantividad, y dejan de tener sentido, a su respecto, de las distintas
denominaciones que podían, de acuerdo con la posición tradicional, serle
aplicables. Así. La denominación de teoría del estado (staatslehre), característica
de la ciencia alemana; la de ciencia política (political science) en Inglaterra; la de
derecho constitucional (droit constitutionnel) en Francia entre otras. Sensible a la
realidad social y política contemporánea, la transformación de la estructura de la
sociedad y de la forma política la convierten en la rama jurídica encargada de la
descripción y aplicación de los fenómenos políticos y su cristalización en nuevas
formas jurídica
Bibliografía

• Jorge Prats, Eduardo. Derecho Constitucional Tomo I, IV

• Potentini Adames, Trajano Vidal. (2010). Manual de Derecho Constitucional


Dominicano. Primera Edición 2010. Ediciones Jurídicas Trajano Potentini.
República Dominicana.

• Constitución, proclamada el 26 de enero. Publicada en la Gaceta Oficial No.


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