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La tarea de educar en el jardin maternal. Sentidos del ensefar Maria Compartir entre educad ra infancia deviene en 9. social, politico. cién, en cada momento histérk Poner ta mirada en los més pequefios, ios que tlegan, los que nacen, supone anallzar tos modos y sentidos de las acién, de mision cultural, de n pedagogica de in: como el jardin maternal, esperan o intentan com iborar, acompafar ia tarea jros ios /77 factn an fos pi nel actual escenario de complejas transformaciones se requiere de un debate piblica de paticipacién comin, {que se consolide en discusiones sobre politcas de primera infancia: una bis- queda de fundamentos que geranticen el derecho a una educacién pablica, comin y gratuita, compartida con las familias desde ef nacimiento y de aque- llos saberes que, validades socialmente, se conviertan en lo que merece ser ensefiado a los mas pequetios (en e caso de la provincia de Rio Negro, esto se refleja en la concrecién del Diserio Curricular para Jardin Maternal, 1998). Para qué educar? &A quiénes educer? éQuiénes educan? CQué ensefiar a los mas pequetos? éPor qué? ZQuién dec de lo que hay que ensefaties? Instalar actualmente el debate en torn 28 estas preguntas no parece ser una cuestion menor, librada séla a decisio nese inicatvas privades, ni solemer Estado - Sot Contexto socio - poli { FAMILIAS \ tspedio prado eit domésten NN - CRIANZA al interior de las familias, nia decisiones patticulares de grupos, organizaciones, entidades de la sociedad cl. Se trata de un debate piblico en toro a las relaciones posibles entre jardin maternal, poica educativa y ensefian- 22, discutiendo el lugar del Estado en la escolarizacién de los nifios de menos de ties af. Al observar a la infancie en el cuadro de la presente pagina, que “como produccién subjetva, se da fen ef encuentro con ‘otros’ significa- tivos y como consiruccién social iteve fas marcas de fos instituciones por las que empieza a transitar del uni- verso de lo privado ~familiar— a lo pubblico -socil se observa también, que, como primer espacio piblico educatvo, el jardin maternal se transforma p dad a Tarea pedagésica Sujetos en crecimiento <—— mvcacion eto ys fois en wnabiente ncuentsos entre cada nifio y un adulto ‘educador, sostén de vinculo seguro, pero también con otros nosy nifias semejantes en edad, mayores 0 meno- res, con otras personas adults diferen- tes sus familias. Encuentros que com: plejizan sus universos sociales. amplian yeariquecen sus experiencias, en una red de interacciones. Encuentios (y desencuentros) con lo ot, lo diferente, las cisnzas de cada familia, as cultures, las otras y las propias logicas de lengua- jes afectivos, corpora, simbslicos y cexpresivos, En ese juego de encuentios, [os educa dores se mueven entre las dos genera- ones: le de los ninos y la de os adul- tos, también entre los lazos feriiares y Ios lazos politicos, entre el Ambito prive do doméstico y la esfera pablica, entre el pasado y el futuro.” Escenas (instantdneas, las llaman sus autores) lejanas (en tiempo y espacio), préximas en sentidos y poética, nos invitan a pensar esas posibildades (educativas) en miltiples encuentros. “Lo siesta se estira, vuelven poco poco, los nifios se despliegan, se fro- tan los ojos, aparecen los formas de Ja semioscuridad, uno ensayo ta voz, ‘otro eshoza un movimieni, ¥ alzan a ver, vibracién sonora, ert, jabito (.) Se los cambia, se los welve a vestir Estelo prepara biberones, Jevanta @ uno pequefa, fs acomeda fen ef hueco de sus brazos, le da de ‘mamar... Nathalie ocuna a uno, nifios emergen de sus lechos y ellas Jos vsten los calzan, la vida se rea nuda *Solimas al jardin (desde la prima: vera y cada ver que hace buen tiempo): los gritos, la teera la hier- a. Otro rumba, otro espacio corpo- ral. Los dejan, en los bosquecilos, en Ios tobaganes, en fas jaulas de las ardilas, se deslizan en los canastos de juguetes (..) surcon el espacio mientras los mds pequefios andon jabilosomente a gatos... La Imeriende que se toma en el jardin siel tiempo es bueno constituye una ‘nueva constelacién de gustos, rui- dos, yolores. Renée sonrie, ellos comen felices. Este es frecuentemen- te un momento privilegiado entre ‘momento alga més tierno. momento de relgjacién en el cual Jas tareas se cumplen de todas naestras y los nos... un 