Intituto

Interamericano de
Electrónica

LECCION 6

El Regulador o Controlador de Carga

Tema:

Funciones, características técnicas, prestaciones, tecnologías PWM / MPPT

Dispositivo electrónico encargado principalmente de controlar y proteger a la batería, o al grupo de ellas,

frente a sobrecargas y descargas extremadamente profundas. El regulador de carga o de voltaje/corriente
controla constantemente el estado de carga de las baterías, regula la intensidad (corriente) de carga para
las mismas y controla la temperatura de dicho proceso a objeto de prolongar su vida útil. Para un
controlador de carga la prioridad operativa está siempre marcada por la carga de las baterías y en
segundo término por la alimentación de la carga o consumo que esté siendo alimentada por el grupo
generador solar. Dependiendo del modelo, entre otras prestaciones genera alarmas en función del estado
de dicha carga. Ello porque toda batería y con el propósito de extremar su vida útil, requiere un régimen
de recuperación carga absolutamente controlado, el que será más bien lento, al punto que
preferentemente no exceda el 5% de su capacidad máxima de almacenamiento. En otras palabras, el
régimen de carga máxima para una batería de 100A., idealmente no debe superar los 5A/h. Los
controladores de carga regulan el régimen de carga de las baterías mediante un rígido sistema de control
de temperatura al interior de la batería. Cada vez que al interior de ella se alcanza una temperatura de
25°C., la carga se detiene. Una carga de régimen lento no debe exceder los límites de la temperatura
señalada: por ejemplo, esta característica –control de temperatura- posibilita conectar una sola batería a
un controlador de 20 Ah., dado a que el sistema de control de la temperatura generada por la carga al
interior de la batería, impedirá que ésta se cargue literalmente a 20 Ah., sino se mantenga dentro de los
límites próximos al 5% de la corriente nominal. Por otra parte, si a un controlador de carga de 20 A.
conectamos cuatro baterías de 100 A., cada una de ellas recibirá proporcionalmente 5 A por hora,
régimen de carga controlada de nivel ideal, y si le conectamos un número menor de baterías, el control
de carga será regido principalmente mediante el control de la temperatura al interior de la(s) batería(s).
Para que ello ocurra, tanto el controlador de carga como el grupo de baterías deben encontrarse operando
en el mismo recinto, caso contrario, el sistema de control de temperatura de carga que incluyen los
controladores, no dispondrá de las necesarias referencias de temperatura exactas si éste se instala en un

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ambiente diferente al que se encuentra el grupo baterías. Al controlador de carga no debe llegarle luz
solar, para que realice de buena forma el control de temperatura mencionado.

La corriente nominal máxima de entrada del controlador de carga debe idealmente ser siempre
superior que la máxima nominal procedente del grupo paneles, también mayor que la necesaria para
cargar al grupo baterías, a razón de 5A hora para cada una, y a su vez igual o un poco mayor a la
máxima corriente requerida por el inversor en su punto de máxima potencia. Por ejemplo, si el inversor
es de 500W / 24V = 20,8 A. la corriente a manejar por el controlador de carga no deberá ser inferior a la
que el algún momento puede demandar el señalado inversor.

Redondeando la explicación, si la corriente nominal procedente del grupo paneles es 20A, el controlador
de carga deberá disponer idealmente de una capacidad nominal superior a dicha cifra, o sea 30 A. Lo
mismo es válido para controlar la carga del grupo baterías; si vamos a recuperar carga para 4 baterías, a

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razón de 5A/ hora para cada una de ellas (total 20A/h.) nuestro controlador de carga debe estar
capacitado para manejar una cifra de corriente (A) similar o superior, salvo que se opte por operar en la
modalidad conocida como ―carga dividida‖, en la cual desde un grupo de paneles, por ejemplo con
corriente nominal total de 40A, se procede a destinar un grupo a 20A para operar directamente hacia el
inversor, y un segundo grupo a 20A se destina a recuperar la carga del grupo baterías, para una vez
cumplida la carga, pasar a sumarse a la primera, según vimos en mayor detalle bloques anteriores.
Importante es también que al momento de dar arranque a un motor alimentado por un sistema solar, la
batería se encuentre a plena carga, en razón de que si no es así, la corriente instantánea de partida –
Surge– (equivalente a 4 veces la nominal) puede provocar daños en el controlador de carga, debido a la
intensidad de la demanda de corriente exigida por el motor al momento de partir, o simplemente no dar
paso a la corriente necesaria para el arranque del motor, en cuyo caso el inversor que alimenta al motor
deberá conectarse directamente a los bornes de la(s) batería(s), quedando privado el sistema del control
de descarga profunda.

Controlador de Carga

Los reguladores de carga actuales incorporan micro controladores en su diseño —una forma de
inteligencia artificial— para la correcta gestión de un sistema fotovoltaico provisto de baterías de
respaldo. Su programación elaborada y residente en chips, permite un control capaz de adaptarse a las
distintas situaciones de forma automática, permitiendo algunos modelos la modificación, manual o
programada, de sus parámetros de funcionamiento para instalaciones especiales. Incluso los hay que
memorizan datos que permiten conocer cuál ha sido la evolución de la instalación durante un tiempo
determinado. Para ello, consideran los valores de tensión, temperatura, intensidad o corriente de carga y
descarga, y capacidad del acumulador o grupo de baterías. Se comunican con el usuario mediante
indicaciones acústicas y/o luminosas y/o por medio de paneles visuales alfanuméricos, y algunos además
pueden emitir los datos a distancia, vía cable o inalámbrica.

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El Controlador de Carga trabaja regulando la tensión/corriente que ingresa desde el grupo de

paneles, limita la corriente de carga para el grupo de baterías, controla la temperatura al interior
de ellas y despacha energía hacia el inversor.

