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La memoria RAM tiene dos características que la diferencian del resto de tipos de
almacenamiento. Por una parte tiene una enorme velocidad, y por otra los datos sólo se
almacenan de forma temporal. Esto quiere decir que cada vez que reinicies o apagues tu
ordenador, lo normal es que los datos que haya almacenados en la RAM se pierdan.
Cómo saber qué páginas están consumiendo más memoria RAM en Chrome
EN XATAKA
Cómo saber qué páginas están consumiendo más memoria RAM en Chrome
Teniendo en cuenta que la RAM sirve para que el ordenador o dispositivo móvil gestione los datos
de las aplicaciones en funcionamiento, la cantidad que tengas afecta directamente al rendimiento
de tu dispositivo. Cuanta más RAM tengas más aplicaciones podrás gestionar a la vez, y de ahí su
importancia porque si no hay suficiente el ordenador puede ir lento.
A lo que te sueles referir como memoria RAM cuando estás hablando de ella como un
componente físico es a unas tarjetas que van conectadas directamente a la placa base de tu
ordenador. Estas tarjetas tienen diferentes módulos de memoria integrada que están conectados
entre sí, y en dispositivos como ordenadores hay ranuras para tener varias de estas tarjetas.
De esta manera, si quieres que tu PC tenga 32 GB de RAM puedes tener dos tarjetas, de manera
que en el caso de que una se rompa puedas seguir utilizando la otra hasta tener un reemplazo.
Esto en los ordenadores de sobremesa y portátiles, porque dispositivos como los teléfonos
móviles no suelen poder permitir cambiar sus componentes.
Esta forma de funcionar es la misma tanto en los estándares DDR3 y DDR4, así como el DDR5 que
se empezará a ver pronto o sus predecesores. Sin embargo, cuanto más moderno es el estándar
que estás utilizando mayor será la velocidad a la que puede operar. Esto quiere decir que no es lo
mismo tener una DDR4 con una tasa de datos de 3,2 GB/s y una tasa de transferencia máxima de
25,6 GB/s que una DDR5 con 6,4 GB/s y 51,2 GB/s respectivamente.
Por lo tanto, las nuevas generaciones de memoria RAM nos ofrecen un rendimiento más alto que
las las anteriores, así como una mayor escalabilidad y eficiencia energética. De ahí que si quieres
un mayor rendimiento pueda ser interesante actualizar. Sin embargo existe un problema, y es que
el estándar de RAM que puedes utilizar lo define la placa base de tu dispositivo.
Por ejemplo, si tienes un viejo ordenador que en su día venía con memorias RAM DDR3, es muy
posible que las ranuras que tiene para la RAM estén dedicadas a este estándar. Cada uno tiene un
conector diferente, por lo que si quieres poder utilizar una memoria RAM más avanzada vas a
necesitar otra placa base.
Para que lo entiendas, vamos a imaginarnos que estás trabajando en tu escritorio. Los cajones son
tu disco duro, donde almacenas todo lo que puedes utilizar. Pero también necesitas poner en el
propio escritorio las herramientas y archivos que estás utilizando, y eso es lo que haría en este
caso la memoria RAM. Así no tienes que estar abriendo y cerrando los cajones, lo tienes todo en
frente.
Memoria expandida
No debe confundirse con Memoria extendida.
Páginas o bancos de memoria expandida dentro del espacio o área de memoria superior (UMA).
La memoria expandida o especificación de memoria expandida (Expanded Memory Specification,
EMS) fue un método que proporcionaba memoria paginada extra a los programas de MS-DOS. Fue
desarrollado alrededor de 1984.
Estos programas, que corrían en la IBM PC original, y sus sucesores como el IBM XT y el IBM AT,
eran típicamente aplicaciones como hojas de cálculo y bases de datos que necesitaban una gran
cantidad de memoria para trabajar correctamente.
El IBM PC y el IBM XT tenían una arquitectura de memoria de modo real, que solo permitía a los
programas usar 1 mebibyte de espacio de dirección, de los cuales solo hasta 640 KiB estaba
disponible como RAM normal para las aplicaciones. El resto entre 640 KiB y 1 MiB era reservado
para periféricos, destacándose la memoria para las tarjetas de vídeo. El IBM AT, con su
microprocesador Intel 80286 soportaba un modo protegido lo que le permitía direccionar hasta 16
MiB, pero este computador también usaba el MS-DOS, un sistema operativo que no usaba la
memoria extendida (por arriba del mebibyte) directamente.
