Está en la página 1de 12

CAPITULO I

1.1 CONCEPTO DE PSICOETICA


Bioética es un neologismo que hace referencia al estudio de la vida
desde el punto de vista de la ética. Es decir, analiza las ciencias de la
vida y la salud a la luz de la moral y la ética, e intenta establecer cuáles
son las soluciones satisfactorias para todas las personas e instituciones
implicadas en un dilema ético (el sistema sanitario, el paciente, su familia
y el mismo profesional).
La bioética ha experimentado un rápido desarrollo causado por los
avances de la biología y la medicina. Algunos ejemplos son los avances
en trasplantes de órganos, la reproducción humana y la ingeniería
genética, y también los progresos en reanimación y tratamiento del dolor
en oncología. Estos avances han llevado a los profesionales de la salud
a plantearse si todo lo que es técnicamente posible es éticamente
correcto.
La bioética ha experimentado una rápida expansión en la sociedad
americana, con una posición socialmente relevante de la medicina y
otras ciencias de la salud. El pluralismo de esta sociedad ha posibilitado
la aparición de visiones diferentes frente a las intervenciones sanitarias y
de salud1.
Sin embargo, el análisis de los principios que tienen que regir la solución
de conflictos o dilemas que pueden aparecer cuando se tienen que
tomar decisiones sobre, por ejemplo, si se tienen que aplicar o no
determinadas tecnologías que puedan prolongar de manera artificial la
vida de las personas parece, al menos aparentemente, que tiene poco
en común con los dilemas con los que se puede encontrar un psicólogo
en su práctica profesional. Los psicólogos no se suelen enfrentar a
decisiones con estas implicaciones. Por lo tanto, parece que los
principios éticos que tendrían que guiar la práctica profesional de la

1
Goikoetxea, M. J. Introducción a la Bioética. Universidad de Deusto: Cuadernos de Teología
Deusto (núm. 20), 1999.
psicología podrían ser diferentes, al menos en parte, a los que guían
otras ciencias de la salud.

1.2 RELACIÓN CON LA BIOETICA Y LA NEUROETICA


La Psicología de la salud constituye una rama de aplicación de la
Psicología a todos los problemas de la salud del hombre, en los
cuales la psiquis desempeña un papel en su determinación.
Contribuye a movilizar los recursos de la sociedad con el objetivo de
mantener al hombre sano y / o reducir sufrimiento y discapacidad una
vez que enferma2.
En la realidad resulta vital la aplicación de sus conocimientos,
postulados teóricos, métodos y técnicas para cumplimentar las
tareas generales que deben abordar los sistemas de salud. Las
concepciones acerca del proceso salud-enfermedad cada vez se
amplían más hacia la búsqueda y explicación de determinantes que
van más allá de lo biológico natural hacia lo social y psicológico. En
este sentido lo biológico se subordina y determina por lo social.
Lo social, así comprendido, no se reduce a la actividad
socioeconómica, sociopolítica, etc.; si no que incluye dentro de sí el
vínculo del hombre con su medio3.
Teniendo en cuenta esta gran amplitud y complejidad en las relaciones
que el hombre establece con su medio, se necesita de sistemas
dinámicos del conocimiento capaces de modificar su objeto de estudio,
métodos e instrumentos en virtud de una realidad objetiva plena de
contradicciones, problemas a resolver, interrelaciones continuas entre
objetos y fenómenos, subjetividad-objetividad y diversidad esencial.
De forma análoga a la complejización de esas relaciones se crean
grandes espacios de subjetividad que definen la esencia social y
humana del hombre. De esta forma, las tareas a las cuales se