Los hay que, además de las características señaladas, ofrecen la posibilidad de control a distancia
enviando la data de control vía cable e inalámbrica a computadores remotos, o para telemetría (envío de
la data de control vía enlaces de radiocomunicación) muy utilizado en instalaciones fotovoltaicas de
gran formato, como son los denominados huertos o parques solares. A otros modelos puede
programárseles eventos tales como prendido/apagado de luces, partida de motores, etc., más conocidos
como controladores de carga duales.

Existen principalmente dos tipos de reguladores de carga, los lineales y los conmutados, siendo los
segundos un poco más eficiente que los primeros, no obstante cumpliendo ambos con el propósito
perseguido. La tendencia actual y a futuro es el uso sólo del tipo conmutado.

Si el controlador no dispone de control de temperatura, lo que no debe hacerse es poner un controlador

de carga de 20 A., a cargar una sola batería, porque supera ampliamente el régimen de carga lenta,
normalmente 5 A/h. En otras palabras, frente a ausencia de un sistema de control de temperatura en el
controlador y si requiere cargar dos baterías utilice un controlador de 10 A; si utiliza uno de mayor
corriente, las baterías se van a cargar con mayor rapidez, pero el incremento de temperatura incontrolado
se reflejará en el detrimento de la vida útil de la batería. Por otra parte y tal como señalamos líneas

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arriba, el controlador de carga debe guardar relación con la potencia máxima que maneja el inversor: si

La figura nos muestra la conexión para el Inversor cuando la demanda excede la corriente capaz
de ser manejada por parte del Controlador de Carga (partidas de motores, por ejemplo).

el inversor es de 600 Watts / 24V. = 25 A. El fusible o automático solar necesario de incluir entre el
controlador y el inversor sería en este caso: 25 A + 25% = 31,25 = 30 A.

¿Cómo trabajan los reguladores de carga?

Regulando la función de los siguientes parámetros de control/carga de las baterías: igualación o

ecualización, carga profunda, carga de flotación, control de temperatura.

Igualación o Ecualización

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Esta respuesta del regulador permite la realización automática de cargas de igualación o ecualización en
los acumuladores o baterías, tras un período de tiempo en el que el estado de carga ha sido bajo,
reduciendo al máximo la generación de gases.

Este tipo de carga —programable en el controlador— se aplica sólo a las baterías de electrolito líquido
cuando se detecten tensiones dispares entre elementos (celdas) superiores a 0,05V, estando la batería en
estado de flotación. También se realizará una carga de igualación después de un cierto número de
descargas profundas y con el fin de disponer lo antes posible de las baterías perfectamente cargadas.
Asimismo, se realizara una carga de igualación después de cada rellenado de electrolito para asegurar la
homogeneidad del electrolito en todo el elemento. Las cargas de igualación o ecualización se realizaran
a una tensión por elemento (celdas) de 2,40V., valor ligeramente superior a un nivel de carga normal,
siendo su objetivo nivelar (previo al proceso de carga) la carga residente en cada uno de los vasos que
componen una batería de electrolito líquido.

La duración de la carga de igualación o ecualización dependerá del estado de carga/descarga de la

batería, de la corriente de carga, de la temperatura y de la tensión a la que se realiza. La manera más
fiable para determinar el fin de la carga, en el caso de baterías de electrolito líquido, consiste en medir la
densidad del electrolito y que ésta permanezca constante durante al menos 3 horas a una temperatura
ambiente inferior a 30ºC. Tensiones de carga superiores y especialmente con temperaturas elevadas,
reducirán la vida útil de la batería

En sí, la ecualización consiste en un sobre voltaje de aproximadamente 14,5V. Esta respuesta del
regulador permite la realización automática de cargas de ecualización o nivelación de las baterías,
exclusivamente para las de electrolito líquido, luego de un período de tiempo en que el estado de
recuperación óptima del nivel de carga, por razones de uso, ha sido bajo. A raíz del funcionamiento y
con el uso, las placas de dicho tipo de baterías acumulan adheridas a ellas material de desecho que debe
ser removido desde su superficie, a objeto de recuperar su máximo nivel de almacenamiento de carga.
Descrito en forma sucinta, se trata de un método de sobre carga controlada —pudiendo ser manual o
gobernado de manera automática por el regulador— y sólo para baterías estacionarias de electrolito
líquido, funcionalidad que se emplea para devolver a las baterías su capacidad de almacenamiento,
aumentando así su eficiencia y extendiendo su vida útil. Se estima como promedio una carga de
ecualización de entre 2, 4 o más horas por cada 10 descargas profundas de la(s) batería(s), criterios que
fija cada fabricante en particular, y que son establecidos automáticamente por el controlador, cuando

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está programado para ello. Este tipo de carga no es aplicable a baterías de mantención libre y es
programable por el usuario directamente en el controlador de carga, cuando se va a operar con baterías
de electrolito líquido.

Carga Profunda

Tras el período de ecualización (cuando corresponda) el sistema de regulación permite la entrada de

corriente de carga normalizada al grupo de baterías, incluyendo ciertos períodos de interrupción
determinados por la temperatura interior de la batería y gobernados mediante la técnica PWM —
acrónimo del inglés: modulación por ancho de pulso— hasta alcanzar el punto de tensión final de carga.
El acto de conversión de la energía eléctrica para almacenarla en forma de energía química al interior de
una batería, genera temperatura, la cual debe ser controlada en directo beneficio de la vida útil de ella.

A objeto que esta temperatura no supere un límite máximo pre establecido, el controlador de carga,
mediante la técnica PWM, emite paquetes energéticos controlados e interrumpidos cada cierto tiempo.
Estos períodos de interrupción se establecen cada vez que al interior de la batería se alcanza una
temperatura aproximada a los 25ºC. Alcanzado el punto de máxima carga, el sistema de regulación la
detiene y el sistema de control pasa a la segunda fase, conocido como carga final de flotación o de
mantención.