1Qué se ensefia ai ensefiart con cada nacimiento ogo sin gulamente nuevo entra en ef mundo. Arent, 1993 {Se ensena en el jardin maternal? La pregunta esconde ciertos supuestos acerca de la primera infancia, co cones de ensenanza, de educacion, de conocimiento, Lz ensefanza no es un problema doméstco, ni individual, sino que la Jp vo veonpe ap waves #1 suon op i | | | ensehanza es un problema didéctico y la didéctica es un problema politico (rig , 2007) Pensar a fa educacién y sus problemas como acto poltico y pensar a la educa- cién como los modos en que cada sociedad, en zada tiempo, implementa la produccién de subjetividades, nos ayuda a comprender que es el otro el ‘centro misme donde se generan las premisas que definen los medos de ins- tituila (Bleichmar, 8, 2005). Esos modos ce realizar esta tarea,a tre vés del ugar que acupan les institucio- res, de la mana de quienes la llevan @ ‘cabo, dan cuenta de un entramado de faz0s en el cuel se insertan ios sujetos ue se estén constituyendo, En buens medida, los laz0s que se esta- blecen dependen del modo en que Sos pequefos son reconocides y de las interpretaciones acerca de lo que nece- sitan, lo que pueden hacer, ser, apren- de, desear, soir. Debajo de le ensenanza, se perciben modas de concebir al otra, formas que se ensefian y cue 2 su vez la exceden, sos modos adquieren una significacién especial en el jardin maternal. Justamente, en eso, que excede ale ensefianza y que 2 su ver la contiene, hay algo muy propio 2 la tarea pedaze- gica que le otorga su particularidad y que la diferencia de otros ciclo y nive les del sistema adueativo Retomande el sentido de le educscién modo en que las personas, las institu- ciones y la sociedad responden 2 la le ada de los que nacen, los que recién llegan, dos acciones se vineulan a las formas de concebir al otro, al recién nacido: la accién de responder, ebrirse 2 la interpelacion de una llamada y acep- tar una responsabilidad y la accién de recibir, hacer sitio, abrir un espacio en el que lo que viene pueda habitar, Es ponerse 2 disposicién de la que viene sin pretender reducila solamente 2 la logica que rige en nuestra casa, écémo respondemes, cémo recibimos a los que Hlegan? Responder y recibir implica el acto de ‘ienvenir, como apertura a la novedad, ue no €s suficiente si no le acompate el cuidar (Freixas, J, 2006). Cuidar de alguien que, mas que esconder un teso- ro, trae consigo claves de historias que ain no han sido narradas, cuidat lo que hay de nuevo en cade nia y nia, pre- servando lo nuevo para intreducirlo en tun mundo viejo, En el movimiento del edueat como bienvenida, apertura y euidado de la rnovedad, encontramos el sentido del ‘educar hospitalario, involucramas el ecompariar. En la tavea especifica del jacin mater- nal, este sentido se resignfics en tanto funcién adulta de cuidado y transmisién de cultura y adquiere un mati especial desde el término de erianza, como pro- eso educativo propia de los nifios equetius (Violante, R, 2008). El educar hospitelario se vincule 2 la {Una manera de bemvenir a os rei Hegados sno. mo de lo catidiano, en torno 2 relaco- nes de confianza mutua, se entrelazan esos modas de concebir al ot, propi- iando (ensefanda) una constante potenciacién de aprendizajes y de ia consttucidn subjetiva e identidad petso- nal y social de los sujetos. como espacio vital de gran contenido afectivo, el ambiente del jardin mater- nal de intima convivencia social, favore- cela conformacion de relaciones parti- cules. En los primeros aftos de vide, esas interacciones sersibles, encuentros cara a cara, cuerpo a cuerpo, son fun- dantes en la construccién de siy la construccién del conocimiento de los ‘lies, dt unde, Encuentros sensibles con lo individual, centre un adul- cara a cata, de asim ‘to que ensena y un pequefto que aprende, dande el oto -rostro (Levinas, 1993) es muy diferente a miy no un rellejo de lo que yo soy; de quien, a su vez, soy responsable y debe responder y sostener. En este sentido, el ensefiar se transfor ma en dar, como acto de generosidad ‘que encuentra sus razones éticas basa- das en la presencia del otro (Mélich, J C, 2008), or cierto, encontramos aqui la poten: Calidad de la enseRanza sostenida por «al intenso virculo confiable, en la prox midod intims, alimentada por el cuidar, el ctar, valor, dar, desear que el atro