2
Pérez Lovelle R: La Psiquis en la determinación de la salud. Editorial científico-técnica.
Ciudad Habana. 1989. P: 77-82.
3
Araujo G.R y Berroto CR.: El problema de la determinación del proceso de salud
enfermedad. Análisis crítico para su evaluación. Instituto Superior de Ciencias Médicas de La
Habana. Facultad de Salud Pública. Ciudad Habana 1995. p: 22-26.
enfrenta la Psicología de la Salud contemplan factores de diversa
índole que determinan o influyen en el sistema de relaciones del
hombre. En todos los espacios en que se pueda propiciar el desarrollo
de la personalidad sana y la lucha contra la enfermedad estará
haciéndose Psicología de la Salud; esta rama del saber está llamada a
descubrir las regularidades que le son específicas, que emanan de las
diferentes funciones que desempeña la psiquis en la determinación de
la salud, la preparación del hombre para la vida sana, la
modificación de estilos de vida y la reelaboración de sistemas de
valores si fuera necesario en función de su salud.
En este sentido, cuando de valores se trata, de concepciones,
conocimientos, puntos de vista, juicios y sistemas de opiniones, nos
adentramos ya en terrenos de axiología y moral y es necesario
enfocar su génesis, su educación y su papel en la salud y el sistema
de relaciones del hombre. Todo lo anterior induce a la ampliación y
complejización creciente de las tarcas de la Psicología de la Salud en
función de esos espacios de subjetividad y su relación teórica con
otras ciencias como la Bioética.
CAPITULO II
CÓDIGO DE ETICA DEL PSICÓLOGO PERUANO.

2.1 RESPONSABLIDAD PROFESIONAL DEL PSICÓLOGO SEGÚN EL


CÓDIGO DE ETICA

Según el Código de Ética del Colegio de Psicólogos del Perú, En el


aspecto de la Responsabilidad, se basa en los siguientes artículos:

Art. 1.- Como profesional, el psicólogo reconoce la responsabilidad


social implicada en su trabajo, ya que puede afectar íntimamente a la
vida de otros; por ello, se mantiene alerta frente a situaciones o
presiones personales, sociales, institucionales, económicas o políticas,
que puedan conducirlo a un abuso de su prestigio o influencia.
En ese sentido, pues para el psicólogo es importante que su trabajo lo
realice al margen de las presiones que pueda tener, tanto a nivel
personal como profesional, ya que su diagnóstico puede afectar de
sobre manera al paciente.

Art. 2.- Como científico, el psicólogo dirige investigaciones allí donde su


juicio le indica que son necesarias y planifica toda investigación de
manera que la posibilidad de error en sus resultados sea mínima;
proporciona amplia información sobre las limitaciones de los datos e
hipótesis, especialmente cuando éstos pueden perjudicar a individuos o
grupos específicos; publica informes completos acerca de su trabajo, sin
destacar jamás -sin explicación- datos que puedan tergiversar la
interpretación de los resultados y evita cualquier clase de vínculos que
interfieran con su objetividad.
En el campo de la investigación, el psicólogo tiene que brindar la
información verdadera de sus investigaciones con el rigor que un trabajo
especializado requiere.
Art. 3.- Como profesor, el psicólogo reconoce su obligación primaria de
ayudar a otros a adquirir conocimientos y destrezas y a mantener
elevados niveles académicos y profesionales. Su docencia se distingue
por la más seria objetividad y calidad académica, evitando sobrevalorar
la profesión, reconociendo las limitaciones de las técnicas que utiliza,
dosificando su difusión para evitar que su uso sea aplicado a personas
no idóneas.
En el campo educativo, todo profesional psicólogo está en la obligación
de brindar los conocimientos a las personas que lo requieran y de esa
manera contribuir a que la profesión sea bien entendida y aplicada, sin el
peligro de la sobrevaloración.

Art. 4.- Como psicoterapeuta, el psicólogo reconoce que, en su actividad,


debe buscar el desarrollo psicológico del cliente.
Tiene la responsabilidad como psicoterapeuta de brindar el apoyo
constante al cliente para que se pueda recuperar y desarrollar.