Cuando se alcanza la tensión final de carga, la batería ha llegado a un nivel de carga próximo o superior
al 90% de su capacidad, en la siguiente fase se completará la carga.

Para realizar en debida forma el control descrito precedentemente, el controlador de carga debe
instalarse en el mismo ambiente en que reside el grupo de baterías, a objeto que su control de
temperatura opere de manera eficiente.

Carga final y mantención – BDF o carga flotante

La carga final de las baterías se realiza estableciendo una zona de actuación del sistema de regulación
dentro de lo que se denomina ―Banda de Flotación Dinámica - BDF‖. La BFD, o carga flotante, es un
rango de tensión cuyos valores máximo y mínimo se fijan entre la tensión final de carga y la tensión
nominal más un 10% aproximadamente (13,5V.)

Una vez alcanzado el valor de voltaje de plena carga de la(s) batería(a), el regulador detecta si ésta decae
en el tiempo y si es así, automáticamente le inyecta una pequeña carga para mantenerla al máximo; esto

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es, inyecta la corriente de flotación o de mantención, la que se encarga por tanto de mantener la batería a
plena carga y, cuando no se consuma energía, se emplea en compensar la denominada auto descarga de
las baterías, en el tiempo.

Control de temperatura

El controlador de carga repone la energía en la batería controlando atentamente que el proceso no

incremente la temperatura al interior de la batería por sobre los 25º C., con el fin de prolongar su vida
útil. Para ello dispone de un controlador de temperatura, que parametrizando los datos de corriente,
voltaje de carga y temperatura ambiente imperante, logra establecer con gran exactitud la temperatura
imperante al interior de la(s) batería(s) bajo carga.

Indicadores de Estado:

 Desconexión del Consumo por baja tensión de baterías,

 Alarmas de señalización —acústicas/luminosas/alfanuméricas
 Desconexión del consumo por baja de carga en las baterías
Recuerda que…
La desconexión de la salida de energía por baja tensión de batería, indica
una situación de descarga de ella o del grupo acumulador, muy próxima  Para que un controlador de
al 70% de su capacidad nominal. Es decir, una batería de 105 Ah. carga opere bien, debe
ingresará a esta fase cuando se aproxime a una carga residual - instalarse en el mismo
dependiendo del criterio del fabricante o por programación directa por recinto en que se encuentra
parte del usuario- de unos 25/30A. La idea es no profundizar a extremos el grupo de baterías de
la descarga con el propósito de extender la vida útil del acumulador o respaldo.
batería.

Si la tensión de la batería disminuye por debajo del valor de tensión de

maniobra de desconexión de consumo, por alguna razón que no
obedezca a falta de carga en las baterías, durante un tiempo establecido por el fabricante o por el
usuario, la desconexión automática no ocurre; esto es para evitar que una sobrecarga puntual de corta
duración desactive el consumo. Si dicho período de tiempo es evidentemente superado, se desconecta el
consumo automáticamente en la gran mayoría de los controladores de carga, previo aviso al usuario
mediante alarmas acústicas y/o luminosas. Esta característica también operará en caso de un corto

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circuito en la carga o consumo. Las prestaciones posibles de encontrar en un controlador de cargas —
fijas, programables y/o automáticas— obviamente van de la mano con su precio final.

Tensión de desconexión del consumo

Tensión o nivel de carga de la batería muy baja, a partir de la cual se desconectan automáticamente las
cargas de consumo. En otras palabras, los acumuladores no entregan más energía al sistema, previo
aviso acústico y luminoso al usuario. Esta condición (alarma) suele encontrarse presente tanto en
controladores de carga como en equipos inversores y, como señalamos, es programable en ciertos
modelos.

Alarma por baja tensión de batería

La alarma por baja tensión de batería —acústica y/o luminosa— indica una situación de descarga
considerable. A partir de este nivel, las condiciones del grupo de baterías empiezan a verse
comprometidas desde el punto de vista de la descarga y del mantenimiento de la tensión de salida,
particularmente frente a intensidades de demanda elevadas. Esta alarma se establece en función del valor
de la tensión de desconexión de consumo y dependiendo del modelo del controlador, puede ser o no
programable.

En ciertos reguladores, —dijimos— si la tensión de la batería disminuye por debajo del valor de la
alarma durante más de 10 segundos aproximadamente, se desconecta automáticamente el consumo. El
regulador entra entonces en la fase de recuperación y el estado de consumo no se restaurará hasta que la
batería no alcance un nivel medio de carga. Se entiende por estado de consumo, la zona en que la
batería o el grupo acumulador, están en condiciones de servir determinada demanda energética, sea esta
puntual o continua.

Cuando por razones de demanda de energía sea necesario conectar el Inversor directamente a los bornes
de las baterías (partida de motores, por ejemplo), el controlador perderá la posibilidad de cortar el
suministro de energía por condición de baterías bajas (30% de carga restante), caso en el cual dicha
alarma será asumida por el propio Inversor, el cual emitirá señal acústica de tal condición, anters de
dejar de funcionar.

Protecciones típicas

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Al adquirir un controlador de carga, verifique que idealmente cuenten con estas características y/o
sistemas de protección.

 Contra sobrecarga temporizada en consumo

 Tolera un lapso de tiempo una carga que supera su capacidad de control de corriente y tras alarma(s)
se desconecta automáticamente.
 Contra sobretensiones en paneles, baterías y consumo.
 Contra desconexión/corto circuito de batería.
 Contra polaridad incorrecta
 Contra corto circuitos
 Contra sobrecarga térmica, Provocada por demanda excesiva o por exposición al sol. Deben
instalarse fuera del alcance del sol.
 Contra corriente inversa
 Contra bajo voltaje
 Con tecnologías PWM y/o MPPT
 Con selección automática del voltaje de entrada

Entre otras características posibles de encontrar en equipos controladores de carga, podemos señalar.

