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La primera ola del Covid 19 llego a Cochabamba en marzo, lo que provoco que se
suspendieran todas las actividades académicas casi por un mes, después de ello la
universidad tuvo que analizar el retorno a clases, pero no podría ser presenciales.
Entonces, la universidad a través de su MAE decide virtualizar las clases y para ese
propósito realizar dos programas de capacitación, una para los docentes y otra para los
estudiantes.
La capacitación de los docentes fue por dos semanas para el uso de la plataforma
Moodle y de manera paralela para el uso de la plataforma Classroom. En estas
capacitaciones se vio las deficiencias en el uso de los paquetes básicos y plataformas,
muchos de los docentes incluso contrataron capacitadores personales para aprender a
manejar las plataformas y los paquetes básicos que estas competencias requieren.
También, hubo docentes que no se capacitaron y decidieron utilizar otros medios para
sus clases como el Email y WhatsApp, lo que genero muchos reclamos de los
estudiantes.
Durante la gestión 1/2020 existió mucho abandono de los estudiantes por falta de
equipos y conexión a internet, además de universitarios contagiados, todo esto provoco
un porcentaje de ausentismo importante. A todo ello se suma las competencias de los
universitarios, es decir, mucho de los estudiantes no lograron aprender a utilizar las
plataformas e incluso no lograban utilizar los paquetes básicos necesarios para las clases
virtuales, sobre todo en los primeros semestres, etapa en la cual los docentes, como mi
persona, tuvo que realizar pequeñas capacitaciones a los estudiantes en el uso de las
plataformas.
En la gestión 2/2020, el tiempo del semestre fue tan corto como el primero, pero los
universitarios tuvieron cierta mejoría en el uso de las plataformas pues ya tuvieron
experiencia en su uso, al igual que los docentes. En relación del primer semestre, los
docentes tuvieron una mayor participación, es decir que casi todos los docentes lograron
dar sus clases virtuales mediante las plataformas.
En esta gestión 2020 los docentes también generaron grupos de apoyos entre sí para
ayudarse en el uso de las TICs para las clases virtuales y fue mediante estos grupos que
los mismos docentes generaron pequeñas capacitaciones para mejorar aspectos
específicos como las evaluaciones, por ejemplo. De la misma manera los estudiantes
generaron cursos de capacitación para el uso de las plataformas para las tareas y para las
evaluaciones.
Para la segunda ola de la pandemia que ocurrió a finales de la gestión 2/2020 e inicios
de la gestión 1/2021, esta ola no fue muy fuerte y no afecto el inicio del semestre
1/2021, gestión que comenzó con normalidad después de las elecciones al rectorado,
que fueron necesarios para conservar la institucionalidad en la universidad e incluso
hubo elecciones facultativas en la misma fecha y antes de la tercera ola hubo elecciones
en mi facultad devolviéndole la institucionalidad ya que estaba sumergido en conflictos
políticos que no dejaron que ingresen estudiantes a la facultad y que más de 600
egresados no puedan salir de sus carreras.
Ventajas
Plantea un cambio en el rol tanto del docente como del estudiante, lo cual aún resulta
difícil de asimilar.
Desde que se decretó emergencia sanitaria en el país, la universidad tuvo que tomar
ciertas acciones para seguir con el proceso académico y no interrumpir las actividades
programadas durante el periodo I/2020.
Fue por ello que después de la suspensión de clases, el análisis y la capacitación de
docentes y estudiantes la virtualización de las asignaturas fue un reto asumido por la
universidad, en ese tiempo desempeñaba el rol de estudiante de la maestría en educación
universitaria.
Desde el rol docente, pude observar que los estudiantes de pregrado tienen una
docilidad para manejar las TICs, no les cuesta manejar aplicaciones y programas
virtuales para el desarrollo de los contenidos de la materia que me fue asignada en la
universidad.
Otro aspecto importante que se pudo observar dentro del desarrollo de la materia, es que
la educación virtual para los estudiantes trae ciertas ventajas, como, por ejemplo, la
flexibilidad para enviar sus trabajos, la facilidad para poder acceder a clases que no
asistieron por cualquier motivo (las clases quedan grabadas) y eso influye mucho para
bajar los índices de abandono de la materia.
Por último, es importante resaltar el rol del docente dentro de la educación virtual, el
mismo que, desempeñando un papel de guía y facilitador se lograran espacios de
construcción de aprendizajes significativos, no dejando de lado actitudes personales con
los que debes interactuar en este proceso, como la empatía, la amabilidad, la
responsabilidad y la creatividad que le pongas a tus contenidos, son como los
estudiantes valoraran tu aporte en su formación.