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EJERCICIO PRIMERA UNIDAD: AUTORREFERENCIACIÓN

AURELIO CHAVARRO NORIEGA 20162150523

UNIVERSIDAD SURCOLOMBIANA – FCSH


PROGRAMA DE PSICOLOGÍA
NEIVA - 2021
Introducción

En las siguientes líneas escribiré todo lo que he descubierto en mi en los últimos meses,
por lo tanto llevare un orden cronológico desde que inicio la pandemia en Colombia, hasta
llegar a la actualidad. Cada una de las situaciones que he vivido durante este tiempo las
iré relacionando con los saberes y actitudes trabajados en clase, por lo que todo está
mezclado según las experiencias que he tenido.
Cabe mencionar en este primer punto que la pandemia y las protestas sociales me han
afectado de una manera tan grande la vida, que no pensé ser tan frágil y pude conocerme
mucho más, o mejor aún me di cuenta de que en realidad no me conocía casi nada, que
siempre había tenido en mi la imagen de persona fuerte y que podía salir de cualquier
situación en la vida, cosa que no es así y me costó aceptarlo.

Desarrollo

Mi vida y mis planes en si trascurrían de manera normal y casi que perfectos hasta el mes
de marzo del año 2020, cuando llego la pandemia a Colombia y curiosamente una de las
primeras ciudades en presentar muchos casos fue Neiva en donde me encontraba
estudiando y trabajando, vivía solo, prácticamente era independiente y tenía pareja
estable, amigos maravillosos y una familia bonita pero que hacía mucho no veía.

Lo primero fueron las clases, las suspendieron, yo trabajaba todas las semanas en el
restaurante de la universidad, por lo que me quede sin trabajo por ese lado, quedaba con
un trabajo de aseador en un conjunto cerrado entre semana y los fines de semana
trabajaba en una peluquería y en un restaurante en las noches, mejor dicho tenía la
agenda ocupada, pero tenia mi ritmo de vida estable, económicamente bien. Al principio,
digamos las primeras tres semanas fueron en verdad muy chéveres, me la pasaba en la
casa haciendo otras cosas, saliendo y pues trabajando, hasta allí normal, también
estábamos descansando de la universidad y pues estaba de relajo se podría decir, lo
tremendo empezó a la cuarta semana de que se hubieran suspendido las clases, puesto
que las restricciones se pusieron super complicadas en la ciudad y yo me quede sin todos
mis trabajos, puesto que entro en rigor el confinamiento total, en ese momento estaba
preocupado pero no tanto, en mi mente estaba la esperanza que eso no duraba mucho
tiempo, así fue pasando el tiempo hasta que me quede sin plata y sin comida, trabajo no
tenía y del estudio no se sabia nada aun; mis papás que viven en una finca me llamaron y
me preguntaron que quería hacer, yo les dije que no sabía, que no tenia ni idea, ellos me
dijeron que me fuera para la finca y me estuviera allá mientras todo esto pasaba.

La verdad era que yo no me quería ir para la finca, sentía que las cosas ya no eran lo
mismo, hacia dos años yo había salido del closet y desde ese entonces unas pocas veces
había ido a la finca, no me sentía cómodo, ese era mi sentir o lo que percibía, así paso el
tiempo hasta que empezaron a restringir la movilidad, yo estaba en una situación crítica y
la única salida era regresar a la finca, un día antes de que cerraran la terminal de
transporte viaje a la finca, mi papá me recogió luego y llegamos a la casa todo normal, así
fueron pasando los meses y nada que las cosas mejoraban, por el contrario los contagios
por covid-19 en Colombia seguían en aumento, durante ese tiempo que estaba sin
estudiar le ayude a mi papá a trabajar, pero no como él quisiera, como lo hace mi
hermano al cual el siempre ha preferido, por que es mas macho y berraco para el trabajo.