Señalizadores alfanuméricos e indicadores de estado de tipo acústico y/o luminosos

 Indicadores de tensión en batería.

 Indicadores de fase o estado de carga.
 Indicadores de corriente de carga
 Indicadores de sobrecarga/cortocircuito.
 Indicadores de fallas en el sistema.
 Otros

Parámetros a considerar - capacidades

Tensión o voltaje nominal: la correspondiente al sistema a instalar (12V., 24V., 48V.)

Intensidad o corriente del controlador: la intensidad o corriente nominal de un regulador ha de ser

mayor que la recibida en total procedente del campo de paneles FV; es decir, si éste entrega 3
Amperes/hora, nuestro cargador debe manejar mayores corrientes: 6, 9 12 Amperes. etc.; es mejor
cuanto mayor sea esta capacidad, por si se presenta la necesidad de aumentar la cantidad de paneles. A

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su vez, reiteramos, la corriente del controlador de carga debe ser capaz de hacer operar al inversor a
máxima potencia. Veamos

Corriente requerida por un Inversor de 600W / 24 V. = 25 Amperes, será la corriente necesaria a

suministrar por el Controlador de Carga. De no cumplirse esta condición, será necesario conectar el
Inversor directamente a las baterías y no a la salida de carga del inversor (icono de ampolleta), como
mostramos por razones pedagógicas en los diagramas relacionados, con mayor razón si el Inversor debe
hacer partir motores en algún momento..

Parámetros importantes que determinan su operación

 Intensidad Máxima de Carga o de generación:

Máxima intensidad de corriente (A) procedente del campo de paneles que el regulador es capaz de
admitir: Si desde los paneles van a llegar aproximadamente 25 A (por ejemplo 4 Paneles 150W./24V =
6,25 A x 4 paneles) en un momento dado y en el mejor de los casos de insolación, por tanto basta con 1
controlador de 25 A.

Intensidad máxima de consumo:

Máxima corriente que puede pasar del sistema de regulación y control, a la carga de baterías y a su vez
al consumo. Para 6 baterías idealmente 30 A. Para máxima potencia demandada por el inversor (600W /
24V) = 24 A., idealmente 30 A.

 Voltaje final de carga:

Voltaje de la batería por sobre el cual se interrumpe la conexión entre el generador fotovoltaico y la
batería, o se reduce gradualmente la corriente media entregada por el generador fotovoltaico (I. de
flotación). Corresponde aproximadamente a 14,1V., para una batería de plomo ácido con tensión
nominal de 12V. Estas y otras cifras señaladas en el curso son estimativas y pueden variar desde un
fabricante a otro.

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Generador solar provisto de un controlador de carga especial, habilitado para controlar voltaje de
carga y temperatura a distancia.

Cómo funciona el Circuito de Control de Carga

Un circuito de control de carga posee principalmente dos secciones: la que ejerce el control, y la que lo
recibe. Ambas están electrónicamente vinculadas en todo momento a través del circuito de monitoreo, el
que completa el circuito de control. La señal de monitoreo permite que la sección de control pueda
ejercer su acción en el momento y forma apropiada.

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El monitoreo vigila el estado de carga del banco de baterías, enviando información al circuito de control
sobre el voltaje de batería. Si bien este voltaje no representa la forma óptima de conocer con precisión el
estado de carga de una batería, es el parámetro más fácil de monitorear, y desde los primeros diseños se
lo utilizó como señal de monitoreo. Por otra parte y hacia el final del ciclo de carga, el voltaje de batería
se mantiene casi constante, proveyendo una información más que satisfactoria sobre el estado de carga
del grupo acumulador o batería.

La Figura anterior muestra tres voltajes de monitoreo: el de batería, el del generador de entrada y el de
un sensor de temperatura externo, como explico a continuación.

La batería está conectada permanentemente a la salida de ―Batería‖ del controlador de carga. En

sistemas con altas corrientes de carga, a fin de eliminar el posible error introducido por la caída de
voltaje en los cables de conexión muy largos entre el controlador y el grupo de respaldo (baterías), se
utilizan cables adicionales de monitoreo por los que circula una corriente muy pequeña, que permite al
controlador conocer el nivel de pérdida caída de voltaje en el trayecto de cableado.

En otras palabras, si el controlador de carga despacha al grupo de baterías un nivel de voltaje de carga de
14,1 voltios, por citar un ejemplo, llegando solamente 12V. al grupo de baterías, el par de cables de
monitoreo acusan una pérdida de 2 voltios en el largo del
cable de conexión que une el controlador de carga con las
baterías, información que permite al controlador elevar su
salida en 2 voltios —16,1V. — para compensar dicha
pérdida y establecer así una diferencia de potencial que
permita recuperar la carga del grupo de baterías de
respaldo.

La incorporación de un sensor de temperatura externo en

las baterías es otra alternativa a usar en aquellas instalaciones en que, por razones físicas, el controlador
de carga debe ser instalado a gran distancia del grupo de baterías de respaldo. (El control a distancia de
los parámetros voltaje y temperatura es característica exclusiva de cierto tipo de controladores de
carga.).

Este sensor, que a veces opera adherido directamente a la caja de batería y en otras atornillado a uno de
sus terminales -bornes-, convierte la señal de temperatura en una señal de voltaje de corrección variable,

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que es su vez remitida a través de un par (cables) al controlador de carga, donde, según sea el caso, se
suma o se resta al valor del voltaje máximo de carga, cuyo nivel pasa así a depender directamente de la
temperatura del electrolito al interior de la batería, estableciendo de este modo el control de la extensión
de los paquetes de carga -PWM-, en relación a la temperatura de operación al interior de la(s) batería (s).