Art. 5.- Como funcionario en una organización, el psicólogo tiene la


responsabilidad de permanecer alerta y no aceptar presiones que
puedan distorsionar sus informes, e impedir el uso inapropiado de los
mismos.
Su principal responsabilidad es mantener sus opiniones e ideales ante
cualquier presión de todo tipo, para que éstas no puedan ser usadas
indebidamente.

Art. 6.- Como docente de práctica profesional, el psicólogo proporciona


supervisión adecuada y oportuna a internos y estudiantes.
CAPITULO III
EL INTRUISMO EN PSICOLOGIÁ.

FACTORES DE COMPETENCIA TEÓRICA Y PROFESIONAL


La psicología como ciencia conduce a prácticas que se hallan estrechamente
asociadas a ella y que, por ese hecho, la integran en su sentido de disciplina.
Así, tenemos la psicología clínica, la psicología organizacional, la psicología
educativa, etc. Estas disciplinas unen ciencia y práctica. Distinguiendo
claramente entre una y otra conviene reconocer su necesaria alianza. La
práctica es un lugar importante en el que se hacen observaciones que sirven a
la construcción de los conceptos teóricos y a la prueba de su verificación.
Las teorías, por su parte, guían la práctica; al menos deberían hacerlo. Los
mismos lazos naturales entre ciencia y práctica nos señalan que la finalidad es
omnipresente en psicología.
En efecto, si hay una práctica solidaria de las construcciones teóricas, es
porque éstas nos aclaran los dinamismos y procesos presentes en el ser
humano que la práctica psicológica tiene precisamente por tarea optimizar. La
psicología organizacional apunta a mejorar la cooperación entre los miembros
de la organización y lograr una más eficiente utilización de sus cualidades
individuales; la psicología clínica práctica tiene por meta ayudar a emplear
oportunamente las técnicas terapéuticas, adaptándolas a las vicisitudes de los
casos particulares. En general, apoyándose ampliamente en finalidades que se
hallan en el hombre por su naturaleza humana –naturaleza culturizada–, la
práctica psicológica las promueve, corrigiendo su realización deficitaria.
A su manera ella aplica el antiguo principio: medicus curat, natura sanat. Al
señalar que las prácticas psicológicas inscriben sus finalidades en las de los
seres humanos del medio cultural en que se ejercen aquellas prácticas, recojo
desde ya de la ciencia psicológica su magisterio sobre las finalidades de las
actividades humanas. No querría sin embargo que la ciencia psicológica se
limitara a la tarea de elaborar el inventario de las diferentes metas perseguidas
por los seres humanos de los diversos medios socioculturales. Sin precisar
desde ahora lo que esto significa, adelanto la tesis de que la psicología explica
e interpreta lo que ella observa. Ahora bien, toda explicación en ciencias
humanas implica una toma de distancia crítica con respecto a los hechos
observados. Si la tarea de la psicología no es la de determinar las finalidades
de la existencia humana, al interpretar y explicar más o menos las que los
individuos se dan, ella abre no obstante un espacio de libertad crítica en su
existencia.
No es porque la práctica psicológica tenga por meta optimizar las actividades
humanas, que la psicología como disciplina teórica y práctica tiene la
competencia de prescribir al ser humano el sentido y finalidad de su existencia.
Sin embargo, la finalidad general de la práctica psicológica ha podido
engendrar una peligrosa ambigüedad a este respecto. Quisiera recordar
brevemente cómo la tarea práctica de optimizar las actividades humanas ha
podido volverse sobre la teoría y hacer de ésta una ideología que se integra a
otras ideologías, haciendo perder así a la psicología su alma humana.
La psicología tiene por objeto una esfera particular del ser humano que no es ni
la esfera de la razón lógica, ni la del cuerpo orgánico. Más bien, la de lo
irracional penetrado de razón. Ahora bien, fue una época de gran racionalidad
técnica la que vio nacer a la psicología.
El cuidado del perfeccionamiento técnico en todo dominio impulsaba desde
entonces a los responsables a estudiar los medios de mejorar el
funcionamiento del ser humano, en tanto que él es también el ser psicológico.
En este contexto de civilización, la ciencia psicológica pudo tomar direcciones
opuestas. Por un lado, ella ilustró sobre los efectos negativos que recaen en las
empresas humanas por el desconocimiento, incluso violación, de factores
humano-psicológicos. Por otro lado, ella se vio confrontada a una civilización
técnica que mostró la tendencia a recurrir a sus servicios con el fin de dominar
los factores humanos reacios a sus proyectos. Al poner la ciencia al servicio de
fines utilitarios, la sociedad manifiesta tendencia a desviar aún las
concepciones teóricas de la psicología en el sentido de un determinismo
psicológico.
CAPITULO IV

