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Hoy veremos Rebelión en la granja de


George Orwell

Comencemos con la biografía


Eric Arthur Bler, conocido como George Orwell, nació en 1903 en una colonia británica de la
India. A los dos años, viajó con su madre y hermanas a Inglaterra donde creció y estudió. Desde
joven mostró desagrado por el imperialismo británico, se unió a la Política Imperial de la India en
Birmania, pero declinó y regresó a Inglaterra proclamando su odio hacia el imperialismo. En esos
sucesos se inspiró para escribir Los días de Birmania. Vivió un tiempo en París y en Londres, donde
experimentó la pobreza, hechos escritos en “Sin blanca en París y Londres”, allí uso el seudónimo
con el que se haría famoso: George por el monarca del Reino Unido, Jorge V y Orwell, por el río
del mismo nombre.
Participó en la Guerra Civil Española con la idea de matar fascistas y en la Segunda Guerra
Mundial donde escribió “Diario de guerra 1940-1942”. Trabajó en la BBC, de 1941 a 1943, de la
cual renunció al ser consciente de la labor propagandística que ejecutaba, para irse a trabajar como
columnista y editor literario del Tribune, la revista semanal de tendencia izquierdista dirigida por
Aneurin Bevan y Jon Kimche. Entre 1947 y 1948 escribió una de sus obras más reconocidas y
vigentes 1984 mostrando un mundo distópico que no dista mucho de nuestra realidad que vería la
luz en 1949. Murió en Londres en 1950 debido a una tuberculosis.

Contexto: una cuestión clave


La rebelión de los animales que se plantea al comienzo de la obra de Orwell alude a un hecho
que marcó la historia moderna: la Revolución rusa. A finales de la Primera Guerra Mundial, Rusia
estaba devastada por el hambre y la desigualdad social: la nobleza y la burguesía eran las clases
dominantes y sus privilegios se basaban en la explotación de obreros y campesinos. La rebelión de
octubre de 1917, llevada a cabo por los explotados, puso fin al gobierno monárquico zarista.
Después de muchas discusiones y conflictos, se instauró un estado comunista: la Unión de
Repúblicas Socialistas Soviéticas.
Cuando Orwell escribió Rebelión en la granja, habían pasado casi treinta años de dicha
revolución. El autor, que comulgaba con las ideas socialistas, estaba desencantado por su desarrollo
en la URSS. Lo que había surgido como proceso libertario de las clases oprimidas se transformó,
después de diez años, en un régimen con rasgos totalitarios al mando de su líder: Joseph Stalin.
Persecuciones políticas, burocracia estatal, explotación de los trabajadores- que seguían dando su
mano de obra a cambio de lo mínimo para subsistir-, escasez de alimentos y manipulación
discursiva eran moneda corriente en el régimen estalinista.

Entre la fábula y la sátira


La obra se encuentra atravesada por estos dos elementos claves en su construcción.
Comencemos con la fábula. Este tipo de relato difunde conocimientos de la vida cotidiana,
principalmente, para los niños ya que contiene una función pedagógica en donde cada animal
representa un vicio o una virtud y busca dejar una enseñanza en su moraleja.
Por otro lado, la sátira es un procedimiento mediante el cual se toma un hecho de la realidad y
se lo representa transformado para hacer visibles ciertos aspectos (por lo general, los defectos) y
poner al receptor en la situación de verlo con otros ojos. Los efectos más comunes de esta nueva
mirada son la risa y la crítica.
Esto uso George Orwell, en forma de fábula satírica, para abordar la Revolución Rusa
ayudado por los animales de una granja. El libro fue publicado en plena Segunda Guerra Mundial,
en el año de 1945, pero tuvo su reconocimiento en los años 50’s.

La fábula satírica en la estructura del relato


(ojo aquí haremos un repaso de la historia, habrán spoilers del final)
La historia se sitúa en la granja Manor, cuyo dueño, el señor Jones, a causa del alcohol, echó a
perder sus negocios; descuidando a tal grado sus animales que éstos deciden rebelarse cuando
olvida darles de comer por un día. Aquí, los cerdos son considerados como los más inteligentes y
esto se debe a que, por un lado, son los que se animan a iniciar la rebelión; y, por el otro, llevan el
legado del Viejo Mayor, representación de Lenin, el cerdo más antiguo de la granja que anticipa,
antes de morir, las consecuencias dramáticas que tendrían al seguir sometiéndose al poder de los
humanos. Estas palabras impulsan a todos a desterrar definitivamente al señor Jones adueñándose
del lugar.
Luego, los animales toman partido y realizan un reglamento escrito en un letrero, basado en 10
mandamientos, entre los cuales radican la prohibición del uso de ropa, beber alcohol, matar a otro
animal, dormir en una cama humana, tener trato con humanos e incluso, caminar en las dos patas
traseras. Los líderes serán los cerdos, en particular, Snowball y Napoleón que representan a León
TRotsky y Joshep Stalin respectivamente. Así comienza una vida de progreso en la nueva Granja
Animal que tiene un crecimiento mayor que en los tiempos del señor Jones.
Entre los líderes hay grandes diferencias, mientras Napoleón vigila los trabajos y el
cumplimiento de los mandamientos con recelo, Snowball se dedica a estudiar, a leer y aprender.
Estas diferencias estallan cuando Napoleón ordena, a unos perros entrenados por él, un ataque hacia
Snowball que lo obliga a exiliarse. Estos perros representan a la policía secreta stalinista, la NKVD.
Las injusticias se hacen más notorias, a pesar de eso, hay animales como el caballo, Boxer, que
representa al pueblo obrero, que se mantienen trabajando aunque con el paso del tiempo sus fuerzas
irán disminuyendo hasta la muerte.
Finalmente, los múltiples cambios en la granja provocan que los cerdos se muden a la casa que
pertenecía al señor Jones, visten sus ropas y duermen en su cama; incluso se desplazan en sus dos
patas traseras. Los animales, casi seguros de la violación de mandamientos, recurren al burro,
Benjamín, representante de los intelectuales, el único que sabe leer, y se dan cuenta que algunos han
sido cambiados y otros eliminados por completo. Mostrando así una vuelta al sometimiento y una
circularidad en que se muestra nuevamente el sometimiento del principio.

Algunos personajes más para tener en cuenta


Squaeler: es la mano derecha propagandística de Napoleón. Tiene una gran facilidad de
discurso para confundir a sus interlocutores y sabe aprovechar la ingenuidad de los animales.
Representa al periódico soviético Pravda, clave de la propaganda de Stalin.
Las ovejas: representan la masa que se deja llevar por la opinión pública y no tienen
pensamiento crítico.
Mollie: la yegua blanca que representaba a la burguesía que coqueteaba con el poder.
Cuervo: es la representación de la religión ya que tiene un carácter místico.
Gallinas: representan al pueblo campesino analfabeto que al igual que las ovejas repiten
consignas.
El señor Federich: representa a Adolf Hitler ya que firmó un pacto de no agresión con granja
animal como aquel con el régimen estalinista.
El señor Pilkington: representa a Wilston Churchill ya que al final se muestra su alianza con
Napoleón, uniendo humanos con cerdos jugando una partida de naipes.

Para finalizar dos elementos claves


El molino: la batalla que se produced en relación representa la batalla de Stalingrado que se
dio durante la Primera Guerra mundial.
Bestias de Inglaterra: es el canto fundacional para la revolución que parodia al himno
socialista, la Internacional

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