Después de varios meses inician las clases de manera virtual, en donde vivo la señal es
muy inestable, y en ese entonces solo se podía por medio de sim cards de la compañía
Claro, tuve que sacar un plan de internet de unas pocas megas y super caro, durante todo
ese tiempo fue muy complejo para mi estudiar, constantemente se iba la energía y
quedaba yo viendo un chispero, y para sumarle ya no podía ayudarle tanto a mi papá, por
que debía cumplir con un horario para las clases y demás compromisos con la
universidad, allí fue donde empezó la peor parte de todo esto, los problemas en la casa
porque no aportaba económicamente, discusiones y otras cosas; yo hasta ese momento
guardaba la calma y creo que porque tenía la esperanza de que solo duraría un semestre
y ya luego me podría regresar para Neiva y todo sería como antes.

Así fue pasando el tiempo y nada que se solucionaban las cosas, eso me fue
desesperando y llegue a un punto crítico en donde no quería hacer nada, me sentía solo,
no tenía a mis amigos, no tenia mi vida, me hacia falta mi vida, esa vida que había
construido en Neiva como un chico abiertamente gay, risueño, lleno de amistades y
conocidos, en donde los prejuicios y la discriminación no existían. Pero volvía a mi
realidad, lejos de todo, con un internet pésimo, sin amistades, sin un ingreso económico y
en medio de una familia que no me entendía y creo que aun no me entienden, no
comprenden que mi orientación sexual no fue una decisión, fue algo que acepte y aprendí
a amar y amarme tal cual soy. Yo no se ni que era lo que tenía, quizás depresión o
ansiedad, lo cierto fue que comía tanto que subí varios kilos de más, es que ha toda hora
y momento estaba comiendo algo, eso luego vino a afectar mi autoestima, no me sentía a
gusto con mi cuerpo, me enojaba conmigo mismo, por comer tanto, luego empezaron los
problemas con mi pareja por el tema de la distancia, que termine por cortar con esa
relación y eso me afecto bastante también, me había vuelto super adicto al celular, al
Facebook y al YouTube, pero una manera terrible, muchas noches en la semana pasaba
hasta las 4 am viendo el celular y así semana por semana, me dolía el cuerpo, sentía una
fatiga, una cosa horrible, deje de hablarle a muchas personas, había caído también en un
ciclo de consumir material para adultos y de masturbarme horrible, se me empezó a caer
el cabello pero una manera terrible, amanecía la almohada llena de pelos y cuando me
bañaba ni se diga, eso mas me agobiaba, lo único fue que sali favorecido con el programa
de Jóvenes en Acción Colombia y de esta manera cubría los gastos de internet y aseo, y
de vez en cuando compraba algo para la casa, mantenía con una angustia, y unas ganas
super grandes de querer irme de la casa, pero ¿cómo hacerlo? Si no tenía trabajo y
además las restricciones seguían, en todos los medios de comunicación solo anunciaban
noticias desalentadoras, que el desempleo seguía subiendo y así mismo las muertes, los
contagios, la crisis económica y las restricciones.

Una mañana desperté, con dolores en todo el cuerpo y unas ojeras que nunca había
tenido en mi vida y frente al espejo soy consciente de que no estoy bien, de que mi vida
se esta volviendo un caos y lo peor que en qué momento había llegado hasta ese estado
tan crítico, cuando yo tan fuerte y berraco había sido, que las cosas las había conseguido
solo, que nunca nada me quedaba grande, y todo a raíz de estar en un lugar en el cual no
quería estar pero que no podía hacer nada para cambiar esa realidad por culpa de un
virus que llego desde el otro lado del mundo para jodernos la vida a todos, porque
conocía de amistades que también la estaban pasando no tan bien; fue en ese entonces
cuando me enteré que el programa de psicología de la universidad exigía haber pasado
por unas sesiones psicológicas al momento de realizar la practica profesional, en ese
entonces estaba empezando el octavo semestre, pero dije, voy a aprovechar para matar
dos pájaros de un solo tiro, necesito a alguien que me ayude a organizar mi vida o re-
organizarla, porque estaba vuelta un caos y además pues de una vez cumplía con ese
requisito para cuando llegara a realizar la práctica, luego de pensarlo varios días me puse
en contacto con una psicóloga, la cual fue como una luz en medio de tanta tiniebla e
incertidumbre que había hasta ese momento en mi vida, con la psicóloga se inició un
proceso terapéutico genial, cosa que yo nunca había tenido, literal nunca había acudido a
un psicólogo e iniciar un proceso terapéutico menos, porque siempre pensé que no lo
necesitaba, que yo jamás tendría que buscar ayuda en un psicólogo, yo me sabia
defender solo y así estuviera estudiando psicología no sentía la necesidad de ir a hablar
con un desconocido y contarle mis pesares ni más faltaba.