PRINCIPALES PROBLEMAS DEONTOLÓGICOS EN:


PSICOLOGÍA CLINICA
La Psicología Clínica es la rama de la Psicología que se ocupa del tratamiento
de personas de cualquier edad que sufren trastornos emocionales, que no les
permiten desarrollar normalmente su vida de relación, atender con eficacia las
obligaciones propias de esa etapa de su existencia, ni superar los conflictos
que provocan los cambios.
Corresponde al Psicólogo Clínico determinar con la máxima precisión posible el
diagnóstico diferencial de sus pacientes y lograr descartar con la mayor rapidez
cualquier enfermedad orgánica concomitante que pueda estar afectando su
comportamiento, efectuando la derivación al profesional correspondiente.
Hoy en día, la ciencia ha comprobado la importancia del tratamiento holístico
de las enfermedades, tratando no solamente los problemas físicos de los
enfermos aisladamente, sino también atendiendo los factores psicológicos,
conductuales y sociales que pueden haber influido en esa afección.
El hombre es una unidad biopsicosocial, y como en toda estructura, si uno de
los sistemas se altera, todo el organismo responde de la misma manera como
una totalidad.
El Psicólogo Clínico cuenta con instrumentos precisos para hacer un
diagnóstico, como la entrevista psicológica, la administración de una batería
confiable de tests; y la indispensable experiencia profesional que lo ayudará a
despejar dudas y a actuar con la mayor eficacia y precisión posibles.
Esta profesión, como todas las relacionadas con el área de la salud, implica
una gran responsabilidad y la obligación del control periódico de los casos con
otro profesional idóneo de la misma práctica, para confirmar diagnósticos y
tratamientos, y para evitar errores.
El trabajo en una institución pública o privada es lo más aconsejable para un
profesional de la salud que recién se recibe, porque es una forma de adquirir
amplia experiencia y de mantenerse en contacto con profesionales de otras
disciplinas para realizar las interconsultas que sean necesarias.
Todo Psicólogo Clínico debe tener lo más clara posible su postura personal en
el aquí y ahora; o sea que es deseable que tenga una decisión tomada con
respecto a una filosofía de la vida

PSICOLOGÍA SOCIAL COMUNITARIO


La Psicología Social es la disciplina –interdisciplina en rigor– capaz de
potenciar los recursos y la cooperación de subjetividades, grupos y
organizaciones tendiente a la constitución de redes porque cuenta con
metodologías y técnicas participativas orientadas a un objetivo de
transformación social.
Desde una preocupación inicial por los procesos colectivos y los grupos
sociales se pasó a poner el énfasis en la interacción y, finalmente, en los
procesos psicológicos individuales, es decir en procesos psicológicos internos.
En la mayor parte de la investigación sobre los procesos de atribución causal y,
particularmente, en los estudios sobre “sesgos” atribucionales, éstos son
analizados como si fueran procesos de carácter interno. Además, al ser
entendidos como principios de carácter universal, se ignora, necesariamente, el
contexto social.
Dentro de contextos pueden darse varios problemas deontológicos en la rama
antes mencionada. Como por ejemplo el hecho de no brindar los datos
necesarios y precisos para que se pueda realizar una adecuada y eficaz labor
en la comunidad.

