BIBLIOTECA CINEP
BOGOTA COLOMBIA
EL TESTIMONIO DE
SOFIA ESPINOSA
Yo no tengo por qué,
sefor, ime a lava en
os ojos suyos.
5B,
‘Alfredo Molano
Sf sefior, como le digo con esta son tres las derrotas que
nos han tocado, Primero fue por alla con don Rojas; después
me parece que en el afio 65, y ahora ésta, En la violencia vieja
yo andaba por Vegalarga y entonces ahf fueron los chulos,
Los chulos entraron a pelear, a chocar. Jode el uno, jode el
otro: no hay pelotera en que no lo metan a una, Los chulos
son los chulavitas, los godos —quién sabe si va y le pego aal-
9... —ellos hicieron la matanza en Algeciras, porque ellos
de andar buscando, ellos siempre tienen que buscarla,
tienen que agarrarlo a una y Ievarlo y camine y vaya y coja,
ally aq y échele, En después vino lade Vegalngs, A mime
cogieron allé los “secretos”. Nosotros venfamos de para afue-
acon las bestias y Ia muchachita, Cuando acordamos fue que
nos alcanzaron en Municiones. Uno de particular me alcanz6
en un jeep. Cuando lo vi fue que dijo: quién de las que va ahi
se llama Soffa? . éCémo sc llama usted? yo le dije: équé fué
Jo que le pasé? . Entonces me dijo: éusted es Soffa? Usted
‘es la que sabe, tengo orden de captura contra usted, Estaban
buscando Ia grande porque yo no les debfa nada, yo no he ro-
bado, yo no he matado, Que el diablo nos lleve porque yo no
Ie he dado de jartar a nadie! . Entonces me echaron en el j
y de yueltas y vueltas y vueltas, A Neiva quince dias y después
para Florencia. Sélo me hicieron preguntas, todos los dfas
Preguntas, preguntas y preguntas. Pero como una no es tan
majadera... A mime daba rabia que me averiguaran tanto una
tina sola cosa, Se arrima el uno bien bravo} el otro, ae trae
1ilito, -y pregunte-y-ite-y-joda. Hasta que me los quitaba
de encima Me acusaban de ser schedora de la gente, ¥ que s
yo era sabedora, y que si yo era mensajera, y que si yo les lle-
vaba comida. Si una jamds ha tenido que jartar de sobra...
Bueno, entonces, me cogieron y me echaron para Florencia,
Ahi estuve 13 meses, ébonito mimero no le parece? . Y me
decfan por aquf y por alli. Bueno Mircha ~porque asf dieron
en llamarme— usted aqui echa bueno, es mejor que nos diga,
diganos y aqui le damos sopa, comida, Diganos: ési le damos
la libertad, para donde se va? . Pues para El Pato —Ies contes-
taba—, yo voy a buscar mi parcela porque all es donde tengo
Jo de comer; yo afuera no tengo dnde trabajar. De modo
‘que usted se va para El Pato, éy por qué? . Y yo de porfiada
les decfa: porque alld tengo mis animales, porque all tengo
todo lo mio. Bueno, volvfan y me cogfan para adentro; a
guardarme alld. A los tres dfas, otra vex: lo mismo. En las
mismas condiciones, 2 hacerme las mismas preguntas, Asf se
completaban trece meses, Hasta que me dié rabia y entonces
ellos dijeron: retenida Soffa Albarracin por delinquir. éDe-
Tinquir? caramba —dije yo— y deso qué es? . Otra detenida
me dijo pasito: eso es ser sabedora de la chusma. Yo los dejé
arrimar; me voltié y les dije: équé es Io que ustedes me estin
adjudicando ahi? . Puede ser que algin dia... Aqui no me voy
a quedar... Yo no soy una perra, yo estoy viva, soy cristiana,
Entonces, vuelva y joda. Haga usted el favor de zafarse de
donde esté metida, decfan ellos. Sus hijos la estin hundicndo,
Yo les contestaba: yo sé lo que es el respeto por la Familia; lo
que estan haciendo con mis hijos es una injusticia, Ustedes les
stan diciendo a ellos lo mismo que me dicen a mi, Yo soy
fea, pero no tonta; a mf no me desayunan con ese cuciito. A
Jos muchachos no les metan mentira por verdad; no les pre
gunten cosas que no les han de preguntar, Ellos son chicos,
son tonticos todavia, ellos del miedo son capaces de decirles
Jo que no han visto. Asf todos los dias durante trece meses,
Pregunten y pregunten boberfas: que donde esta Pata-de-
Perro, que dénde est Richard, que quién es fulano, que cuan-
do estuvo el otro, Yo a nadie conocfa, Y volvian a preguntar:
y cuando la soltemos, épara dénde se va? . Pues para El Pato,
Sefiores, ya me tienen aburrida, Para El Pato! . No me pre-
gunten mis esas tristezas porque les digo lo mismo, Yo sa-
biendo que nada debo, no me molesten més, cojan oficio que
hhay harto que hacer, Por alld en septiembre de 1966 Hegé un
sefior y dijo: suelten a la vieja, ella no debe nada, nada, nada.
Dénle Ia libertad, {Usted cémo se Mama? me preguntd,
8{Cémo? | . Usted me va a soltar éy no sabe como me llamo?
Emtonces por qué me han tenido todo este tiempo aqui. Pero
bueno, al fin me dieron la libertad, y una boleta para presen-
tarme cada quince dfas. Yo sali y me dije: yo nome pongo a
mas vueltas, me ccharon para afuera y me voy, no més ofici
fnas, no mds vueltas... Hasta hoy fué! . Yo tengo mi finea, mis
hhijos, mi marido por allf. Voy a buscarlos y para la finea otra
yee, éRinca? cual finca, sefior. Si daban ganas de llorar. Todo
Se lo habfan jartado ihay sefor! , se jartaron la vaca parida,
Jas gallinas, Ios marranos; le metieron candela al rancho, tro-
zaron la platanera, asi, de raiz; trozaron la cafia disque para
que los muchachos se salieran. Cuando la tropa entra, lo que
hho hace con Ja mano lo hace con la boca y hasta con lo demas.