Esta señora me ayudo a que yo me ayudara, me guio y oriento para que yo pudiera
aceptar y mas que aceptar, lograra acomodarme a esta nueva realidad que estaba
viviendo, a través del dialogo, se colocaron unas reglas que de manera voluntaria y con
todo el compromiso acepte, también una serie de objetivos y lo mas bonito de todo fue
que todo eso se fue llevando por medio de una autobiografía, fue un recorrido de mi
historia y las experiencias que me han atravesado hasta llegar a la actualidad, esto fue
maravilloso, a medida que pasaba el tiempo fui dejando todos esos hábitos tóxicos que
había adquirido, me volví a encontrar conmigo mismo y hasta con mi familia, cosa que
jamás llegue a pensar que fuera así, a través del dialogo tanto ellos como yo nos fuimos
sincerando y mejor entendiendo y aceptando nuestras realidades, nuestras fortalezas y
debilidades, establecí un cronograma en mi vida, con unos tiempos, metas y los posibles
resultados, poco a poco estaba volviendo a ser yo, pero un yo en la finca, ya no en la
ciudad de Neiva, si no muy lejos, solo conmigo mismo, mi familia y la naturaleza, los
animales y las flores; me salió trabajo en la universidad, cosa que me hizo super feliz, por
primera vez pude hablar con mis padres acerca de mi vida, mis parejas sentimentales,
mis experiencias y gustos, por primera vez luego de a ver salido del closet me sentía
comprendido y apoyado por ellos, empecé una dieta y una rutina de ejercicio, volví a
hablar con mis amistades, que son muchas, me desprendí de una manera sorprendente
del celular, dormía muy bien, y a medida que pasaba el tiempo poco a poco mi vida iba
encarrilándose de nuevo en esta realidad aun incierta.

Termine mi octavo semestre y el trabajo en la universidad también, en familia hicimos


colocar internet satelital en la casa, un logro bastante grande, deje de sufrir por la
conectividad y así todo fue mejorando. Inicio mi noveno semestre y paradójicamente
inician también una seria de protestas en el país, nuevamente las clases se vieron
truncadas, ya no por la pandemia, ahora por un gobierno ineficiente e incompetente que
pretende hacer y deshacer con el pueblo lo que quiere, afortunadamente para esta
situación, ya estaba bien conmigo mismo, tenía nuevamente un horizonte, un rumbo, una
meta clara, por lo que durante todo este tiempo no vi comprometida mi salud mental ,
gracias a que ya había entendido que todo en este mundo es un constante cambio y que
por lo tanto a la vuelta de unos meses o años estaremos plenos y viviendo otra realidad
completamente diferente a la actual, ahora retomo nuevamente las clases e igualmente
retome el trabajo en la universidad y sigo trabajando juicioso en la tesis de grado que al
principio me costó muchísimo asumir, por todo lo que mencione arriba, pero ahora al ver
todo el trabajo que se ha logrado, no me queda más que disfrutar el resto de actividades
restantes.

Conclusión

Al final de todo aprendí que la vida nos trae múltiples retos a diario, que cada día somos
diferentes a lo que fuimos ayer, que todos necesitamos ayudar y ser ayudados y que por
más compleja que parezca la realidad, siempre existirán las posibilidades y las salidas
pero todo eso depende de la cara que le pongamos y nos pongamos a nosotros mismos.

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