La figura nos muestra las diferentes operaciones que realiza un controlador de carga, dependiendo la las
situaciones que enfrente. No debe interpretarse como voltajes diferentes, sino es un solo voltaje que
asume diferentes niveles de operación de acuerdo con el procedimiento que se presente.

La mayoría de los controladores de carga detectan directamente la temperatura ambiente como una señal
de referencia y omiten este control de temperatura cableado hacia la batería, siempre y cuando estén
montados en las proximidades del grupo de acumuladores o baterías y, en beneficio de la eficiencia en

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tal sentido, por tanto DEBEN instalarse directamente en el lugar donde opera el grupo de baterías y
evitando que la luz solar incida sobre su cuerpo, lo cual hace que el control de temperatura sea erróneo.
Señalamos que este tipo de control se realiza en forma inteligente en el controlador de carga, el cual
parametriza entre la temperatura ambiente que detecta, el voltaje y corriente de carga, para establecer así
los niveles y tiempos adecuados que permitan mantener —al interior de la batería— la temperatura bajo
control en todo momento.

El monitoreo del voltaje de batería continúa durante la noche y se utiliza para interrumpir el circuito de
carga cuando éste alcanza un valor excesivamente bajo o LVD (desconexión por bajo voltaje).

Un criterio similar se aplica al voltaje de salida de los paneles, el que puede ser desconectado por el
controlador de carga cuando alcanza un valor menor al voltaje de carga de la batería. Estos ejemplos los
he traído a colación para que el alumno advierta que los controladores de carga modernos son utilizados
para llevar a cabo funciones adicionales, las que se agrupan bajo el nombre genérico de opciones, como
entre otras son las modalidades operativas, PWM/MPPT señaladas precedentemente. Algunas de ellas
están directamente relacionadas con el proceso de carga (control de temperatura), mientras que otras —
dijimos— tienen una acción indirecta de ecualización, carga y monitoreo general del sistema.

La posición que tiene el controlador de carga dentro de un sistema Generador Solar Fotovoltaico,
instalado entre la parte generadora y el resto del circuito, nos señala que las opciones descritas se
incorporen en este punto. Algunas de ellas pasan a formar parte del control de carga (control de
temperatura y ecualización), mientras que las que guardan relación con el monitoreo del sistema
requieren el uso de unidades adicionales, las que estarán dedicadas a una función específica
(desconectado por bajo voltaje de carga, etc.). La filosofía de diseño del circuito de control determina la
calidad de su acción.

Los primeros controladores de carga utilizaban la tecnología conocida como ―semiconductores

discretos‖ (diodos y transistores) para determinar cuándo la acción de control debe tener lugar, y un
componente electromecánico, el relevador o relé (relay, en inglés) para ejercer la acción de control. El
resultado era una muy pobre acción reguladora, la que se traducía, de acuerdo con observaciones de
terreno hechas en instalaciones que los usaban, en baterías cargadas entre un 50 y un 60% de su
capacidad máxima y muchas de ellas con placas excesivamente sulfatadas por falta de proceso de
ecualización.

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Como si esto fuera poco, cuando los contactos del relevador se abrían, se daba origen a un arco eléctrico,
puesto que se interrumpe una corriente continua, la que al no cambiar de polaridad o sentido, nunca pasa
por cero. Con el uso, los arcos eléctricos señalados dañaban paulatinamente la superficie del contacto,
aumentando su resistencia y disminuyendo rápidamente la vida útil del relé. Si por alguna remota
posibilidad un controlador de carga de este tipo (muy antiguo) va a ser ubicado cerca del banco de
baterías o de acumulación, el relé debe tener los contactos dentro de una caja hermética, ya que los arcos
eléctricos generados durante su operación pueden activar la reacción química entre el oxígeno y el
hidrógeno que la batería libera al cargarse, la que concentrada en un recinto cerrado puede llegar a ser
altamente explosiva.

Actualmente, con la introducción de los semiconductores de potencia, los relés fueron reemplazados en
su función por componentes de estado sólido (FET de potencia), prolongando ellos la vida útil del
controlador de carga y haciéndolo mucho más eficiente. Cuando los microprocesadores bajaron su costo,
éstos fueron incorporados en el circuito de control, mejorando considerablemente dicho proceso gracias
a la inteligencia artificial que aportan. Estos microprocesadores son controlados por programas
residentes específicos, llamados algoritmos de carga, los que disponen de varios pasos (etapas). Los
controladores de carga que los usan se denominan técnicamente multi etapas, para distinguirlos de los
que no incorporan un microprocesador (controles de una etapa).

Ventajas de estos modelos

La incorporación en dicho proceso de un control vía del algoritmo de carga, permitió diseñar un
controlador de carga que presenta una adaptación muy eficaz entre el estado de carga de la batería y el
generador de carga. Otra ventaja adicional es que el microprocesador requiere un bajo consumo y los

FETs de potencia, debido a su elevada resistencia de entrada (106 W), permiten el cierre y apertura
electrónica del circuito de carga, mediante un consumo de energía francamente despreciable para el
sistema, lo cual se traduce en una clara eficiencia energética.

Estos factores posibilitan que un controlador de carga de última generación (MPPT) pueda controlar
corrientes de varios amperes, consumiendo en dicha actividad solamente decenas de mA. Por otra parte,
la resistencia interna de los FETs de potencia durante el período de conducción/corte es baja, lo que
disminuye las pérdidas por disipación de calor.

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Grafico del trabajo de carga de baterías de un controlador provisto de tecnologías PWM/MPPT.

