El derecho laboral es fruto de una evolución, de mucha lucha e insistencia, de allí
que su origen es una cadena de hechos y consecuencias, que surge ante la necesidad de brindar protección a la parte objetivamente débil de la relación laboral: El trabajador. No se puede negar que desde la edad primitiva ya se tenía noción de trabajo puesto que desde el principio el hombre vio la necesidad de expandirse y buscar nuevas tierras, por lo tanto, las primeras profesiones era la recolección y la siembra que desembocó en las primeras relaciones entre trabajadores y empleadores que se trataban de relaciones totalmente desiguales; así mismo en la edad antigua en Roma, el trabajo encontró dentro del Derecho Civil, las disposiciones para la prestación del trabajo mediante la compraventa de esclavos y el alquiler o arrendamiento de los hombres libres; Y siguiendo la línea de desigualdad del trabajo, en la roma clásica este no era para las personas sino para los animales y las cosas, dentro de las cuales se encontraban ciertas categorías de la especie humana que tenían condición de esclavo. Se empezó mirar una regulación del trabajo en el tiempo del Imperio romano, pues fue donde se creó la Ley de Marcu, la cual consistía en la limitación de la jornada laboral del trabajador, considerando que el día se dividía en horas de luz y oscuridad, estableciendo con esta ley, la primera reducción de horario laboral, que permitía a los trabajadores descansar luego de ocultarse el sol; y quienes se dedicaran a la agricultura como la principal actividad comercial se les reconocía unos honores públicos que hace referencia al hecho de ganarse un sueldo. Pero tiempo después, con la caída del imperio toda esta cultura tan denigrante para el ser humano pasa a ser ocultada y escondida por la invasión de los monjes católicos romanos y se crece en una cultura el dónde el trabajo se considera como un bien social una forma de sustento única e obligatoria, en el dio paso al Feudalismo en el que se entienda como que trabajen todos y cobre uno cuya propiedad pertenecía a la nobleza y al estado a quienes se les debía pagar para sobrevivir, dándose las figura de terrateniente y trabajador. Pero fue en la Revolución Industrial, al ser el trabajo una actividad permanente del diario vivir de la sociedad, se hizo necesario contar con una normativa eficiente sobre los derechos, deberes, prohibiciones y beneficios que deben sujetarse tanto los empleados como los empleadores. Las condiciones infrahumanas en las que tenían que trabajar los individuos en fábricas propicia la aparición de la conciencia de clase, la cual no hubiese sido posible si la población no se hubiese reunido en ciudades, nacen así los primeros movimientos sindicales en Inglaterra, enseñando que la riqueza se obtiene no solo por nacer en una familia noble si no que en cualquier parte hay oportunidades de crecer, que las necesidades humanas pueden ser satisfechas. Al mismo tiempo, Karl Marx y Friedrich Engels daban forma a su Manifiesto Comunista que se publicará por primera vez en 1848 y que supondrá un antes y un después en el movimiento obrero quienes colaboraron en la primera Asociación Internacional de Trabajadores en 1864, que trató de unir a los trabajadores de los diferentes países. Agrupó inicialmente a los sindicalistas ingleses, anarquistas y socialistas franceses e italianos republicanos, sus fines eran la organización política del proletariado en Europa y el resto del mundo, así como un foro para examinar problemas en común y proponer líneas de acción. Pero fue Alemania, quien dio el principal paso al establecer la Seguridad Social con la Ley del Seguro de Enfermedad de 1883. Después llegará la Ley de Seguro del accidente de Trabajo (1884) y el Seguro contra la Invalidez y la Vejez (1889). El principal objetivo era tranquilizar a los revueltos trabajadores y evitar una revolución socialista e ideológica. Ahora bien, diversos eventos históricos que tuvieron lugar principalmente en Europa, como el sistema feudal, la abolición de la esclavitud, los nuevos roles, dinámicas y la forma como la tierra fue dividida, sentaron las bases para establecer como la relación laboral sería regulada en Colombia. En la colonia los españoles impusieron órdenes y decretos que tenían origen en la voluntad del Rey de España, las cuales fueron recopiladas bajo del reinado de Carlos II de España con el nombre de Legislación Indiana, a pesar de existir dicha legislación, se continuó estableciendo esclavitud a las personas traídas del África, quienes no tenían derecho a la vida. Pero fue a partir de 1852 con la presidencia de José Hilario López que quedo abolida la esclavitud en nuestro país. Más tarde se expide la Constitución de 1886 la cual incorpora en el Titulo III, relativo a los Derecho Civiles y Garantías sociales, los siguientes preceptos, primero, Libertad laboral “Toda persona podrá abrazar cualquier oficio u ocupación honesta”, segundo, el derecho de reunión y asociación “es permitido formar compañías o asociaciones públicas o privadas”. Así mismo hubo avances en normas como: Accidentes de Trabajo (Ley 57 de 1915), Contratación colectiva y derecho de huelga (Ley 78 de 1919), Protección de menores (Ley 15 de 1925), Descanso dominical (Ley 57 de 1926), los Sindicales (Ley 83 de 1931) Protección de maternidad (Ley 53 de 1938), entre otros desarrollados. Actualmente Colombia ha contado con una evolución que ha cumplido con el fin del derecho laboral, proteger al empleado, es por eso que cuenta con normas que los benefician tales como contrato laboral regido por la ley, remuneración laboral, una jornada laboral establecida y un sistema de seguridad social, y demás servicios que nuestra legislación ha determinado.