FACULTAD DE FILOSOFÍA Y TEOLOGÍA

PROGRAMA DE TEOLOGÍA

UNIDAD II: CONDICIONAMIENTOS Y CARACTERISTICAS DE LA

TEOLOGIA ESPIRITUAL

ÁREA ACADÉMICA: Teología Litúrgica

SEMESTRE: 1ero.

ESTUDIANTE: FLOR DE GONZÁLEZ

 RELACIÓN ENTRE EL TEXTO DE SATURNINO GAMARRA (CAP II, IV y V) CON LA
EXORTACIÓN APOSTÓLICA: GAUDETE ET EXULTATE DEL PAPA FRANCISCO.

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En la sociedad actual existe cierta apatía por lo espiritual y la llamada personal

de todo cristiano a la santidad. Al profundizar en las lecturas recomendadas de esta
unidad, se pueden encontrar diversos condicionamientos y características que poseen
la espiritualidad y el vivir la santidad hoy desde nuestros contextos sociales. Ambos
autores exponen con claridad e insistencia su preocupación por la vaga concepción que
se tiene hoy sobre la experiencia espiritual en la vida de las personas. El objetivo es
reconocer el papel fundamental que tiene la espiritualidad y la santidad, procurando
encarnarlo en el contexto actual, con sus riesgos, desafíos y oportunidades. A
continuación se presentara cada uno de los aspectos en los que ambos textos guardan
relación:

Concepciones equivocadas sobre la espiritualidad y la santidad que

limitan a la persona al encuentro con Dios.

Entre las características que limitan a la persona a reconocerse como cristianos

capaces de vivir la santidad hoy, expone el papa Francisco es el prescindir de Dios
como quien da la gracia para poder crecer y obtener nuevos conocimientos que
enriquezcan la vida personal. Se cae en una concepción de pelagianismo de no
reconocer que no es el conocimiento lo que nos hace mejores o santos, sino la vida que
llevamos. Así mismo, Gamarra plantea que existen términos de espiritualidad que
causan dificultad en la vivencia de la fe cristiana, como el creer que la espiritualidad es
narcisista y centrada solo en ellos, con peligro a la idealización, a la privatización y la
manipulación de la persona.

La espiritualidad y la santidad con una visión encaminada hacia los

otros.

Gamarra, presenta una de las dimensiones de la espiritualidad, la apertura hacia

los otros. “El hombre en cuanto espíritu está abierto a lo universal y comprometido con
ello, trascendiendo las propias fronteras; está impulsado hacia los otros y a la actuación
en el mundo” (Gamarra, 1994.p 35). Y el papa Francisco nos dice que nos existe
santidad sin una manifestación de entrega a los otros, allí donde la acción de Dios nos
moviliza a responder por tanto amor recibido como gracia. La verdadera relación
supone salir de uno mismo, buscar e ir al otro por encima de los propios intereses y aun
en contra de ellos, y llegar al tú del otro; y esto es auto-trascenderse.

La santidad y la espiritualidad vivida en comunión con la Trinidad y

la Iglesia.

Ambos textos presentan como condicionamiento para vivir la espiritualidad

desde una actitud contemplativa que nos lleva a la comunión. Se trata de contemplar al
verdadero Dios de Jesucristo, Dios uno y trino. Para Gamarra, la relación fraterna debe
ser la experiencia eclesial fundamental de la vida del cristiano, y el Papa Francisco lo
reafirma con un pensamiento fresco sobre una santidad que encuentra en medio del
pueblo de Dios y que vive en comunión.

La espiritualidad y el llamado a la santidad implica misión.

Somos llamados a vivir la contemplación también en medio de la acción, y nos

santificamos en el ejercicio responsable y generoso de la propia misión, así hace
alusión el papa en su exhortación apostólica. Al igual que para Gamarra, la misión
forma parte de una de las características visibles de la vida espiritual en todo cristiano.
“La implicación mutua de la comunión y la misión plantea la peculiaridad del ser de la
Iglesia, que se presenta descentrada de sí misma y en total relación hacia Dios, de
quien procede, y hacia los hombres, a los que es enviada” (Gamarra, 1994.p 105).

Participar en los sacramentos y vivir las bienaventuranzas como

medios para alcanzar la santidad y tener una mayor plenitud de vida
espiritual.

En la exhortación el papa Francisco menciona las bienaventuranzas como luces

que ayudan al cristiano a vivir a mayor plenitud su fe cristiana a imitación de Cristo. Al
igual que Gamarra nos plantea los sacramentos como medios de santificación. “La
celebración de un sacramento es en el sujeto un verdadero acontecimiento espiritual,
que marca su vida espiritual. Los sacramentos son algo más que medios aislados o
ayudas para la santificación, son un encuentro con la realidad salvífica de Cristo.
Gamarra, 1994.p 116).
 Una espiritualidad y santidad que se hace llamada a permanecer en
una relación filial con Cristo.

Ambos invitan a la unidad con Cristo, entrar en relación con el Padre en el Hijo.
Para Gamarra la autodonación de Jesús al Padre a favor de los hombres descansa en
la relación entrañable del Hijo encarnado con el Padre y dicha relación invita a la
comunión filial del hombre con Cristo. Así mismo, el papa reconoce que el fondo para
alcanzar la santidad es vivir en unión con Cristo, los misterios de su vida. Al asociarnos
a la muerte y resurrección del Señor de una manera única y personal, en morir y
resucitar constantemente con él.

La caridad como centralidad en el amor a Dios y al prójimo.

Por último, la relación que predomina en ambos textos y exponen como el centro
de la vida espiritual para alcanzar la santidad, es la vivencia de la caridad. La
participación de la naturaleza divina por la filiación implica contar con el amor como el
dato más radical de la identidad de la persona. Este amor ha de transcender en la
persona y ser comunicado a los otros como expresión de la participación en la vida de
Cristo. El papa enfatiza que el primado lo tienen las virtudes teologales, que tienen a
Dios como objeto y motivo. Y en el centro está la caridad. San Pablo dice que lo que
cuenta de verdad es «la fe que actúa por el amor» (Ga 5,6).

En conclusión, cada uno de los autores presenta características y

condicionamientos para vivir una vida espiritual y alcanzar la santidad teniendo como
punto de partida la apertura que debe tener toda persona a vivir una experiencia
trascendental en la que el amor recibido por Dios lo movilice a creer posible la vivencia
de la santidad hoy en la actualidad desde el contexto histórico o social que viva y así
entrar en la participación de la vida Cristo, la comunión con la trinidad y con la iglesia.

Bibliografía

Gamarra, S, (1994) Teología Espiritual. Madrid-España. Biblioteca de autores

cristianos.

Papa Francisco, (2018) Exhortación apostólica: Gaudete et Exultate. Vaticano