La forma de la curva es totalmente ficticia y se representa así únicamente con fines didácticos.
Los espacios en blanco entre paquetes energéticos, indican suspensión de la carga a objeto de
disminuir la temperatura al interior de la batería.
Este es, en resumen, el corazón de los controladores de carga modernos. Independientemente de cuántas
etapas en ellos se ofrezcan, los factores considerados en el criterio de diseño de las dos primeras es el
mismo para todos los fabricantes. Todas las filosofías de diseño electrónico operan bajo la premisa
técnica de cargar al banco de baterías lo más rápido y eficientemente posible, atendiendo a que la
duración del día solar promedio —dijimos— es limitada. Por otra parte, la alta cantidad de iones libres
presentes en la solución electrolítica cuando la batería está descargada, hace posible acelerar al
comienzo el proceso de carga (paquetes energéticos de mayor duración) prolongados hasta que la
temperatura al interior de la batería alcance los 25ºC., punto en que el paquete PWM se interrumpe a la

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espera que decrezca la temperatura. Se consigue así una carga neta substancial durante las primeras
horas del día solar.

La implementación del proceso de carga es la misma para todos los fabricantes y consiste en elegir un
voltaje de referencia lo suficientemente alto, como para asumir que cuando el voltaje de batería alcanza
ese valor, el estado de carga se encuentra cercano al 80% del máximo posible. Durante este período, la
corriente de carga tiene un valor igual al máximo que el sistema puede entregar en un dado instante. Al
respecto, debe tenerse en cuenta que los paneles solares no proporcionan una corriente constante durante
el día, ya que el máximo valor sólo se alcanza cuando el sol atraviesa las horas del mediodía. Previo y a
partir de este punto, su valor se presenta claramente disminuido, por factores tan diversos como hora del
día, la temperatura ambiente, velocidad y temperatura del viento, nubes, polución atmosférica, etc.

Las diferencias entre distintos modelos de controladores de carga tienen que ver con detalles como:

 El valor elegido para el voltaje de referencia, o

 La posibilidad de alterar (o no), manualmente, el valor del voltaje de referencia.

Cuando el voltaje de batería iguala o se nivela, con el de referencia —a veces con un margen de error
entre 20 y 30 mV. (milésimas de volt)— el circuito de control inicia la segunda etapa. Todos los
fabricantes de baterías reconocen para este punto la necesidad de desacelerar el proceso de carga y se
acorta el tiempo de duración del paquete o pulso energético PWM, ya que el estado de carga de la
batería es lo suficientemente alto como para asumir que la cantidad de iones libres en la batería ha
disminuido, y que seguirá disminuyendo durante esta etapa. Se hace entonces necesario disminuir,
paulatinamente, el valor de la corriente de carga —pulsos PWM de menor tiempo. A esta etapa se la
denomina de absorción.

Algoritmos para la segunda etapa

Como llevar a cabo la disminución de la corriente durante esta etapa es lo que diferencia a un modelo
del otro, una solución es mantener el valor del voltaje usado como referencia en la primera etapa. Como
la diferencia entre el voltaje de batería y el del generador de carga disminuye constantemente, la
corriente de carga se reduce paulatinamente.

Una segunda solución consiste en disminuir la corriente de carga usando un generador de carga
modulado por pulsos, —paquetes energéticos controlados en el tiempo en función de la temperatura al

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interior de las baterías— de amplitud constante (valor de referencia) y tiempo de conducción variable.
Este tipo de generador se conoce, en inglés, con la abreviatura PWM (modulación por ancho de pulso).

Durante esta etapa (PWM) los incrementos en el voltaje de batería se traducen en reducciones en el
tiempo de conducción, disminuyéndose así el valor de la
corriente de carga y como consecuencia también la
temperatura.. La duración de la segunda etapa está determinada
Recuerda que…
por el algoritmo de carga y no por un voltaje de referencia. Al
terminar esta etapa, el fabricante estima que la batería está Un controlador de carga debe tener una
cargada, interrumpiéndose así el proceso de carga. capacidad de manejo de corriente
superior al promedio de carga necesaria
Cuando una batería permanece en reposo, su voltaje disminuye
para el grupo de baterías que va a
lentamente, proceso que se ve afectado además por la
controlar. Si se trata de un grupo de 4
temperatura ambiente. Es por ello que los controladores de
baterías a las cuales se espera cargar a
carga de dos etapas ofrecen dos opciones al terminar la
un promedio de 5 A/h., el controlador
segunda etapa:
deber ser capaz de gobernar por lo
* El reinicio automático de la carga (de flotación) o menos 25 A/h.
* La posibilidad de ecualizar las baterías.
 El cable de conexión entre
Reinicio automático controlador/baterías debe incluir

Cuando el valor del voltaje de batería decrece o cae por debajo elementos de seguridad (fusible)

de un segundo voltaje de referencia, llamado voltaje de reinicio

o de flotación, el ciclo de dos etapas se repite automáticamente.

Ecualización

Aunque explicado precedentemente, profundizando un poco más sobre este tema, diremos que a modo
de alternativa al reinicio automático, estos controladores de carga ofrecen la posibilidad —
programable— de elegir una tercera etapa: la de ecualización. Esta opción permite a los fabricantes de
estos modelos, considerarlos como controladores de carga de tres etapas, aún cuando la etapa de
ecualización no constituye una extensión del proceso de carga. El proceso de ecualización o igualación
puede trabajar a elección, en forma automática o manual —se programa por parte del usuario— y es
aplicable —señalamos— sólo a baterías estacionarias con electrolito líquido. Es importante observar

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que la corriente de ecualización usada en estas unidades no es excesiva, ya que en el proceso usa un
voltaje de sólo 1 V. por sobre el de referencia (sistemas de 12V). Esto evita una excesiva gasificación
del electrolito. Esta alternativa es seleccionable mediante conmutación manual en los controladores de
carga y viene debidamente indicada en el Manual de Operación del controlador de carga.