La idea detrás de la memoria expandida era usar, también para la memoria del programa, parte de
los 384 KiB restantes normalmente dedicados a los periféricos. Para poder usar potencialmente
mucho más memoria que los 384 KiB que el espacio de direccionamiento permitía, fue ideado un
esquema de conmutación de bancos de memoria, donde solamente estarían accesibles a un
mismo tiempo, porciones seleccionadas de la memoria adicional. Originalmente, era posible una
sola ventana de 64 KiB de memoria, más adelante esto fue más flexible. Las aplicaciones tuvieron
que ser escritas de una manera específica para tener acceso a la memoria expandida.
Memoria extendida
No debe confundirse con Memoria expandida.
La memoria extendida está por arriba de 1 MiB (representado en el gráfico por "MB"), por encima
de la memoria convencional y el área de memoria superior (UMA).
La memoria extendida o especificación de memoria extendida (Extended Memory Specification,
XMS) es la especificación que describe el uso de la memoria extendida para almacenar datos (pero
no código ejecutable) en el modo real de las computadoras IBM PC y compatibles. La memoria se
hace disponible mediante software manejador de memoria extendida (extended memory
manager, XMM). Las funciones del XMM son accesibles por medio de la interrupción 2Fh.
El XMS no debe ser confundido con la especificación de memoria expandida (Expanded Memory
Specification, EMS).1
En modo real, la memoria extendida está disponible solamente por medio de EMS, UMA, XMS, o
HMA. Solamente las aplicaciones ejecutándose en modo protegido pueden usar directamente la
memoria extendida. En este caso, la memoria extendida es proporcionada por un sistema
operativo en modo protegido que la supervisa, como Microsoft Windows o Linux. El procesador
hace disponible esta memoria a través de la "Tabla Descriptor Global" (Global Descriptor Table,
GDT) y de una o más "Tablas de Descriptor Local" (Local Descriptor Table, LDT). La memoria es
"protegida" en el sentido que los segmentos de memoria asignados a un descriptor local no
pueden ser accedidos por otro programa porque este utiliza un LDT diferente, y los segmentos de
memoria asignados a un descriptor global pueden tener sus derechos de acceso restringidos,
causando una "trampa de hardware" (hardware trap), típicamente una violación general
protection fault o GPF (falla de protección general). Esto evita que los programas que se ejecutan
en modo protegido interfieran con la memoria de otros.
Un sistema operativo de modo protegido como Windows puede también ejecutar programas en
modo real y proporcionarles memoria expandida. La DOS Protected Mode Interface (DPMI) es el
método prescrito de Microsoft para que un programa de MS-DOS tenga acceso a memoria
extendida bajo un ambiente Multitarea.
Teniendo en cuenta que cualquier componente del PC hace uso de esta «Memoria de Acceso
Aleatorio» es necesario contar al menos con una capacidad mínima que permita trabajar con el
equipo. ¿Pero, hasta dónde podemos llegar con ese «mínimo»? Lo repasamos para que tengas una
idea, aunque cada usuario y equipo es un «universo» aparte y dependerá mucho del uso del
equipo.
1 GB. Es el requisito mínimo establecido por Microsoft para la versión de 32 bits de Windows 10, y
aunque el sistema puede ejecutarse con ello (arrancar y poco más) la experiencia es lamentable. Si
tienes un equipo así (netbook antiguo o similar) hay que buscar un segundo módulo.
2 GB. Es el requisito mínimo establecido por Microsoft para la versión de 64 bits de Windows 10 y
es el mínimo absoluto que debes manejar. Va justo para operaciones básicas como navegación
web (aunque no espere ejecutar un navegador con docenas de pestañas abiertas), correo
electrónico, procesamiento de textos o multimedia básica.
