La condición resolutoria y los vicios tanto ocultos o aparentes en la
compra venta
La compra venta se conoce como el contrato mediante el cual el
vendedor a de transferir la propiedad de un bien al comprador, y este a su vez, debe pagar su precio en dinero. La compra venta en Venezuela está regida por el Código de Comercio Venezolano en su capítulo IV, donde engloba características importantes y precisas a tener en cuenta al momento que ésta tenga lugar. Dentro de las mismas abarcan la compra realizada sin un precio determinado pero por mutuo acuerdo a ser determinado a futuro, o el realizarla al precio corriente, encomendándose al arbitrio de un tercero o bien por la autoridad judicial. Además, el estado de la mercancía en venta debe ser especificado en el contrato, en calidad, cantidad y especie, anexando detalles específicos si lo requiere, por ejemplo, si el objeto está en una condición precaria, de tal modo el comprador puede decidir si adquirirlo de tal manera, esto, debido a que el vendedor está obligado a entregar la mercancía en la calidad y cantidad prometidas. En el mismo orden, la compraventa al ser un acuerdo está sujeto al cumplimiento de dicha obligación, es decir, la condición resolutoria tendrá lugar a favor de la parte (ya sea el vendedor o el comprador) que antes del vencimiento de la consumación del contrato haya ofrecido el objeto o el pago, si la contraparte no cumple con su obligación; es ahí donde deberá pagar los daños e inconvenientes por el incumplimiento del mismo.
Por una parte, si dicha falta es cometida por el comprador, él deberá
resarcirse llevando la cuenta ante la venta del objeto, que el vendedor tiene derecho a hacer vender, esto a cargo de un vendutero, corredor o el juez de comercio. En cambio, si es por parte del vendedor la falta, él deberá subsanar el inconveniente ocasionado. De la misma forma, lo que se haya estipulado en el contrato debe de hacerse cumplir, salvo que haya expirado el mismo o genere inconvenientes que deben ser comunicados. Por otra parte, cuando se habla acerca de vicios, se refiere a los inherentes del objeto, ya sea tanto los aparentes, aquellos que es posible notar a simple vista, tanto como los ocultos, aquellos que se pueden observar gracias al uso del objeto en cuestión. Dentro del código de comercio venezolano, se tocan estos temas, en su artículo 144 y algunos posteriores, donde se expone que el comprador debe denunciar dichos vicios al vendedor, por lo general en dos días del recibo del objeto a menos que el objeto tenga condiciones particulares, en cambio si éste, transcurrido el tiempo no expone los vicios al vendedor en cuanto al objeto adquirido, pierde el derecho al reclamo. Es posible observar en esto la importancia de una de las características de la compraventa que es: el informar en especie, cantidad, calidad y detalles particulares de dicho objeto, como ha sido mencionado anteriormente, por ejemplo, si el mismo ha sido modificado de alguna forma, o posee una vida precaria, debe de especificarse para que el comprador pueda asumir dicho riesgo, y concretar la compra conociendo el estado del objeto.
En el mismo orden de ideas, las mercancías que hayan sido entregadas
al comprador luego de haber examinado el objeto al tiempo de la entrega, no serán tomadas como reclamos, lo mismo si el vendedor hace entrega de reconocimiento en calidad y cantidad del producto; por el contrario, si el objeto es entregado bajo cubierta y el comprador expresa el examinarlas, puede reclamar por las mismas en cuanto a calidad o cantidad. Para evitar inconvenientes, el comprador tiene derecho a exigir facturas de la mercancía donde se encuentren especificados los datos del objeto. Y el vendedor, tiene derecho a retener la mercancía hasta el pago de la totalidad del precio. Por último, en cuanto a la compraventa, la entrega del objeto vendido es llevada a cabo por los medios en el Código Civil, por medio del envió del mismo al domicilio o un lugar convenido, por medio de facturas o cartas, o por el comprador colocar su marca en las mercancías compradas, a consentimiento del comprador. En otro orden de ideas, cuando se enfoca en la cesión o transmisión de derechos, es decir, el ceder derechos referentes a la compraventa, deben ser siguiendo los efectos del Código Civil.
La sección referente a la enajenación de fondos de comercio,
refiriéndose a la venta, donación o cesión del derecho o el dominio que se tiene sobre un bien o una propiedad, dicha enajenación que pertenezca a una firma inscrita o no en el Registro Mercantil, deberá ser publicada antes de la entrega del fondo, debe ser una publicación mercantil para el reconocimiento de terceros. Además de otras particularidades referentes al monto del fondo de comercio, que deben ser revisadas y actualizadas acorde a la situación actual, dado que el código vigente venezolano data de décadas atrás, y éste debería ir a la par con los avances de la sociedad (por ejemplo, en cuanto al valor monetario para ciertas transacciones , debido a la inflación).
Sin embargo, y a rasgos generales el código de comercio ocupa dar
igualdad de condiciones tanto al vendedor como el comprador, y establece pautas para evitar inconvenientes que puedan desencadenar consecuencias indeseadas durante el proceso de compraventa (como exponer claramente los vicios inherentes en los objetos a vender), de tal modo que habiéndolas cumplimentado correctamente puedan ser llevadas a término de manera satisfactoria, a una condición resolutoria del contrato a ambas partes que lo conforman.
“Si es por el comercio, el interés propio es el fundamento de esta
sociedad; y no nos juntamos por el placer de la compañía, sino para avanzar en los asuntos particulares.”