En algunos modelos la etapa optativa de ecualización no existe. Se trata, entonces, de controladores de

carga sólo para baterías de Gel o libres de mantención. En su lugar, el algoritmo de carga convierte al
generador de carga en un generador del tipo PWM, como el descrito precedentemente. En esta etapa, el
valor del voltaje del generador disminuye (2V. en sistemas de 12V; 4 en sistemas de 24V) con respecto
al de referencia de la etapa anterior. Este voltaje, llamado de flotación, debe disminuir porque la
cantidad de iones libres en el electrolito es muy escasa, evitándose así una excesiva e innecesaria
gasificación del electrolito.

La sigla inglesa MPPT (del inglés, Maximum Power Point Tracking ) traducido significa: “seguidor del
punto de máxima potencia” y a lo que se hace mención es que corresponde a los valores o niveles
óptimos para el voltaje y corriente, que permitan una máxima eficiencia a la carga de baterías. Como
vimos al tratar los paneles fotovoltaicos, ese punto varía con la temperatura de trabajo del mismo.

La ventaja inmediata del sistema MPPT es el mayor aprovechamiento de la energía solar, pero otra
no tan obvia, es que este tipo de control permite usar un voltaje de generación más elevado que el
nominal del sistema, dado que su diseño incorpora un conversor de CC a CC, (corriente continua a
corriente continua) el que mantiene (electrónicamente) el voltaje de carga dentro del rango requerido por
el voltaje nominal del sistema, pese a una ligera baja en el voltaje proveniente del grupo de paneles, sea
temprano en la mañana o al atardecer, debido a la baja potencia de la luz solar de esas horas, por el paso
eventual de nubes, por ejemplo, en que el nivel de corriente de carga resultará claramente afectado. La
idea -descrita en términos simples- de un control MPPT, es mantener el rendimiento en forma
permanente, en el punto de mayor eficiencia energética de la curva de operación.

Al respecto es necesario señalar que los primeros controladores de carga lo hacían en forma lineal, es
decir operaban en directa relación con un nivel de corriente de carga dado, el que debía arribar desde los
paneles; si esta condición no se cumplía, se detenía la carga. Con la tecnología MPPT dicha condición
no existe, pues independiente cual sea el nivel de corriente proveniente desde el grupo paneles, el
controlador sigue operativo, trabajo que sólo se detiene frente a alzas de temperatura al interior de las

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baterías, como resultado directo del proceso de carga, la cual debe ser acotada a objeto de extender la
vida útil de las baterías.

El grafico nos muestra las diferencias existentes entre la tecnología MPPT – curva en rojo – y la PWM.
Podemos advertir que la primera es más eficiente en términos de recuperación de carga.
La forma de la curva es totalmente ficticia y se representa así únicamente con fines didácticos.
Para ilustrar esta ventaja, pensemos que requerimos dos paneles en un sistema de 12V nominales,
pudiendo optar por conectarlos en serie (24 V.) y reducir la corriente entre los paneles y el controlador
de carga a la mitad, lo que le permitirá usar cables de menor diámetro (y costo).

Si asumimos que las pérdidas del circuito convertidor de CC a CC interno del controlador no son
elevadas, la potencia de salida de este circuito será cercana a la de entrada. Como el voltaje de salida es
menor, la corriente de salida debe ser mayor que la de entrada, y por ello este tipo de control incorpora

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un limitador de corriente a fin de no sobrepasar la corriente máxima tolerada por las baterías cuando la
potencia de entrada sube transitoriamente.

La máxima corriente de carga y el máximo voltaje del sistema son dos criterios obvios de selección,
pero como el alumno podrá apreciar, al tratar el diseño de un sistema, las consideraciones de éste
determinan finalmente el tipo de control a utilizar. Asumiendo que el mercado ofrece alguna variedad de
modelos, el costo inicial de la unidad deberá ser evaluado considerando las características del sistema.

Es imposible describir todos los modelos que se ofrecen a la venta, de manera que sugiero utilizar los de
tecnología PWM o MTTP. Los nuevos diseños se conocerán con esta última sigla, pues la tecnología
PWM prácticamente ha dejado de fabricarse como tal y quedará implícita directamente en el diseño del
nuevo controlador MPPT.

Finalmente, el costo de un controlador de carga depende de:

La máxima corriente de carga que puede controlar.

Un controlador de carga tiene limitaciones al respecto. Si su capacidad es de 20A/h puede recuperar

carga sólo a 4 baterías simultáneamente (5A/h para cada una). Si se le conectan más baterías, sólo
trabajara hasta que su control de temperatura actúe debido a esta sobredemanda y previo aviso
acústico/luminoso detendrá su operación.

 Las opciones o prestaciones que se elijan.

 El tipo de monitoreo incorporado en la unidad.

El número de opciones ofrecidas por el fabricante se incrementa con el valor de la corriente de carga,
dado que los sistemas de mayor consumo requieren más protecciones.

Opciones : Fundamentalmente dos

Control de temperatura

Lo explicamos líneas arriba. Esta opción es muy práctica y debe ser adoptada por el usuario

Ecualización

Si usa baterías con electrolito líquido, elija un controlador de carga que incluya esta opción.

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Seguridad

Todas las líneas de alimentación DCV —voltaje continuo— que se conectan al controlador de carga,
deben incluir circuitos de protección tales como seccionadores manuales/automáticos, o por lo menos
fusibles de protección adecuadamente dimensionados para los niveles de potencia a manejar.

Todos los conductores deben guiarse a través de ductos separados.

Las corrientes (A) a conducir no deben superar la capacidad de transporte nominal de los cables.

El número de baterías conectadas al controlador no deben superar la capacidad de carga de éste. En otras
palabras, un controlador de 20A puede recuperar carga únicamente para 4 baterías (5A/h. para cada una
de ellas).

¿Qué hemos aprendido?