PSICOLOGÍA EDUCATIVA.
La Psicología Educativa es concebida como el estudio sistemático y
experimental de la conducta del ser humano inmerso en procesos de
enseñanza-aprendizaje, exitosos o no, formales o informales, para llegar a
conclusiones y recomendaciones de una alta probabilidad de cumplimiento
para así posibilitar que dichos procesos cumplan con los objetivos que le han
sido pre-establecidos. La aplicación de dichas conclusiones y
recomendaciones, atendiendo a las diferencias individuales, corresponde a la
técnica pedagógica y al ejercicio docente en la cual el facilitador debe poseer
características de liderazgo.
La psicología de la educación se ha especializado en diferentes materias:
aprendizaje, conducta social, desarrollo humano, diferenciación individual, en
1910 aparecen las primeras guías sobre psicología de la educación ( Journal of
Educational Psychology ): temas relacionados con las sensaciones, instinto,
atención, memoria, hábitos, aprendizaje,...; diferencias individuales, tests
mentales, aplicación de métodos entre los escolares.
La psicología de la educación no sólo se ocupa de la conducta de profesores y
estudiantes, sino que también se aplica a otros grupos como los ayudantes de
los profesores, primera infancia, inmigrantes y tercera edad. Las áreas de
estudio de la psicología de la educación se superponen inevitablemente con
otras áreas de la psicología, incluyendo la psicología del desarrollo (del niño y
del adolescente), la psicología social (grupos e instituciones, socialización), la
evaluación psicológica y la orientación vocacional o educativa.
Entonces existen diferentes tipos de problemas que se podrían propiciar en
este campo, debido a su amplia cobertura.
CAPITULO V
CONCLUSIONES

 El profesional en su diario vivir no solo confronta problemas con relación


a su trabajo, sino también en su profesión de día a día con las personas
que le rodean, esto hace que muchas veces cometamos errores sin
darnos cuenta que estamos pisando la línea d la moralidad y el diario
vivir.
 El individuo al tener una presencia o personalidad variable, puede
modificarse, es decir, puede engrandecer su ego, puede tener una sed
inmensa de llegar a la perfección de su profesión, haciéndolo para él un
modelo sin errores e inequívocos. El carácter para el individuo en su
profesión se refleja desde tiempos antiguos, ellos han experimentado un
progreso en todos los tipos de ciencias, han conquistado y desarrollado
experimentos que tiempos atrás hubieran sido inimaginables de realizar.
 El profesional sin carácter puede tender a caer en un modelo usado por
cientos de profesionales, puede llegar a caer en lo que sería la
mediocridad, siendo éste el título menos deseable para personas con
aspiraciones en la vida. El carácter no se forja solamente con un título,
se hace día a día experimentando cambios, ideas, experiencias, se hace
enfrentándose a la vida. En definitiva, el título es como el "adorno" de la
profesión. No importa si lo tienes, lo importante es saberlo utilizar.
BIBLIOGRAFÍA DE CONSULTA

BEAKSHTANOVSKI V: Ética. Editorial, Progreso. Moscú. 1986.

CHANGEUS, Jean – Pierre & Paul Ricoeur (2001). La naturaleza y la norma.


México, Fondo de Cultura Económica.

FABELO, José. (2003). Los valores y sus desafíos actuales. Editorial José
Martí. La Habana.

FERRATER, José. (1965). Diccionario de Filosofía. Editorial Sudamericana.


Buenos Aires.

SANCHEZ, Adolfo. (1969). Ética. Ed. Grijalbo. México.

ROSENTAL-IUDIN. (1973. Diccionario Filosófico. Ediciones Universo.


Argentina.

También podría gustarte