‘Ala mami de esta tontica que ve ahf sefior, la dejé yo cuidan-
do el rancho, entonces un soldado le hizo el perjuicio, la aga-
176 por ahi, Ie hizo el mandado, la picardia, Afortunadamente
el angelito se murié, él no tenfa la culpa, pobrecito! . Asi se
Io dije a un capitan que me preguntd ahora que salfamos:
dbueno y por qué se van?. éQuién los ha echado? . éPor qué
se van? . éPor qué se van? . Como, épor qué se van? , le con-
testé yo. Porque les tenemos miedo, Porque yo tenia una ton-
tica que le hicieron un hijo, porque ustedes ofrecian matarnos
porque decfamos que el hijo cra de ustedes. A m{ no se me
Olvida, Me robaron mi crédito diciendo que nosotros eramos
amigos de Ja chusma y ea falso: me aamparon trece meses y
me los deben toda la puta vida. Ademés yo me estoy volvien-
do vieja para que otros traguen. Asi les dije... Porque, sefior,
fueron los tiros y las bombas las que nos sacaron esta vez en
derrota. Hace veinte dias como a eso de mediodia, un sibado.
El domingo también, el lunes lo mismo: bombas, tiros, joda
para acé, joda por alli, Cuando sentimos las bombas era por-
{que ya las habian tirado abajo, por cl lado de Las Perlas, por-
que hacen una explosion muy extensa. Ya estébamos sordos
y todavia nos preguntan: ¢y por qué se salieron? . Porque nos
asustaron, No la gente de los monies, sefior, no los diablos,
no las gentes del particular, iNo! . Cuando se revuelea, es la
tropa la que dafia todo. Asf es, Nosotros no podemos decir
que hay otros que nos molesten, Es que, sefior, eso les da
pica, Alla nadie nos dice nada, Yo dejo esta tontica de diez
afios cuidando el rancho y cuando vielvo pregunto, équién
ha venido? . Ninguno. ¥ da vergiienza mostrarle el rancho. Es
de puro palo pegado, donde quiera se ven los huccos y alli
dentro vivimos todos, sin puerta, sin nada y nadie nos estor-
ba; las gallinas, los animales andan todos por abi sueltos y
sinunca se picrden. éQuién nos atormenta de noche? . Na
die.
que él crefa que debfamos salir si el gobierno nos daba las ga-
33rantfas, Pero no de boca sino firmadas. Por ahi anda el papel.
Que los de los Derechos servian de fiadores, Entonces todo
mundo estuvo de acuerdo y al otro dia a las seis de la mafiana
nos vinimos para acé. Y aqui estamos, sefior, esperando a ver,
esperando...
Yo lo tinico que quiero decir, sefior, es esto: queremos
az y tranquilidad para poder trabajar. Eso es nuestro desti-
no. El deseo de todos es luchar hasta que haya alguna cxpre-
sign que nos diga: hay paz. Esa es mi conversacién, sefior.
EI altoparlante, que habfa estado transmitiendo todo
cl dia musica, mensajes, consignas de organizacién, partidos
de basket, dindole al estadio un ambiente de bazat, se silen-
‘ci6: Humberto Moncada iba a hablar:
“Bueno Compafieros —dijo~ simplemente quiero decir-
es que se organicen un poco. Se va a recibir los regalos que
va a repartir el Doctor Félix Trujillo. Va a leer un mensaje de
Nidia de Turbay. Entonces compafieros, hagamos orden, lo
mis que se pueda, con el fin de evitar Ia insolada que vamos a
tener porque este es el momento més caliente del dia. Le
damos las gracias al Doctor Trujillo porque nosotros no recha-
zamos la ayuda venga de donde venga. Tiene lapalabra el Doc.
tor Trujillo”.
El Doctor Tryjillo dijo:
“Bueno, muchas gracias al sefior Humberto Moncada.
Quiero decitles a los seitores colonos que estan en el estadio,
que una delegacién remitida por la Primera Dama de Colom-
bia, ha querido hacersc presente en el dia de hoy con unos
regalos que ella envia a los niios de los colonos. Me place so.
bremanera estar en este lugar compartiendo este momento las
inquietudes de la Primera Dama, dofia Nidia ro de
Turbay Ayala. Esté presente la sefiora Gladys de Gaviria, que
es asistente de la Primera Dama, la capitana Urrea, el sehor
Comandante de la Policfa y, légicamente, la sefiora esposa del
sefior Gobernador. Quiero pedirles un poco de atencién a la
carta de la Primera Dama que dice as “Septiembre 13 de
1980. Mis queridos nifios: Era mi propésito ir a Neiva y visi
tarlos y Ilevarles una ayuda, pero no pude cumplit con mi
deseo por hallarme un poco indispuesta después de llegar de
mi viaje de Ecuador. Es por ello que estoy haciéndoles llegar
5
34algunas cositas que espero les sean iitiles. Especialmente que-
fa decirles que pondré todo mi empefio en Ja creacién y fun-
cionamiento de un centro de nifios en la regién donde uste-
des hhabitan. Reciban todo mi afecto y un abrazo carifioso
para cada uno de ustedes. Nidia Quintero de Turbay. Viva
Colombia...”.
Composicién elaborada por Alfredo Molano a partir de
‘entrevistas realizadas a colonos del Pato.
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