 Que la principal función de un Controlador de Carga es prolongar la vida útil de las baterías a
través de adecuados niveles de voltaje y corriente de carga y así mantener siempre cargado el
grupo baterías.
 Que su capacidad de manejo de corriente debe ser superior a la entregada por el grupo de
paneles solares y superior al nivel de corriente necesario para cargar cada una de las baterías a un
ritmo de 5 A/h.
 Que la condición operativa denominada Ecualización se utiliza sólo para baterías de electrolito
líquido y es programable a voluntad en el propio Controlador.
 Que no debe ser instalado en lugares donde lo alcance la luz solar.
 Que debe instalarse en el mismo ambiente en que lo está el grupo baterías, a objeto de poder
efectuar un efectivo control de temperatura al interior de la batería, durante el proceso de carga.
 Que algunos modelos poseen características que permiten el control de voltaje de carga y
temperatura de la(s) batería(s) a distancia.
 Que todas las operaciones de control las realiza de manera automática, siendo algunas de ellas y
en ciertos modelos, programables a voluntad por parte del usuario.
 Que algunos pueden comunicarse con una central de control vía alámbrica e inalámbrica a objeto
de proveer control a distancia.

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 Autoevaluación

1. Para proteger la vida útil de una batería el Controlador de Carga realiza:

A = control del voltaje de carga

B = control de la corriente de carga

C = de ambos parámetros.

2. La temperatura interior de una batería debe ser rígidamente controlada:

A = falso

B = verdadero

3. Si deseamos cargar un grupo de 4 baterías de manera simultánea a un ritmo de 5 A/h para

cada una, el Controlador de carga debe estar capacitado para proveer:

A = 15 A/h.

B = 25 A/h.

4. Para cargar una batería 12V. se requiere de un voltaje de:

A = 13,5V.

B = 12V.

5. El ritmo apropiado de corriente de carga para una batería debe ser de:

A = 8 A/h.

B = 5 A/h.

6. Debe evitarse que al Controlador de Carga le llegue luz solar:

A = falso

B = verdadero

7. En algunos modelos puede programarse a voluntad el trabajo de un Controlador de Carga:

A = verdadero

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B = falso

8. Pueden conectarse en paralelo uno o más Controladores de Carga:

A = verdadero

B = falso

9. La función ecualización debe programarse en el controlador para las baterías

A = libres de mantención

B = de electrolito líquido

10. Un controlador de carga debe instalarse en el mismo ambiente en que se encuentra el grupo
baterías de respaldo

A = verdadero

B = falso

11. Un controlador de carga está facultado para controlar la temperatura interior de una
batería durante el procedimiento de recuperación de carga:

A = verdadero

B = falso

12. Frente a una demanda excesiva de carga para un grupo de baterías, un controlador de
carga puede desconectarse automáticamente:

A = verdadero

B = falso

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Laboratorio Técnico

Las pruebas señaladas a continuación serán realizadas por el alumno siguiendo estrictamente los
protocolos de seguridad previamente estudiados en el bloque correspondiente.

Conecte un panel solar —asoleado— al controlador de carga.

Disponga el tester para una lectura de voltaje continuo —escala VDC-20V o superior.

 Conecte las puntas de prueba del tester en los contactos del panel solar y tome nota de la lectura
indicada por el instrumento
 Observando la polaridad correcta, inserte las puntas de prueba del tester en los contactos de
salida desde el controlador a la batería y tome nota de la lectura de voltaje indicada por el
instrumento

Conecta a continuación una batería —de voltaje adecuado— al controlador de carga y, observando la
polaridad correcta apoya las puntas de prueba del tester en sus bornes y toma nota de la lectura indicada
por el instrumento.

 Observando la polaridad correcta, conecta un Inversor (Off Grid) a la respectiva salida del
controlador de carga.
 Selecciona en el instrumento la escala ADC para medir corriente (A) y conéctalo en serie con la
conexión positiva que une el controlador con la batería.
 Conecta una carga o consumo (lámpara, por ejemplo) al inversor, pero con el interruptor de ella
abierto (sin energizar)
 Energiza el inversor.
 Observa la lectura de corriente (A) consumida por el inversor operando sin carga, señalada en el
display del instrumento
 Cierra el interruptor de la carga conectada a la salida de inversor para que la carga o consumo se
ponga en operación
 Observa la lectura de corriente (A) consumida por el inversor CON CARGA, señalada por el
instrumento.

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Respuestas Correctas
1. Para proteger la vida útil de una batería el Controlador de Carga realiza:

A = control del voltaje de carga

B = control de la corriente de carga

C = de ambos parámetros.

2. La temperatura interior de una batería debe ser rígidamente controlada:

A = falso

B = verdadero

3. Si deseamos cargar un grupo de 4 baterías de manera simultánea a un ritmo de 5 A/h para

cada una, el Controlador de carga debe estar capacitado para proveer:

A = 15 A/h.

B = 25 A/h.

4. Para cargar una batería 12V. se requiere de un voltaje de:

A = 13,5V.

B = 12V.

5. El ritmo apropiado de corriente de carga para una batería debe ser de:

A = 8 A/h.

B = 5 A/h.

6. Debe evitarse que al Controlador de Carga le llegue luz solar:

A = falso

B = verdadero

7. En algunos modelos puede programarse a voluntad el trabajo de un Controlador de Carga:

A = verdadero

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B = falso

8. Pueden conectarse en paralelo uno o más Controladores de Carga:

A = verdadero

B = falso

9. La función ecualización debe programarse en el controlador para las baterías

A = libres de mantención

B = de electrolito líquido

10. Un controlador de carga debe instalarse en el mismo ambiente en que se encuentra el

grupo baterías de respaldo

A = verdadero

B = falso

11. Un controlador de carga está facultado para controlar la temperatura interior de una
batería durante el procedimiento de recuperación de carga:

A = verdadero

B = falso

12. Frente a una demanda excesiva de carga para un grupo de baterías, un controlador de
carga puede desconectarse automáticamente:

A = verdadero

B = falso

Complemente los conocimientos entregados en esta Lección revisando el archivo

Manual de Referencia Rápida.

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