Para comenzar, cierra los ojos e imagina una línea vertical de blanco

luz, una que pasa del nadir al cenit a través del punto de vista detrás de tus ojos.
Luego imagina una mancha de luz a unos dos pies de este punto de vista. Con este punto traza un círculo
horizontal alrededor de tu cabeza. Luego traza una elipse pasando este punto hasta la parte superior de la
cabeza, por la espalda, debajo de los pies y de nuevo hasta la parte superior de la ca beza. A
continuación, trace otra elipse desde la parte superior de la cabeza hacia abajo por un lado, debajo de los
pies y del otro lado hasta la parte superior de la cabeza. Cuando haya terminado su punto de vista debe
estar en el medio de una jaula que se ve así(ver imagen adjunta)
Con sus fortificaciones ahora en su lugar, puede limpiar su imaginación. Para ello, transforme la línea
que primero visualizó en un pilar de fuego y haga que se expanda hacia afuera a través de tus tres
anillos. Mientras lo hace visualice como su mente se limpia de cualquier fantasía persistente, no preste
atención a sus fantasías, más bien enfóquese en que su mente se limpia y despeja con este fuego
purificador, siga visualizando los anillos arder hasta que no queden nada más que tres anillos blancos
brillantes.
Y eso es todo lo que hay que hacer.