sea. Esos actos de dar al ensefar se 3s primeras responder de los pequefios y pequefias sefias de reconacimiento en miradas, tisas,llantos, gestos, cuerpos, acerca- rmientos, rechazos. Pensamos que en esos encuentros entre los “nuevos” sujetos, los rec lle- gados al “viejo mundo’, y los otros, los “iejos" sujetos del viejo mundo, se potencia la posibilidad que tenemos los ‘adultos de propiciar una eeconstruccién del mundo, en la tensién entre lo cono- cdo y lo econocer. Encuentros donde el deseo de ensefar sostiene el deseo de saber y donde el movimiento de dar en el ensefar devie- ne en la tarea de transmisién y de mos- tracién (Winnicot,©., 1991) del mundo, Poniendo en juego la llamada ética de la transmision (Hassoun, 1, 1996). *(..) se inscribe en lo més profundo de nuestro ser y de nuestra subjetivi- dad. ¥ esta dice refiere que cade uno pueda atrecer « las generacio- res siguientes no solamente una pedagogia 0 una ensefanza, sino quello que les permits asumir un compromiso en relucin «su histo via, ES decir, 0 su manera de conce- bir su propia vide, a su manera de concebir su propia muerte.” Al pensar @ fa infencia como tiempo de cianza, como tiempo de constitucién subjetiva y 8 los aduitos como aquellos que damos le bienvenida a fos "nuevos" {que imumpen con otros interragantes, s¢ tensionan algunas cuestiones. En principio, parece que na basta con transmitir un nico camino, el buen camino, a los que recién llegan, sino que la tarea de enseftar podria encon trar otros sentidos en el hecho de hacer posible la apertura al pensar, con rela- cién al hacer, al sentir y al deci No se trata, pues, de adaptar a los que Hlegan a un orden social dado, inamovi- ble, dominante, sino de despertar, incentives, motivar el deseo de conocer otras posibiidades que inquieten y motiven a nuevas basquedas colectivas Ids alld de las logicas del sistema, la educacién como enseftanza ética, hospi- talatia, reclama una actitud de compro- miso y de responsabilidad. 2Cémo tes Ponder de manera abierta, atenta y tieina, desde una actitud de acogida? Desde el punto de vista ético, como Gonacién al otro, se ensena ensefiando fen cads acto, en cadz manera, en gesto, cada silencio, cade accién, cade Palabra, devolviendo al otra el espejo de quien es, cémo es para los otras y para si, quiénes son los otros, como es ef mundo y como pensar otros mundos posibles Responder, recibir, bienvenit, euidar, acoger, sostener, acompana, car, pro- cigar, nuts, mostrar, envolver, dar, son sentidos que adquiere la ensetanza en el jardin maternal, acciones que la exce- den y la contienen, que interpelan a omar decisiones de eémo y qué ense far; formes y modos que ensefian al ‘el pélogo de Greila Figo al ro De fo Familegl excuele inland, soiaacén Sissi, compiado pox Sana cap 7. 2. fata ides es de Sonata Cal cap 11a ntanci tomo cnstrucon sce, en Dela Fola @ la exzel, nfo, soclbacén ysujeo- od, ob. cada 5 fst excenas han sido tomades dev velo [ro Hancds Mozte Ly Aubert (7 econ 1877), Gurderios. xperieneias cecr mints perspectives. tas autora, ens aos 7, cuenan Is experience de trandornadén, cn franc de la antes guareras de Insure rigdos hoc expacos mas tales y iohecen de una manera potcayspasonada Propango eerie de compara ets xc has en tntoimdgenes de educacin de los ‘ns pequetos con ls frogs leeions 4 Arent Bana, Lo condi hue 5, Tein del fesofo Deri, que Levinas ta bem toma y que Febasvncla 3 edcscn 6, Ponancin “Los exenais de las en a eu ‘hein dele noe pequenor oradas de Jatcn Motel SPE “Sra. de Euston’ Buenos ie, septembre de 2006, 7 Cha de Cras gor, Clase 17s de Ta consttucgn de os laos soles destnes y stare” ge Cuno del CEM Pura Segui (@007) “inland yadlescncas: tropa hes ent sbaresy pric, donce desarala ctor des y deste acta de Jacues Hes Sou cae del concept de sie del ons ns del autos en 2 ob Los cosrobend- tose fo memoria rads, H.(1993), Le concn hum, Baee- a Paid. and (1996), "La cris en a edu, en [Erte el paso tur ocho guces sobre lain plc, arclo Peis Beichmat (2005), "Modes de conebit al cto, Ministerio de Educacion de fa Nacén- CaS (1990), "La intra come ersten ‘oi en Sanda Cah (comp), Oe Fan le escuela fon, sciotzoién y sje idee: Boenes Ares Santilana Cale, € (199), catca dels razones de et ‘ Temcs de flora de le ecucctn, Boe os aires, Paid. 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