4 GB. Solo es el doble que el anterior, pero es pasar de la noche al día. Las aplicaciones no solo se
ejecutan más rápido, sino que también puedes ejecutar más aplicaciones simultáneamente. En un
tragón de memoria como el navegador Chrome ya podemos abrir unas cuantas pestañas (sin
pasarnos) y se puede ejecutar aplicaciones más avanzadas como Photoshop (o al menos eso dice
Adobe). A tener en cuenta que si utilizas sistemas Windows de 32 bits solo podrás utilizar 3,2
Gbytes de esa memoria por las limitaciones de direccionamiento de memoria. En versiones de 64
bits puedes usar los 4 Gbytes.
8 GB. Es el estándar actual a partir de la gama media en PC. Lo ofrecen la mayoría de fabricantes
en equipos nuevos y es lo que se debe buscar (mínimo) en un equipo de 2019 en ese rango de
mercado. Esta es la cantidad de RAM recomendada por Adobe para los usuarios que ejecutan
aplicaciones de Creative Cloud y, en general, se pueden comenzar a manejar aplicaciones de
edición y renderización de fotos o vídeos con resoluciones hasta FHD. Los mismo tareas
informáticas con bases de datos u hojas de cálculo y multitarea, sin pasarse porque la RAM se
llenará pronto. Necesitas obligatoriamente sistemas de 64 bits para manejar este tamaño de
memoria.
16 GB. Es la cantidad a buscar en un equipo avanzado de nueva adquisición, aunque -según el
presupuesto- se pueden adquirir 8 GB y actualizar posteriormente. Aquí ya si se nos abre un
mundo de nuevas posibilidades, incluyendo trabajos profesionales con CAD y 3D, procesamiento
de imágenes en RAW o vídeos 4K con aplicaciones como Premiere Pro o After Effects. La
multitarea mejora notablemente y podemos acumular múltiples pestañas / sesiones de
navegadores web. Necesitas obligatoriamente sistemas de 64 bits para manejar este tamaño de
memoria.
Cuestión de juegos
La ejecución de videojuegos merece una mención aparte. Muchos de los grandes juegos son
multiplataforma y están diseñados para consolas y PC. Teniendo en cuenta que PS4 y Xbox One
tienen 8 Gbytes no es extraño que sea esa medida la recomendada para los grandes juegos,
aunque algunos exigen ya 16 Gbytes.
Los 8 Gbytes recomendados se aplican a equipos que cuentan con tarjetas gráficas dedicadas que
incluyen su propia memoria. Si el equipo tiene gráfica integrada ya sea en procesador o chipsets la
cuestión puede variar.
Las tarjetas gráficas discretas incluyen su propia RAM de vídeo (VRAM), son de utilidad, por
ejemplo, para la carga de texturas y son independiente de la memoria RAM. Por contra, las
gráficas integradas que usa Intel en sus procesadores en lugar de incorporar su propia memoria
utilizan la RAM general del sistema.
Intel informa en este artículo que la cantidad máxima de memoria RAM que pueden reservar sus
gráficos integrados es de aproximadamente 1,8 GB, lo que tendremos que tener en cuenta a la
hora de evaluar la necesidad de memoria. En todo caso, la medida recomendada de 8 GB es válida
también para integradas, sabiendo que los títulos de gama alta serán prácticamente injugables en
una integrada de Intel y necesitarán una dedicada con su propia memoria.
Ya tienes una idea de lo que puedes esperar con cada cantidad de memoria RAM, un componente,
repetimos, esencial en todo PC y al que conviene ir siempre sobrado, manteniendo a la vez el
necesario equilibrio del resto de componentes.
Síntomas de que la memoria RAM está fallando
Es común que cuando hay algún problema en la RAM, no hay síntomas aparentes: el PC arranca
bien, podemos iniciar aplicaciones o juegos sin problema… sin embargo para llevarnos a pensar
que algo va mal, tiene que haber algo que nos haga saltar las alarmas. Síntomas comunes de que
la RAM tiene problemas son:
Como ya supondréis, muchos de estos síntomas nos harían pensar que el problema está en otro
componente. Por ejemplo, el más evidente es el de que no nos deje acceder a archivos del disco
diciéndonos que están corruptos, pues podríamos pensar que lo que se ha roto es precisamente el
disco duro. No obstante, cuando abrimos un archivo éste se carga en la memoria RAM, y el tener
problemas haciendo esto es indicativo de que el problema puede estar precisamente en ésta.