Fidel es un ingeniero en software, trabaja para la empresa Seguridad Computacional, la
cual se encarga de dar un servicio de ciberseguridad a los bancos y empresas. Un día Fidel al acabar su jornada laboral antes de salir, observa a dos de sus compañeros entrando en la sala de los servidores, cuyo lugar está completamente reservado para un personal cualificado, y estos al igual que Fidel, no lo son. Este entra y observa que esos dos compañeros están robando información de los bancos y empresas, Fidel les grita advirtiéndoles que, si no se van, avisara a los guardias, estos que acaban realizar su trabajo, hablan con él y logran persuadirlo con dinero ya que saben que está en una situación económica difícil, a su vez le prometían darle más cuando terminaran el “trabajo” (el cual era la venta de esa información a unos hackers). Al llegar a casa, reflexiona lo sucedido y decide denunciarlos al OIJ, ya que este prefería ser un trabajador honrado y no caer en las artimañas y tampoco ser un ladrón.