La sede fue erigida can�nicamente hacia el a�o 739 por San Bonifacio como Obispado
de Frisinga, fundamentada en la labor pastoral de la abad�a benedictina de
Frisinga, fundada por San Corbiniano (considerado primer obispo de Frisinga y santo patr�n de la archidi�cesis) hacia el 724 y dedicada a San Esteban. Despu�s de 1294, con la adquisici�n del Se�or�o de Burgrain (incluyendo la Abad�a de Isen) y el Condado de Werdenfels, el obispo de Frisinga se convirti� en pr�ncipe-obispo con poder territorial, no solo eclesi�stico, y el obispado se enriqueci�.
Durante la Reforma protestante s�lo el Condado de Haag y el Se�or�o de
Hohenwaldeck, en el Schliersee, se convirtieron por un corto tiempo a la nueva fe protestante. La pol�tica religiosa de los duques de Baviera previno la propagaci�n del nuevo credo, introduciendo las ideas de la Contrarreforma del Concilio de Trento, en las que el obispo Vito Ad�n de Gepeckh (1618-1651) fue un gran impulsor. En los a�os siguientes el obispado se convirti� en el cargo ocupado por los segundones de la Casa de Wittelsbach de los duques de Baviera. El principal representante del Barroco en el Obispado fue el obispo Juan Franz de Eckher (1696- 1727).
El Principado-Obispado de Frisinga fue disuelto en 1803 tras el colapso del Sacro
Imperio Romano Germ�nico, a pesar de que un obispo titular gobern� la di�cesis hasta el 1 de abril de 1818, cuando el Papa P�o VII la elev� a archidi�cesis, con sede en M�nich y con los territorios diocesanos del propio Obispado de Frisinga, junto con las parroquias b�varas del Arzobispado de Salzburgo, del Prebostazgo de Berchtesgaden y del Obispado de Chiemsee.
El arzobispo m�s famoso de la Archidi�cesis ha sido Joseph Ratzinger, desde que fue elegido Papa y tom� el nombre de Benedicto XVI.
A Menudo Dejamos Sin Escuchar La Guía Personal Más Preciada Del Espíritu Porque No Registramos Ni Respondemos A Las Primeras Impresiones Que Recibimos Cuando El Señor de